Estaba apunto de acercarse a mi, cuando un ruido extraño se escucho del otro lado del arbusto, ya que este era un poco grande en extensión, así que se detuvo y empezó a ir hacia el lugar del ruido, no quería que fuera, por temor a ser vista. Así que la detuve.

—¡no lo hagas! ¡Te dije que no lo hagas! ¡Puede ser que sea una trampa! –hable en voz baja.

—solo espera, ¿si? veré si no es nada de eso. Y... – ella se fue acercando poco a poco, hasta que...

—oigan! ¿acaso una no Puede comer en paz en un lugar como este?

—¿Eh? –ella no regresaba.

—¿que sucede?  –llegué a donde estaba, y hable en voz baja.

Hice Eso después de asegurarme que no había nadie cerca.

—¿Hishigawa? ¿Que haces aquí?

—ah, Hola kousaka, y también a usted presidenta. ¿Como estan hoy?

—¿no has respondido a mi pregunta.

bueno... Es que...

—¿estas comiendo sola? –OneeChan habló. —¿Sabes que ya terminaron las clases, ¿no?

—si, lo se, pero... Es que... ¡no quiero desperdiciar esto!

—oye baja la voz! –le hable en voz baja.

–lo siento.

—¿estos no son esos Rollos de huevo y salchichas en forma de pulpo, con arroz? –OneeChan tenía la mirada fija en ese almuerzo.

—S, si. Eso es.

—oh, ¿y... Y porque te los estás comiendo aquí y no lo hiciste en la hora del almuerzo? –OneeChan preguntó.

—bueno... Es que, lo que pasa es Que... no es mi almuerzo –ella agacho la cabeza

—¿Eh? ¿No es tuyo? –ambas hablamos a la vez.

—si, no es mío.

—si no es tuyo, ¿porque lo tienes tu? ¿No era mejor devolverlo a quien lo olvido? –la cuestione.

—no es eso, nadie olvido su almuerzo, más bien, yo no quise dárselo.

—¿dárselo? ¿A quién? –OneeChan preguntó, mientras Hishsigawa tenía la mirada triste.

—oh, ya entiendo, – supe rápidamente de quién se trataba. —¿y porque no pudiste dárselo? ¿Acaso no lo hiciste para ella?

—bueno... Si, pero es que lo que pasó fue...

Recuerdo:

Temprano por la mañana.

—Hola Hishigawa.

—ah, H-Ho, Hola Ayase. ¿Como estas?

—¡muy bien! Gracias por preguntar, jeje. ¿Como estas tu?

—ah, ah, ¿yo? Yo... Yo estoy bien. ¿Y tu?

—yo estoy bien gracias. –sonrisa.

—que bueno, me alegro, O, oye Ayase, yo...

—ah! ¡No puede ser ¡olvide que tenía que ir al salón de música!

—¿al salón de música?

—si, Maki senpai, dijo que me enseñaría a tocar el piano, pero debía estar más temprano! ¡Y voy muy tarde! ¡nos vemos luego! ¡Adiós! ¡Espero que no sea muy tarde! ¡Espero que no! –ella se alejo rápidamente.

—yo... Haa... Esta bien, en otra ocasión será quizás.

Fin del recuerdo.

—¿y no pudiste darselo en cuanto entraron al salón? –pregunté.

—bueno... Si, pero me entró el pánico y ya no lo hice, luego Intente dárselo en el almuerzo, pero ya no estaba en su lugar, y la busque, pero no puede encontrarla, al final termine comiendo sola mi almuerzo y... Pues, después de clases vine aquí para comerme este y así ya no tener que ir a cenar a casa.

—entiendo, –OneeChan decidió
ver si no había alguien cerca. —pero... ¿Porque no intentaste buscarla?

—bueno, iba intentar volver hacerlo, pero escuché que la anterior presidenta estaba de visita y es muy estricta y alguien que la protege mucho.

—bueno... Es normal, es su hermanita pequeña, así que... cuidado, si quieres conquistar el corazón de la pequeña Alisa. – OneeChan hablo.

—Si, lo se, por eso mejor estoy aquí.

—bueno, no estas cerca de Alisa, así que no tendrías porque escónderte, solo vete y ya ¿no? –la cuestione.

—si, lo se, pero si me voy, no la veré hasta mañana, y quería por lo menos despedirme. –ella se sonrojo.

—bueno, entonces, ¿porque no sólo lo haces Y ya?

—OneeChan, si fuera fácil para Hisigawa irse a despedir y ya, ya lo hubiera hecho hace mucho tiempo. así que, mientras ella siga aquí, el despedirse de Alisa... es algo que no va a pasar.

—¡es cierto! Tengo que salir de aquí para despedirme de ella, pero, es que la ex-presidenta da mucho miedo, pienso y siento que si me acerco a Ayase, al verme, me va a matar con la mirada.

—bueno, si solo vas y te despides adecuadamente de ella, no pasará nada, su hermana seguramente lo dejará pasar por alto.

—¿tu crees?

—te lo aseguró!

—E- esta bien, lo haré y también le diré que no lleve almuerzo, porque le esperara una gran sorpresa mañana. Jeje.

—Ah, si... Jeje – ambas reímos a la vez.

—jeje, gracias por sus ánimos nos vemos mañana, –salió del arbusto.

—bien, ¿y que hacemos nosotras? – pregunté.

—¡huyamos! –salimos de rápidamente del arbusto.

Al salír y empezar a correr, fuimos vistas por Nico, quien no dudo en seguirnos, parecia decir algunas cosas, pues por ir corriendo no le entendía nada.

Ella siguió detrás de nosotras, habíamos logrado salir de la escuela, pero justo en el camino, pués...

—¿pensaron que escaparian? –Kotori apareció frente nuestra.

—¿Kotori?

—Así es Yukiho Chan, Soy yo. ¡Yo! "Tu novia" ¿no es así?

—Kotori Yo...

—no, no me des ninguna explicación, solo dime que esto es un juego y ya, que tu seguirás siendo mi novia ¡y de nadie más! –ella lucia muy furiosa —Honoka Chan, siempre te he estimado, incluso te ame, me enamore de ti por mucho tiempo, pensé en hacer mi vida a tu lado, tener hijos, oh, eso hubiera sido hermoso, te imaginas, el color de sus ojos, su cabello, solo de imaginarlo se me acelera el corazón, pero... Tu no quisiste, tu simplemente, ¡me rechazaste!

—Kotori Chan, Yo...

—¿tu no que Honoka?

—yo no podía corresponderte. Sabes que incluso rechace a Umi Chan, pero, Porque... Porque... ¡Porque Amo a Yukiho! ¡Así es! ¡Amo a mi Hermana! ¡Y no como mi hermana! ¡Sino de manera romántica! ¡Si! ¡Yukiho es mi novia!

—.... – Kotori se quedó atónita al escuchar todo eso.

—¡si! ¡Es cierto! ¡Somos novias y no nos importa decirlo!!! – grite fuertemente.

Al ver que Kotori no se movía, salimos corriendo, solo voltiamos a ver como ella seguía así, no lo podía creer, OneeChan fue capaz de decir todo eso sin titubear, realmente fue algo completamente arriesgado, corrimos ten rápido como pudimos que no nos dimos cuenta de que llegamos a casa.

Llegamos, y estábamos sudurosas, mamá al vernos así, se asustó, nos mandó directo a la ducha, como pocas y raras veces lo hicimos, nos duchamos juntas, terminamos y fuimos a su habitación, terminamos de sacarnos, ella cerró con seguro la puerta, ella se acostó en su cama y yo me acurruque a su lado y lo que pasó después... Pues... Eso no lo puedo decir, porque... Es nuestro secreto. Jeje.

Bueno, hasta aquí llego el capitulo 23 espero que sea de su agrado e interés, y si es así, den clic a la ⭐ y comenten que les pareció y si no, pues no importa, recuerden, mascarilla, gel antibacterial y la distancia indicada, sin más que decir, hasta luego, hasta el siguiente capitulo, cambio y fuera.