¡¿Que haces aquí?! Se escuchaba desde la puerta, lo que Maeda y la profesora decían, ellas realmente estaban muy sorprendidas por lo que estaba pasando ahí. Después de eso el silencio se volvió a escuchar, un momento, mientras yo, empezaba a sentirme un poco preocupada, y sin saber si hablan en silencio o ya no estaban ahí.

Dentro del consejo.

—¿a qué se debe que estés aquí Hanako?

—la presidenta dijo que quería hablar conmigo. ¿Y tu,“ino”?

—lo mismo, ella dijo que quería hablar algo conmigo, pero...¡No dijo que tu ibas a estar aquí!

—pues yo tampoco lo sabía, ¡¿porque tenías que venir?!

—¿yo? ¿Tu porque tenias que venir hoy? ¿No podías venir mañana, tal vez?

—¿Eh? ¿Porque yo? ¿Porque no podías tu venir mañana?

—pues... ¡Eso a quien le importa!

—¿a quien? ¡A mi me importa!

—pues que mal, pero yo esperare a la presidenta y hablar de lo que teníamos que hablar.

—pues, pues, ¡yo también la voy a esperar! ¡Así que no me iré!

—¡bien!

—¡bien!–Maeda le sacó la lengua.

—¿pero...? Aaaah, haaaa, bien, ¿que sucede?

—¿que sucede de que?

—bueno... ¿Sobre lo que has hecho en estos días, más que nada, tu forma de actuar?

—¿sobre mi forma de actuar? ¿Que estupideces dices?

—lo que quiero decir, es... ¿Porque te comportas como una chica rebelde cuando no lo eres? ¿Donde quedó esa chica dulce y educada que conocí antes?

—¿donde? Tu deberías saberlo

—¿yo? ¿A que te refieres con eso?

—olvídalo, no tiene ninguna importancia, ya que yo solo soy tu alumna y tu mi profesora, ¿no? así que...

—¿así que, que?

—no hay nada que decir, ¿sabes que? Vendré otro día mejor, supongo que es más importante lo que la Presidenta tiene que decirte. Adiós, Hasta mañana.

—¿Eh? ¡No! ¡Espera! No te vayas.

—¿Porque no?

—bueno... Porque... ¿Porque no hablamos un poco más?

—¿hablar un poco más? ¿Pará qué o porque?

—porque... Pues, para... ¿que tal de nosotras?

—¿Eh? ¿De nosotras? ¿Que nosotras? Tu sabes que nunca hubo un nosotras.

—lo sé, eso fue mi culpa, yo... Yo lo siento.

—¿como que lo sientes? ¿Porque dices que lo sientes? ¿Porque deberías sentirlo?

—pues, porque te amo.

—¿Eh? ¿Que estupideces estas diciendo?

—lo que te acabo de decir, que te amo, y que realmente no he podido olvidarte, que... Pienso cada segundo, cada minuto, cada hora y día, en ti. Solamente en ti.

—¿En mi? Ja, ¿porque debería creerte?

—pues porque... También sueño contigo –le susurro al oído.

—¡¿Eh?! ¿P- po, porque lo dices ahora?

—porque fui una Tonta, creí que estar lejos de ti, me haría bien, pero te veo aquí y lo único que quiero , bueno, es besarte, lamento portarme como una idiota antes, el haberte rechazado no era algo que había pensado hacer, bueno, tampoco confesarme, y luego tu lo hiciste.

—¿Y eso que?

—que bueno... fue sorpresivo y no supe reaccionar, y cuando lo hice, fue de esa forma estúpida, así que... Quiero hacerlo bien, esta vez.

—¿Eh? ¿A que te refieres con bien esta vez?

—pues, que más, darte mi respuesta, y esa es, acepto, jeje. ahora te pregunto, a ti. ¿aceptas ser mi novia?

—¡¿Eh?! ¡¿Es en serio?!

—claro que lo es, te dije que está vez haría bien las cosas, y el darte mi respuesta es muestra de ello.

— entiendo eso, ¿pero, porque crees que diré que si, solo porque me respondiste?

—bueno, tu lo has dicho, ya respondí a tu pregunta. ¿No?

—si claro, la respondiste, pero... ¡¿Peró, porque hasta ahora?!

—ya te lo dije, fui una idiota que creía que el enamorarme de ti, estaba mal, por eso lo hice, pero ahora me importa un carajo.

—¿Es En serio? ¿En serio? –lágrimas empezaban a deslizarse por sus mejillas.

—ya te dije que si, ¡aahh! ¿que sucede?

—yo... quiero pedirte disculpas,es que yo fui... Yo fui quien actuó mal, yo... Lo siento, solo quería hacerte sentir lo que tu me hiciste sentir, cuando me rechazaste. –sigue llorando.

—entiendo, debí haberlo previsto.
fue totalmente mi culpa que pensaras y actuaras así, pero ahora, Lo diré de nuevo ¿aceptas ser mi novia?

—bueno... Pues, yo... Yo... S, si, si acepto. –bajo la mirada, muy sonrojada.

—¿En serio? Bueno... Pues, ¡que bien! –la abrazo. —¡te amo! ¡Gracias por decir que si! jeje.

—esta bien, yo... Yo también te amo, jeje.

—que bueno, supongo que ya es tarde, la presidenta no a venido, tal parece que se olvido de esto, o quizás simplemente fue algo que ella planeo para unirnos.

—¿tu crees?

—bueno, si, eso es lo que creo, pero mejor vengamos mañana durante el almuerzo, así sabremos que era lo que quería decirnos, ¿esta bien?

—si,tienes razón, jeje. Vámonos entonces.

—¡si! Jeje.

Mientras tanto en las afueras de Otonokizaka.

—¿que crees que hayan hablado?

—no lo se, preferí no seguir escuchando y venir aquí contigo, oh mira, –nos escondimos. —así que mis sospechas eran reales.

—¿tus sospechas? –maeda y la profesora iban tomadas de la mano. —¿a qué te refieres?

—Ah, es que yo sospechaba que Maeda y la profesora se amaban, bueno, por eso fue el plan ¿recuerdas?

—es cierto, vaya, ya lo había olvidado jeje. Bueno, supongo que todo salió bien, ahora la pregunta es, ¿que voy a hacer si mañana me detienen o van a verme al consejo para saber que les quería decir?

—oh, tienes razón, bueno... Ya pensaremos en eso, supongo que también estarán intrigadas por saber que es lo que ibas a decirles.

—y supones bien, bueno, mejor volvamos a casa ya, no quiero que algo no esperado pase. Por... –ella se adelantó y topo con alguien. —¡auch! eso duele, ah, ¿Kotori?

—Hola Honoka.

—¿que haces aquí? Creí que ya te habías ido a casa.

—ah, no, me quedé con mamá, la estaba ayudando con algo así que no me di cuenta de la hora, jeje.

—entiendo, ¿y que vas a hacer?

—bueno... Voy a acompañarlas, así no me voy sola, mamá todavía tiene unas cosas que hacer antes de llegar a casa.

—esta bien, vamos entonces, dime Kotori, ¿a ti te gusta alguien?

—¿Eh? ¿Si me gusta alguien?

—si, bueno, solo pregunto por curiosidad, pero si no quieres decírmelo, esta bien, no hay problema, jeje.

—no, no hay ningúno, bueno, la verdad, es que si.

—¿si? ¿En serio? ¿Puedo saber quién es?

—bueno, Eso sí no te lo puedo decir, jeje.

—ah, esta bien, ¿pero me lo dirás algún día?

—ahh, puede que si, pero no ahora, jeje.

—bien, oye, ¿donde esta Yukiho?

—aquí estoy, estoy detrás de ti, no pones mucha atención al parecer. –me adelante. —idiota.

—¡espérame Yukiho!

Así seguimos nuestro camino, Kotori empezó a hablar de varias cosas, muchas sobre la escuela, el como extrañaba elaborar los trajes, pero que cada que podía, se reunía con Nico para poder elaborar una que otra prenda, de esas muy lindas, ella no dejaba de hablar de eso, me estaba aburriendo, pero a mi hermana no al parecer, el trayecto siguió así, hasta que al fin nos despedimos, y volvíamos a estar solas las dos y nadie más, o eso es lo que espero...

Bueno hasta aquí llego el capitulo 12 espero que sea de su agrado e interés y si es así, den clic a la ⭐ y comenten que les pareció y si no, pues no importa, recuerden, mascarilla, gel antibacterial y la distancia indicada, sin más que decir, hasta luego, hasta el siguiente capitulo, cambio y fuera.