Capitulo 7 - Conociendo a los Pingrey.
Royal Woods Michigan - Escuela Primaria - 12:00 p.m.
Vemos a nuestro protagonista, el cual se encontraba saliendo de su salón muy feliz, pero cuando estaba por irse, este comenzó a escuchar unos pasos y al voltear, observa que Chandler y su grupo de amigos lo veían fijamente y a su lado, estaba Ronnie Anne.
Lincoln: Eh, hola chicos, señorita Ronnie Anne, cómo están. - dice el albino con una sonrisa nerviosa, mientras se alejaba lentamente - escuchen, no quiero tener problemas.
Chandler: Pues ya los tienes, por tú culpa, las chicas que nos golpearon, nos delataron con el director y nos dieron 3 días de suspensión y sabes algo... Eso, te lo vamos a cobrar a ti, por estar de mirón, por dónde no debes - dice el pelirrojo con una sonrisa, mientras se acercaba lentamente al albino.
Ronnie Anne: Llegó la hora, de darte tu merecido. Por qué en esta escuela, no soportamos a los mirones y a los soplones. - dice la pelinegra, con seriedad. Para luego acercarse al albino, el cual muy asustado comenzó a correr hacia afuera de la escuela.
Pero cuando llegó a la entrada, este se da cuenta de que Vanzilla no había llegado y al voltear, observa como los bravucones iban tras el, por lo que rápidamente el albino comienza a correr, mientras era perseguido por los bravucones, los cuales querían su cabeza.
Lincoln: Por favor, podemos hablarlo. Nunca tuve la intención, de que se metieran en problemas. Por favor no se desquiten conmigo, ahhhh. - decía el peliblanco muy asustado, mientras corría a una gran velocidad.
Chandler: No huyas cobarde, que cuando te atrapemos, te va a ir muy mal, así que te recomiendo pararte, para que no te vaya peor - dice el pelirrojo con una sonrisa, pero el albino no hace caso y sigue corriendo.
Unos minutos después... El peliblanco había llegado a una zona algo despejada y con árboles, pero al detenerse para tomar aire, observa que los bravucones se encontraban ya enfrente de el.
Ronnie Anne: Espero y te prepares, por qué cuando terminemos contigo, no verás la luz del sol en un largo tiempo, con lo morado que te vamos a poner los ojos, de tantos golpes. - dice la pelinegra mientras alzaba su brazo, pero cuando estaba por golpear a Lincoln, este por error se tropieza y comienza a caer por una colina, hasta que aterriza en una cerca, golpeandose la cabeza contra una tabla, para luego quedar inconsciente.
Rápidamente los bravucones se van de allí, mientras que el albino se quedaba allí, hasta que de pronto un hombre de traje se acerca a el, para checar cómo estaba y al ver que quedó desmayado rapidamente lo carga y lo lleva adentro de la casa.
Un rato después... En una habitación. Lincoln se encontraba dormido, en una cama. Tenía una toalla en la cabeza, mientras que sus cosas estaban en una silla, hasta que poco a poco comenzó a despertar, observando a su alrededor, viendo que no estaba en su casa, pero cuando estaba por levantarse, alguien comienza a frotar esa toalla, suavemente por la frente y la cara del albino el cual se siente un poco más relajado.
Lincoln: Mmm, mamá... Mami eres tú - dice el albino con una mirada bastante baja, mientras veía una la figura de una chica de cabello largo, la cual estaba sentada frente a el - Tuve un sueño muy extraño, pasé... Por muchas cosas feas y...
- Tranquilo, ya estás a salvó, aquí en la casa Pingrey - dice la voz de una chica, lo cual hace que el albino abra los ojos y se levanté viendo a aquella chica la cual deja ver su hermoso cabello rubio y unos bonitos ojos azules.
Lincoln: Usted no es mi... mi... ¿Quién es usted? - dice el albino con algo de preocupación, mientras veía a la rubia, pero al ver sus cosas al lado, rápidamente intenta levantarse, aunque está lo detiene lo acuesta en la cama nuevamente.
Carol: Tranquilo, te diste un fuerte golpe en la cabeza, pero tuviste suerte de que mi mayordomo te encontrará, el entro en la casa muy preocupado, así que solicite que te atendiera uno de los mejores médicos de la zona, pero solo me dijo que era un simple golpe y te puso un par de vendajes. Pero bueno, ahora estás mejor. Por cierto, cómo te llamas pequeño.
Lincoln: Mmm... Me llamo Lincoln, señorita. Lincoln Loud. - dice el albino en un tono tranquilo, dejando algo sorprendida a la rubia por su tono tan educado - Es un gusto conocerla, pero ya me tengo que ir, mi familia me debe estar esperando.
Carol: Espera... No puedes irte así, no puedes ir solo por la calle, te pueden hacer algo, estuviste dormido por casi 3 horas y no me gustaría que te pasará algo. Dime, tienes el número de tus padres o sabes por dónde vives. - dice la rubia algo preocupada, por el albino el cual comienza a pensar un poco.
Lincoln: Ehm, no tengo ningún número pero... Si se dónde vivo, avenida... - el peliblanco no termina de hablar, debido a que algo parecido a un rugido, sonaría, cosa que lo puso algo avergonzado mientras veía al suelo, para luego levantarse de la cama.
Carol: Mjm, veo que tienes hambre verdad. Parece que no has comido, mira antes de que te vayas, déjame que te hagan algo de comer, no quiero que te vayas con el estómago vacío, ven. - dice la rubia, mientras salía del cuarto con el albino - Creo que le caerás bien a mi hermanita menor, ella es muy amable con todos.
Al bajar las escaleras, la rubia lleva al peliblanco a un comedor, al mismo tiempo que está se sentaba con el y luego de eso, toma una campana con la cual llama a los chefs para que sirvan en almuerzo.
De la cocina, varias personas vestidas de blanco, salen con varios platos, los cuales colocan sobre la mesa, mientras eran vistos por el albino con algo de curiosidad, pero cuando esté observa la comida que tenía enfrente, no pudo evitar mirarla fijamente.
Chef: Provecho, señorita Carol y joven. Enseguida llamo a su hermana menor, señorita Carol. - dice un chef, mientras se retiraba con el resto, al mismo tiempo que Carol se colocaba una servilleta en las piernas.
Carol: Anda, puedes comer lo que quieras, estás en tu casa Lincoln. - dice la rubia con una sonrisa, mientras veía al albino el cual traga algo de saliva.
Lincoln - junta sus manos - Muchas gracias señor, por darme la oportunidad de probar esta comida, de personas increíbles, de verdad muchas gracias... Amén. Ahora sí a comer jeje - dice el albino con una sonrisa, mientras comenzaba a probar varios platillos - Vaya, esto sabe tan bien. No eh comido desde el desayuno, no pude almorzar antes. - decía, mientras degustaba de la comida. - esto está delicioso, jamás habría probado una comida tan buena.
Carol solo observa al albino con una sonrisa, hasta que escucha unos pasos y al voltear, observa a una chica de cabello castaño y vestido morado, la cual entra al comedor, pero está pone una cara de sorpresa al ver al albino.
Cookie: Lincoln, que haces aquí. Nunca creí verte por aquí - dice la castaña muy sorprendida, mientras veía al albino el cual la observa algo sorprendido, mientras comía - Carol, por qué no me dijiste que Lincoln estaba aquí y... Por qué tiene esos vendajes en la cabeza.
Carol: Bueno hermana, mientras ayudabas al abuelo en la cafetería, Sebastián encontró a Lincoln lastimado afuera de la casa, por lo visto se cayó de la cocina y se golpeó muy feo en la cabeza pero al menos ya está bien. Es un milagro, que haya sobrevivido sin un daño tan horrible.
Lincoln: Señorita Carol, le molestaría si me pasa la sal, por favor - dice el albino con una sonrisa, mientras comía por lo que la rubia solo se la pasa - muchas gracias. - continua comiendo.
Cookie: Eso es un alivio, pero de seguro ya se quien fue el responsable de que el se cayera, fueron Chandler y sus amigos verdad, ellos junto con Ronnie Anne te hicieron caer verdad - dice la castaña con molestia, mientras veía al albino el cual para de comer para mirarla fijamente y después agachar la mirada.
Carol: Chandler... Chandler McCann, el hijo de los McCann, ese pequeño mocoso, lo está molestando. Que acaso no tiene consideración con los más pequeños, Lincoln apenas tiene como 6 años, caray. Eso no es justo y lo peor es que mamá y papá están haciendo negocios con esa familia.
Lincoln: Bueno, yo en realidad casi cumplo 7 años, señorita Carol y la verdad... Me agrada su forma de ser, tan luchona, tan trabajadora y tan responsable. Me recuerda mucho a mi amiga Sofía, ella era casi igualita que usted, solo que ella tenía un gran cabello color chocolate y los ojos verdes como esmeraldas. Mmm, ella era tan hermosa, eh digo... No van a comer, jeje.
Ambas solo miran al albino algo extraño y después empiezan a comer, mientras que esté solo observa a la mesa algo nervioso, debido a lo que había dicho, sobre su amiga.
Un rato después... El albino termina de comer, pero cuando estaba por bajarse de la mesa, este escucha el sonido de un timbre, mientras veía a Sebastián el cual se acercaba a la puerta para luego abrirla y dejar pasar a una chica.
Sebastián: Señorita Carol, la joven Lori Loud vino a verla. - dice el mayordomo en un tono elegante, mientras que la rubia se acercaba a la puerta, viendo a su amiga, la cual se encontraba parada allí.
Lori: Carol, hola. Mira... Vine aquí a preguntarte si no habías visto a... - la rubia no termina de hablar, debido a que escucha unos pasos y al voltear, está ve al peliblanco el cual se pone frente a ella con una sonrisa de felicidad - Ah, con que aquí estabas pequeño mocoso, oh cuando lleguemos a casa créeme que tendrás muchos...
Pero la rubia no termina de hablar, debido a que el albino le da un fuerte abrazo, el cual hace que la rubia pierda todo el coraje y la molestia que estaba sintiendo y a la vez no pudo evitar sonrojarse debido a que el albino la abrazaba con mucho cariño.
Lori: Oye este... Ya puedes soltarme - dice la rubia con un sonrojo mientras que el peliblanco se separa de ella - Carol... yo no sabia que el estaba aquí. Mamá se atraso cuando fue por nosotras y cuando llego a la escuela, ella se asusto mucho al no ver a Lincoln con nosotras. Lo buscamos por muchas partes y parece que ya lo encontré. Solo espero y no haya hecho alguna tontería.
Carol: No, de hecho es un angelito, se porta muy bien y es muy tranquilo. Aunque se asusto un poco cuando despertó, pero se calmo muy rápido. Parece que me agarro mucha confianza, pero dime algo... El es molestado en la escuela, por que mi mayordomo vio como el se cayo cuando era perseguido por unos chicos mayores que el.
Lori: No sabia eso. - observa al albino de reojo. - Pero... ya veré eso después. Por mientras ya nos vamos, tenemos que volver a casa, antes de que mamá se preocupe mas por el. Bueno, vámonos enano. - dice la rubia con seriedad, mientras salía de la casa.
Lincoln: Nos vemos luego, señorita Carol. Que tenga bonita tarde. - dice el pequeño peliblanco, mientras se acercaba a la rubia, para luego darle un abrazo. - muchas gracias por cuidarme y darme de comer. Y también por ayudarme con ese golpe, de verdad es una buena persona.
Carol: Eh... Bueno, gracias Lincoln. - empieza a ruborizarse. - pero supongo, que ya te tienes que ir... pero si tu quieres, me puedes visitar cuando quieras. - saca un papel - aquí esta mi numero telefónico y mi dirección, para toda cosa importante que necesites, puedes contar conmigo.
El peliblanco solo toma el numero y lo guarda, para luego tomar su mochila y su conejo y después de eso, este se marcha con Lori hacia la casa Loud, pasando así un buen rato, hasta que llegan, pero antes de entrar a la casa, Lincoln detiene a Lori y la toma de la mano.
Lincoln: Por favor, no le digas nada a mamá, a Leni o a las demás, no quiero involucrarlas en mis problemas, se lo pido por favor Lori, no le diga a las demás sobre los que me molestan. Quiero resolverlo por mi cuenta... Por favor. - dice el albino en un tono preocupado, mientras veía a la rubia, la cual solo asiente con la cabeza, para luego abrir la puerta, entrando a la casa.
Leni: Ya encontraste a... ¡Linky! - grito la rubia con emoción, mientras corría para luego darle un fuerte abrazo al peliblanco, al mismo tiempo que lo cargaba en el aire. - Que bueno que estas bien, nos diste un susto a todas, por favor no vuelvas a irte de esa manera, por que yo... yo... - su voz comienza a quebrarse. - Linky... por favor no me asustes mas así, pensé que te había pasado algo y yo...
Lincoln: No llores Leni, no tienes por que derramar tus lagrimas por mi culpa, yo soy el responsable de haberme ido así sin avisar, lo siento mucho. - dice el albino con un tono bastante triste, mientras agachaba su mirada.
Rita: Tranquilo, yo también tengo parte de la responsabilidad, por no haber llegado a tiempo. Aún así, estoy feliz por qué tú estés bien y le doy gracias a Lori, que te encontró. Que por cierto dónde estaba Lori y... Por qué tienes ese vendaje en la cabeza - dice la rubia, mientras tocaba levemente la cabeza del albino el cual muestra un quejido de dolor.
Lori: Bueno ehm... - observa al peliblanco de reojo y ve que esté se le queda viendo con una mirada de terror - Lincoln se perdió, cuando se fue de la escuela. Y llegó hasta un terreno, no vió por dónde caminaba y se cayó de una pequeña colina y parece que se golpeó la cabeza con algo. Carol una amiga mía lo encontró y le curaron sus heridas, afortunadamente no tiene ningún daño y está bien. Aunque solo se quedó con un pequeño golpe que tiene en la cabeza.
Rita: Ufff, al menos me siento más tranquila de que no te haya pasado nada malo, hijo. - lo abraza con mucho cariño - Prometo que estaré más atenta a ustedes a partir de ahora, no quiero que te separen de mi lado hijo.
Lincoln: Yo también quiero estar contigo siempre, mamá. Siempre - dice el albino con seriedad, mientras abrazaba a la rubia para luego separarse - Necesito ir a mi cuarto, quiero descansar un poco.
El peliblanco solo comienza a subir las escaleras, por lo que todas las hermanas vuelven a sus actividades normales, mientras que Rita entraba a la cocina, para comenzar a hacer la cena.
Un rato después... Lincoln se encontraba sentado en su cama, mientras observaba su playera y al mirarse en el espejo, este observa todas sus cicatrices con una mirada de tristeza.
Lincoln: Si las demás descubren esto... Me consideraran un monstruo - comienza a acariciar sus brazos - Yo las quiero mucho pero... No sé si ellas me quieran, como yo las quiero a ellas. Todas estas marcas fueron producto de... Mis dolores. - dice con un tono de tristeza, mientras dejaba caer un par de lágrimas. - Si me descubren, es probable que me devuelvan al orfanato.
Leni: Linky, soy yo Leni. Está todo bien - dice la rubia desde la puerta, por lo que Lincoln rapidamente se acerca a ella y entre abre la puerta, viendo que la rubia se encontraba sola, por lo que esté solo suspira y la abre, dejando ver el resto de su cuerpo. - Linky, que pasa... Por qué lloras otra vez.
Lincoln: No es nada Leni. - se limpia los ojos - Yo estoy bien, que es lo que necesitas - toma una playera y se la pone - Puedo ayudarla en lo que usted mande y necesite.
Leni: No necesito nada Linky. Solo vine a ver cómo estabas, quería saber si necesitabas hielo, para tu golpe - acaricia el cabello del albino con suavidad. - Tu sabes que no me tienes por qué ocultar nada, siempre podremos estar en confianza o no.
Lincoln: Eso lo sé Leni, pero simplemente recordaba algunas cosas, es todo. - toma su conejito y lo abraza. - Gracias por el hielo. Usted siempre es muy amable conmigo y eso es algo que me agrada mucho de ti. - dice el albino con una sonrisa, mientras veía a la rubia, la cual se ruboriza un poco.
Leni: Bueno... Si hago esto es por qué te quiero y no me gusta verte lastimado. A decir verdad me preocupé demasiado cuando te ví vendado de la cabeza, no solo mamá se preocupó por ti, también yo casi llore por qué no aparecías, pero gracias a Lori apareciste por su amiga
Lincoln: La señorita Carol, si ella es muy linda y también muy amable, siempre estuvo atenta conmigo y su hermana, la señorita Cookie también fue muy amable conmigo, además ella asiste a la escuela conmigo y es una gran amiga, ambas son en verdad muy lindas.
Leni: Lindas dices... Si ellas son... Muy lindas. - mira a otro lado - me da gusto, que te cuidarán y te tratarán bien Linky. Eso es algo que también pude haber hecho. - dice la rubia con un tono algo bajo, mientras veía al suelo.
Lincoln: Tu también eres muy linda, Leni - toma su mano - de eso nunca me olvidó. Te pareces tanto a mi mamá, siempre tan amable, hermosa, protectora y sobre todo, siempre se preocupaba por mí. Mi mamá... Fue una gran madre y ella, siempre va a estar en mi corazón - le empiezan a salir lágrimas, las cuales se limpia rápidamente. - Pero algo que tú y ella tienen más en común, es ese gran corazón puro que tienen.
Leni: Oh Linky, es lo más hermoso que alguien me ha dicho en mi vida - dice la rubia con una sonrisa, mientras le daba un abrazo al peliblanco el cual lo cotresponde bastante feliz - Te prometo que cuando pueda, pasaré más tiempo contigo, incluso te podría llevar a mi trabajo, sería muy divertido. Que te parece el sábado.
Lincoln: Por supuesto, me gustaría mucho. - dice el peliblanco con una sonrisa, mientras veía como la rubia solo lo acaricia en la mejilla, para luego salir del cuarto - Mmm - observa la foto de sus padres - Mamá... Papá... Me preguntó si, habrán más personas así de buenas en este mundo. Pero al menos, ya están acompañado a otras personas que también me hicieron muy feliz - dice el albino con una triste sonrisa, mientras dejaba la foto en su cama, para luego ir a su escritorio - bien, es hora de hacer la tarea, tengo que terminar esto para mañana.
El peliblanco solo abre su mochila y saca su libreta y algunos libros, para luego empezar a resolver algunos ejercicios, los cuales le habían dejado de tarea, al igual que este encendía una lámpara para trabajar.
Que pasará?, Acaso Lincoln seguirá siendo molestado en la escuela, a qué se refería con lo de ahora están acompañando a otras personas que me hicieron feliz, algún día podrá volver a ver a Sofía, descubranlo pronto.
Continuará... Fin del capitulo 7, si les gusto dejen su voto, comenten y síganme para más y antes de irme les mando un abrazo muy fuerte y un saludo muy especial a:
KarlaOreki
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Bueno hasta aquí los saludos, yo me despido por ahora mi nombre es PinBlack97 y esto es todo por hoy, les mando un abrazo muy fuerte chao chao.
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