Royal Woods Michigan - Parque - 6:00 p.m.

Podemos ver a nuestro protagonista, el cual se encontraba algo pálido, mientras se recargaba en el árbol, al mismo tiempo que Maggie se acerca con un par de conos de helado.

Maggie: Ten, creo que con esto, se te podrá bajar el miedo que sientes ahora mismo. - dice la pelinegra en un tono serio, mientras le daba un cono al albino, el cual comenzó a comerlo, poco a poco. - Hmm, siendo sincera no creí que ibas a aguantar tanto. Pensé que llorarías o gritarías en la primera escena.

Lincoln: Hmm... No... Yo sé que esa película, no era para mí, pero... Quise verla, para que usted no se quedará con las ganas. Y simplemente me mantuve callado, aguantando todo lo que pude. - dice el peliblanco algo nervioso, mientras seguía comiendo.

Maggie: Mjm, tranquilo. Al menos salimos del cine, ilesos. Pensé que iban a decirnos algún sermón, por qué estaban en la sala de una película que no es apta para ti. Aunque siendo sincera, me hubiera valido ese sermón. - dice la pelinegra con seriedad, mientras empezaba a comer su helado. - No suelo seguir órdenes muy a menudo. Que no sean de mi madre. Por ejemplo, quise pintarme el cabello de morado, pero ella no me dejó. Y siendo sincera, por un momento me dieron celos, ver tu cabello blanco.

Lincoln: Mi cabello... Hmm, si a veces me dicen que lo tengo pintado o que parezco un anciano. Pero eso no me molesta, jeje. Al contrario, me hace sentir bien. Hay pocas personas que tienen el cabello natural como el mío. Y eso es bastante genial. - dice el peliblanco con una sonrisa, mientras se ponía más cómodo.

Maggie pensando - Hmm, este niño es muy extraño, al momento de expresar sus sentimientos. Por un momento parecía un indefenso niño asustado y ahora se pone feliz, de la nada. Será que sabe ocultar bien sus emociones. O habrá tenido algún dolor en el pasado. Hmm... Esto es algo interesante. - dice la pelinegra en sus pensamientos, mientras observaba fijamente al peliblanco, el cual comienza a mirar el cielo.

Lincoln: Hmm... Se que ya está atardeciendo, pero... Esas pocas estrellas que hay en el cielo, se ven muy bonitas. Aunque... Al lado de la luna, siempre aparece una que veo todos los días. - dice el peliblanco con una leve sonrisa, mientras miraba hacia arriba.

Maggie: ¿Una estrella al lado de la luna?, eso suena extraño, pero bueno quien soy yo, para juzgar. Aunque... Dime, tiene algo de especial esa estrella. - dice la pelinegra con seriedad, mientras miraba el cielo.

Lincoln: Si... Mi abuelito, está allí, viéndonos. El me cuida desde allá arriba y... Se que ahora está muy contento. Por qué cuando veo esa estrella brillar, pienso que el está riendo y sonriendo como siempre lo hacía. - dice el peliblanco en un tono tranquilo, dejando algo sorprendida a la pelinegra.

Maggie: Hmm... Ya veo. Tu abuelito debió ser una buena persona, para que lo veas así. Pero... Sin ser entrometida, como fue que el terminó allá arriba. - dice la pelinegra en un tono de curiosidad, mientras se coloca un poco más cerca del peliblanco.

Lincoln: Hmm... Un día... Cuándo se fue a dormir su siesta de siempre... Quise ir a despertarlo, para jugar pero... El no despertó y no pude hacer nada. Se fue arriba y ahora me iba a cuidar desde allá. Hay veces que me pregunto, si el no se hubiera ido a dormir... Seguiría aquí... Conmigo. - dice el peliblanco en un tono bastante bajo, mientras que Maggie lo miraba atónita. Al mismo tiempo que los ojos del peliblanco brillan por un momento, para luego dejar caer unas lágrimas. - Sniff... Perdón. Hay veces que me pongo así, cuando cuento esto.

Maggie: Ay rayos... No, perdóname tú a mí, por preguntar. Creo que debí ser más discreta, a la hora de hablar. Lo lamento. Yo se lo doloroso que es perder a alguien. Tampoco conocí a mi padre, y muchas veces... Pensé que había fallecido. Aunque ahora puedo confirmarlo, cuando voy a visitarlo. - dice la pelinegra en un tono serio, mientras veía como el peliblanco, sube nuevamente su mirada hacia arriba.

Lincoln: Quizás el este allá con mi abuelito. Ambos deben ser buenos amigos, ya que hay varias estrellas, que rodean la estrella de mi abuelito. - dice el peliblanco con una sonrisa, mientras veía como más estrellas, comenzaban a aparecer en el cielo.

Maggie: Hmm, es probable. Pero... Cambiando de tema. Tengo una pregunta, para ti. Es de ese día, en el que viniste llorando de aquellas colinas del parque. Cuando vi tu libro en el suelo, me preocupé un poco, pensé que te había pasado algo, pero cuando te bi subiendo, me alivie muchísimo. Pero esa no es mi pregunta, mi pregunta es... ¿Quién es la niña de cabello castaño, que estaba en tu libro?. - dice la pelinegra con una ceja alzada, llamando la atención del peliblanco, el cual sonríe levemente.

Lincoln: Ella es mi amiga, Sofía. Hmm... Ella y yo, fuimos amigos cuando llegue al orfanato. Ella alivió tantos dolores que yo sentía dentro de mi corazón. Nunca podré olvidarla. Y espero con ansias, que ella vuelva a Royal Woods, el mes que viene. La extraño tanto. - dice el peliblanco en un tono bajo, mientras miraba el cielo.

Maggie: Entiendo Lincoln. Hmm... Debe ser una amiga, a la cual aprecias mucho, por la forma en que hablas de ella. Supongo que incluso, puede ser tu mejor amiga. - dice la pelinegra en un tono serio, mientras desviaba su mirada. Dejando algo confundido al peliblanco, por su repentino cambio de humor.

Lincoln: Bueno, si pero... Eso no quiere decir, que no quiera a mis demás amigos. Por ejemplo, sin decirte mentiras. Fuiste la primera persona que conocí aquí, a la que le tuve mucha más confianza, que a mis amigos de la escuela. Actualmente les tengo confianza a todos ellos, pero en ti... Confío un poco más, junto con otras dos amigas. Eres una amiga especial, Maggie. - dice el albino con una sonrisa inocente, mientras tomaba la mano de la pelinegra, la cual se sonroja levemente.

Maggie: Ami... Amiga especial... Yo... Vaya... No me esperaba eso, gracias Lincoln. Sinceramente eres el primer amigo que me ha caído bien. Ya que... Desde que entre a segundo de secundaria, no eh tenido muchos amigos. Y es como si fueras el primero que tengo. - dice la pelinegra con una sonrisa, mientras veía como el peliblanco sonríe levemente.

Lincoln: Mjm, siendo sincero eres la primera amiga, que conocí cuando salí del orfanato. Y me alegro mucho de tenerte como amiga. Sinceramente, me hubiera sentido solo en el parque, de no ser por ti, Maggie. - dice el albino con una sonrisa, mientras que Maggie se recarga en el árbol bastante contenta.

Mientras tanto, en el restaurante. Lucas se encontraba completamente sorprendido, mientras veía como Elizabeth, ya se encontraba con la cara roja, luego de haber tomado más de 7 copas de vino tinto.

Lucas: Elizabeth, creo que es mejor, que dejes de tomar. Ya estás bastante borracha y creo que tú hijo te debe estar esperando, jeje. - dice el pelinegro algo nervioso, mientras jugaba con sus dedos. - Mesero, la cuenta.

Elizabeth: Vamos Lucas... Hic... Solo una más y ya... Por favor... Hic... Además no eh bebido demasiado, me encuentro bien... Estoy muy bien. - dice la peliblanca bastante contenta, mientras le daba otro sorbo a su copa.

Lucas: Eso me lo dijiste, cuando apenas ibas por la segunda copa. Y eso, que no te deje pedir whiskey, por que con eso, estarías peor. - dice el pelinegro en un tono serio, mientras recarga su mano en la cabeza. - ¿Qué diablos tienen los Rochester con el alcohol?.

Elizabeth: Ay Lucas... No tienes por que... Hic... Poner esa cara... Hic... Vamos... Sácame a bailar un rato... Quiero divertirme contigo... En nuestra cita. - dice la peliblanca con una sonrisa, mientras se levanta de la mesa, para luego caminar con dificultades, hacía donde estaba Lucas, el cual ya parecía avergonzado.

Lucas: Dijimos que esto era una reunión de trabajo, no una cita de enamorados. Además como quieres que te saque a bailar, en esta condi - el pelinegro no termina de hablar, debido a que la peliblanca con una gran fuerza, lo toma del brazo, para luego llevarlo a la pista. - Como diablos se hizo tan fuerte... Ah claro... Asesina... Si... Hmm... Sin duda necesito vacaciones.

Rápidamente la peliblanca camina hacia la pista, en donde habían algunas parejas bailando, por lo que está toma la mano de Lucas, el cual un poco avergonzado, la toma de la cintura, para luego comenzar a bailar con ella, de forma lenta.

Elizabeth: Hmm, hace mucho que no me divierto así con alguien... Desde el fallecimiento de mi esposo, me la eh pasado escondida, para proteger a mi hijo... Pero ahora, que regresé...  Pienso recuperar el tiempo perdido con él... Y quizás con alguien más... Como un apuesto hombre de cabello negro. - dice la peliblanca con un leve sonrojo, mientras veía a Lucas de frente, el cual se pone bastante nervioso.

Lucas: Elizabeth... Creo que sería mejor pagar la cuenta e irnos, además... Tú hijo debe estar en el parque muy preocupado por ti... Esperándote... Creo que sería mejor que... - Esté no termina de hablar, debido a que Elizabeth, se acerca a él y de forma inesperada, le planta un beso en los labios, que deja al pelinegro bastante sorprendido.

La peliblanca bastante sonrojada, coloca sus brazos hacia arriba, rodeando el cuello de Lucas, el cual sin pensarlo, comienza a corresponder el beso, abrazando su cintura, para luego cerrar sus ojos. Sintiendo como su corazón latía a una velocidad enorme.

Después de unos segundos... La peliblanca y el pelinegro, se separan del beso, dejando un leve hilo de saliva entre sus bocas, para luego mirarse fijamente a sus ojos... Mientras se movían lentamente al ritmo de la música que sonaba.

Lucas: Vamos a casa, Elizabeth. Ya es tiempo... Por favor. - dice el pelinegro con seriedad, mientras tomaba la mano de la peliblanca, la cual seguía con un enorme sonrojo, en su rostro, mientras que Lucas se acerca a la mesa, para luego dejar un fajo de billetes, arriba de la cuenta, y después de eso, se marcha con la peliblanca del restaurante.

Mientras tanto, con Lincoln. El peliblanco se encontraba caminando, por las calles junto con Maggie, la cual parecía más contenta de lo normal. Pues esta incluso iba sonriendo, luego de haber platicado con el peliblanco.

Lincoln: Hmm... Señorita Maggie... Le tengo una pregunta... Esté... ¿Cómo se encuentra su tío?, el señor... Rick... Owens. - Preguntó el peliblanco con algo de dificultad, llamando la atención de la pelinegra, la cual se queda algo pensativa.

Maggie: Hmm, pues... Eh ido a verlo un par de veces. Se ve muy mal. Tuvo un accidente, muy fuerte. Pero creo que pronto iré a verlo otra vez. Y... No lo sé... ¿Podrías ir conmigo?. Quiero tener a alguien a mi lado, al momento de verlo. No soy fanática de los hospitales. - dice la pelinegra con seriedad, mientras se cruza de brazos.

Esa pregunta, dejaría completamente helado a nuestro protagonista, el cual se queda en shock, por unos segundos, mientras que sus pensamientos se dividen, en dos partes. Una de ellas, decía que no debía ir, ya que Rick fue el causante, de uno de sus más grandes sufrimientos, pero por otro lado, su otro pensamiento le dice que vaya, para apoyar a Maggie, en un momento difícil, aunque deba ver a una persona despreciable.

Pero esos pensamientos se terminarían desvaneciendo, cuando sin previo aviso, el peliblanco se choca con un árbol, dándose un golpe en su cara, para luego caer al suelo. Alertando a Maggie, la cual rápidamente se acerca para ayudarlo. 

Lincoln: Ay... Eso me dolió. - dice el peliblanco con bastante dolor, mientras se agarraba su cabeza, al mismo tiempo que Maggie se agacha a su altura, para luego tomar su cara y mirarlo en todas partes. - Hay algo... Me sigue doliendo mucho.

Maggie: Tranquilo, por suerte no traes nada. De lo contrario, el golpe hubiera sido peor, pero tranquilo, no comiences a llorar. Sabes que no me gustan los lloriqueos. - dice la pelinegra con seriedad, mientras sobaba la frente del peliblanco, el cual se limpia sus ojos. - Mjm... Eres bueno para aguantar esto. Sin duda te has vuelto más fuerte, que cuando te conocí. Parecía que tenías miedo de mi. Aunque es bastante obvio, ya que solo tienes 6 años.

Lincoln: Gracias señorita Maggie... Siendo sincero me dio bastante miedo, cuando la conocí, pero ahora... Puedo ver que debajo de esa cara de seriedad, hay una persona dulce y amable que ayuda a los demás. - dice el peliblanco con una sonrisa inocente, dejando algo sorprendida a la pelinegra, la cual toma su mano.

Maggie: Mejor te llevo a casa de la mano, no quiero que te golpees otra vez. Pero ahora si, contesta a mi pregunta. ¿Me acompañarías al hospital, para ver a mi tío?. - dice la pelinegra con seriedad, mientras veía como Lincoln se queda algo pensativo.

Lincoln: De acuerdo, señorita Maggie. Iré con usted, para que podamos ver... A su tío. - dice el peliblanco con una falsa sonrisa, a lo que Maggie sonríe levemente, para luego continuar con su camino. - Ahora tengo mucho miedo. Espero que esto no salga mal.

Mientras tanto, con Lucas y Elizabeth. Ambos se encontraban caminando por una calle, un tanto oscura, aunque Elizabeth, necesitaría algo de ayuda. Debido a que está, seguía bastante ebria, como para poder caminar por su cuenta.

Lucas: Sabía que no debía estacionarme, tan lejos. Pero no te preocupes, cuando lleguemos a mi auto, te llevaré a casa, de acuerdo. - dice el pelinegro algo preocupado, mientras caminaba de la mano con Elizabeth, la cual iba muy mareada, hasta que de pronto, este escucha unos pasos. Haciendo que se detenga en seco. - Hmm... ¿Qué demonios?.

De pronto, un cuchillo se dirige con dirección a Elizabeth, pero Lucas reacciona rápidamente y desvía el ataque con su cuchillo, para luego mirar hacia arriba, observando a algunos sujetos, los cuales rodeaban la zona por completo.

Lucas: Hay tres en los techos, dos en el callejón, hay uno por detrás del buzón y cuatro por detrás de nosotros, supongo que es mas que obvio, que quieren matarnos. Pero no lo voy a permitir, asesinos. - dice el pelinegro con seriedad, al mismo tiempo que Elizabeth, miraba a todos lados, algo confundida.

Elizabeth: Eh, que sucede Lucas, ¿Quiénes son estos sujetos?, y... ¿En dónde estamos?. - dice la peliblanca con una mirada llena de confusión, al mismo tiempo que Lucas, la tomaba de la cintura. - ¿Qué pasa?, nos vamos a besar otra vez.

Lucas: ¡¿Qué, no!?. Vamos a bailar un poco... Pero esta vez, yo elijo el baile. - dice el pelinegro con seriedad, mientras comenzaba a moverse con la peliblanca, al ritmo de un tango, para luego mover un poco a Elizabeth, la cual levanta su pierna, dándole una fuerte patada a dos asesinos, los cuales caen al suelo.

Rápidamente varios asesinos, comienzan a correr en dirección de ambos, pero Lucas usando su estrategia, mueve a Elizabeth hacía abajo, para luego tomar su pierna, tomando 2 cuchillos que esta tenia escondidos allí, y a una gran velocidad, los lanza hacia ambos asesinos, los cuales los reciben en sus piernas, cayendo al suelo, bastante confundido.

Lucas con una gran velocidad, comienza a girar con Elizabeth, la cual se comenzó a marear un poco, levantando su brazo, con el cual abofetea a un asesino, el cual Lucas golpea, con su puño, derribándolo al suelo.

Lucas: Eso es... Ahora... Es tiempo de un pequeño... Tango. - dice el pelinegro con seriedad, mientras tomaba la mano de Elizabeth, para luego moverse con ella, hacia donde estaban 3 asesinos más, los cuales atacan con sus cuchillos, pero Elizabeth levanta su pierna, golpeando sus brazos, al mismo tiempo que Lucas les daba una patada en la cara, que los derriba al suelo.

Rápidamente uno de los asesinos, se acerca con su pistola, dispuesto a acabar con ambos, pero Lucas rápidamente le lanza el último cuchillo que tenía Elizabeth, desviando el disparo de la pistola, que iba directo hacia ella. Pero al moverse a un lado, Lucas recibe el disparo en su brazo, haciendo que este se queje de dolor.

Elizabeth: ¡Lucas!, te encuentras bien. Hmm... Malditos, como se atreven a lastimarlo. Ahora si estoy muy enojada... Y esto... No pienso perdonárselos, malditos miserables. Morirán. - dice la peliblanca bastante molesta, mientras se lanzaba contra el asesino que tenía la pistola, dándole un fuerte golpe en la cara, para luego darle una fuerte patada, con la cual le termina por romper el brazo, al estrellarlo con una pared. 

El otro asesino al ver la oscura mirada de Elizabeth, intenta huir... Pero la peliblanca se acerca a él, y con una gran fuerza, lo toma del cuello de la camisa, para luego estrellarlo contra la pared, haciendo que está se agriete un poco. Para luego comenzar a pisar su pierna, con la punta de su tacón, provocando que el sujeto, se quejé del dolor.

Elizabeth: Juro, que van a pagar por lo que le hicieron a Lucas, malditos asesinos, no se los pienso perdonar nunca. Ahora mismo morirás como el otro imbécil, y luego me ocuparé de matarlos a todos... Lenta y dolorosamente, hasta que no quede rastro alguno de ellos. - dice la peliblanca con un brillo rojo en sus ojos, los cuales mostraban irá.

Lucas: Elizabeth... ¡No lo hagas!, recuerda la promesa que le hiciste a tú hijo... Recuérdala, no le puedes fallar de está manera, por algo tan absurdo. - dice el pelinegro con seriedad, haciendo que la peliblanca entre en razón, para luego soltar al tipo, el cual se encontraba bastante débil.

Elizabeth: Eh... Mi pequeño... No... No te puedo fallar otra vez... Yo prometí, protegerte mi amor, sin más asesinatos... Te lo prometí, mi pequeñito. - dice la peliblanca en un tono bajo, mientras caía al suelo, pero Lucas la atrapa con un brazo, y la sostiene con bastante fuerza, para luego tomar al sujeto de la camisa.

Lucas: Ahora mismo vas a hablar... Los envió tú jefe... De dónde... Dónde está ese maldito infeliz, dímelo si no quieres morir... Por que ella, no es la única que ha asesinado a malditos, como tú. - dice el pelinegro con seriedad, mientras le apuntaba con su cuchillo en el cuello, haciendo que el sujeto se ponga muy nervioso.

Asesino: El Jefe... Él... Él se esconde en un lugar secreto... Que se ubica en... - el tipo no termina de hablar, debido a que un disparo le atraviesa su cabeza, por lo que Lucas rápidamente se voltea, y observa a la misma mujer que intentó asesinarlo.

El pelinegro con los ojos totalmente rojos, abraza a Elizabeth y se levanta del suelo, al mismo tiempo que la misteriosa mujer, le dispara al resto de sus compañeros, asesinándolos a todos, para luego huir de allí. Mientras que Lucas volvía sus ojos a la normalidad.

Lucas: Carajo... Por poco y derrotaba a esos malditos parásitos... Pero será mejor que me vaya de aquí... Claro no sin antes, deshacerme de las pruebas, para que no nos incriminen a nosotros... No quiero que Elizabeth vaya a la cárcel y deje a su hijo otra vez solo... Y yo... No pienso volver a pisar una cárcel nunca en mi vida. No de nuevo.

Un rato después. En la casa Loud, Lincoln se encontraba en su cama, mientras miraba al techo, con una mirada llena de nervios, al mismo tiempo que Leni entraba a su habitación, con una taza de té, en sus manos.

Leni: Linky... ¿Te encuentras bien?, se que tú mamá no ha llegado, pero... Tranquilo. Ella está con el tío Lucas, así que no te preocupes, ella va a estar bien. - dice la rubia con una sonrisa, mientras se sienta al lado del peliblanco, el cual se sienta en su cama.

Lincoln: No es eso lo que me preocupa, Leni. Yo sé que mi mamá se encuentra bien, con el tío Lucas. Lo que me tiene preocupado, es otra cosa. - dice el peliblanco en un tono bajo, llamando la atención de Leni, la cual deja su taza en la mesa, para luego mirar a su hermano. - En unos días... Iré al hospital... Para ver a Rick Owens.

Leni: ¿¡Qué!?, dijiste Rick Owens. El mismo señor, que junto con su esposa, te hicieron un maltrato horrible. No... No puede ser, y por qué vas a ir a verlo. ¡Si el te hizo mucho daño!. - dice la rubia bastante preocupada y a la vez algo enojada, haciendo que el peliblanco se asusté un poco.

Lincoln: Lo sé, pero... El, es tío de mi amiga, Maggie. Y le prometí a ella, que íbamos a visitarlo, juntos. Por qué ella le teme a los hospitales. Pero jamás me atreví a confesarle, lo que ese señor me hizo. No quería romper el corazón de Maggie, y que ella viera con odio a su familia. - dice el peliblanco con seriedad, mientras agachaba su cabeza.

Leni: Linky... No debiste prometerle eso. Se el buen corazón, que tienes pero... Sabes muy bien, que si ese señor te llega a ver y te reconoce, es muy probable que intente hacerte algún daño, pero del que te hizo. - dice la rubia en un tono de preocupación, mientras tomaba la mano de su hermano, el cual comenzó a entrecerrar sus ojos. Mientras que sus labios temblaban. - Linky...

Lincoln: Sniff... No te preocupes, Leni... Ese señor tuvo un accidente y debe estar muy medicado. Debido a que sufrió mucho daño. No puede moverse, así que por eso, acepté cuando Maggie me explicó sobre él. - dice el peliblanco con bastante tristeza, mientras se limpiaba sus ojos. - Pero aún así... Le sigo teniendo miedo. Se que el señor Crochet, fue el peor de todos, pero... Con Rick Owens. Los días que me dejó en ese sótano y los días que estuve enfermo, por comer comida en mal estado. Me hicieron tenerle un miedo bastante fuerte... El no tenía compasión por nadie, ni por nada. Cualquier cosa que el tocará, prácticamente lo mataba.

Leni: Ay Linky... Ven conmigo, hermanito. - dice la rubia en un tono de tristeza, mientras abrazaba al peliblanco, el cual comenzó a sollozar en su hombro. - Tranquilo... Ese señor jamás te volverá a atormentar de esta manera. Nadie más volverá a hacerlo, te lo prometo. Además... El hospital debe estar muy bien protegido y ese señor no se moverá. Así que no te preocupes, vas a estar bien. Aunque no me sigue gustando la idea, de que vayas con ella, a verlo. Pero respetaré tu decisión.

Lincoln: Gracias hermanita... Ahora solo me queda esperar a mi mamá. No te preocupes, me puedo quedar aquí tranquilo, solo leeré algún libro o comenzaré a dibujar. Tú ve al sofá y termina de ver tu serie, yo estaré bien. - dice el albino con una sonrisa, mientras veía como Leni se levanta de la cama, y toma su taza.

Leni: Bien, pero si necesitas algo, no olvides que estoy abajo, si. - se acerca a el y lo besa en la frente. - Buenas noches hermanito, no te duermas muy tarde. Recuerda que mañana tienes clases. - dice la rubia con una sonrisa, mientras salía de la habitación, al mismo tiempo que el peliblanco tomaba su libro.

Lincoln: Hmm... Leni, es de las pocas personas, que pueden tranquilizarme, cuando tengo miedo. Solo muy pocos, lo pueden hacer, y esos son mi mamá, mi otra mamá, mi abuelito, mi hermana Zoe, Rachel... Y... Sofía. Hmm... Cuando Maggie, la menciono me confundí, pero... Eso no quiere decir, que no me pusiera feliz, por recordarla. - dice el peliblanco con una sonrisa, mientras miraba su libro. - Sofía... Aún recuerdo cuando la señora Brisa, me contó cuando llegaste al orfanatorio.

Flashback...

Podemos ver a nuestro protagonista, de tan solo 4 años, el cual miraba directamente a Sofía, la cual se encontraba dormida, con la chimenea calentando el lugar, para que fuera más cálido. Debido al frío que hacía en ese entonces.

Lincoln: Disculpe, señora Brisa. Pero tengo una duda... Cómo fue, que Sofía, llegó al orfanatorio. De hecho, usted mencionó una vez, que ella era la niña, que llegó siendo muy joven. - dice el peliblanco con bastante curiosidad, mientras abrazaba a Bun Bun.

Brisa: Oh, la historia de Sofía. Recuerdo perfectamente como llego ella. Fue una noche, como cualquier otra. Estaba arropando a los otros niños, que estaban por dormir, cuando de pronto, escuché algunos ruidos en la puerta principal. Decidí ir a ver, pensando que era algún padre, con deseos de adoptar, pero... Cuando abrí la puerta, me quedé estupefacta, debido a que mis ojos, no se creían lo que veían.

En el suelo. Estaba un pequeño canasto, con una bebé de ojos verdes y un mechón castaño. Con mucho cuidado, tome a la bebé, que se encontraba despierta, y en sus manos, tenía una nota que decía lo siguiente.

"Está pequeña, no nos será de mucha utilidad. Se que los niños, son normalmente una "bendición", pero para nosotros, fue como una maldición. Puede quedarsela, para que la adopten. Por qué no la queremos. Nos iremos de Royal Woods, ahora mismo. Y ni siquiera le hemos puesto el nombre. Usted puede hacerlo si quiere. Atte... Nadie.

En ese momento, me moleste un poco, pero cuando escuché los llantos de ella. Decidí arrullarla y buscarle algo de leche, para que pudiera dormir tranquila. Ya que a pesar de ser mi primera bebé, en el orfanatorio. Siempre tenía leche, por si las moscas. Nadie sabía lo que podía pasar en el futuro.

Luego de que ella se tranqulizara y se durmiera. La lleve a mi habitación, para que descansará. Me quedé en una silla, por horas pensando en algún nombre, para ella. Yo sabía que sus padres, no la querían por esa carta. Y que parecían tener resentimiento hacia ella. Pero una bebé, no tiene la culpa de sus problemas. Y luego de haber pesando por horas... Al amanecer, viendo el sol salir por las montañas. Me llegó un nombre a la cabeza... Sofía.

Con el tiempo, crié a Sofía, como si fuera una hija mía. La vi crecer, la hi dando sus primeros pasos. La vi decir su primera palabra, la vi cuando le creció su primer diente, entre otras cosas. Pero como tú, ella fue muy solitaria. No hizo amigos fácilmente y siempre estaba sola, conmigo. Ya que muchos niños, sentían celos de ella, pero luego... Llegaste tú. Y con esa bondad que tienes, te hiciste su primer y único amigo. Ella sin duda es una niña especial, Lincoln. A pesar de su corta edad, creció y aprendió muy fácil, las cosas que los niños de su edad, no aprenden fácilmente.

Ahora... Ella va a ser adoptada, el día de mañana. Y hoy es su última noche aquí. Se va a ir, mañana por la tarde. Así que te recomiendo, que pases todo el día de mañana. Por qué sus padres, se la llevarán a Europa. - dice la pelinegra en un tono serio, haciendo que el peliblanco, se quede completamente sorprendido.

Lincoln: Lo prometo, señora Brisa. Aunque el mundo se parta en dos mitades, o que nos separe un mar intenso. Jamás dejaré a Sofía sola, por nada del mundo. Ella sin duda, es lo más especial que tengo en mi vida. - dice el albino con una sonrisa, mientras se acerca con la castaña, para luego acostarse a su lado. - Buenas noches, señora Brisa.

Brisa: Buenas noches, Lincoln. Que descansen. Espero que mañana no sea un día, tan duro para ambos. Aunque lo más probable, es que si lo sea. - dice la pelinegra en un tono de preocupación, mientras veía como el albino cierra sus ojos, para luego dormir.

Fin del Flashback.

Nuestro protagonista, poco a poco, comenzó a cerrar sus ojos, al mismo tiempo que su libro, caía en su pecho. Para luego girar la cabeza a un lado, quedando profundamente dormido, al mismo tiempo que una sonrisa se formaba en su rostro. Recordando los días, que estuvo con Sofía. Y el tiempo que faltaba, para estar con ella, se estaba acabando más y más.

Mientras tanto con Lucas. El pelinegro ya se encontraba en su casa, con una navaja en su mano, mientras se sacaba una bala de su brazo, la cual coloca en un recipiente, para luego comenzar a tratar su herida de bala, mientras que en sofá, Elizabeth se encontraba dormida con una manta, cubriéndola.

Lucas: Hmm... Dios... En verdad, se preocupó por mi. Incluso se enojo, cuando me hicieron, pero... Por qué lo hizo... Será acaso, por el beso que nos dimos. - dice el pelinegro con seriedad, mientras recordaba como la peliblanca lo besaba en los labios. - O será por qué nos llevamos bien. No lo sé con exactitud... A veces no entiendo a las mujeres. Pero supongo que son los misterios de la vida. Por eso dicen que el otro misterio del universo, es la mujer.

El pelinegro con una mirada seria, comienza a cerrarse la herida de su brazo. Para luego mirar al cielo, recordando algunos momentos qué pasó en su infancia. Para luego mirarse fijamente en un espejo. Observando su aspecto y apariencia.

Lucas: Ah... Ojalá pudiera regresar al pasado... Quisiera poder revivir esos días, otra vez... Esos días, en los cuales yo era feliz y tranquilo. Pero como dicen algunos... Debes sentar cabeza y enfrentar el presente... Aunque sea con miedo. Pero si tienes al amor de tu lado, nada es imposible. - dice el pelinegro con una leve sonrisa, mientras miraba a Elizabeth, para luego mirar el cielo. - Ese blanco cabello... Sin duda... Es hermoso.

¿Qué pasará?, ¿Acaso Lincoln le confesará a Maggie, lo que Rick le hizo?, ¿Lori se vengará de Lincoln, por la broma que el supuestamente le hizo?, ¿Elizabeth estará enamorada de Lucas?, descubranlo pronto.

Continuará... Fin del Capítulo 65, si les gusto dejen su voto, comenten y síganme para más y antes de irme les mando un abrazo muy fuerte y un saludo muy especial a:

KarlaOreki
KanaoTsuyuri77
DianaMorales795
Naimar62
Alejandrafox32
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Sachaqui
JaviSuzumiya
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Bueno hasta aquí los saludos, yo me despido por ahora, mi nombre es PinBlack97 y esto es todo por hoy, les mando un abrazo muy fuerte, chao chao.