Royal Woods Michigan - Residencia Loud - 2:00 a.m.

Podemos ver a nuestro protagonista, el cual se encontraba acostado en su cama. Pero el sudor se podía notar en su frente, al mismo tiempo que esté se movía de un lado para otro. Con un rostro lleno de terror y miedo.

En los sueños del peliblanco...

Lincoln se encontraba corriendo por los pasillos de una casa, al mismo tiempo que era perseguido por un hombre, el cual azotaba su cinturón contra el suelo y la pared, al mismo tiempo que gritaba y balbuceaba cosas sin sentido.

El pequeño peliblanco con mucho miedo, comenzó a buscar un lugar en donde esconderse. Hasta que de pronto, este observa un armario en el cual, este entra y cierra, para luego abrazar sus piernas con bastante miedo.

El albino solo comenzó a cerrar los ojos, al mismo tiempo que esté rezaba por qué nada le pasará. Pero de pronto, este escucha un fuerte golpe, al mismo tiempo que unos pasos se dirigen a dónde estaba el. Cosa que lo asusta demasiado, pero cuando abren las puertas del armario, el peliblanco es iluminado por una gran luz, al mismo tiempo que esté no sentía nada.

Lincoln con algo de miedo, abre los ojos, viendo que estaba en otro lugar como aquel sueño. Se sentía un aura bastante calida y el lugar se veía muy relajante. Pero cuando esté da un paso fuera del armario. Este aterriza en aquel lugar, viendo que estaba en un mundo completamente distinto.

Lincoln: Este lugar es increíble. Todo es tan, calmado y tan bonito. Pero... Esa es mi, mamá. Mamá eres tú. - dice el peliblanco con una sonrisa, mientras veía como una mujer peliblanca se levanta del suelo, para luego empezar a caminar hacia otra dirección. - Mamá espera.

De pronto el peliblanco quedaría completamente inmóvil. Al mismo tiempo que esté comenzaba a ver cómo todo el lugar se ilumina de color blanco, mientras que en su cabeza una leve voz femenina se comenzaba a escuchar.

- Lincoln... Tienes que ser fuerte. Tienes que ser más valiente. Tienes que luchar, nuevos peligros vendrán. Y debes estar listo para cualquier cosa. Jamás te rindas y lucha por los que más amas, por tus amigos y por tu familia. - dice la voz, haciendo que el albino se agarre su cabeza con algo de dolor.

Lincoln: Hmm... Quien es usted. Por qué me duele mi cabeza, me duele mucho - dice el albino con bastante dolor, mientras sentía como su cabeza le comenzaba a doler, hasta que de pronto una fuerte luz cegadora ilumina todo, haciendo que el albino despierte de sus sueños.

Fuera de los sueños del peliblanco...

Nuestro protagonista con mucho dolor comenzó a moverse aún más en la cama. Logrando despertar a Leni, la cual observa como el peliblanco se agarraba su cabeza con bastante dolor.

Leni: Linky. Linky que tienes, por favor tranquilízate - dice la rubia muy preocupada, mientras tomaba las manos del albino, el cual abre los ojos de golpe, para luego respirar agitadamente. - Te sientes bien. Te duele algo. Dime cómo te sientes Linky.

Lincoln: Ya... Ya me siento mejor. Creo que solo tuve un mal sueño, eso es todo Leni. Solo me duele un poco la cabeza - dice el peliblanco con algo de dolor, mientras se sentaba en la cama, para luego tocar su frente.

Leni: Haber déjame ver por favor. - dice la rubia en un tono de preocupación, mientras tocaba la cabeza del peliblanco. - Hmm, no. No es fiebre. No tienes caliente la cabeza. Mejor te traeré un vaso con agua, para que te tranquilices de acuerdo.

Lincoln: Si. Muchas gracias Leni - dice el albino con una leve sonrisa, mientras veía como Leni sale de la habitación, para luego bajar las escaleras, al mismo tiempo que el peliblanco se levanta de la cama, para luego mirar por la ventana. - Acaso, quien me habló en mi cabeza. Fuiste tú mamá. Me hablabas desde las estrellas. Me hablabas desde el cielo.

Varias horas después... Llegaría la mañana. Y en el comedor, nuestro protagonista se encontraba comiendo un poco de cereal, mientras estudiaba su libro. Al mismo tiempo que escucha como sus hermanas bajaban las escaleras para desayunar.

Lynn Padre: ¡Hijas, sobrinos, vamos a comer! Que se les está haciendo tarde para que desayunen - dice el castaño mientras servía el desayuno, al mismo tiempo que todos se sentaban para desayunar. - Por favor dense prisa. Su madre salió temprano para ir con su hermano. Y Lori los llevará a la escuela.

Lincoln: Hmm. Papá... Este, crees que puedas darme permiso de ir al parque hoy en la tarde. Quiero dejarle estás flores a Copito, por favor - dice el peliblanco mientras miraba unas flores azules, llamando la atención de todos.

Lynn Padre: Por supuesto hijo. No hay problema. Puedes ir a dejarle eso a tu amigo. Por mi no hay problema. - dice el castaño con una leve sonrisa, mientras veía como el peliblanco asiente con la cabeza, para luego seguir comiendo. Mientras que Leni y Lori solo cruzan miradas levemente.

Zoe: Hermano. Hermano ya vine para llevarte a la escuela. - dice la pelinegra desde la puerta, por lo que el peliblanco toma su plato y se come el resto de su cereal de una sola sentada. Para luego tomar su mochila y despedirse de todos. Al mismo tiempo que salía de la casa, para luego ir con su hermana.

Lincoln: Ya estoy lista hermana. Vámonos - dice el peliblanco con una sonrisa, mientras subía a la motocicleta de su hermana, para luego marcharse junto con ella, hacia la escuela. - Oye hermana, en la tarde. Puedes llevarme al parque. Yo te cuento en el camino, por qué quiero ir.

Minutos después. En la entrada de la escuela, la pelinegra se despide del peliblanco con un beso en la frente, como era costumbre. Para que luego está se marche, al mismo tiempo que el albino comenzaba a caminar hacia la escuela. Pero mientras esté caminaba. Se da cuenta, de que Ronnie Anne se encontraba parada en la puerta de la escuela. Con los brazos cruzados.

Ronnie Anne: Parece que por fin te libras de uno de tus problemas, Loud. Hoy en la noche, mi familia y yo nos mudamos a la gran ciudad. - dice la pelinegra con seriedad, mientras miraba como el albino abre los ojos algo sorprendido. - Que pasa, por qué no estás celebrando.

Lincoln: Es que yo, no le veo el caso celebrar eso, señorita Ronnie Anne. Por qué celebraría que usted se vaya. No le veo el caso - dice el peliblanco en un tono tranquilo, sorprendiendo a la pelinegra la cual lo mira fijamente. - yo creo que sería incluso un buen momento para... Hacer las pases, por todos los problemas, en los que nos metimos. No lo cree - alza su mano.

Ronnie Anne: Hmm, supongo que si. Pero eso no significa que seamos amigos. Solo somos conocidos, entendido Loud - dice la pelinegra en un tono serio, mientras alzaba su mano. Por lo que el peliblanco solo sonríe y la estrecha, al mismo tiempo que asentía con la cabeza. - Quizás algún dia nos volvamos a ver. Pero si no. No me importa.

Lincoln: Lo comprendo. Espero que sea feliz y que algún dia deje ese lado abusivo y malo que tiene usted. Que tenga una buena vida en esa ciudad - dice el peliblanco con una leve sonrisa, mientras se marchaba de allí, dejando a la pelinegra algo sorprendida por la madurez con la que Lincoln se había tomado aquella noticia.

El peliblanco solo se acerca a su casillero y comienza a buscar algunos de sus libros, hasta que por error deja caer una de sus cartas que le había mandado Sofía, por lo que esté la recoje y comienza a verla con una leve sonrisa, para después abrirla y leerla nuevamente.

Rusty: Oye, parece que tienes a una chica detrás de ti eh - dice el peli naranja con una sonrisa, haciendo que el peliblanco se asusté y se golpee contra la puerta de su casillero. - Uy, lo lamento amigo, te encuentras bien.

Lincoln: Si, muchas gracias Rusty. Es que me asustaste - dice el peliblanco algo adolorido, mientras se agarraba su cabeza. - Y ella es solo una amiga. Pero más bien, es mi mejor amiga. Se llama Sofía.

Rusty: Si, ya lo sabíamos. Sofía la chica del cual nuestro amigo se encuentra enamorado y con ganas de abrazarla y besarla - dice el peli naranja en un tono burlón, haciendo que el peliblanco se sonroje de la vergüenza.

Lincoln: Yo eh... Me tengo que ir a clase, voy tarde - dice el albino bastante avergonzado, mientras dejaba su carta en el casillero, para después cerrarlo y salir corriendo, al mismo tiempo que Rusty se comenzaba a reír un poco.

Rusty: Jejeje, oh viejo. Algún dia debes de admitir que estás enamorado. Pero de acuerdo con mi reloj, aún faltan como 5 minutos para entrar a clases - dice el peli naranja con una sonrisa, hasta que de pronto este escucha el timbre. - Oh oh, como te odio reloj de feria.

Un rato después... En la cafetería. Nuestro protagonista se encontraba mirando a la nada, con una leve sonrisa, dejando algo confundidos a sus amigos, los cuales observan que esté apenas y comía.

Stella: Oigan, saben por qué Lincoln tiene esa cara. Lleva 3 minutos así mirando a la pared, como si viera a los dioses regresar al Olimpo - dice la pelinegra algo confundida, mientras veía como el peliblanco suspira profundamente.

Rusty: Ah, es solo por qué esta recordando a la niña de la que este está enamorado. Una tal Sofía - dice el peli naranja con una sonrisa, haciendo que Cookie y otras chicas se atraganten con su comida. - Que, que dije.

Cookie: Dijiste que Lincoln, está enamorado de una niña. Pero el ni siquiera entiende sobre el amor. Es demasiado pequeño e inocente como para darse cuenta que está enamorado - dice la castaña un poco celosa, mientras destruye una de sus galletas en 2 partes.

Rusty: Pues parece que no estás en lo cierto. El puede entender el amor hasta cierto punto. O por qué crees,  que el tiene esa cara, cada vez que mencionan o lee una de las cartas de su amiga, Sofía - dice el peli naranja con una sonrisa, mientras se acerca al peliblanco para luego susurrarle. - Oye, Sofía está en la puerta.

Lincoln: Eh?, Que... Cómo dices Rusty?. - dice el peliblanco algo confundido, mientras veía como todos lo miraban algo extraño, menos las chicas que algunas lo miraban algo celosas. - Que sucede, por qué me miran así. Que pasa?.

Jordan Chica: Oh no es nada, Rusty solo nos comentaba un poco, sobre tu amiga Sofía. - dice la castaña en un tono serio, mientras veía como el peliblanco asiente con la cabeza, mientras comenzaba a comer más tranquilo. - Por cierto en dónde está ella ahora. No sabes si vive en Royal Woods.

Lincoln: No, ella está en Europa ahora mismo con su nueva familia. Y me dijo que en menos de 2 meses, vendrá para acá y así podré volver a verla. - dice el peliblanco mientras volvía a sonreír enamorado. - Hmm... Sofía.

Cristina: Oye en esas fechas que dices, son las fechas del baile de este año. Así que podrías invitarla al baile, no lo crees - dice la pelirroja con una sonrisa, haciendo que el albino abra los ojos, bastante sorprendido.

Lincoln: Lo dice en serio. Puedo invitarla al baile. Te... Te... Tengo que irme. Le debo escribir una carta - dice el peliblanco mientras salía de la mesa, para luego irse corriendo, al mismo tiempo que los demas solo lo miraban algo sorprendidos.

Clyde: Sin duda alguna, Lincoln está enamorado de esa niña, Sofía. Es como si cada vez que la mencionan, su mundo automáticamente cambia y se vuelve feliz y brillante. Esa niña debe ser muy especial para el. - dice el pelinegro con una sonrisa, mientras veía como el albino salía de la cafetería.

Un par de horas después. En la salida de la escuela. Nuestro protagonista se encontraba saliendo con un sobre en sus manos, al mismo tiempo que esté caminaba hacia la motocicleta en dónde estaba su hermana.

Zoe: Oh vaya Lincoln, ya estás listo para irnos - dice la pelinegra con una sonrisa, mientras se abrochaba su casco, hasta que de repente, esta observa la carta del peliblanco. - ehm, que es eso hermanito.

Lincoln: Es una carta que le escribí a mi amiga Sofía. Quiero enviársela, para que venga conmigo al baile del otro mes, en el cual ella vendrá - dice el peliblanco con una sonrisa, dejando algo sorprendida a la pelinegra.

Zoe: Entiendo, bueno sube y vamos a tu casa, para que la dejes en el correo - dice la pelinegra con una sonrisa, mientras le coloca su casco al peliblanco, para luego empezar a conducir junto con el, hacia la casa Loud.

Minutos después, la pelinegra aparca afuera de la casa Loud, por lo que el peliblanco se despide de esta y deja su carta en el buzón, al mismo tiempo que veía como su hermana se marcha de allí, para luego caminar a la casa Loud.

Al entrar. El peliblanco deja su mochila a un lado, y comienza a caminar hacia la cocina. Viendo que sus hermanas no habían llegado. Por lo que esté, comienza a sacar algo de la nevera. Al mismo tiempo que escuchaba el motor de un auto.

Lincoln: Hmm, vaya un pudín. Bueno esto lleva días en la nevera, así que está bien - dice el peliblanco con una sonrisa, mientras tomaba una cuchara, para luego empezar a comer, al mismo tiempo que comenzaba a ver un par de cosas en sus libros de la escuela.

Lori: Muy bien entren todas, que vengo muerta del cansancio. Y por qué además, en unos minutos me tengo que ir, para despedirme de mi novio Bobby. Ya que hoy se va a la gran ciudad - dice la rubia con tristeza, mientras miraba su celular. - Hmm, pero a quien dejó a cargo, para que la casa no termine destruída.

Leni: Yo me quedo a cargo Lori. Supongo que al ser la segunda hermana mayor, me puedo quedar a cargo mientras tú no estás. Así será cuando te vayas a la universidad - dice la rubia en un tono serio, dejando algo sorprendida a su hermana mayor.

Lori: Supongo que tienes razón, Leni. Tu quedas a cargo. Pero más te vale que la casa, este como la encontré cuando regrese. O de lo contrario, te haré responsable - dice la rubia en un tono serio, mientras comenzaba a subir a su habitación, al mismo tiempo que las hermanas se dispersan por el lugar.

Lola: Ufff cómo sea. Iré a ver si quedó algún pudín en la nevera - dice la rubia en un tono serio, mientras entraba a la cocina, viendo al peliblanco el cual se encontraba viendo su libro, por lo que está no le presta atención y abre el refrigerador, pero al hacerlo está no ve ningún pudín a la vista. - Oigan, quien se comió el último pudín que quedaba.

Esas palabras dejarían completamente pálido al peliblanco, el cual se traga el pudín con bastante miedo. Al mismo tiempo que sentía como Lola se acerca a el, para luego mirarlo fijamente.

Lincoln: Eh yo... Ehm. Señorita Lola. Ehm, yo no sabía que esto... Yo pensaba que... Ay mamá - dice el peliblanco bastante asustado, mientras se volteaba, viendo cómo la rubia se encontraba con una cara seria.

Lola: Hmm bien. De todas formas no te haré nada. Mamá me hizo prometer que no haría más venganzas por cosas tontas. Solo te pido que seas más cuidadoso, entendido Lincoln - dice la rubia con una sonrisa forzada, mientras coloca sus manos en los hombros del peliblanco, el cual comienza a sentir algo de dolor, para luego soltar un quejido. - Por dios, eres demasiado débil. Ni siquiera aguantas nada. Con razón te dejan en el piso.

La rubia solo se marcha de la cocina, dejando al peliblanco algo adolorido. Al mismo tiempo que esté se sobaba sus hombros. Pero en su mente, las palabras que le habían dicho en sus sueños, comenzaron a sonar nuevamente.

Unas cuántas horas después. Nuestro protagonista se encontraba enfrente del parque al que solía ir. Por lo que esté solo deja salir un leve suspiro. Al mismo tiempo que volteaba a ver a Zoe, la cual solo asiente con la cabeza, al mismo tiempo que comenzaba a caminar junto con el peliblanco.

Ambos comenzarían a bajar la colina, caminando por algunas piedras y algo de tierra. Llegando hasta una zona donde habían varios árboles. La cual el peliblanco comenzó a recordar mucho, pues este aún tenía en su mente, los recuerdos de como su pobre conejo Copito había muerto allí.

El peliblanco solo continúa con su camino y sigue descendiendo hasta que llega a una zona algo plana, en la cual se podía ver un pequeño bulto de tierra y al acercarse, se dejaría ver un par de palos amarrados con una pequeña cuerda, que le daban forma de cruz, dando la intención de que era una tumba.

Zoe: Aqui fue donde dejaste a Copito, cuando el falleció - dice la pelinegra en un tono serio, mientras veía como el albino asiente con la cabeza. - Quieres que te deje un minuto a solas con el, o quieres que me quede.

Lincoln: Solo quiero un minuto a solas, por favor. Quiero decirle unas palabras a Copito. - dice el albino en un tono melancólico, mientras veía como su hermana asiente con la cabeza, para luego retirarse a unos árboles que estaban cerca. - Hmm... Copito. Hola viejo amigo. Se que ahora ya no puedes escucharme pero... Se que tú aún estás aquí conmigo. Tu vives en mi corazón. Y ahora vives también con mi familia. Se que les vas a hacer mucha compañía y... Que... Que los vas a hacer muy felices, como lo hiciste conmigo. Nunca me arrepentiré de haberte encontrado, en aquel parque cuando estabas herido. Pero ahora ya puedes descansar. - le deja las flores. - Gracias, por haber estado conmigo Copito... Gracias por haber sido una gran compañía, cuando me sentía solo. Jamás lo olvidaré. Cuídate mucho amigo.

El peliblanco solo se levanta del suelo, al mismo tiempo que comenzaba a derramar unas lágrimas. Por lo que Zoe, algo preocupada se acerca a el y le da un fuerte abrazo, al mismo tiempo que el peliblanco rompía a llorar en su pecho.

Lincoln: Se fue hermana... Se fue mi Copito. - dice el peliblanco con tristeza, mientras abrazaba y lloraba en el pecho de Zoe, la cual solo acaricia su cabello, mientras miraba la tumba que el albino le había hecho en su honor a Copito. - Se fue... Mi Copito.

Zoe: El ahora ya está descansado, hermanito. Ya está volando alto en el cielo y está dando brincos en las nubes. Ahora puede dormir y descansar todo lo que el quiera. Y estoy segura, que aún te sigue queriendo como el primer día - dice la pelinegra con tristeza y preocupación, mientras abrazaba al peliblanco. Quien no podía dejar de llorar.

A lo lejos, ambos estaban siendo observados por la persona misteriosa. La cual observa al peliblanco y a la pelinegra, para luego mirar su cuchillo. Pero luego de un par de segundos, decide retirarse de allí, dejando a ambos hermanos completamente solos.

Lincoln: Gracias por haberme acompañado hermana. No sabes lo agradecido que estoy, por qué estés a mi lado. En verdad, muchas gracias hermana - dice el peliblanco con tristeza, mientras veía como la pelinegra se separa un poco de el, para luego agacharse a su altura.

Zoe: Yo jamás te abandonaré hermanito. Siempre serás alguien especial en mi vida. Y yo, te doy las gracias a ti, por haberme aceptado como tú hermana. Somos familia. Y la familia jamás se abandona - dice la pelinegra con una sonrisa, mientras le daba un beso en la frente al peliblanco, para después levantarse y abrazarlo nuevamente. - ¿Quieres ir a casa?.

Lincoln: Si hermana. Otro día, vendré a verlo otra vez. Pero igual gracias por acompañarme. Vamos a casa - dice el peliblanco con tristeza, mientras se limpiaba sus lágrimas, para luego empezar a caminar junto con su hermana hacía arriba de la colina.

Varias horas después, ya había anochecido. Y el peliblanco, se encontraba colocándose la pijama. Al mismo tiempo que acomoda su cama para dormir. Pero esté al oler su aliento, decide ir al baño a lavarse los dientes.

Lincoln: Hmm. Mañana tengo que empezar a hacer esas ideas que tengo en la mente. Para crear mi cómic. Y tal vez le pida a Leni, un nuevo disfraz. De ese superhéroe... Ace Savvy. - dice el albino con una leve sonrisa, mientras caminaba al baño, hasta que de pronto, este comienza a escuchar una discusión en la habitación de las hermanas mayores. - que estará pasando.

Leni: En verdad, yo no puedo entender tu cinismo. A ti en verdad te vale, que Linky este sufriendo en silencio por tu culpa. El pobre vino casi llorando a casa, luego de ver a su amigo. El cual tu corriste de la casa. Y te valió. No te importó verlo triste. Y peor aún, con tus disculpas "sinceras" ni le regresaste el ánimo - dice la rubia bastante enojada, mientras veía como Lori solo gira los ojos con aburrimiento. - Pobre de Linky, es tan bueno que el perdona todas tus tonterías.

Lori: Ah pues no es mi culpa. Que ese idiota, sea tan bondadoso. Si, no es mi problema. Y si ese mocoso es tan ingenuo para creer que yo en verdad lo perdone, está muy equivocado. No me arrepiento para nada de lo que hice. Y si su conejo se murió, ya no es problema mío. - dice la rubia bastante molesta, mientras se cruzaba de brazos.

Leni: Como puedes decir eso. Lincoln es nuestro hermano menor, debemos amarlo y apoyarlo en los momentos más difíciles, pero a ti, solo te importa tu tonta relación con Bobby. Y no te importa, que le rompiste el corazón a Linky - dice la rubia bastante enojada, mientras veía como Lori se levanta de su cama ya muy molesta.

Lori: ¡Ese mocoso, dejo de ser mi hermano, en el momento que hizo que Bobby me terminará!. Para mí, no es más que un estorbo, un inútil, y un ser inservible. Y si por mi fuera, lo mandaría de regreso a ese estúpido orfanato de dónde lo sacaron. Pobre de su madre, que tuvo que aguantarlo - dice la rubia en un tono molesto, dejando a Leni sin palabras, al mismo tiempo que el peliblanco lleno de sentimiento, comenzaba a abrir la puerta.

Lincoln: Yo pensé, que nunca me sentiría decepcionado de nadie. Pero por lo visto me equivoqué. Con lo que acabas de decir, Lori. Me demuestras que no me sabes querer como tú hermano. Y que no te importo para nada. Yo quise darte todo mi cariño y mi aprecio desde el primer día. Pero solo me rechazabas. Quise creer que algún día nos podríamos llevar bien. Pero me equivoqué, me equivoqué demasiado. Ya no tienes por qué preocuparte. Si ya no quieres que sea tu hermano. Está bien. Ya no lo seré más. Buenas noches hermana, buenas noches Lori. - dice el peliblanco en un tono de tristeza, mientras salía de la habitación, para luego irse al baño. Al mismo tiempo que ambas rubias miraban la puerta algo sorprendidas.

Leni: Ves lo que provocas. Ya le rompiste el corazón. Otra vez. Tú jamás vas a cambiar tú forma de ser. Me decepcionas por completo, Lori. Ojalá y algún día, Lincoln te perdone. Por qué si no, ya solo no lo perdiste a el. También me perdiste a mi - dice la rubia en un tono serio, mientras salía de la recamara, dejando a Lori bastante sorprendida, por lo que está solo se sienta en su cama, al mismo tiempo que miraba al suelo, pensando en varias cosas. Pero después de unos segundos, está se recuesta y decide dormir para olvidar todo.

Un rato después. En la habitación de nuestro protagonista, el albino se encontraba mirando el techo. Al mismo tiempo que escucha como Leni entra a la habitación.

Leni: Linky... Cómo te sientes. - dice la rubia en un tono de preocupación, mientras veía como el albino desvía su mirada con tristeza. - Oye sobre lo que pasó hace rato con Lori... Yo... Eh... Hmm, no se ni que decir. Me siento muy decepcionada de ella. Y parece que jamás cambiará su forma de ser.

Lincoln: No... No lo hará. En verdad me siento vacío, por dentro. Ella me decepcionó por completo y yo... Ya no se, ni que sentir. Me siento muy mal. Y lo único que quiero es... Olvidar todo esto que siento dentro de mi. En mi corazón. - dice el albino con un tono de tristeza, al mismo tiempo que unas lágrimas, comienzan a salir de su rostro. Por lo que Leni se acerca a el y le da un fuerte abrazo, al mismo tiempo que el peliblanco lo corresponde bastante triste.

Leni: Tranquilo. Sea cual sea la decisión que tomes con Lori, yo te apoyaré Linky. No te pienso dejar solo, nunca más - dice la rubia con un tono de tristeza, mientras abrazaba al peliblanco el cual solo dejaba caer unas lágrimas, al mismo tiempo que miraba al cielo, viendo la ventana y las estrellas.

Que pasará?, Acaso Lincoln perdonará a Lori por esto?, Quien será esa extraña persona que veía a Lincoln y Zoe?, Acaso las chicas estarán celosas de Sofía, descubranlo pronto.

Continuará... Fin del capítulo 42, si les gusto dejen su voto, comenten y síganme para más y antes de irme les mando un abrazo muy fuerte y un saludo muy especial a:

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Bueno hasta aquí los saludos, yo me despido por ahora, mi nombre es PinBlack97 y esto es todo por hoy, les mando un abrazo muy fuerte, cuidense mucho, chao chao.