Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 3: Amigos.

Los días pasaron y ya habíamos tenido misiones, las cuales eran de bajo rango por lo que Kiba se molestaba. Nuestra sensei se llama Kurenai y es una persona asombrosa.

Ahora mismo nos encontrábamos todos comiendo de unos dangos.

—Luego de esto iremos a entrenar, ¿no? —preguntaba Kiba.

—Tengo que hablar con el Hokage por lo que hoy estarán los cuatro solos. —decía con una sonrisa nuestra sensei. —No sean tan duros con ___-chan.

—La que será dura con nosotros será ella cuando logre perfeccionar su habilidad con el Byakugan.

—K-Kiba-kun...—digo su nombre avergonzada ante lo que había dicho. —Yo no podría ser dura con ustedes.

—No te contengas, ___. —habló Shino.

—Bien.

—Bueno los dejo.

Kurenai-sensei acarició levemente mi cabeza para luego dedicarnos a todos una sonrisa e irse. Kiba había dicho que iríamos a entrenar una vez termináramos de comer.

Una vez terminado de comer nos dirigimos al campo de entrenamiento que frecuentábamos y en el camino Kiba le iba reclamando a Shino, cosa que Shino no le tomaba atención alguna a lo que decía.

—Quiero que vengas a atacarnos, ___.

—¡No te adelantes, Shino! —exclamó Kiba con molestia mientras se posicionaba a su lado. —¡Iba a ser yo el que le dijera eso! ¡Yo soy el líder!

—Cuando quieras, ___.

—¡¿Me estás ignorando?!

Activé mi byakugan y corrí hasta donde ellos, Shino se alejó rápidamente y si no fuera por Akamaru, Kiba hubiera recibido mi golpe en su estómago.

Vi como Akamaru se bajó de la cabeza de Kiba y le ladró a lo cual Kiba asintió, y me miraron fijamente. De un momento a otro ambos venían corriendo hasta donde me encontraba, comencé a verlos detenidamente y cuando Kiba iba a golpearme di un salto hacia atrás.

Del suelo pude ver unos insectos por lo que volví a alejarme al ver que esos insectos eran de Shino.

Akamaru había desaparecido por lo que comencé a buscarlo y pude verlo escondido detrás de un tronco.

—Akamaru se encuentra detrás de aquel tronco. —digo a lo que Kiba sonrió y pude ver como Akamaru desaparecía. —¿Qué?

—¡Te tenemos!

Akamaru había aparecido arriba mío, Kiba y Shino venían por los lados, iba a retroceder, pero mi espalda chocó con un árbol.

—¡N-No se acerquen! —exclamé mientras cerraba mis ojos y lancé mis manos hacía los lados escuchando así un quejido. Los abrí rápidamente encontrándome con mi compañero en el suelo. —K-Kiba-kun...

Akamaru se posicionó sobre mi cabeza y comenzó a ladrar de manera alegre.

—Akamaru...eres malvado. —se quejaba Kiba desde el suelo.

—Haz logrado darle un golpe a Kiba. —habló Shino. —Haz progresado desde la última vez. Bien hecho.

—G-Gracias, Shino-kun. —sonreí gentilmente y entonces extendí mi mano para que Kiba pudiera levantarse. —¿Te encuentras bien, Kiba-kun?

—Eso me ha dolido. —él tomó mi mano para levantarse y entonces acarició levemente mi cabeza. —A la próxima golpea fuertemente a Shino.

—Estaré esperando eso.

Ambos reímos ante la respuesta de Shino.

Estos momentos que he pasado con mis compañeros han sido geniales, ellos en verdad son unas personas grandiosas y espero que podamos seguir todos juntos.

❇❇❇

Me encuentro corriendo tratando de alcanzar a Kiba, el muchacho había dicho repentinamente que haríamos una carrera hasta el puesto de Dangos y quien de los dos llegara último invitaba los dangos.

—Kiba-kun corre muy rápido. —digo agitadamente ya cansada de correr. Cuando doblé por un lado me encontré a Naruto y Sakura, rápidamente me detuve y me escondí detrás de un poste. —¿Q-Qué hago?

—¡Sakura-chan! —exclamaba su nombre con gran felicidad. —¿Qué tal si vamos a comer Ramen?

—¡Cállate, Naruto!

Sakura le había dado un golpe en la nuca a Naruto y lo dejó en el suelo para luego irse corriendo gritando el nombre de Sasuke.

Con timidez comencé a acercarme a Naruto para ofrecerle mi ayuda.

—No debía golpearme tan fuerte. —le escuché murmurar. —¿Eh? ¿___?

—¿T-Te encuentras bien? —pregunté estirando mi mano para que él la tomara y se levantara.

—Gracias, ___-chan. —sonrió ampliamente tomando de mi mano, cosa que me hizo sonrojar al sentir su tacto. —¡___-chan!

—¿Q-Qué sucede? —pregunté a punto del colapso al ver como Naruto sostuvo repentinamente mis dos manos.

—¡Vayamos a comer Ramen!

Sin dejarme decir algo, Naruto comenzó a arrastrarme por las calles en dirección a Ichiraku. Yo iba completamente sonrojada debido a que manteníamos nuestras manos unidas.

Una vez llegamos a Ichiraku Naruto le habló animadamente al cocinero de que le preparada dos tazones de ramen, yo me mantenía aun tomada de la mano con Naruto.

—N-Naruto-kun...—le llamé con timidez, él se giro a verme con una gran sonrisa cosa que me hizo poner aún más roja. —M-Mi mano...

—¿Eh? —él confundido miró en dirección de mi mano y ahí fue que soltó su agarre rápidamente. —¡Lo siento, ___-chan! ¡Es solo que me emocioné bastante!

—No pasa nada. —sonreí.

—¡Bien! ¡El día de hoy yo invito el Ramen!

Naruto se sentó para esperar su tazón, yo le seguí y entonces me di cuenta de algo.

Había olvidado a Kiba.

—Lo siento, Naruto-kun. —digo apenada a lo que él me miró confundido. —O-Olvidé que tengo un asunto en otro lugar.

—¿Eh? ¿En serio?

—S-Sí.

—Ya veo...—bajó un poco la mirada a lo que me preocupé, pero enseguida la levantó y me mostró una gran sonrisa. —¡A la próxima comeremos juntos!

—S-Sí.

Me despedí disculpándome por última vez y comencé a dirigirme donde se encontraba Kiba.

Cuando llegué al lugar no lo vi por ninguna parte, creí que se habría cansado de esperar y se fue, pero todas esas suposiciones se esfumaron al verlo junto a Shino a lo lejos.

Comencé a ir en su dirección y una vez quedé frente a ellos iba a hablar, pero entonces Kiba me abrazó de improvisto a lo cual comencé a alarmarme.

—¡Creí que te había sucedido algo! —exclamó paranoico mientras se separaba y luego me dio un pequeño golpecito en mi cabeza. —¡No nos hagas preocupar así!

—Esto no hubiera pasado si tú no la hubieras dejado sola. —habló Shino de manera sería a lo cual Kiba comenzó a gritarle.

—Siento hacerlos preocupar.

Sonreí de manera gentil a lo que Kiba se detuvo y me sonrió ampliamente. 


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro