El ambiente en aquel automovil no estaba siendo para nada agradable, y Seokjin podía adivinar fácilmente cual era el motivo de que Jungkook estuviera clavandole miles de dagas atraves de su asiento hacía la cabeza.

—Según el doctor, Yoongi podría salir del hospital en dos días. —Intentó minimizar un poco la tensión.

—Si, es una buena noticia. —Respondió Taehyung realmente feliz por aquello.

Aunque claro, todavía estaba en espera de la respuesta del doctor Chanyeol, realmente esperaba que este pudiera darle pronto nuevas y buenas noticias. No creía que el doctor Jong Suk fuera malo o no estuviera haciendo de forma correcta su trabajo, claramente sabía que cada medico trabajaba de distinta forma y de la forma correcta que les parecía a ellos.

—Pero hyung esta solo, y según lo entendido las cosas entre Hoseok y él no estan tan bien.

Hizo la observación el menor de todos, Jungkook finalmente había decidido romper el silencio, sin embargo, la tensión continuaba y para el abogado el camino a casa realmente se estaba sintiendo eterno.

—Ya podremos hablar con él sobre ese tema.

—Creí que Jimin y Yoongi hyung tenían algo. Siendo sincero, creo que Jimin estaba más preocupado que Hoseok hyung.

No era necesario ser un gran genio para darse cuenta de aquello, aunque claro, esa era la perspectiva de Taehyung. Agregando que Seokjin sabía cierta información que otros desconocian, por ejemplo; Jungkook.

—¡Eso es absurdo! —El enojo de Jungkook era bastante obvio.

—Es lo que me pareció ver. —Taehyung intentó no responder de forma grosera o altanera cómo lo había hecho cierto personaje que iba en el asiento de atrás.

—Pues deberías revisarte la vista.

Seokjin agradecio a Dios por haber llegado a casa, la verdad que si continuaban diez minutos más dentro de aquel carro.

—¡Hemos llegado! Vamos chicos, hay frío y debo ir hacer la cena. —Sin dejar que ambos menores respondieran, Seokjin empujó adelante de él a Jungkook, para que este fuera el primero en entrar.

Sin embargo, los planes de Jungkook eran diferentes. Cuándo los tres estuvieron adentro, este no perdió oportunidad para buscar quedar frente a las narices entrometidas del nuevo intruso.

—Tengo mi vista excelente, además conozco de mejor forma a Hoseok y Yoongi que tú.

—Podrás conocerlos, pero yo conozco a Jimin.

Si las miradas mataran, aquella casa ya se hubiera convertido en un campo de batalla en el cual aquellos dos no dejaban de lanzarse golpes y dagas por los ojos. Taehyung no entendía porque Jungkook estaba en aquel plan, si siendo realistas, no había dicho algo que lo pudiera perjudicar o afectar a él.

—Dudo que lo conozcas, te aseguro que cambio en los últimos diez años que te fuiste.

Taehyung apretó el puño de su brazo bueno, sintiendo aquellas palabras cómo filosas dagas ser clavadas en su pecho. Era verdad, seguramente Jimin había cambiado en aquel tiempo, y lo que Taehyung conocía de él, ya no existia. Aunque claro, no iba a dejar que aquel mocoso le ganará y mucho menos darle la razón.

—Te aseguró que aunque me hubiera ido por cuarenta años, seguiría conociendo a Jimin mejor que ¡TÚ!

Su dedo golpeo el hombro izquierdo de Jungkook, haciendo que este se moviera por unos milimetros, aunque claro, aquello había hecho enojar más a susodicho.

—¡No me empujes! —Devolvió el empujón de hombro.

—No te empuje, sólo te toque.

—Eso es empujar. —Por supuesto que le llevaría la contra.

—No es mi culpa que seas un llorón y te quejes por tan poca cosa.

—¡Repite eso!

Rechinando sus dientes, Jungkook tomó a Taehyung por el cuello, acercando así un poco los rostros. Taehyung tomó la muñeca de la mano con la que estaba siendo sujetado, apretando así su agarre para conseguir que el contrario lo soltara, pero ninguno de los dos parecía querer ceder.

—De acuerdo, creo que es momento de dejar las cosas así.

Seokjin sólo quería poder descansar, no que su casa se invadiera por la testosterona elevada de ambos chicos para demostrar quién sabía más que el otro. Obligando a ambos a separarse, Seokjin logro quedar en medio de ambos para poder crear una distancia.

—Ambos tienen razón ¿De acuerdo? Ambos conocen a los chicos a su manera, así que no es tema para discutir o querer decidir quién conoce más a quién.

Taehyung sacudió su ropa de mala manera, algo que realmente odiaba era que se atrevieran a tomarlo de aquella forma, sólo arrugaban su ropa y él no pasaba una hora planchando su ropa para que alguien con pocos modales se la arruinara.

—En primer lugar, no entiendo que hace él aquí. —Jungkook se acercó dando pasos grandes señalando con su dedo el rostro de Tae.

—¿Quién te crees para señalarme así? —Respondió molesto a la vez que tiraba la mano de Jungkook. —¿A caso no te enseñaron qué es de mala educación señalar a las personas?

—¿Y a ti no te enseñaron que no debes dar órdenes en casas ajenas?

—¿Y a ti no te enseñaron que debes respetar a las visitas?

Seokjin rodó los ojos queriendo golpearse justamente en esos momentos con un martillo, aunque ambos chicos estuvieran en sus 20's ambos parecían tener en esos momentos menos.

Jungkook dio un tiró el brazo izquierdo del abogado, tratando de así alejarlo del entrometido.

—Deberíamos ir a comer hyung, y tú vete.

—Tú no me das órdenes, y Jin se queda. —Taehyung no dudo en sujetar a Seokjin del brazo contrario.

—Jin hyung se va conmigo.

—¡Ya sueltalo!

—Tú sueltalo ¿Por qué no te vas a tu casa? —Jungkook gruño mientras arrugaba su nariz.

—¿Por qué no buscas dónde vivir y te vas? —Taehyung frunció su ceño, soltando pequeños gruñidos.

Seokjin pestañeo confundido al quedar atrapado ante aquella situación. Ninguno de los dos parecía querer ceder, por lo que ambos estaban haciendo más fuerte el agarre en sus brazos.

—¡Hey! Deja de ser un parásito. —Jungkook dio un nuevo tirón.

—Tú deja de ser una sanguijuela. —Respondió bastante molesto Taehyung, sin medir su fuerza, al dar el tirón hizo que Seokjin tambaleará un poco.

—Deja a Mi hyung.

—No es tuyo, nunca lo será. —Frunció su ceño, Taehyung se estaba comenzando a sentir celoso.

—¿Y tú que vas a saber eso, tonto?

—Porque Jin es mio, siempre ha sido mio, mio, mio ¡Mio! Y así seguirá siendo, así que tú ve a perderte por otro lugar.

—¡Acabas de cavar tu tumba! —Jungkook fue el primero en soltar el brazo de Seokjin, listo y dispuesto para estrellar su puño contra la nariz del contrario y hacer que se callará.

—Pues tú ya estas en ella, amigo. —Taehyung no iba a permitirse quedarse atrás al ver la clara intención de Jungkook.

—¿Amigo? Amigo mis bolas, yo no soy tu amigo, amigo.

Seokjin volvió a interferir, sujetando las muñecas de Jungkook, impidiendo así que fuera el primero en lanzarse para golpear.

—Hey, basta los dos. —Jungkook forcejeaba por soltarse de las muñecas mientras que Taehyung continuaba dando cuerda tras la espalda del mayor.

—Deje que le paté el culo a éste.

—Oh no, quién saldrá con el culo pateado serás tú. —¿Taehyung no podía cerrar su boquita? Pensó Seokjin, realmente no le estaba ayudando en esos momentos.

—Ya veremos quién a quién imbécil.

—Oh pues aquí te espero. —Jungkook comenzó a patalear para soltarse, logrando darle en la rodilla al abogado.

—¡Ya suficiente los dos! Ya estuvo de todo ésto.

Reacomode su camisa soltando el aire retenido, pudó observar por la rabadilla del ojo, la manera en que Taehyung había pasado su dedo bajo su cuello señalando a Jungkook.

—Taehyung, basta ¿Piensan seguir así toda la noche?

—...

—Ambos parecen muchachitos peleando por un juguete.

—Pero hyung...

—Pero nada Jungkook, tú en primer lugar debes respetar, soy tu mayor. Y tú... —Señaló a Taehyung. —Debes respetar en casas ajenas.

Ambos bufaron dándose miradas de odio, la paciencia de Seokjin se agotaria definitivamente si tendría que vivir ésto cada vez que ellos se deban encontrar.

—Éste fue el que comenzó todo. —Exclamaba paciencia a Dios para no arrancarse el cabello. Sería lamentable quedarse calvo antes de los 40.

—¡Éste tiene nombre!

—¡Pues me vale un pepino si tienes nombre! —Y ahí iban de nuevo.

Llevando dos dedos a su entrecejo, para comenzar a darse masajes, Seokjin sentía cómo la cabeza le estaba comenzando a doler.

—¡YA SUFICIENTE! —Ambos se quedaron congelados y asustados por el gritó tan repentino del mayor.

Sin embargo, había sido suficiente para que ambos menores olvidarán su pelea y por fin prestarán atención. Taehyung retrocedió bastante apenado, dandosé cuenta de que se había comportado cómo un mocoso malcriado; por otro lado, Jungkook estaba sorprendido de ver cómo Seokjin parecía tener una vena saltando de su frente.

—Lo siento por eso... Pero ya fue suficiente de su pelea.

Bajaron la cabeza y ambos comenzaron a llorar ¿Cómo sabía? Porque ambos comenzaron a sorber la nariz. Genial, lo que faltaba.

Lo peor era que no podía consolar a uno porque el otro se sentiría peor, así que con todo el dolor de mi corazón me cruce de brazos esperando a que ambos dejaran el llanto y se calmaran esta vez.

—Lo siento... Será mejor que me vaya.

—Yo debo ir a dormir, permiso.

Ambos chicos estaban dispuestos a retirarse, uno a su habitación y el otro a su casa. Sin embargo, Seokjin detuvo a ambos por la parte de atrás de los cuellos de sus chaquetas, provocando que ambos se detuvieran en sorpresa.

—Taehyung, debes aprender a respetar a Jungkook, ya que él vive aquí y del mismo modo que viviras tu aquí, Jungkook debe tenerte el mismo respeto ¿Entendido?

—¿Cómo que vivir con nosotros? —Jungkook fue el primero en soltar el agarre del mayor. —¿Por qué vivira con nosotros?

—¿No has visto tu telefeno? —Preguntó Seokjin a la vez que sacaba el propio de su bolsillo. —Ves, todos estamos incluidos en un grupo para ayudar a Tae.

—No planeo ser parte de eso, ni siquiera me consultaron si estaba de acuerdo, así que lo siento mucho hyung, pero yo quedo afuera de cualquier problema que tenga este.

Sin esperar una respuesta, Jungkook paso al lado de Taehyung, empujando su hombro. Sin voltear a ver atrás, Jungkook cerró la puerta de su habitación, dejando en claro que no cenaria esa noche.

—Creo que no le agrado la idea. —Dijo Taehyung al ver cómo el menor de todos había hecho su retiro de la conversación.

—No le prestes atención, vamos, iremos a cenar y luego te enseñare tu habitación.

—Pensé que dormiria contigo. —Dijo Taehyung de forma confundida.

Realmente Seokjin no se había esperado aquella respuesta, lo había sorprendido tanto cómo lo sorprendio lo caliente que había comenzado a sentir todo el rostro, Taehyung se había acercado de forma sigiliosa hasta quedar a unos centimetros de su rostro, podía sentir la respiración chocar contra su propia nariz y labios.

—Creo que...

—¿No puede ser así? —Preguntó en un susurro.

Taehyung estaba gritando en su mente cómo quinceañero, llenando aún mas de sorpresa al abogado, llevó su mano tras el cuello del abogado, atrapando así mismo los labios en un beso bastante intenso. Sólo Dios sabía cuantas ganas había tenido de probar una vez aquellos labios.

Al final de la noche, Taehyung había aceptado dormir en otra habitación de aquella casa. Seokjin no había podido dejar de pensar en aquel beso tan inesperado, ni siquiera había podido reaccionar a tiempo, cuándo su cerebro envío la señal; Taehyung yacía sentado en una de las sillas del comedor.

El ambiente había estado bastante callado, no sabía si Taehyung estaba avergonzado o sólo estaba fingiendo estarlo, porque aquella sonrísa tan socorra que había adornado sus labios por una milesima de segundo, le había dado la entender que Taehyung se había salido con la suya de tomarlo con la guardia baja.

Viendo fijamente la pared con un mar de pensamientos inhundando su mente, no se había dado cuenta que alguien estaba tocando la puerta de su habitación. Encendiendo la lámpara que tenía a su derecha, se levantó con pereza de la cama para atender al llamado.

—¿Tae?

—¿Puedo dormir contigo? Me siento un poco solo en ese gran cuarto. —Confesó a la vez que acariciaba su brazo enyesado.

Sin saber o entender, Seokjin se hizo a un lado para darle acceso a Taehyung, quién no desaprovecho para escurrirse hacía la cama, dando pequeñas palmadas en dónde estaba acostado el mayor. De forma silenciosa cerro la puerta, caminando con lentitud hasta meterse bajo las sabanas junto a Taehyung.

—Sólo hemos dormido una noche juntos y de un momento a otro siento que lo hemos hecho toda la vida. —Confesó  a la vez que se aferraba a Seokjin cómo un pequeño koala.

Seokjin comenzó a repartir pequeñas y tiernas caricias en el cabello del menor, haciendo sonreír a Taehyung, se sentía tan bien aquello que deseaba que aquel momento pudiera ser eterno. Sin embargo, no había podido dormir debido a que en su mente se repetía de igual forma aquel beso que habían tenido, y por supuesto, que aquella intensidad había mandado una corriente de excitación a la entrepierna propia, siendo un poco complicado calmar aquello.

Con lentitud, enredo una pierna entre la cadera de Seokjin, haciendo roces apenas perceptible, Seokjin tragó saliva tratando de convencerse que aquel chico tan sólo estaba acomodandose y no frotandose contra su pierna. Pero era imposible pensar en otra cosa cuándo había comenzado a sentir la clara erección de Taehyung, quién lentamente fue quedando encima de él, con una pierna de cada lado de la cadera.

—¿Qué haces?

—Creo que es obvio, su cuerpo es cómo un gran imán para el mío. —Confeso con coquetería mientras rozaba su mano por encima de la playera del mayor, tratando de imaginar su piel.

—No creo que sea el momento Taehyung.

—¿Piensas esperar hasta que recuperé la memoria? —Su voz había sonado un poco molesta.

—Yo...

—¿Qué pasaría si nunca la recuperó? ¿Nunca intentarás algo conmigo? ¿Con mi versión actual? —Ahora había sonado un poco triste, sus caricias habían parado, pero su mirada dolida se había clavado a la suya. —Sin memoria o con memoria, te aseguro que siempre sentiré cosas por ti.

—Taehyung.

—Deja de tanta limitación Jin, entiende ¡Me gustas! ¡Te quiero! Se que tal vez sea poco tiempo o no sé, pero me vuelvo loco sin ti, no dejo de pensar o desear poder estar contigo cada día, desear que al cruzar la esquina te encuentre, que al verte deseo tanto poder abrazarte o saltar a tu boca y besarte a mi total antojo.

Aquello había sido una confesión bastante DIRECTA y sincera, Seokjin definitivamente no se había esperado que aquel chico empezará a vómitar las palabras, aunque no podía negar que Taehyung tenía razón, en estos años había cambiado y había un nuevo Taehyung que conocer, a quién querría de igual manera.

Con cuidado, deslizó sus manos por la cintura de su pequeño Taehyung, aunque claramente ya no estaba tan pequeño o escualido cómo en la adolescencia.

—Sólo tengo miedo de presionarte y que te alejes de mí, por eso creí que ir despacio sería lo mejor.

—¿Por qué me tendía que alejar?

—No sé, tal vez ahora estas mejor y puede que estes mejor así, sin recordar nada. —Taehyung frunció levemente el ceño un poco molesto por aquello. —Me refiero que después de haberte perdido... No sé si pudiste llegar a pasar algún infierno y tal vez hayas deseado en algún momento olvidar eso.

Claro que Seokjin había imaginado muchas veces los posibles escenarios que Taehyung pudó haber vivido durante aquellos diez años, claramente esperaba que hubiera tenido una buena vida en dónde alguien se hubiese hecho cargo de él y dado el cariño que siempre merecía. Sin embargo, también había imaginado el peor escenario, en dónde Taehyung pudó haber vivido un completo infierno, asustado, triste, enojado; tal vez había resultado en algún orfanato o con familias temporales, pensó en la posibilidad de que haya sido victima de algún maltrato, de algún abuso y claramente eso era algo que Seokjin deseaba que no hubiera pasado, pero aquella respuesta no la sabría hasta que Taehyung recordará y tuviera la confianza para hablarlo.

—Muchas veces me he preguntado lo mismo. —Seokjin siguió con la mirada los movimientos de Taehyung, no esperaba que se quitará la playera.

Con sus manos nerviosas intento detenerlo o incluso hacer que se colocará nuevamente la prenda, pero su mente quedo en shock cuándo Taehyung giro un poco a la izquierda, levantando su brazo para poder dejar a la vista varias cicatrices.

—No recuerdo nada antes del día que me atropeyaste, pero cada vez que me baño y veo al espejo, veo estas cicatrices y me pregunto cómo es que llegarón ahí. —Seokjin rozó su dedo anular en aquellas marcas, tratando de descifrar. —Sin embargo, en ocasiones he tenido una leve laguna de que le pido a alguien que se detenga.

Aquello había llenado de tanta rabia y dolor el corazón de Seokjin, tragando saliva al sentirse impotente al darse cuenta que aquellas cicatrices no eran más que secuelas de quemaduras de cigarro.

—¿Quién fue la persona desgraciada que se atrevió a lastimarte así?

—Quisiera saber, pero creo que si lo descubró, deseare olvidarlo nuevamente.

Lo había dicho con una sonrisa en su rostro, tratando de decir "estoy bien", pero vaya que Taehyung era malisimo para fingir sus emociones. Seokjin tomó el brazo libre del yeso para poder atrayerlo a su pecho, Taehyung no hizo nada más que acomodarse encima de su cuerpo, descansando su cabeza sobre el pecho del mayor, escuchando cómo sus latidos iban rápido.

Seokjin no hizo nada más que comenzar acariciar su cabello, tratando por decima vez tragarse las lagrimas. El sólo hecho de pensar que Taehyung realmente pudo sufirir maltrato le partia el corazón y lo hacía llenarse de un enojo enorme. Con fuerza abrazó su cuerpo, queriendo de alguna forma protegerlo.

—Descuida, si no recuerdo entonces no me molesta.

—Si un día lo recuerdas, por favor, no dudes que estaré aquí para ti.

—Pero es mejor olvidarlo.

—Es mejor superarlo, y ten por seguro que aquí estaré para ayudarte Tae.

Diendo un leve asentimiento de cabeza, Taehyung olvidó por completo sus intensiones traviesas que tenía cuándo estuvo frente a la puerta del mayor. Aquellos brazos eran mejor, claro que conseguiría que Seokjin por fin lo aceptará, pero por el momento estaba bien estar solamente así, el abogado lo estaba protegiendo y dando el consuelo que no sabía que necesitaba.

Sin ningún tipo de pensamiento negativo o alguna pesadilla que invadiera sus sueños, Taehyung no tardó mucho tiempo en lograr quedarse encima, recibiendo el calor corporal de Seokjin. Su respiración estaba tranquila, su pecho subía y bajaba lentamente mientras que el pelinegro no dejaba de repartir caricias en su cabello y tener la mirada clavada en el techo.

—Te juro que encontraré a esa persona y la haré pagar.

Prometió a Taehyung entre sueños, claramente el menor no iba a recordar aquello, ni siquiera sabría que Seokjin le había prometido eso. Pero para Seokjin era un hecho, haría lo imposible por encontrar esa persona, aún si estaba muerta, no iba a dejar que su nombre quedará limpio.

El problema era que no sabía por donde empezar, ya que no sabía si Taehyung se había quedado en Daegu o si había ido a otro lugar, sería una investigación bastante larga y pesada, pero no se iba a quedar sin hacer nada.

Escuchando las agujas del reloj caer en cada segundo, Seokjin consiguió quedarse dormido. Por fin acompañando a Taehyung, al final el menor se acomodo a su lado, enredando una pierna en su cadera mientras que su cabeza yacía recostada en el hombro ancho de Seokjin. Tal vez aquella conversación sería el nuevo inicio la relación de ambos.

Sólo era cuestión de tiempo y el deseo del uno por el otro para estar juntos nuevamente.

🍁
Aunque la historia haya tenido
varios cambios, no quitaré las etiquetas
o las menciones que hice en los capitulos.
Espero que hayan decidido seguir la historia, después de tanto lo sucedido.

Uno de mis propositos de
este año es dar por finalizada la historia.

JinnieP10.

Publicado:
21/08/2019

Modificaciones:
18/12/2022
18/01/2023