Capitulo 3
Una semana después
Me despierto con los rayos del sol que atraviesan mi ventana, dirijo mi mirada hacia el despertador y me doy cuenta de que ya es medio día. Me levanto agarró ropa y me dirijo al baño para darme una ducha. Salgo, ya vestida y me dirijo hacia la cocina y agarró una manzana, mientras le doy un mordisco entran mis padres y me saludan. Luego mi padre dice:
-Hija, ¿preparaste las maletas? Te acuerdas que te dije que hoy viajariamos?- me dice mi padre, eso me hizo acordar que mi padre me había comentado de que iríamos a ver a los abuelos.
-si padre, me acuerdo que dijiste que hoy viajariamos. Pero me olvide por completo de hacer las maletas- le digo- con todo lo que pasó estuve un poco distraída- le digo.
-Para eso es este viaje, es para que nos despejemos los tres- dice mi padre- las dos están encerradas en esta casa, desde lo que paso- bajo mi cabeza, sabía a lo que se refería y también sabía que era un tema muy delicado- se que creerán que no me hace mal verlas tristes y llorando- me quedo callada mientras el se levanta de su asiento y nos abraza- tienen que saber que el las amaba y las ama todavía a las dos, saben que el ya no va a sufrir más- termina de decir eso y salgo del abrazo y voy hacia mi cuarto.
Entro y saco la maleta que está debajo de mi cama y mientras sacaba un poco de ropa de mi placar, pensaba en como estarían mis abuelos, mi primo, mis tíos y a la persona que más quiero que me trata como una hermana y es mi mejor amiga extraño a mi prima. Termino de hacer la maleta y llevo las cosas hacia la salida para si subir al auto donde nos dirijiriamos hacia la casa de mis abuelos.
Nos dirijiamos hacía la casa de mis abuelos, el viaje no duraba mucho unas 2 horas mínimo. Mis abuelos eran muy cariñosos con sus nietos, siempre lo fueron, ellos vivían cerca de la playa, más bien al frente. Siempre en el verano los venía a visitar y íbamos a la playa todos juntos, pero últimamente en estos últimos años mi abuelo empezó a tener una enfermedad y no era muy buena que digamos pero el es un luchador por eso esta aquí con nosotros.
Luego de que pasaron las dos horas llegamos a lo que vendría a ser la vieja casita de mis abuelos. Me dispongo a bajar del auto y ayudar a mi padre a bajar las maletas, pero el me dice que valla y yo muy emocionada de ver a mis abuelos corro hasta la puerta y le doy unos golpes para que me escuchen y es ahí que la abre mi abuela y con una sonrisa en la cara le doy un enorme abrazo y le digo....
-Abuelitaaaaaa- le grito - te extrañe tanto, no sabes cuanto te necesite- le digo
- Yo también mi niña, yo también te extrañe- me dice mi abuela
Escucho que se acercan como unas ruedas medias oxidadas y me doy cuenta al instante que es mi abuelo y ya que con sólo verlo se me parte el alma y lo primero que hice fue soltarme del abrazo que estaba teniendo con mi abuela y ir corriendo a darle un enorme abrazo a mi abuelo, que aunque estuviera en silla de ruedas y me recibe con la misma fuerza.
-Te extrañe pequeña, te extrañe mucho- dice mi abuelo- estas tan grande, tan hermosa es como si fuera ayer cuando eras una bebé y te tenía en mis brazos.
- Yo también te extrañe, y como has dicho ya no soy más una niña soy una mujer- siempre que estoy con ellos me hacen sacar todo lo infantil que puedo llegar a ser y por eso los amo.
Luego entran mis padres y mientras saludan a mis abuelos, yo agarró mi maleta y la subo a la que debería ser mi recámara. Al entrar me hizo recordar todas las cosas que pase, como cuando le teñi el pelo a mi mamá de rosa con mi prima o cuando hicimos con mi prima una guerra de comida, aunque sólo eramos nosotras dos lanzando el brocoli hacia los demás, también recuerdo que tuvimos nuestro merecido pero se que eran muy buenos recuerdos. Luego escucho llamándome mi abuela y asomo la cabeza
- Lucyyy- grita mi abuela
-Queeeee???- le pregunté
-Me acompañas al supermercado- me dice- necesito comprar unas cosas- ve que mi cara no está convencida hasta que me dice- Te compro helado a cambio de que me acompañes- dice
Salí corriendo de mi cuarto para dirigirme con mi abuela hacia el supermercado. Al llegar mientras ella elegía unas frutas me llama la atención un piano y me dirijo hacia el, luego de observarlo dirijo mi mirada hacia mi abuela y veo que está hablando con un chico, era más alto que yo y parecía tener pelo castaño y lo juro pero nunca vi a un chico con un culo tan lindo, iba todo bien hasta que mi abuela me llama y logró escuchar:
-Ven mi niña, te quiero presentar a alguien- me acerco y dice- Tyler ella es mi nieta de la que tanto te e hablado- dice de golpe- ella es mi nieta Lucy- es ahí cuando el se da vuelta y me dice
-Un gusto conocerte Lucy soy Tyler espero que nos llevemos bien- me dice
Fue ahí cuando sentí que se me caía la baba y en donde dije que conocí a un chico que parecía que provenía de Grecia. Ahí me di cuenta que la visita hacia mis abuelos no iba a ser común como la de todos los años.
Hay perdonen por no haber subido capítulo hace mucho fueron dos semanas muy duras y bueno acá estoy de vuelta espero que les guste nos vemos en el siguiente capi besos 😘
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