Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

1.- Extra: Tengo dos bebés

Felix se desperezaba ya siendo las diez de la mañana. Demonios, él no dormía hace mucho tiempo así y se sentía bien, su vista cayó al lado de su cama y un puchero se formó en sus labios al no ver a su alfa en la cama.

Con sus pequeñas manos tocó el lado vacío y se levantó de la cama, un pequeño bóxer azul y la gran camiseta negra de HyunJin eran lo único que cubría su cuerpo.

Restregó sus ojos y caminó en dirección al cuarto de su bebé, pues se le hacía demasiado curioso que no esté llorando por hambre o porque le cambien los pañales en ese instante.

Y al entrar en el cuarto una linda sonrisa se dibujó en su rostro, su JeongInnie estaba recostado en un pequeño sofá cubierto por tela blanca con decorados de nubecitas y almohadas alrededor. Vestía uno de sus pequeños enteros que cubrían su cuerpo de apenas seis meses y unos guantes para que sus pequeñas manitos no lastimen su rostro.

Las ventanas abiertas y la luz de la mañana golpeando cálidamente a su bebé, HyunJin observando todo con ojos de amor sentado en el suelo arrimado al pequeño sofá, mientras acariciaba la barriguita de su cachorro con uno de sus dedos.

JeongIn moviendo sus manos de arriba a abajo, lamiendo el guante de tela en su manito o solo observando a su alrededor con ojos curiosos, era lo que podía admirar.

—HyunJinnie. —Llamó el omega, observando todo desde el umbral de la puerta.

Y una sonrisa surcó los labios de HyunJin al ver a su omega con tan poca ropa en su cuerpo, sus brazos cruzados, juntos con un ceño fruncido y su puchero.

—¿Qué ocurre, amor? —Contestó, extendiendo sus brazos para que Felix se acercara a sentarse en su regazo.

—Me dejaste solito. —Puchereó como si de un bebé se tratara.

—Quería que durmieras más porque últimamente este travieso nos está despertando mucho, por eso vine a buscarlo. —Miró a su cachorro que había girado su cabecita un poco y los veía con atención, igual de curioso como siempre.

—¿Sí? —Se acercó hasta sentarse a horcajadas sobre su pareja —Pues no me gusta. —Dijo y atrapó los labios del otro con los suyos, sin darle permiso a contestar algo.

La lengua del pelinegro los delineó suavemente y sus grandes manos atraparon la cintura del pequeño omega.

—Te amo. —Susurró sobre sus labios.

—Yo más. —Su vista estaba perdida en los ojos del mayor.

Y de pronto, JeongIn empezó a llorar. Rayos, ellos incluso se habían olvidado de que su bebé estaba ahí.

—Oww, amor. —Dijo el rubio hablándole al cachorro que cerraba sus ojitos con fuerza y empezaba a mover todas sus extremidades buscando atención. Con cuidado agarró el pequeño cuerpo y besó su frente.

—Jinnie, ¿Lo cambiaste? —Observó a su alfa.

—No. —Respondió, recordando que él solo lo había alimentado.

—¿Qué? —Preguntó algo exaltado.

—No lo hice, lo olvidé.

—Demonios, HyunJin —Estaba enojado, eso era malo —. Sabes cuántas horas pasa dormido con el mismo pañal.

—Perdón. —Y el omega solo lo ignoró, caminando con el bebé en brazos hasta el baño para dejarlo sobre una pequeña camilla que tenían para cambiarlo.

—Tu papi es muy malo. —Dijo desabotonando el entero para quitárselo. El cachorro solo hipaba, mientras sus ojos se encontraban rojos por el llanto.

—Felix —Dijo el otro a sus espaldas —, déjame hacerlo.

Y el omega solo le dio espacio para que el alfa se acercara, después salió de la habitación.

—Ah, Dios —Suspiró —. Tu papi se levantó de mal humor. —Le dijo al pequeño JeongIn y este empezó a soltar soniditos de su boca sin sentido.

Enrolló el pequeño pañal sucio y lo tiró al cesto de basura.

—Perdón, bebé —Dijo, para después besar la barriguita de su cachorro —. No quería, lo olvidé, ¿Sí?

Y JeongIn solo sonrió.

Una sonrisa que mostraba las rosadas encías sin dientes que tenía.

Dios.

Su bebé tenía una hermosa sonrisa.

Limpió sus nalguitas con toallitas húmedas y luego le puso talco. Con cuidado acomodó a JeongIn y le empezó a poner el pañal. Su vista se enfocó en el pequeño cuerpecito de su bebé.

—Serás un lindo niño —Dijo mirándole a los ojos —. Como tu papi, muy hermoso.

Y JeongInnie volvió a sonreír moviendo sus manitas de arriba a abajo.

—Ahora vamos por un cambio de ropa. —Agarró a su bebé con mucho cuidado y salió del baño.

Poco después de encontrarla, se encaminó con la ropa de JeongIn a su cuarto matrimonial. Felix estaba recostado en la cama observando un programa en el televisor. Lo ignoró otra vez.

Dejó su cachorro en su cama y comenzó a vestirlo, colocando primero sus pequeños pantalones de color cielo y luego su blusita con estampado de caramelos en ella.

—Listo —Dijo después de vestirlo, besando sus mejillas y su barriguita —. Ahora vamos a comer.

Bajó las escaleras con un puchero en su rostro, su omega lo estaba ignorando.

Preparó la leche de su cachorro y cuando estuvo lista se la dio. El cachorro agarraba el biberón con sus dos pequeñas manitas mientras observaba con los ojos algo cerrados a su papi, ya tenía sueño.

No llegó ni acabarse el primer biberón cuando cayó dormido nuevamente, y una sonrisa adornó los labios del alfa.

Caminó cantando una canción cualquiera hasta la planta de arriba y entró al cuarto de su bebé. Besó su pequeña naricita de botón antes de acomodarlo en la cunita y ponerle su mantita para que durmiera mejor.

Y entonces caminó decidido a su cuarto, donde su esposo estaba.

—¿Qué te pasa, Lixxie? —Preguntó suavemente cuando entró y el omega solo quería largarse a llorar.

Escondió su cuerpo en las mantas y se quedó ahí, hasta que sintió un peso en el lado de la cama, nunca quitándose las cobijas de encima.

—Bokkie... —Arrulló el alfa.

Y Felix salió disparado de las cobijas para sentarse en el regazo de su alfa, empezando a hipar, parecía un bebé.

—Es... es que, no estabas en la cama cuando me levanté, estabas con JeongInnie, y-y no lo limpiaste bien. Además, me dijiste Felix, tú nunca me dices Felix, y-y quizás sea tonto, pero... pero estoy un poquito... —Él simplemente no podía decir que tenía celos de su cachorro, eso era inmaduro.

Sintió caricias en su espalda tratando de calmarlo.

—Estás celoso, amor.

Y el omega asintió escondiendo su nariz en el cuello de su alfa, mientras sus manos apretaban la tela del suéter negro de HyunJin.

—Perdón. —Dijo finalmente.

—Oh, no, amor. Está bien, es normal, últimamente mi atención se ha dirigido solo a Innie, voy a tratar de cambiar eso, ¿Sí? Perdóname tú a mí. —El rubio besó el cuello de su esposo, para luego salir de su escondite y besar los labios de este.

—Tu perdóname a mí. —HyunJin solo sonrío.

—Creo que tengo dos bebés.

•••

Lamento que la actualización fuera tan tarde, aquí en Chile ya casi son las 23:30.

Este es el primer extra de los tres que serán, como pudieron darse cuenta no son muy largos.

Si el tiempo me lo permite y no sucede nada que lo impida, trataré de subir los dos restantes el fin de semana, ya que el viernes toca actualización en The Perfect Omega.

Nos vemos 👋

에이브릴🌹

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro