𝑃𝑟𝑖𝑚𝑒𝑟 𝑠𝑜𝑛𝑟𝑜𝑗𝑜
Si ya eran cercanos antes de tener los dormitorios, cuando se trasladaron a estos lo fueron todavía más. Sero solía pasar casi todo su tiempo libre con Kaminari, en su cuarto o en el del rubio, y el resto lo pasaban con sus compañeros. También se había hecho más cercano a Todoroki ya que era quien dormía en el cuarto de al lado, y a veces le invitaba a pasar tiempo con ellos, para que no estuviese solo en su habitación.
En ese momento estaba haciendo palomitas; iba a ver una película con el resto del squad, y estaba contento porque les había convencido para ver Spiderman una vez más, según él para que pudiesen apreciar cada detalle de esa obra maestra del cine. Bakugo se había opuesto al principio, pero Denki había convencido a Kirishima momentos antes de que era la mejor opción de película, y duraron poco tiempo sus reclamos.
-Oh, ya casi están. -Una voz se hizo presente en la cocina, y se giró para ver a su mejor amigo caminando hacia él, comiendo un mochi-. Los demás están listos ya, hemos avisado a Iida de que estaremos todos en tu cuarto esta noche.
-Genial, yo termino esto y voy. ¿Les abriste la puerta? -En respuesta, Kaminari sacó de su bolsillo la tarjeta que servía como llave, y se la entregó a Sero.
-Están conectando los cables de la televisión de Bakugo... Sería todo más fácil si pudiésemos entrar a su cuarto.
El chico suspiró y Sero asintió conteniendo una risa. Cuando se mudaron a la U.A. propusieron una noche de películas de vez en cuando, pero ninguno de ellos parecía tener televisión; hasta que a Kirishima se le ocurrió decir que Bakugo tenía una pequeña en su habitación. De inmediato todos decidieron que verían las películas en esa televisión, pero el rubio les dijo que no iban a entrar a su cuarto.
No había sido difícil decidir entonces el lugar; el cuarto de Kirishima y Kaminari había sido descartado por Mina, y el de ella por Bakugo, así que siempre iban al cuarto de Sero. Al pelinegro no le importaba, tenía una hamaca y una cama, por lo que había más espacio para que todos durmiesen cómodos.
Cuando vio que ya estaban todas las palomitas hechas, las puso en varios cuencos grandes y junto a su amigo fueron al cuarto del menor. Desde fuera se podía escuchar a Katsuki quejarse de la película nuevamente, pero ninguno de los dos le hicieron caso al entrar. En la pantalla se podían ver claramente los créditos iniciales, y sus amigos ya estaban en el suelo; excepto Mina, que se había acomodado en la cama.
-Ya era hora, idiotas, llevamos un siglo esperando -Bakugo habló mientras Kirishima tomaba uno de los cuencos de palomitas, y se sentaba de nuevo en el suelo junto a él.
Mina tomó otro que le ofreció Kaminari cuando se sentó a su lado en el colchón, y quedó en medio una vez Sero se acomodó también después de apagar las luces. Ashido esperó a que todos estuviesen listos para darle al play, y empezaron a ver la película.
Era ya tarde, pero parecía que ninguno de los cinco tenía todavía sueño. Kirishima tomaba palomitas con una sonrisa, y de vez en cuando le daba a Bakugo para que las probase, porque el rubio estaba tan concentrado en lo que estaba pasando que se le olvidaba la comida. Mina tenía su propio cuenco, del que a veces Denki robaba. Aprovechaba estar en medio para poder tomar palomitas tanto del cuenco de Sero como del de Ashido.
Hanta en cambio estaba prácticamente como Katsuki. Por muchas veces que hubiese visto esa película, no podía dejar de emocionarse con cada una de las escenas que veía, y que ya se sabía de memoria. De vez en cuando salía de su ensoñación para susurrarle algo a Kaminari, porque lo tenía al lado.
-Kaminari, ¿no te parece genial esto? -Iba a girarse para poder verle a los ojos, cuando notó un peso en su hombro.
Denki se había quedado completamente dormido en medio de la película, con unas cuantas palomitas en su mano. Sero sentía el tacto del gorro que llevaba para que no se viese su pelo, gracias a Bakugo que siempre se quejaba del problema de Denki; y sintió dolor en el estómago, como si tuviese ganas de vomitar.
Había dormido con Kaminari varias veces, él en su cama y Denki en la hamaca, pero nunca le había visto tan tranquilo. Parecía que estaba muy cansado por el día que habían pasado de clases, y no había aguantado hasta que acabase Spiderman para dormirse.
-Sero... ¿Te encuentras bien? Estás rojo. -Las palabras repentinas de Mina le sacaron de sus pensamientos, y la miró asintiendo.
La chica le creyó y siguió observando la televisión, mientras Sero tocaba sus mejillas, notando efectivamente un pequeño calor, ¿acaso estaba enfermo? No, no se había sentido mal en todo el día, y las palomitas no solían tener ese efecto.
Sin embargo, un movimiento por parte de Kaminari, removiéndose en su sitio hizo que el calor en su cuerpo aumentara. Se tensó nervioso ante la posible idea del origen de ese extraño calor que notaba por dentro. Miró de reojo al rubio, que seguía descansando en su hombro, y negó tratando de parecer seguro. No podía ser Denki.
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