Narra Ylenia

No puedo creer lo que veo me sigo repitiendo cada vez que mi mirada va dirigida detrás de esas ventanas «¿Cómo es que llegué aquí?»

Llegué como todas las mañanas a la empresa, después de salir de la empresa de los hermanos Jackson me dirigí molesta ya que no me dejaron entrar con mi pequeño, cuando bajo me partió el corazón ya que lo veo llorando e hipando me dio tanta rabia que me descontrole y empecé hacer una escena que estoy segura que jamás en su vida me dejarán entrar a la compañía de los "Jackson" «nótese mi sarcasmo» y no me pasó desapercibida que Aiden estaba molesto ya que vi sus manos con heridas, cuando lo vi me dio un nerviosismo ya que quería saber lo que pasaba pero sé que para ellos sólo soy una de sus trabajadoras nada más.

Entré y creo que este día tuve más atención ya que mi Ángel veía todo mientras escuchaba los sonidos de mi corazón y eso llega todo mi amigo vino y me empezó a preguntar si era mío quien era el padre y aquí en me tiré hace meses para venir con mi hijo cosa que hice oídos sordos para no escuchar cosas sin sentido.

Lo que más me paralizó fue que cuando llegué a mi escritorio pensé que mi jefe me iba a gritar, pero no lo que paso fue diferente.

—Ylenia quiero que... —El señor O'Connor me mira para luego dirigir su mirada a mi retoño que está en su coche lo cual me la pasé empujando ya que Ángel sólo quería estar en mis brazos. —¿Pero ¿quién es esta hermosura? —Dice viendo como Ángel dirige su mirada dejando de morder sus dedos, el cual sólo tiende a sonreír mostrando sus encías al escuchar la voz de mi jefe.

Me quedo mirando «maldito traidor» a él le sonríe, pero a mí sólo me mira como si fuera una estatua.

—Es mi pequeño. —Digo mientras el sólo se encarga de hacerle caras a Ángel que sólo sonríe.

—Mmmm. —Escucho y cuando me dirige su mirada me ve con ceño fruncido «¿Ahora que carajos hice?».

—¡Los quiero en mi oficina ahora mismo! —Dicho esto se va, pero no antes de sonreír a Ángel y a mi mandarme una mirada de furia.

—Mira si me despiden tú vas hacer el responsable ¿entendido? —Le digo mientras me dirijo a paso decidido empujando su coche. A lo que él sólo sonríe creo que le gusta cuando me gritan.

Estoy a punto de tocar cuando escucho la voz de mi jefe.

—Pueden pasar.

Sólo me encargo de inhalar y exhalar varias veces antes de entrar con una sonrisa que dice que todo está bien, aunque por dentro estoy muriéndome poco a poco, sólo nos mira entrando. Me siento y a mi lado pongo el coche yo sigo como si su llamado hace rato hubiera sigo mi imaginación.

—¿Por qué no Me lo dijiste?

—¿Ah? —Decir qué me pregunto moviendo mis cejas rápidamente.

—Sobre el bebé.

—Ah...era eso. —Digo sonriendo. —Pues tenía miedo que usted me gritaba por traer a Ángel, pero...

—¿Ángel?

—Si el pequeño que ve aquí y le está sonriendo se llama Ángel, pero le doy un consejo que de Ángel no tiene nada no entendiendo como...

—No se salte de tema y siga contestando mis preguntas ¿Dónde estuvo todo este tiempo?.

—Pues le cuidaba su padre.

—¿Y usted?.

—¿Yo? —Digo señalándome. —Pues estuve trabajando aquí además ¿qué tiene que ver el padre conmigo?.

—No lo puedo creer que todavía haya mujeres así.

—¡¿Disculpa? ¿Qué me dijo?! más bien estoy haciendo un bien, no me hubiera metido en este lío si no fuera por mi hermano y mis estu...primos sólo hice un favor al padre del niño que fue ser su niñera ¿hay algo mal en eso?.

«Respira no hagas que la vena se hinche que puede reventar y no quieres estar bañada en sangre verdad» además quien puede estar enfadado con tener alguien a su costado que te mira con esos ojos marrones.

—Ósea... ¿Me estás diciendo que él bebe no es tuyo? —Dice echándose en su silla movediza sólo asiento cuando veo que sale baba de la boca de Ángel y cojo un papel que hay en la mesa y le limpió. —Okey puedes retirarte.

—¿Qué? Para eso me llamó. —Quien se creé claro ya que él es el jefe puede hacerme perder el tiempo.

—Dije que ya puedes retirarse. —Dice mirándome fijamente. —Pero puedes dejar al pequeño ya que no quiero que te incomode mientras trabajas. —Dice agarrando unos papeles y poniéndolos de lado. —Y tienes que esforzarte ya que por sólo esta semana trabajas y una cosa más, ¿las copias del contrato?.

—Están ahí. —Digo señalando la carpeta con el logo de la empresa Jackson lo puse ni bien vine por sé cuál es el carácter del jefe cuando no está listo sus cosas. —Y por qué quiere que...

—No voy a responder esa pregunta si es lo que desea y por favor cierra la puerta cuando me traigas su maletín.

Sonrío y cuando me doy vuelta mi cara se descompone «puedes traerme el maletín» si claro yo todavía voy a traer.

Tenía que llevar, pero entre con regañadientes ya que sé que sólo estuve poco tiempo con Ángel, pero él es un niño muy tranquilo y también inquietó, pero se hace querer por cómo es.

Ahora llegamos donde estoy mirando con la boca abierta al ver como mi jefe empieza a jugar y escucho las risas de Ángel y yo no soy la única ya que varios empleados ven lo mismo. A trabajar se ha dicho.

Estoy saliendo del ascensor cuando escucho el sonido de mi celular el cual me paro, pero me casi lo suelto al ver el nombre de Landon.

—¿Hola?

—Ylenia quería que vengas para poder hablar sobre el contrato.

—Pero si ya firmaron además estoy dirigiéndome a mi casa y no puedo regresar a su empresa ya que...

—Dirígete a mi casa ya que mis hermanos y yo nos encontramos ahí.

Dicho esto, cuelga yo me quedo mirando mi cel. quien se creé para cortarme así.

Narra Nathan

—¿Cómo pudiste cortarla?.

—Pero que quieres que haga si sabemos que ella sigue con él tenía que ser rápido.

—Tienes razón fuiste rápido en cortarla. —Habla Aiden sentándose en el sillón.

—Lo importante es que ella viene para ser nuestra ya que no dejaremos que nada nos detenga. —Dice Landon todos nosotros asentimos ya que no vamos a dejar que él la tenga.

—Deja de mover la pierna. —Digo mirando a Nathan ya que se sentó cómodo en el sillón. —Que si lo sigues haciendo me vas a pegar tu manía.

—Lo de mover la pierna no es contagioso sabías eso ¿Verdad?.

Estaba a punto de contestarle cuando escucho el sonido del timbre.

«¿Cuánto tiempo pasó para que ella llegue temprano?».

Nos paramos como si estuviéramos sincronizados, aunque yo ya lo estuve con tanta emoción que sentarme no pude. Nos dirigimos a paso rápido, aunque por parte de Nathan se atrajo ya que Aiden lo cerró el paso.

Cuando abrí la puerta me quedé estático ya que con lo que mi vista vio no pude reaccionar y no fui el único porque mis hermanos me siguieron el ejemplo.

—¿Me querían ver? —Responde con un bebé que está a su costado en un lindo coche, creo que si no es tuviera mis hermanos ahí seguro que me desplomaría.

***

¡Hola!

Es mi primera vez escribiendo una historia y sólo espero que les guste.

Estoy tan nerviosa que hasta escribiendo me tiemblan las manos... sí sé que varios no me creen, pero es totalmente cierto...ya tengo el final cosa que será...uffff... luego de varios pero varios capítulos... no pude actualizar, cosa que haré lo más pronto posible, el siguiente, pero eso no significa de aquí a dos o tres días.

Ya sé que ustedes quieren que actualiza cada día si es posible, cosa que también me pasa a mí también, pero estoy feliz ya que ingresé a la Universidad eso es para mí un logro y mis clases van a empezar con fuerza con punche como digo yo, así que les dejo este capítulo y nada sólo que gracias a todas las personas que les gustó.