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Un trato...

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...

Según lo que entiendo por ahora... los ángeles siempre han protegido este mundo y algunas veces son enviados para ver cómo van las cosas, pero el ángel que tengo en frente...

• Aoi: Aún que... ya que prácticamente no soy un "ángel genuino", nada de eso tiene que ver conmigo.

• Yuko: ¿Entonces para qué me cuentas todo eso...? // Pregunta algo indignada.

• Aoi: Si no te doy ni la más mínima información de lo que está pasando, no podrás confiar en mí.

• Yuko: Así que quieres que confíe en tí, ¿eh...?

• Aoi: Solo estoy siendo lo más honesto posible... Quiero aclarar cualquier duda que tengas para que almenos comprendas un poco esta situación sin sentido.

• Yuko: Hm... Bueno... hace un momento dijiste que hay ángeles que son enviados a este mundo, ¿me podrías dar más detalles?

• Aoi: Los ángeles son enviados y se mezclan con el resto de la gente por un período de tiempo espesifico y así evitar crear sospechas que confirmen nuestra existencia. Como lo acabas de ver, podemos hacer desaparecer nuestras alas y halos, y parecer humanos.

• Yuko: Ya veo...

De alguna forma me molesta que lo diga todo como si no fuera nada... pero encontré la manera de seguirle el juego.

• Yuko: Si su existencia no debe ser confirmada, entonces ¿por qué me lo dices todo a mí? ¿No va en contra de sus reglas?

• Aoi: Porque no me importa... // Responde con una mirada seria.

• Yuko: ¿Hm...?

• Aoi: Soy un angel caído... Ya fui expulsado del cielo como para interesarme en esas cosas. No tengo nada mejor que hacer que vagar por este asqueroso mundo o irme al infierno, pero ya que no soy de los que sienten placer de hacer algo malo como los sádicos demonios, prefiero por mucho quedarme aquí.

• Yuko: Ya... veo. // Yuko empieza a tener menos confianza de este sujeto. // Creo que es suficiente.. ¿Puedes decirme qué busa un ser de otro mundo como tú de alguien tan insignificante como yo?

• Aoi: Lamento contradecirte, pero "insignificante" es una palabra muy lejana a lo que veo de tí.

• Yuko: ... Sigo sin entenderte.

• Aoi: He vivido entre ustedes por mucho tiempo... y no importa cuánto camine o vuele por ahí, siempre sentiré las malas intenciones de cualquier persona que vea por allí. // Mientras habla, se podía notar como sus ojos se oscurecian cada vez más.  // Los humanos son seres repugnantes llenos de egoísmo, deshonestidad y envidia.

• Aoi: Los he visto más de una vez desde la sombras... Se matan entre sí, se enojan y destruyen todo porque sí, y acaban con su propia vida solo por estar llenos de cobardía y sentimientos sin ningún fundamento. // Se rasca detrás de la cabeza con una expresión de pena, mirando a la nada. // Enserio... no tienen salvación.

• Yuko: Basándome en lo que dices, no tienes fé en la humanidad... Es un pensamiento simple entre mucha gente.

• Aoi: Jeje~ Siii.. se podría decir que sí, pero... si soy consciente de algo, es que no todos son así. La naturaleza humana es muy simple... naces sin nada, valoras todo; naces con todo, valoras nada y tú, Yuko Konoe, eres todo lo que busco de un simple humano.

• Yuko: ¿E-Eh?

¿Este tipo ya sabía mi nombre?

• Yuko: ¿Qué quieres decir...? Sigo sin saber que buscas de mí.

• Aoi: Te he estado observando desde un tiempo, Yuko... // Su expresión seria se rompe un instante. // Ah, perdón si sueno como acosador.

• Yuko: Ya es muy tarde.. // Menciona mientras suspira. // No se puede evitar, solo sigue hablando.

• Aoi: Bueno... me disculpo por no intervenir cuándo fuiste tratada de esa manera. Fue una vista realmente desagradable... pero me seguía sorprendido lo poco que te afectaba y como seguías con tu vida.

• Yuko: Ya estaba acostumbrada a este tipo de cosas. Sé que probablemente tenga varios traumas y problemas psicológicos, pero me esforcé e hice todo lo posible para mantener mi mente cuerda. // Menciona inexpresivamente, con la mirada baja.

• Aoi: Resumidamente tienes una buena resistencia mental y puedes ganar contra tí misma... Eso me hizo ver lo realmente peculiar que eres.

• Yuko: ¿Eso crees? // Pregunta con sus ojos cruzandose un breve segundo con Aoi. // Es la primera vez que me dicen algo así.

Aún que no dejó en claro que era un halago, no podía evitar sentirme algo feliz por sus cortantes palabras.

• Aoi: Sabiendo todo esto. Quiero que entiendas que estoy aquí para ayudarte.

• Yuko: ¿Este es el trato del que me hablabas?

• Aoi: Así es. // Nuevamente Aoi pone la mano en su pecho. // Te ofrezco la oportunidad de dejarme ser tu ángel guardián. Si es que aceptas, me aseguraré de darte una vida feliz y sin sufrimiento hasta el final de tus días.

• Yuko: ¿Ángel guardián...? ¿Qué no eres prácticamente un demonio?

• Aoi: Qué ya no sea un ángel no me convierte en demonio... // Menciona claramente indignado. // Admito que no soy alguien bueno, pero tampoco soy alguien malo.

• Yuko: Hm... Sabes que igual no confiaré en ti, ¿no?

• Aoi: Por lo menos quiero intentar demostrar que puedo serte de ayuda. // Menciona con la mirada seria.

• Yuko: ... ¿Y qué quieres a cambio? No creo que lo hagas solo porque quieres, especialmente un ángel caído...

• Aoi: Bueno, no puedo negarlo...

• Yuko: ...

No puedo pensar en algo que el quiera de mí.
No tengo riqueza ni nada que pueda ofrecerle...

• Yuko: ¿Y qué es lo que quieres?

• Aoi: Por ahora, solo quiero que nos llevemos bien. // Menciona con una amable sonrisa.

• Yuko: ¿Llevarnos bien?

• Aoi: Así es. // Responde algo entusiasta. // No busco nada en particular de tí más que una simple amistad. Eres una simple humana después de todo.

• Yuko: ... E-Eso... me asusta.

• Aoi: ¿Mm? ¿Qué es lo que te asusta?

• Yuko: Es solo que... lo que dices suena demasiado bien como para ser verdad. ¿Arreglarás mi vida a cambio de solo volverme tú amiga? ¡No me jodas! ¡Es imposible que pase algo así! // Yuko parecía desesperarse por la confusión cada vez más.

• Aoi: ... Realmente has perdido toda la esperanza, ¿no es así? Ahora veo mejor porque querías suicidarte. // Menciona calmadamente.

• Yuko: ¿Ha...?

• Aoi: Es cierto... es un trato muy barato el que te ofrezco, ¿no es verdad? Yo también lo creo... pero tengo mis razones.

• Yuko: ¿Q-Qué quieres decir...?

• Aoi: Bueno... yo estoy... realmente solo. // Menciona con una mirada muerta en sus ennegrecidos ojos. // Es aburrido estar solo en este mundo, por lo que intenté hacer amigos, pero... todos los humanos son igual de repugnantes. // Menciona con su mirada muerta y una deshonesta sonrisa.

Comienzo sentirme cada vez más insegura al estar cerca de él...

• Aoi: He conocido a muchos humanos con el pasar de los siglos...  Incluso creo que si jamás los hubiera conocido, no me habría convertido en un ángel caído. // Menciona con una triste sonrisa.

• Yuko: ¿E-Es enserio lo que dices?

• Aoi: Mhm. // Asiente con la cabeza. // Guardé un gran rencor hacia ustedes por mucho tiempo, pero... luego descubrí que no todos son así. Hay algunas personas en este mundo que son genuinamente amables. He conocido y ayudado a varios niños, adultos y hasta discapacitados que no tenían intenciones ocultas hacia mí e hice buenos recuerdos con todos ellos. // Menciona felizmente.

El viento empieza a resoplar...

• Aoi: Y ahora te toca a tí, Yuko. Has sufrido por mucho tiempo, ¿no es así? Esta vez quiero que sea diferente.

• Yuko: ... Pero aún no sé qué buscas de todo esto.

• Aoi: Busco buenos recuerdos y por sobre todo... diversión.

• Yuko: ¿Diversión?

• Aoi: No lo entenderás ahora, pero creo que muy pronto lo harás. // Menciona con una ennegrecida mirada lejana. // ¿Y qué dices, Yuko? ¿Me dejarás ser tu ángel guardián?

• Yuko: A-Aún no estoy muy segura... ¿Como puedo asegurar que no me estas mintiendo? Nisiquiera aún puedo creer que eres un ángel caído.

• Aoi: Hm... Entonces... ven.

• Yuko: ¿Mm? Oye... ¿qué intentas hacer? // Pregunta realmente confundida.

• Aoi: Te llevaré volando como un súper héroe hasta tu casa y así me creerás. // Menciona en un tono entusiasta, sin cambiar su inexpresiva cara.

... Me rindo con él.

• Yuko: *Suspiro* Ya lo tengo claro, así que deja de hacer eso.

• Aoi: ¿Así que me crees?

• Yuko: Si, si... Te creo.

Luego de pasar otro segundo, el estómago de Yuko vuelve a rugir, haciéndola estremecerse cada vez más por el aumento del dolor.

• Aoi: Cielos... Llevas casi tres días sin comer bien.

• Yuko: ¿Qué...?

¿Cómo es que él lo sabía?

• Aoi: Espera un minuto. Iré a traerte algo rápido. // Tras decir eso se mueve hasta llegar a las escaleras. // Resiste un poco, ¿sí?

Aoi baja las escaleras y es perdido de vista...

                                             * * *

Apenas puedo mover mi cuerpo.
¿Será por el hambre...?

Me siento tan débil y adolorida por todo...
Ya estoy acostumbrada a esto, así que no tengo una reacción en particular.

...

Es una situación muy rara en la que me encuentro ahora... ¿de verdad es un ángel?
Me cuesta creerlo, pero por la forma en la que habla parecía decirlo enserio... sin mencionar, también, esas extrañas cosas que hizo para probarme que no es humano.
Aún así...  no me importa nada de eso ahora. De todas formas saltaré de este techo una vez me deje...

Realmente no entiendo lo que dice...

Dice querer ayudarme, pero no veo ningún fundamento en sus palabras, ni razones por el cual haría algo así.

Y si me estuvo observando antes, entonces ¿por qué no hizo nada mientras pudo?

¿Qué intenciones tiene conmigo...?

No puedo confiar en él.

¿Por qué sigo esperando que algo mejore de todos modos?
Siempre creí que las cosas mejorarían si seguía resistiendo este infierno, pero... ¿realmente vale la pena?

Aoi dijo que podía mejorar drásticamente mi vida, pero... ¿como lo hará?

¿No será que simplemente me está tomando el pelo?
¿No será que el me está haciendo una broma con todas esas chicas?

No quiero seguir sufriendo más...
Me siento tan desesperada y aterrada por lo que ocurrirá mañana que siento no poder soportar otro maltrato más.

¿Qué es este sentimiento?

Ah... ahora lo recuerdo...
Este sentimiento de miedo y tristeza que siempre me acompañó desde pequeña...

...

Yuko desvía su mirada del suelo a la parte rota de la reja.

¿Por qué simplemente no salto y acabo con mi problemas de una vez?
Siempre fue... tan fácil rendirse.

Empieza a caminar al frente lentamente con una mirada muerta y vacía.

Si hago esto... ya no sufriré más.

Si hago esto... todo se acabará.

Si hago esto... podré ser feliz.

Repentinamente algo toma a Yuko por detrás de los hombros.

• Aoi: No te dejaré morir... Tenlo por seguro. // Lo dice en un tono serio.

• Yuko: Pero...

• Aoi: Tampoco dejaré que te hagan daño... pero para eso tienes que confiar en mí. // Lo dice nuevamente en un tono serio.

• Yuko: ... Dame una buena razón... // Lo dice en un tono realmente bajo.

• Aoi: ¿Yuko?

• Yuko: ¡Dame una buena razón para confiar en ti!! // A este punto ya se podía notar el nudo en su garganta y las gotas de lágrimas que caían al piso. // ¡¡No quiero seguir sufriendo!! ¡¡No quiero que me sigan torturando!!

Yuko empieza a moverse hacia delante, pero Aoi no la suelta. Empieza a forcejear para que la suelte y así intentar correr y saltar del techo, pero Aoi sigue sin ceder.

• Yuko: ¡¡Suéltame de una maldita vez!!! ¡¡Si quieres que sea feliz, entonces dejame saltar!!!

• Aoi: ...

Yuko ya se quedaba sin fuerzas...
Unos pocos segundos después, ella cae al suelo de rodillas completamente agotada y débil; seguramente por el hambre que soportó estos días.

• Aoi: Yuko... créeme que te arrepentirás después saltar.

• Yuko: ... *Lloroso* // No podía hacer nada más que derramar sus lágrimas en silencio.

• Aoi: Sé sobre estas cosas... Tienes demasiados arrepentimientos y deseos sin cumplir... Si mueres ahora tú no irás al cielo, solo serás otra alma perdida de este mundo.

• Yuko: ...

¿Nisiquiera puedo morir feliz...?
¿Qué mundo tan cruel es éste...?

Antes de darse cuenta, Aoi ya tenía sus brazos gentilmente colocados alrededor de ella.

• Aoi: Perdón... estoy siendo muy exigente, ¿no es verdad? Habría sido más fácil ayudarte antes de que pensaras en hacerte esto. Realmente lo siento.

• Yuko: ... // Una gran cantidad de emociones recorrían la cabeza de Yuko como para pensar en algo que decir, pero era claro que no perdonaría a Aoi por no aparecer antes.

• Aoi: Sé que estas desesperada, pero por favor, dame una oportunidad y te prometo que no dejaré que te hagan sufrir más. Desde ahora me aseguraré de que seas feliz, así que te pido que mantengas tus esperanzas una última vez. // Lo dice en un tono tranquilizador.

• Yuko: ... Cada palabra que dices... suena demasiado bien como para ser verdad. // Menciona en un tono apagado.

• Aoi: No es cierto. // Menciona seriamente.

• Yuko: ¿Mm?

• Aoi: Solo tuviste mala suerte como una inmensurable cantidad de personas en este mundo. No todos tienen la suerte de vivir una vida sin preocupaciones, ¿sabías...? Eres realmente especial, Yuko... no dejaré que una persona tan increíble como tú muera de esta forma. Como te dije antes, me aseguraré de darte una vida feliz.

• Yuko: ... *Lloroso*

Los llantos de Yuko poco a poco iban subiendo de volumen hasta acabar llorando claramente frente a su nuevo ángel guardián...

                                             * * *

Antes de darme cuenta, ya me encontraba caminando por los pasillos con Aoi hasta mi salón de clases.

• Yuko: Oye... ¿qué tienes ahí?

• Aoi: ¿Esto? Es un obento que preparé para tí.

• Yuko: ¿Qué..? ¿P-Para mí...? ¿Cuándo lo preparaste?

• Aoi: Esta mañana... Tenia pensado conocerte el día de hoy después de clases, pero... está claro que las cosas no acabaron como yo quería. Realmente siento no haberme presentado antes.

• Yuko: Ya veo...

Pasan varios segundos caminando en silencio.

• Aoi: Bien, este es tú salón, ¿verdad?

• Yuko: Si...

Aoi procede a deslizar la puerta y entrar con Yuko por detrás.

El salón de clases... aún no se había limpiado.
Estoy segura de que la profesora lo notará y esas chicas me echaran la culpa a mí... aún que si la profesora termina echandonos la culpa a todas, es seguro que mi trato con ellas no será muy amable en el descanso.

• Aoi: Bien, siéntate aquí. // Tras decir eso, Aoi arrastrara el asiento del lugar de la esquina.

• Yuko: ¿Eh..? ¿Para qué?

• Aoi: Tienes hambre, ¿no? // Coloca el obento sobre el escritorio. // Vamos, siéntate y come. Mientras haces eso, yo me encargaré de limpiar todo el salón.

• Yuko: ¿E-Enserio harás algo así por mí? // Pregunta asombrada.

• Aoi: Es mi primera misión para ayudarte con tu vida... // Menciona inexpresivamente, mientras se remanga la camisa. // Tengo sacaré de los problemas que tienes con tus responsabilidades.

• Yuko: ...

Estoy realmente asombrada.
Es la primera vez que alguien hace algo por mí sin siquiera tener que pedirlo. Y eso que apenas estamos comenzando.

                                             * * *

En el atardecer que resplandecía desde las ventanas de este salón,  Aoi ya había terminado de limpiar todo el lugar.
No es para nada malo en esto de limpiar... hasta pudo remover los chinches que se encontraban pegados en mi asiento usando solo una cuchara.

• Aoi: *Suspiro largo...* Terminé... // Menciona algo agotado, mientras se acostaba en el escritorio de los profesores.

• Yuko: Buen trabajo.

• Aoi: Es aburrido, pero vale la pena. // Tras decir eso se levanta. // ¿Cómo te sientes, Yuko?

• Yuko: Hace tiempo que no como hasta sentirme satisfecha... Muchas gracias. // Menciona algo tímida.

• Aoi: No te preocupes... esto aún no es nada. También debo encargarme de esos infelices que te maltratan.

• Yuko: ¿Y... que harás con ellos? // Pregunta Yuko, preocupada.

• Aoi: Veamos... ¿Alguna vez escuchaste el dicho de "Todos guardamos un demonio dentro de nosotros"?

• Yuko: S-Si...?

• Aoi: Bueno... para un ángel, ese dicho es raro y carente de sentido, pero puedo ponerlo de esta forma... // Desvia su mirada hacia la ventana. Lo inquietante era que sus ojos no brillaban pese a la luz que irradiaba el sol. // Los demonios de un ángel... son verdaderamente aterradores.

Una inquietante sonrisa y una mirada que parecía ansiar la muerte de alguien, fue lo que estremeció a Yuko.

• Aoi: No tiene ningún sentido lo que acabo de decir, ¿verdad? // Pregunta tras desviar su mirada a Yuko, mostrando una sonrisa. // Pero puedes tener en cuenta de que si estás conmigo, no tienes que preocuparte por tú seguridad.

• Yuko: ... // Se quedó algo atónita y aterrada por lo que acába de ver.

• Aoi: ¿Eh? ¿Yuko? ¿Por qué me miras de esa forma? ¿Acaso viste un fantasma?

• Yuko: ¡¿Eh..? Por... nada en realidad... // Menciona algo temerosa.

• Aoi: Vamos... no voy a matar a nadie, así que tranquila. Recuerda que el único incoherente aquí eres tú.

• Yuko: ¡O-Oye, eso es cruel...!

• Aoi: Je~ Pues entonces relájate más. // Se acerca a Yuko y le acaricia la cabeza. // Mientras estes conmigo, no hay problema del que debas preocuparte. Estoy aquí para protegerte... así que no me temas, ¿bien? // Menciona con una amable sonrisa.

• Yuko: B-Bien...

Su trato es tan amable que no puedo evitar sentirme segura con el, pero esa actitud impredecible suya nubla por completo este sentimiento.

Es alguien inexpresivo... pero cuando parece enojarse, sonríe de una forma inquietante.

                                             * * *

Yuko y Aoi se encontraban caminando de regreso a casa.

• Yuko: Oye...

• Aoi: Si, Yuko?

• Yuko: Si no eres de este mundo, ¿entonces dónde vives?

• Aoi: Me acabo de mudar a un apartamento.

• Yuko: Hm, ¿enserio? ¿Cómo es que hiciste eso? ¿No necesitas dinero?

• Aoi: He trabajado en muchos lugares estos años... así que ahora tengo bastante dinero ahorrado.

• Yuko: Oh... ¿A qué te dedicabas antes?

• Aoi: Nada fuera de lo común... Ya que tengo la apariencia de un estudiante de diecisiete o dieciocho años, no hice nada más que trabajar en tiendas de conveniencia y esas cosas. Me compré varias cosas entretenidas como un celular, muchos libros, ropa bastante cómoda y hasta varios video juegos.

• Yuko: ¿Eh...? ¿Cómo fue que ahorraste para conseguir todo eso? // Pregunta algo impresionada.

• Aoi: A diferencia de los humanos, yo no gasto la mitad de mis ganancias en comida. Soy un ángel... no necesito comer.

• Yuko: ...

Eso responde una de mis dudas, pero ahora solo me dio más dudas sobre él...

                                             * * *

Yuko ya había llegado a su destino...

• Yuko: Bien, aquí es donde vivo. Supongo que aquí nos separamos.

Yuko sube las escaleras y llega a su puerta.

• Yuko: Oye... ¿por qué sigues aquí?

• Aoi: Te dije que me mudé, ¿no? Pues lo que no te dije fue que lo hice aquí al lado tuyo. // Aoi apunta a la puerta que se encontraba a la derecha del apartamento de Yuko.

• Yuko: ... ¿Eh? // Yuko parecía realmente sorprendida.

• Aoi: Voy enserio cuando dije que te protegería. Así que si me necesitas, ya sabes donde encontrarme.

• Yuko: Ehh....? // Yuko no sabe cómo reaccionar.

                                             * * *

Ahora mismo Yuko se encontraba en su cuarto, acostada en su cama.

• Yuko: *Suspiro...* No importa lo que haga... simplemente no puedo confiar en él.

Aún sigo temiendo el día de mañana... y también sigo sin creer completamente de que ese chico sea un ángel.
Pese a que me mostró sus alas y desapareció en frente mío...
Supongo que a mi cerebro le cuesta creer algo así...

Ya no sé qué puedo hacer ahora...

• Aoi: Oye... ¿hay algo que te esté deprimiendo ahora?

• Yuko: ¿EH?! // Yuko, sorprendida, rápidamente se levanta. // ¡¿D-D-D-DE DÓNDE SALISTE?!

• Aoi: Tu ventana estaba abierta. // Responde como si no fuera nada.

• Yuko: ... Llevas varios días acosándome y ahora irrumpes en mi cuarto... Lo único que te separa a ti y la prisión es que dices que puedes ayudarme. // Menciona Yuko con una mirada de irritación.

• Aoi: Perdón, perdón... No entiendo muy bien el comportamiento humano. // Menciona vagamente.

• Yuko: Eso suena como una excusa...

• Aoi: Tu cuarto está realmente desordenado... // Exclama vagamente.

• Yuko: ¡Tampoco desvíes el tema!

                                             * * *

Pasó un tiempo para que la situación se calmara.

• Yuko: ¿Y bien...? ¿Qué es lo que quieres ahora?

• Aoi: Ten... // Te entrega a Yuko una bolsa de hule.

En ella se podía apreciar varios tipos de comestibles e ingredientes.

• Yuko: ¿Q-Qué es todo esto?

• Aoi: No pudiste comprar nada para tu cena, ¿no es verdad? Y ya que llevas varios días sin comer bien, tu hambre regresará rápido aún después del obento que comiste.

• Yuko: O-Oye no necesitas hacer todo esto. // Menciona Yuko realmente sorprendida.

• Aoi: El dinero no es muy preciado para mí como es para ustedes. Ya compré todo lo que quería y no hay nada que quiera por el momento, así que no me molesta gastar en cosas para tí.

• Yuko: Pero lo que me ofreces es demasiado...

• Aoi: Para mi no es nada. // Menciona inexpresivamente. // Además, a partir de mañana ya no te quitarán más tú dinero, así que no necesitas preocuparte de que siga invirtiendo mis ahorros en tí.

• Yuko: Suenas realmente seguro de tí mismo cuándo dices que vas a ayudarme...

• Aoi: Aún hay cosas que no me has visto hacer. // Menciona Aoi, alzando su puño con algo de entusiasmo.

• Yuko: ... // Yuko se muestra inexpresiva, con la mirada baja.

Repentinamente Aoi la toma con una mano del hombro y, con la otra, de la cabeza, mientras la acaricia.

• Aoi: Deja de preocuparte. Que hayas decidido no suicidarte y empezar a confiar en mí para mejorar tú vida, es algo que me hace realmente feliz, así que no te defraudaré. Ya verás... todo acabará bien. // Menciona en un tono tranquilizador, mientras sigue acariciandola.

• Yuko: A-Aoi-kun... // Dice Yuko realmente sorprendida, al no estar acostumbrada a este tipo de consuelo.

• Aoi: ¿Mm? // Aoi parece sorprendido. // Es la primera vez que dices mi nombre. // Menciona felizmente.

• Yuko: ¿Eh?

¡Se me escapó...!

...

• Aoi: Je~ Bueno, será mejor que me vaya. Duerme bien, ¿sí?

• Yuko: B-Bien... nos ve...mos?

Una vez alzo la mirada, el ya no se encontraba en la habitación.

• Yuko: No me estoy volviendo loca ¿o si? // Se pregunta Yuko, ahora si, preocupada. // ¿Um?

Yuko se acerca a su ventana.
Tra acercarse lo suficiente, ve algo en particular que le llama la atención, y eso era una pluma negra.

Tras asomarse por la ventana y mirar hacia su izquierda, ve a Aoi igual de asomado por la ventana.

• Aoi: ¡Te veré mañana en la escuela! // Exclama inexpresivamente.

• Yuko: ¡D-De acuerdo! ¡Nos vemos mañana, Aoi-kun! // Exclama algo avergonzada.

                                             * * *

Y así... es como acaba el principio de esta corta historia.
Ahora los protagonistas no pueden hacer nada más que seguir caminando hasta encontrar la felicidad a la vuelta de la esquina.

Todos buscan la felicidad en sus vidas, pero algo tan desagradable como el sufrimiento o algo tan simple como el aburrimiento es un obstáculo o estorbo que nos mantiene constantemente apartados de este sentimiento singular.

Lo único que nos puede ayudar... es no dejar caer todas las esperanzas y esforzarnos más para llegar a sonreír genuinamente.

Ahora es el momento de luchar por lo que quieren...

                                             * * *

• Profesora: ¡Muy bien, escuchen todos! Hoy tenemos un nuevo estudiante... Adelante, puedes pasar.

La puerta se desliza lentamente y entra una figura llena de intenciones desconocidas.
Se acerca con cada paso, los cuales resonaban levemente por todo el salón, hasta acabar en frente de las miradas de todos los estudiantes.

• Yuko: ¿Eh...?

• Aoi: Un gusto conocerlos a todos. Mi nombre es Aoi Nishida.

...

Palabras del autor...
Bien, bien...
¡Espero que lo hayan disfrutado!
Ya estoy trabajando en el dibujo del próximo capítulo.
Estoy practicando el arte de dibujar "miradas aterradoras"
Con todo eso dicho, espero poder seguir contando con ustedes para el próximo capítulo.

Próximo capítulo: Diversión con los problemas.