-Punto de vista de Gwendal- 

Delante de mis ojos se encontraba la tumba ardiente de Jhon, a mi izquierda estaba Sam y a mi derecha se encontraba Dean, Sam estaba con lágrimas en los ojos no sabía lo que había pasado pero yo si. Jhon había dado su alma a cambio de la vida de Dean, lo sabía por la de veces que yo lo había hecho, Azazel me había usado como mensajera, y aunque Dean se encontrase pasivo y distante, por dentro estaba que echaba fuego por la boca. 

Aunque Sam no supiese la verdad, Dean y yo lo sabíamos, Sam llevaba sangre de demonio en sus venas, y jhon le había pedido a su propio hijo mayor, sangre de su sangre que le salvase, sabía perfectamente que era un trabajo que siempre caería sobre los hombros del hermano mayor. 

Ya habían pasado varios días en la casa de Bobby, Dean se encontraba arreglando el Impala y me acerqué a él - hey vaquero - en mi mano derecha traía dos botellines y le di uno. 

Con gesto cansado me lo aceptó y se dirigió hacia la mesa donde tenía las piezas de repuesto del Impala - se que no quieres hablar de esto Winchester pero sabes que estoy aquí para lo que sea - dejó la llave inglesa en la mesa - entre Sam y tú me vais a dejar loco, dejar de preguntarme que tal estoy - me levanté de mi lugar - pero yo no me refiero a eso Winchester - se giró y se apoyó en la mesa, se encontraba cansado y confuso pero antes de que me pudiera decir algo Sam llegó a nuestra posición. 

Sam: Dean tenemos que hablar - Dean negaba con la cabeza intentando evitar una pelea - te la pasas aquí reconstruyendo el Impala, ¿acaso no quieres venganza? - Sam se resignó.

Sam: en el móvil de papá he encontrado una dirección y este mensaje de voz - Dean cogió el móvil - hey Winchester, no seas cabezota y llámame sabes que puedo ayudarte - Dean cerró el móvil y habló - dile a Bobby que nos preste un coche. 

Con el coche que nos dio Bobby encontramos un pequeño bar, rentado por Ellen y Jo Harvelle, Jo tenía apuntando con una escopeta en la espalda de Dean y Sam era apuntado por Ellen, yo en cambio tenía mi Desert Eagle en la sien de la hija de Ellen. 

Jo bajó la escopeta al igual que Ellen - ¿Quiénes sois? - Ellen habló la primera. 

Dean: hijos de Jhon Winchester, escuchamos su mensaje de voz dijo que podría ayudarnos - me senté en la primera silla que encontré. Me fijé en la pequeña Jo sus ojos miraban hechizados a Dean, una sensación dentro de mi me revolvió las entrañas. Ese era el efecto que tenía Dean con las chicas - con el demonio - dijo Ellen y mis tripas se encogieron formando un nudo cada vez más enredado. 

Saqué un cigarro y me lo encendí - ¿Para que queremos su ayuda? - solté una bocanada de humo, aquellas dos mujeres me miraban con desprecio, no sabían porqué pero lo hacían y me daba exactamente igual que lo hicieran. 

Dean: vale ya, ¿que pasa que ha salido un artículo en la revista "cazademonios" y lo sabes todo? - apoyé las piernas encima de la mesa ante la atenta mirada de Jo. 

Ellen: calma vaquero, yo solo tengo un bar pero por el pasan cazadores de vez en cuando, incluido vuestro padre, era como de la familia. 

Gwendal: ¿y porqué nunca os mencionó? - con una sonrisa burlona bajé las piernas de encima de la mesa y apagué el cigarro en la gastada madera de la mesa y salí del bar con Sam detrás de mí.

Sam: hey Gwendal para el carro - me cogió del brazo y le miré a los ojos, eran la mirada de un chico sincero y bueno, no sabía si iba poder con ello más y me abracé a Sam, notando como me acariciaba el pelo, la puerta del bar se abrió y salió Dean y miró como Sam me abrazaba - ¿os molesto? - me separé de Sam lo suficiente y mis mejillas se empezaron a sonrojar. 

Sam: ¿Qué te he dicho Ellen? - Dean nos hizo un gesto y volvimos a entrar. 

Ellen: yo no os puedo ayudar pero Ash si - un chico de pelo largo nos miró a los tres y se acercó poco a poco - ¿Qué pasa lindura? - me azotó el culo y se rio por lo que yo también lo hice. 

De repente le pegué un cabezazo que le tiré al suelo - vuelves a tocarme el culo y te corto los huevos - Ash se levantó y pude escuchar como Dean se reía por lo bajo ante la escena. 

Ellen se fue dejándonos solos y Jo nos atendió poniéndonos una jarra de cerveza y Dean dejó la carpeta de Jhon en la mesa - aquí está un año de trabajo de nuestro padre - se lo dio a Ash - haber que consigues - le sonrió. 

Ash: son augurios de malas cosechas, muertes de ganado pero darme 51 horas y lo tendréis - cogió la carpeta de Jhon y se fue dejándome con mis pensamientos, Ash podría conseguir el paradero de mi padre y sobre todo que me descubriesen, en definitiva me había dado cuenta de que los Winchester me habían calado hondo. Dean se dirigió hacia Jo, con pesar sabía que intentaba ligársela y el vaso que tenía en mis manos estalló, todos los integrantes del bar me miraron, Sam se dirigió hacia mi. 

Sam: Gwendal, ¿estás bien? - asentí y con una última mirada en Dean me largué dejando a los hermanos solos en aquel bar. 

No aparecí en toda la noche por aquel lugar, miles de llamadas de Dean y de Sam se encontraban en mi móvil hasta mensajes pero no contestaba ninguno, estaba más entretenida besando al tipo que se encontraba en la cama de aquel motel, no sabía su nombre pero me puse a horcajadas encima de él - vaya parece que te gusta el sexo duro cariño - una sonrisa apareció en mis labios, el mismo tipo me sonrió e iba a besarme pero me levanté e iba a vestirme pero cogí a escondidas uno de mis sais, el tipo se sentó en la cama y mis ojos negros aparecieron - hey vaquero - la cabeza de aquel tipo me miró - Azazel te manda saludos - y le lancé el sais que se clavó en la frente. 

Después de una noche bastante buena de sexo y alcohol aparecí en la puerta del bar de Ellen y me apoyé en el Impala, otra vez estaban aquí los hermanos y saqué un cigarro de mi paquete de tabaco y me lo fumé - ¿Qué haces aquí? - Jo hizo aparición de algún lugar que no tenía ganas de conocer. 

Gwendal: vaya si es la putita de turno - Jo se cruzó de brazos - es verdad todas esos monólogos que tienes con Dean y esas ganas que tienes de echarle a tu cama, son falsas Jo, para él solo eres como su hermanita o más bien tienes tantas ganas de chupársela que ni te das cuenta  - Jo se dirigió hacia mi en forma de ataque y lo esquivé, el puñetazo que le di en el estómago la hizo caer al suelo - te lo advierto Jo, no me toques los ovarios o acabarás muy mal - mi mirada fue hasta la puerta del bar dónde se encontraba Dean y Sam, viendo una faceta en mi que nunca en aquellos casi dos años me habían visto. 

Sam se acercó hacia mi y le cogí de las solapas de su camisa de franela y le besé, Sam no se alejó de mi y me siguió el juego - ahora está todo perfecto - con una sonrisa en los labios entré en el Impala, Ash nos estaba haciendo el trabajo sucio, si mi padre movía un solo dedo sabríamos donde estaba. 

En nuestro camino conocimos aun cazador de vampiros llamado Gordon y a otro de los tantos hijos de sangre de mi padre, ese caso nos había dado interminables dolores de cabeza, ocasionando que Dean casi se pegara un tiro, también ayudamos a Jo en un caso dentro de una casa que acabó por secuestrarla por el tipo de chica que le gustaba al monstruo que debíamos de seguir. Descubrí que Jhon no había sido un ángel del cielo, provocando la muerte del padre de Jo por haber sido el cebo y Jhon no llegó a tiempo. 

Rivergrove, Oregón

Por otra de las predicciones de Sam no había llevado aun caso en Rivergrove en Oregón, nos encontrábamos en el Impala con la música de AC/DC de fondo, el día se encontraba lluvioso y frio. 

Dean: solo hay dos pueblos que se llamen Rivergrove, ¿de verdad que es el de Oregón? - Sam asintió con la cabeza, desde el beso que le había dado estaba raro y distante conmigo - si es allí - me miró por el retrovisor y volvió a dirigir su linterna al mapa. 

Al llegar al pueblo en cuestión estuvimos hablando con los pueblerinos pero no conseguimos ninguna información, yendo por la calle principal Sam encontró la palabra "CROATOAN" en un poste - hey mirar - Dean y yo nos miramos por lo que Sam bufó - ¿Qué pasa que no atendíais en clase de Historia?.

Dean: yo me quedaba dormido en clase - yo asentí con la cabeza por lo que Sam empezó a contar la historia de Croatoan - Roanoke, una de las primera colonias inglesas desapareció de forma extraña a finales del siglo XVI. 

Dean: es verdad, lo recuerdo lo único que quedó fue una palabra tallada en el tronco de un árbol.

Gwendal: pero hubo varias teorías, ¿no? me refiero una epidemia, los indios pero nadie supo lo que pasó, desaparecieron como por arte de magia.

Dean se rio - ¿Crees que eso está pasando aquí?, bueno no se ¿Quién creéis que ha hecho esto o que?.

Sam: bueno como tu me dijiste Dean, todas mis visiones están relacionadas con el demonio de ojos amarillos - no pudimos pedir ayuda ya que las comunicaciones habían muerto y la gente del pueblo se encontraba a las afueras del pueblo, la única manera de poder estar a salvo era ir a la comisaria. 

Gwendal: esto es una locura, no podemos hacer nada - me encontraba con Dean mirando por las ventanas por si alguno de los del pueblo hacía aparición, escuchamos ruidos en una de las tantas salas, una de las enfermeras que estaba estudiando el virus había saltado sobre Sam derramándole su sangre infectada, con su arma en la mano Dean la mató dejándola en el suelo. 

Sam se sentó en la sala de enfermería mientras Dean, la doctora y un hombre sobreviviente al virus discutían por lo que me dirigí hacia Sam y le abracé enterrando mis dedos en sus cabellos - Sam te vamos a ayudar - se separó un poco de mi y me acarició la mejilla derecha.

Hombre: ya está bien de carantoñas tiene el virus debemos de matarle - sacó su beretta y le apuntó pero me puse en medio -  ya está bien de gilipolleces. 

Dean cogió las llaves y se las dio a la doctora - quiero que os vayáis los tres hay suficiente explosivos , coger mi coche, hay armas para enfrentarse a lo que sea.

Sam: Dean no basta ya, coge a Gwendal e iros todos, es vuestra única oportunidad.

Dean: no te librarás tan fácilmente - aquel hombre intentó convencernos pero le dijimos que no, negándonos a nuestra única oportunidad de escapar. 

Con Sam todavía en la camilla Dean cerró la puerta por lo que me senté al lado de Sam - no estás solo Sam - le sonreí entrelazando mi mano con la suya y apoyé mi cabeza en su hombro. 

Dean se quedó de pie delante de nosotros- ojala hubiese una baraja o un futbolín - Sam estalló en lágrimas. 

Sam: no lo hagáis, tenéis que iros de aquí - Dean negó con la cabeza - ni hablar Sammy no lo haremos - dijo el hermano mayor.

Sam: por favor Dean dame el arma y desaparecer los dos ahora.

Dean: por última vez Sam no lo haremos - me miró y afirmé con la cabeza- no nos iremos de tu lado Sam. 

Dean se sentó dejando el arma en la mesa más cercana a él - estoy cansado Sam, estoy cansado de esta tarea, de esta vida, de este peso sobre los hombros.   

Sam: ¿Y vas a darte por vencido? ¿Vas a tirar la toalla y morir?, oye Dean se que lo de papá ... - iba a hablar pero Dean le interrumpió. 

Dean: te equivocas no es por lo de papá, bueno en parte si pero .. - iba a hablar cuando la doctora volvió. 

Doctora: es mejor que vengan a ver - los tres nos dirigimos hacia el laboratorio, la sangre de Sam no tenía restos de azufre, era inmune a la sangre de demonio. Al día siguiente Dean hablaba con Sam apoyados en la carrocería del Impala- no puede ser que hayan desaparecido de repente - Dean dijo alzando la voz. 

Sam: ¿Porqué seré inmune a la sangre de demonio? - querían respuestas y yo podía dárselas pero no podía, mi destino como mercenaria de Azazel era conseguirle a Sam como fuese. 

Dean: este caso me va a quitar el sueño - me senté en el asiento y cerré la puerta, al retirarnos a descansar un momento a las afueras del pueblo en un lago cercano, Dean le dijo la verdad a Sam, que Jhon el día de su muerte le pidió que le matase.

- Fin del capítulo-