Lotte Jansson
*alergia*
Izuku entro al dormitorio del equipo rojo con un paquete de galletas en la mano y una mochila amarilla, mira por todos lados con un toque de preocupación en su mirar, según la castaña de ojos rojos la pecosa de lentes estaría aquí.
Y así fue, la joven de pelo amarillo estaba en su cama usando su esfera de bruja para leer su libro favorito "nighfall", novela qué lleva tantos años como los que lleva viva la misma joven o mas, su nariz se veía un poco roja, así como una caja de pañuelos al lado y una cesta colgante llena de algunos ya usados llenos de moco.
Ella desvía la mirada al ver la puerta habriendoce, al notar la cabellera verdosa se exalta levemente limpiando su cara rápidamente y sentandoce correctamente en su cama, miró desde arriba de la litera al joven.
-¡¿i-izuku?! ¿Que haces aquí? -pregunto la brujita con sorpresa, al sentarse y salir de sus cobijas dejaba notar su pijama, una camisa gris clara de manga corta y un pantalón anaranjado claro con estampado de lunas blancas.
El joven dejo entrecerrada la puerta, no podía cerrarla con el adentro por reglas de la academia de no dejar a dos chicos de sexo opuesto en una habitación a solas, el peliverde se acercó y se subió por las escaleras de la litera.
-p-perdon por llegar sin avisar, espero no estar molestándote -se disculpo apenado, pero sin dejar aquella incomodidad en su corazón- supe que tuviste un resfrío.
-¿h-he? ¿Pero como lo supiste? -pregunto avergonzada por tener que mostrar esta pequeña faceta mocosa y sudorosa de ella, además de no estar peinada o arreglada en lo absoluto.
-akko me contacto por teléfono -se sentó en la punta de la litera para sacar su teléfono y mostrarle la pequeña conversación que tuvo con la castaña.
Lotte tomo el teléfono con el total permiso del chico, leyendo como su imperactiva amiga le decía con mayúscula retenida como ella tenía un resfriado severo y que debería estar ahí para ella.
La joven de lentes dio un suspiro por las exageraciones de parte de su amiga, agradecía su preocupación pero hiba muy lejos.
-akko me dijo que tenias algo grabe, no pude quedarme quieto y tenía que venir a verte, ¡traje un paquete de galletas de tus favoritas! -alzó su mano con el pequete mencionado, pasando a sacarse la mochila- pero también traje sopa de pollo para tu resfrío.
-¿Q-que? I-izuku no tenias porque -sus tiernas mejillas de enrojecieron al notar la bolsa y el recipiente con la comida- n-no es tan grabe...
-¿he? ¿Enserio? -el chico dejo levemente sus preocupaciones al escucharla.
Con vergüenza lotte asintió, le dio el celular y se aspiro un moco qué estaba saliendo de su nariz- n-no tengo nada preocupante, solo es un resfrío de hada.
-¿n-no? e-esto... yo no soy muy conocedor de la magia, puedes explicarme ¿porfavor? -ladeo su cabeza avergonzado de no entender a que se refería ella.
Alzo su mano hasta su frente y dio un suspiro- por accidente akko dejo caer una bolsa de polvo de hada cerca mio, es como polvo pica pica o un alcohol muy fuerte en grandes cantidades -ejemplificó alzando una mano y contando con los dedos los ejemplos- generalmente suele ser muy alérgico pero se cura con un poco de descanso.
- ¿enserio? -sus ojos se abrieron con sorpresa al tiempo que sus nervios bajaban aun mas, pero si ese era el caso- e-entonces ¿Porque akko se asustó tanto?
-akko solo exagero las cosas porque no hay echizos para acelerar la curación -apenada por la preocupación del muchacho se rasco la mejilla, y usando un pañuelo se tapó la nariz- (qué vergüenza, ¡siento que me veo como un troll con las pintas qué traigo!)
El chico respiro ondo y soltó aire, se tomó del pecho con una sonrisa aliviada- oh por all might, entonces no es nada malo... -el chico abrió los ojos, notando la actitud de la chica de lentes.
Al mirarla más detalladamente, podía notar su Apariencia, al lado de ella aquella esfera con la que las brujas se comunican.
-¿estabas leyendo? -pregunto, realmente no tenía que ser un genio paea notarlo, pero no quería incomodar a la chica más de lo que ya parecía.
-e-es el nuevo tomo de nighfall qué salió hace un día -con más confianza tomo con su mano la esfera- no puedo ir a clases así que vi la oportunidad para leerlo.
-oh, eso explica porque akko quería tomar tu lugar -mencionó el pecoso con una risilla, lotte entrecierro los ojos negando con la cabeza- bueno, realmente llegar aquí es un camino largo, ¿me puedo quedar?
-he... N-no lo sé -sorbio su nariz nuevamente mirando a otro lado con pena- n-no estoy en condiciones para que me veas... -baja la mirada pésima, ocultandoce entre más sábanas y su esfera.
-l-lotte no me importa como te veas -se acercó con cuidado de no aplastar las piernas de la chica ocultas entre sábanas, tomando la esfera de cristal de la cara de lotte.
Con un toque suave dejo la esfera a un lado, tomo un pañuelo y limpio la nariz de la jovencita de lentes. La acción dejaba sin habla a la pelinaranja, sus ojos mostrando un brillo particular.
-ya esta -voto el pañuelo usado en el canasto, acomodandoce al lado de la más pequeña, en sus manos el bote de sopa y una cuchara- porfavor resiveme la comida, mi madre me ayudo a prepararla para ti.
-¿t-tu la hiciste? ¿P-para mi? -volteo a ver al peliverde con una sorpresa sin igual, sus manos en su pecho enfatizando sus palabras.
Asintió, con una sonrisa, le ofreció una cucharada- ¿porfavor? -sus cejas bajaron en una leve súplica la cual la brujita no pudo decirle que no.
Lotte abrió la boca, resiviendo la comida con gusto, saboreo y sintió un sabor espectacular, podía sentir el sentimiento detrás de su preparación, como bruja que se destacaba por encontrar los sentimientos de los espíritus.
Su paladar fue degustando, ciendo alimentada con el puro cariño y preocupación de aquel peliverde qué sin dudar llego hasta aquí para hacer lo que estaba en sus manos.
Como un capítulo de su novela favorita y como el lobo habia caído enfermo por una bruja, la doncella sin querer que su amado pereciera trae desde lo más lejano la cura.
Y cuando se dio cuenta, había resivido la última cucharada, el cuenco vacío y el peliverde limpiando su boca con un pañuelo más, cuando volvió a la realidad, la pena y la vergüenza se apodera de ella, sintiendoce la doncella qué en esta versión del cuento el lobo la esta cuidando.
-estuvo deliciosa izuku -miró con encantó al chico, feliz de ser cuidada tan bien por su apuesto joven héroe de asia- realmente agradezco tu comida.
Sonriente y satisfecho, el peliverde asiente con calma de ver a su joven bruja finlandesa estar más feliz en su presencia, dejando de lado aquella pequeña inseguridad de no verse aceptable para el.
Sus ojos se desvían a la esfera de la pecosa, la toma en sus manos- cierto, estabas leyendo -le ofreció la esfera a la Chica, quien la tomó asintiendo- ¡e-espero no haber arruinado un momento importante!
-¡n-no! Nada de eso izuku -negó haciendo un desdén con la mano, queriendo que el pecoso no se sientiera mal- s-solo estaba terminando un capítulo, no había pasado nada muy revelador.
-qué alivio... Por cierto, ¿qué capitulo es? -denoto curiocidad en su mirar, observando intrigado la esfera.
-oh, el capitulo 34 del tomo 78, hay 50 capítulos -sonríente le aclaro al héroe en práctica, sintiendo felicidad por el Interés de izuku.
-mmm ¿puedo leer contigo? -pregunto, la curiocidad le estaba llamando.
-¿he? I-izuku, necesitas estar al día para entender todo -aclara, sintiendo algo de pena al sentir que eso sonó demaciado friki, miró la esfera, sentía que esta podría ser una gran oportunidad- pero... Si tu quieres... P-puedo resumirte la historia.
-de echo... -el joven peliverde saco su teléfono nuevamente, entrando a un documento, viendoce el capitulo 12 del tomo 22- aun me falta mucho por leer, pero s-
Como un torbellino, las narices de los pecosos se pegaron cuando la joven brujita salto a él como un gran brillo en sus ojos- ¿¡haz estado leyendo!? Oh por el trizquelion, ¡dejame leer contigo por donde vas!
-p-pero tu estas muy adelante, ¡no es necesario! -sorprendido, el pecoso no quería molestarla en tener que leer tanto nuevamente, pero la pelinaranja infló las mejillas.
-¡izuku no me subestimes! ¡He leído esta historia 3 veces seguidas! -con orgullo mando una mano a su pecho y una mirada de victoria- ¡leerla una cuarta vez no es nada para mi!
-(¡¿3 VECES!? e-ella realmente esta obsesionada con esta obra... A-aunque no soy quien para criticarle) -sudo un poco notando el entusiasmo de la brujita, aun así, verla con tanta emoción... No podía decirle que no.
Se acercó un poco a ella, dandole un rápido beso en los labios, la cual callo al instante a la chica en un shock, aprovechando, izuku se la llevo entre sus brazos para estar más cómodos.
-bien, ¿quieres iniciar? -pregunto con una sonrisa, viendo la cara hiviente de la pelinaranja, pero al preguntar, no dudo y con una sonrisa tomo el teléfono del héroe.
Ambos, acompañados de galletas, se acomodaron en la cama, arrunchados en los brazos del otro mientras la bruja finlandesa contaba y leía con una voz animada la historia de más de 3 generaciones, mientras el pecoso prestaba atención a la historia tratando de no perderse en el los ojos brillantes de la bruja más pura qué conoce.
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