𝗖𝘂𝗮𝘁𝗿𝗼
﹙¿Sabes Jiminie?... Verte dormir es una de mis cosas favoritas, tus labios entreabiertos y el cabello alborotado... ¡Eres un angelito! Y luego está el ogro del profesor que viene a despertarte ¡Eso no me gusta! Yo quiero verte dormir por mucho más tiempo ¿Llegará el día en que duermas así de tranquilo junto a mi? Yo espero que si.
Te quiere mucho , S.﹚
Jimin repitió el procedimiento de las últimas mañanas: doblar la nota como estaba y meterla en el sobre con las demás, tomar el libro que necesitaría para la primera clase y, tras cerrar el casillero, caminar hasta el lugar donde su mejor amigo le esperaba.
—Pareces un tomate—dijo, agarrando con sus manos las mejillas de Park como si fueran de plastilina—, ¿te sientes bien, hyung?
El peli-rosa lo apartó de un manotazo, comenzando a caminar, evitando que Jeon siguiera mirando su rostro sonrojado.
—¡Por supuesto, me siento de maravilla!
©ʏᴏᴏɴɴɪᴇxᴊɪᴍɪɴɪᴇ5
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