Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 9

-Entonces ¿Ahora qué? ¿Hacemos algo como juego de miedo y abrimos sus ojos a la fuerza mientras la atamos a una silla para que mire algo perturbador? -preguntó Chaeyoung entrando detrás de todas las chicas a la casa de Nayeon.

-No, no haremos eso. -Sana la miró como si la que estaba detrás suyo estuviera loca. - Y además, ¿Me puedes responder porque nos seguiste hasta aquí?

-Relájate un poco monito con maquillaje. -con aquello logró extraer un gran gruñido de la boca de la mayor- Ya me involucré lo suficiente en esto como para que ahora este exenta de estas reuniones.

-Es cierto, y de todas formas, yo le dije que viniera. -defendió Mina.

Chaeyoung tan sólo cruzó sus brazos mirando con victoria a Sana. Esta última se preguntaba por cuanto tiempo más la soportaría antes de matarla.

-Como sea, ¿Podemos continuar?- todas asintieron a la pregunta de Momo- Yo tengo una idea para comenzar, Nay, saca un libro de tu mochila.

-¿Y eso en que ayudará?- la castaña expuso su duda.

-Sólo hazlo.

La menor de las dos levanto los hombros aceptando la extrañeza de la situación y sacó el bolso de sus hombros.
No sabía porque un libro resolvería esto pero nunca se sabría con que locas ideas saldría Momo.

-¡Mierda! Dejó otra nota aquí dentro. -respiró ondo buscando paz en su interior.

Más allá del hecho de la nota todas miraron a la castaña con los ojos muy abiertos.

-Acaso tu ¿Acabas de insultar? -preguntó Sana- ¿Es así como se siente una madre orgullosa?

-Oh, es cierto. -cubrió su boca con una mano. -Supongo que escuche esa palabra demasiadas veces ayer.

-¿Deberíamos preocuparnos? -preguntó Chaeyoung.

-Para nada Chae, insultar es parte de crecer. - Sana abrazó a su amiga pasando su brazo por detrás de los hombros de esta.- Vamos, dime todo lo que aprendiste.

-Para nada. - la mayor de las Japonesas salió al rescate de su amiga.- Utiliza tu boca para otras cosas en las que seguramente tienes experiencia en vez de incentivarla en ir por el mal camino.

-Para tu información mi boca es completamente virgen.

-Si claro, quién sabe cuántas cosas debes saber hacer con ella.

La menor se acercó con furia, se acercó a tal punto que sus cuerpos chocaban y sus miradas contenían irá pura.

-¿Entonces quieres averiguar que cosas puede hacer está boca?

La tensión lleno el ambiente en tan sólo un segundo de silencio.

Las demás estaban observando la escena como si se tratase de una novela que miras con tu tía a las cinco de la tarde.

-Aléjate. - la primera que cayó en cuenta de la situación en la que se encontraban fue Momo.

Estaba nerviosa pero no pensaba demostrarlo. Su tono de voz tranquilo y gélido la separó en un segundo.

Ahora todas se sentían incómodas luego de aquella separación pero debían regresar a la realidad.

Momo carraspeó su garganta. -Bien, lee la nota. -prefirió no levantar su cabeza para mirar a sus amigas mientras se dirigía a Nayeon.

Comenzó a leer no sin antes tomar una gran bocanada de aire.

Querida Nayeon:

"Quisiera ser mariachi para tocarte la cucaracha"

Y.J.T.M.R

El mensaje era un poco diferente a lo que la tal Y.J siempre le escribía, empezando porque la letra se veía un poco diferente y tampoco decía algo bajo la frase.

Más allá de eso, Nayeon quedó estática luego de haberlo leído, sentía vergüenza, tal vez no tanta pero no sentía la necesidad de salir corriendo luego de eso. De hecho su única necesidad era arrugar el papel y tirarlo a la basura, era mejor eso que tener la maldita frase girando en su cabeza.

-Nay...- Mina fue la primera que habló.

La nombrada levantó su rostro sin ninguna expresión.

-¿Estas bien? -preguntó Chaeyoung.

Un asentimiento fue suficiente como para que todas se acercarán a ella curiosas.

-¿En serio no saldrás corriendo? ¿Ni siquiera taparas tu rostro?- preguntó Momo.

-Esperen, comencemos desde el principio. -las detuvo Mina. - ¿Cómo te sientes?

-Avergonzada pero...Más que huir quiero quemar la nota.

-Bien, ahora si que llorare del orgullo. -pronunció Sana limpiando una lágrima falsa de su ojo.

-¿Cómo está mi cara?

-Ahora tienes el sonrojo de una persona normal- respondio Mina- Estás un poquito rosa pero eso si que es un avance.

-Chaeyoung, nuestro plan definitivamente funcionó. - Momo y la nombrada chocaron los cinco bajo la atenta mirada de las otras. -Ah si, le dije a Chaeyoung que escribiera una nota que pareciera Y.Jpara así poder ver tu evolución ahora- explicó

-¿Qué trucazo no? -agrego la maknae de las cinco. La expresión más notable fue la de Sana ya que su cara de desagrado fue bastante obvia por una razón.- Tranquila niña, no tienen que pagarme por está nota, la casa invita el helado.

-Estuvo bien para empezar pero yo digo que sigamos haciendo pruebas. -propuso Mina.

Ninguna estuvo en desacuerdo así que casi toda la tarde se la pasaron en la casa de la japonesa.

Al final habían obtenido buenos resultados. Nayeon podía controlar sus impulsos de salir corriendo en casos de vergüenza extrema, aquello por si acaso, pero habían logrado bastante y al caer el sol todas decidieron tomar su camino.

-Yo tomare el autobús, adiós. -Chaeyoung sonrió caminando en dirección contraria a las otras tres.

Nayeon y Momo iban para la misma dirección ya que sus casas estaban a pocas manzanas de distancia entre ellas.

-Yo iré con ustedes. -se les unió Sana.

Su casa quedaba un poco más lejos pero por el mismo camino así que decidió tener compañía.

El camino fue relativamente pacífico. Charlaban animadamente y cada tanto había pequeñas discusiones entre las dos chicas que parecían odiarse pero nada que saliera fuera de lo común.

-Aquí está mi casa. -anuncio Nayeon sacando sus llaves a medida que se acercaban a la puerta.

-Nay, ¿Puedo quedarme está noche?. -preguntó Momo comenzando a tensarse sabiendo que si Nayeon se iba quedaría sola con Sana.

-Lo siento Momo , vinieron unos familiares de Daegu y no hay espacio.

Mentiras y Momo lo sabía, no había nadie en esa casa además de los padres de Nayeon.
Ella sólo quería dejarla sola con su...Ni siquiera sabía lo que era Sana de ella.

-Esta Bien, adiós.

-Adiós.

En cuanto la puerta se cerró, el cuerpo de Nayeon quedó más duro que milanesa de hormigón.

-Si quieres puedes dejarme. -recomendó la mayor.

Sana negó con su cabeza. -Es más seguro si te acompaño, además, queda por el mismo camino...a menos que no soportes mi presencia.

-Tienes razón, es mas seguro. -Asintió y bajó su mirada a sus pies ignorando el otro comentario.- Aunque si hay una invasión zombie no creo que quieras confiar en mi como tu compañera.

-No habrá una invasión zombie, y si lo hay y me empujas hacia ellos para salvarte, entonces tu tampoco saldrás viva porque no dejaré de perseguirte, en fin, sé más directa o utiliza una situación más realista para decirme que me vaya, ¿Es eso?

-Haz como quieras, condón roto.

El camino luego de esa pequeña conversación se volvió silencioso y tenso, no hablaban y los nervios estaban asentados en el estomago de Momo.

-Momo, ¿Por qué me odias?

La mayor elevó su cabeza extrañada por la repentina pregunta-¿Qué? No te odio ¿Porqué crees que lo hago?

-¿Qué no es obvio? Me tratas como si fuera tu peor enemiga. Siempre creí que estabas molesta conmigo por meterme en tu amistad con Nayeon.
Antes lo que tenías que compartir con una luego debiste compartirlo con dos, luego con tres cuando llego Mina pero supongo que ya estabas acostumbra...No lo sé, ¿puedes decirme?

La mayor tragó con dificultad.- Es algo complicado...Tú nunca me has hecho nada sólo...Aish, me provocas ganas de golpearte, eso es todo.

¿Bonita declaración no?

-Es bastante evidente que te molesta como soy, sino no estarías recordándome constantemente lo que no te gusta de mi.-rió de una manera seca y amarga- Es muy raro, al principio pensé que en algún momento dejarías de ser así conmigo pero nunca cambiaste, hace mucho tiempo que deje de preocuparme por tu trato y comencé a defenderme porque eres irritante, me exasperas y más de una vez he pensado en golpearte...pero a pesar de todo no puedo.

-Eres idiota hasta para eso, lo recuerdo y, no puedo entender como pierdes tu dignidad y tiempo intentando llevarte bien con alguien que no te soporta, ni siquiera entiendo porque me dices esto.

-Sé que me equivoqué contigo, te detesto, pero por algún motivo nadie elige estas cosas, mientras peor me tratabas más intentaba que fuéramos amigas ¿Sabes por qué?

-¿Porqué como eres la hija no deseada ahora tienes problemas psicológicos?

-No -contestó cansada del ataque de la mayor- Porque...Porque...Porque aún así como eres me gustas.

El corazón de la mayor dio un golpe seco en su pecho y sintió como un temblor recorría todo su cuerpo.

No sabía muy bien que hacer pero no quería lucir como idiota en ese momento.

-Buena broma pero no es graci...-no terminó de invalidar la declaración cuando la menor la empujó con fuerza desde los hombros.

Momo detuvo su caída contra una pared pero de la misma forma que por un momento estuvo a salvo, volvía a correr el mismo peligro, o más que antes, cuando Sana la acorraló poniendo sus brazos lado a lado.

-¡No es una maldita broma, Momo!

Ambas miradas conectadas que destilaban tensión, algo a lo que ya estaban acostumbradas a sentir las dos entre ellas sólo que ahora también se sumaba la frustración de Sana.

La menor cerró sus ojos un segundo buscando relajarse y en un solo movimiento dejo a la contraria libre.

Momo parecía no terminar de procesar la situación, aunque quisiera ponerse a la defensiva como siempre por primera vez no lograba hacerlo, no podía decir nada.

Regresaron a su anterior actividad y los pasos llenaron el silencio que se había creado entre las dos.
Momo no tenía ni siquiera una idea de cómo debía reaccionar.
¿También debía reconocerle a la menor que tenía sentimientos por ella?

Es decir, podría hacerlo, pero nunca reconocería que el origen de su odio era porque realmente quería llamar la atención de ella. Tampoco hablaría de que las peleas que tenía con Chaeyoung la ponían extremadamente celosa porque sólo ella podía ocupar ese lugar en la vida de Sana.

Y mucho menos admitiría que cuando ella no estaba le decía Shiba, aunque tal vez las traicioneras de sus amigas le hayan dicho.

El camino continuó hasta que ambas se detuvieron frente la casa de la menor.

-Supongo que aquí te dejo.-sonrió la menor con dolor. Realmente esperaba una respuesta, mala o buena, no le importaba- Nos vemos maña...

La frase fue interrumpida por los labios de Momo sobre los de ella.

Había jalado del cuello de su chaqueta para luego enredar con suavidad sus dedos detrás del cuello de la menor.
La menor atónita pero no lenta correspondió al beso.

Fue lento, pequeño y corto pero lo suficiente para que Momo dijera lo que no podía con sus palabras.

Luego de aquello tan sólo se separó dejando a la contraria con cara de idiota.

-Adiós -dijo dirigiéndose por primera vez hacia ella con un tono dulce y corrió a esconderse dentro de su casa.

Ese día todos al parecer habían salido ganando, en especial Sana...

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro