Allí estaba Nayeon, sentada en el escritorio de madera que había en su habitación mirando fijamente su computadora.

Al principio, lo que estaba a punto de hacer, le parecía buena idea pero ahora tenía muchas dudas.

Ella tan solo había pensado:
Si no puedo deshacerme de ella entonces deberé combatirla.

Aunque claro, ya no sería el combate relacionado con las notas, otro tipo de lucha era la que estaba por desatarse.

Para ello debería dejar de ser tan débil y sonrojarse por todo, debía curarse como si de una enfermedad se tratara.

Debía volverse inmune.

Y así es como había terminado frente a su computadora con la duda de si debería darle play al video porno frente a ella.

El tiempo parecía estar estático y el ambiente silencioso, ni siquiera habían ruidos del exterior que interrumpieran el momento dejando que sus ideas retumben dentro de su cabeza.

Mordía su labio una y otra vez en señal de nerviosismo, hasta estaba desarrollando una nueva acción común que se produce gracias a la ansiedad o nervios, ella estaba comenzando a mover su pierna de arriba a bajo frenéticamente.

Inhalo profundamente tomando valentía y sin pensarlo otra vez dio click.

-¡AHHHH, DETENTE, DETENTE! -gritó en cuanto el video comenzó.

Cerro su laptop y arrancó sus auriculares de sus oídos.
Inconscientemente había tapado su rostro con sus manos y podía sentir el calor alojándose en sus mejillas.

Por el único motivo que se alegraba es que su madre no estuvieran en la casa en ese momento. Con su grito hubiera venido de inmediato a indagar en su habitación y no tenia forma de explicar su sonrojo.

Negó una, dos, tres veces y se puso de pie para caminar hasta el baño.
Necesitaba mojar su cara con agua fría y exactamente hizo aquello.

Al levantar su rostro pudo apreciar claramente su reflejo y como sus mejillas estaban aún con un suave rojo.

Estaba comenzando a detestar aquella imagen de ella. Indefensa y afectada.

Eso no debería ser así.

En un arranque de valentía y decisión, salió a paso firme y entro a la cocina.

Haría un segundo intento, o los que fueran necesarios con tal de obtener lo que ella deseaba.

Abrió el congelador y saco unos cuentos hielos.
Al regresar a su habitación tomó dos toallas y los repartió para hacer dos bolsas.

Cuando terminó volvió a sentarse en su silla y abrió su laptop, colocó sus auriculares y tal vez rezó un padre nuestro antes de volver a reproducir el video no sin antes colocar esos hielos en su cara.

Realmente estaba decidida a encontrar la formar de que su cara no se tiñera de un color cada vez que llegara una nota, y si para lograr esto iba a necesitar entumecer sus mejillas de tanto frío a pesar de estar en invierno, entonces así sería.

Así que esa sería una larga tarde en la que se llevaría algún que otro trauma pero estaba preparada para soportar las horas que aún le quedaban.

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-¡Nayeon ! -Mina gritó frente la cara de la castaña pero nada parecía sacarla del tercer trance que había tenido por tercera vez desde que llegó a la escuela.

Y tan solo habían pasado 15 minutos de su llegada…

Comenzaban a parecerse a ori de mierda gritándole a las velas pero con la diferencia de que le gritaban a Nayeon.

-Esperen tengo una idea. -intervino Momo entre los gritos de sus amigas. - ¡Allí viene Jeongyeon!

Señaló las espaldas de la más bajita quien comenzó a parpadear.

-¿Q-qué? ¿D-dónde está? -comenzó a desesperarse moviendo su cabeza buscando con la mirada a Jeongyeon.

Las demás rieron y Momo levantó su mano chocándola con la de sus amigas en victoria. Inclusive, en una distracción chocó su mano con la de Sana y al darse cuenta solo bajó su mirada regresando a su expresión seria que siempre le ofrecía esta.

-¡Hasta que reaccionas niña! -Mina llevó sus brazos al cielo. -¿En dónde estabas? Es la tercera vez que te quedas con esa cara.

-Parece que tienes un trauma o algo así. -Sana tomó el rostro de Nayeon moviéndolo mientras asentía. -Si, muy traumada.

-¿Puedes explicarnos que es lo que te dejó esa cara? -preguntó Momo.

La mente de Nayeon quedó en un completo blanco.

Tal vez si tenia un trauma…

-Y-yo, ehm, yo…yo…yo…yo vendo churros.

Todas se miraron entre sí confundidas y luego regresaron su vista a Nayeon, volvieron a mirarse y regresaron a la otra.

-Creo que ya lo tengo. -dijo Sana antes de levantar su mano y golpear la mejilla de Nayeon.

-Yo vi porno -pronunció sin expresión como si el golpe hubiese sacado la información a la fuerza.

Todas repitieron el proceso de mirarse entre sí y luego a ella unos segundos más.

-Creo que es más probable lo de los churros. -de hecho a todas les parecía más probable.

-Le daré otro golpe. – la japonesa volvió a levantar su mano.

-¡Espera! -la vocecita de la castaña detuvo la mano. -D-digo la verdad…ehm, yo recibí otra nota en casa y pensé que si lograba acostumbrarme a ese tipo de cosas las notas ya no me afectarían.

-Pero Nay. – Momo pasó un brazo por los hombros de su amiga. -Si lo que querías era perder la inocencia hubieras pasado una hora con Sana.

-¿Eso es un insulto? -pregunto la susodicha.

-Estoy buscando otras formas de llamarte simio en celo.

-Suerte que aún no llegó Chaeyoung, esa perra junto a ti me sacan de quicio.

-Tu eres más desquiciante.

-Me alegra que me lo diga una persona inestable que tiene poco control de su ira.

-Y a mi me alegra estar hablando con el accidente del condón roto.

Mina carraspeó su garganta en medio de las miradas de odio-En fin, la pregunta del millón es…¿Aún te sonrojas?

-No lo se.

-En realidad, teniendo en cuenta los antecedentes…inocentes, de Nayeon, ¿Qué pasó exactamente mientras veías los vídeos? ¿Qué sentiste? -preguntó Sana.

Alguna hubiera intervenido antes de la respuesta porque podría resultar algo personal pero teniendo en cuenta la personalidad de la bajita todas sintieron una pizca de curiosidad que las mantuvo atentas.

-¿Además de miedo? Nada -respondió despreocupada.

Todas fruncieron el ceño.
La respuesta era genuina, ¿Cómo lo sabían? Porque Nayeon no sabía mentir.

-Oigan, en serio, ¿Ella no es asexual? – Sana la señaló mientras miraba a sus amigas con la misma extrañeza.

-Si fuese asexual no condice que tal vez le guste Jeongyeon. -comentó Myoui.

La Japonesa mayor negó.- En realidad lo que sería anormal es que tuviera atracción física, pero hasta donde yo sé si puede tener una clase de atracción sentimental, aunque…Hay casos y casos, ni siquiera sabemos si ella es asexual o simplemente nunca llegó a la adolescencia, quién sabe, ella tiene cinc…

-¡Que no tengo cinco años! – la exaltada respuesta de Nayeon capturó a las demás. -¡¿P-por qué están discutiendo esto?!

-Porqu…

-No me importa -detuvo la respuesta de Sana con su mano- Sólo dejen de hablarlo como si yo no estuviera aquí.

Todas se miraron en silencio y asintieron.

-En fin, volviendo al tema principal, tendremos que averiguar si aún te sonrojas. -continuo la mayor.

-¡Oh oh! ¿Vamos a la biblioteca a ver porno? -la única emocionada allí era Sana.

-Claro que no simio en celo- respondió Momo-esta tarde en casa de Mina, ya que sus padres no estarán, veremos que sucede.

-Me parece una perfecta organización. -marco Mina.

-Si nos organizamos todos cojem…ehm digo, si, perfecta organización. -quién mas sino Sana diría eso.

-Perfecto…