POV ELSA

Cielo totalmente gris, las casas de madera relucen el frio por la madera petrificada... un viejo pueblo sin luz ni calor. No tengo idea de donde estoy.

Agarro mi capa negra y camino hacia la que parece la plaza... una fuente con hielo que refleja el gris del cielo, algo pasa pero solo siento miedo.

Nadie sale, nadie camina... solo un viento helado que mueve mi cabello suelto levemente.

-¿Hay alguien?- Digo en espera de una respuesta, nada solo silencio. El silencio es atroz y atemorizante, el suelo negro como las ramas termina donde la neblina impide la vista, miro a todas partes en busca de una señal de vida.

La vieja campana desde lo alto de una iglesia suena, uno... dos...tres... doce campanadas. Y en la última a lo lejos en la neblina una sombra alta y delgada. Ojos brillantes que provocan una sensación desagradable en mí.

-¡Hola!- Trato de gritar pero mi voz suena ronca y apagada-¿Po... podría decirme que hago aquí?-Tonta pregunta pero necesito saber.

Pasan unos segundos silenciosos y el viento a mí alrededor se intensifica, la extraña figura alarga lo que parece un brazo y señala a la iglesia. Miro la estructura algo insegura, cuando volteo de nuevo hacia la figura ya no está.

Retrocedo con pasos torpes... miedo, inquietud y soledad; una fría y tétrica soledad en mi interior. A lo lejos se escuchan aullidos... parece que lobos se acercan así que contra todos mis instintos me acerco a la entrada de la iglesia. Una fuerte ráfaga de viento me quita la capa descubriendo mi rasgado vestido... tela que debió ser esplendorosamente blanca alguna vez; caigo en cuenta... es un vestido de novia.

Las puertas se abren y dentro todo se ve destruido, lo que debieron ser los bancos están empotrados bruscamente contra los cristales a medio romper. Las imágenes rasgadas y mordidas por animales. Y al fondo el altar donde una copa espera.

Entro y siento la presencia de sombras a mi alrededor, intento salir pero la puerta se cierra... espero el ataque pero... no ocurre nada; entiendo que no van a hacerme daño, son sombras de lo que alguna vez fue, personas que existieron y ahora caminan sin rostro como una mancha negra en el aire.

Las distingo bien mientras caminan alrededor del altar: una pareja cerca los bancos, la mujer mirando hacia afuera por la ventana; otra pareja sentada en uno de los bancos sobrevivientes al otro extremo de la iglesia, abrazados y la mujer apoyando su cabeza en el hombro del hombre; una sombra varonil que talla lo que parece un pedazo de madera; una mujer sentada en el suelo con algo entre manos, como un libro y finalmente una mujer que parece secarse lágrimas, esta parada junto al altar. Doy un paso y todas las sombras me miran, ¿me harán daño?

A mi lado otra sombra que no había visto, la que pudo ser de un hombre alto y gallardo me tiende el brazo invitándome a que lo tome para llevarme altar. Con mucho nerviosismo decido hacerlo, no quiero hacer nada que me ponga en peligro, solo quiero salir de aquí.

Cuando tomo su brazo se siente como el de una persona, fría... sin vida, a pesar que no parece tener consistencia al verse como una mancha en el aire. Llego al altar donde veo claramente que la copa está llena de vino, esperan que lo tome... lo sé...

Mi mente me lleva a pensar en Jack ¿Dónde está? ¿Por qué estoy sola aquí? Tengo miedo. Me niego a beber esto. Tomo la copa y la tiro al suelo, corro lo más rápido que puedo, abro como puedo el portón de la iglesia y corro hacia el camino... el viento es fuerte y la neblina no deja que vea nada... siento como la lluvia empieza a caer y el cielo se oscurece aún más.

Corro sin dirección alguna, perdida... desorientada, me duele mis piernas y las ramas atrapan el rasgado vestido causándome varias caídas.

-¡Jack! ¡Ayuda!-Sé que tengo que encontrarlo... está ahí, lo sé.

-¡Por favor! ¡Jack! ¡Quien sea!- Grito pero nadie me escucha.

En mi desesperación llego a lo que parece un cementerio, veo lapidas con distintos nombres... son las tumbas de quienes vi en la iglesia.

Llegó a una gran roca y me sujeto para hallar equilibrio, pero hay algo... la inscripción... es la tumba de mi madre y a su lado la de mi padre... abro mis ojos y lucho por mantener el equilibrio entre el viento. Salgo corriendo... debo encontrar ayuda.

Y vuelvo a caer, pero al levantar la vista, la sombra de brillantes ojos me mira atrás de una lápida frente a mí, una perversa sonrisa me provoca los recuerdos más desagradables, debo concentrarme, está jugando con mi mente.

Pero... observo la lápida frente a mí, no... no es posible.

Siento las lágrimas moverse por el viento, reprimo un gemido de angustia con mi mano; y un dolor profundo me invade el pecho, en la lápida está el nombre "Jack Frost"

-Esto no puede ser real...-Mis lamentos alegran a la horrible figura de ojos brillantes.

±±±±±

-¡No!- Me despierto de un salto con la respiración agitada... miro a mi alrededor y me doy cuenta que estoy en el salón del palacio, el sol entra suavemente por la ventana y la nieve acumulada sobresale de las rendijas.

-Elsa ¿Qué sucede?- Dice Merida que entra corriendo por la puerta.

-Solo... solo...-No puedo pronunciar bien, necesito calmarme. Dios, eso fue tan real...-Solo fue una pesadilla-

-¿Una pesadilla?- Merida se sienta a mi lado - Te ves terrible... estas muy pálida-

-E... es... estaré bien, solo dame un momento- Digo con las manos en la cabeza.

-No se Elsa... creo que debería llamar al doctor- Merida me mira preocupada.

-No hace falta... solo debo hablar con Jack- Un momento...-¿Don... dónde está?- Díganme donde esta ¡ahora!

-Salió en la mañana, no quiso despertarte, dijo que volvería mañana-Merida toma los platos de la mesa, ya recuerdo... anoche cenamos por noche buena.

-Está bien, necesito cambiarme... bajare a la cocina por comida más tarde- Respira Elsa, tranquila.

-Ok, por cierto Anna, Mavis y yo saldremos al pueblo, Punzie estará en su habitación- Dice aun con su mirada de preocupación, está por salir cuando dice -¿Segura que no quieres que llame al doctor?-

-Totalmente segura Merida- Digo sonando más segura de lo que estoy.
Merida sonríe y agrega: -Por cierto Elsa, feliz navidad... Jack te dejo esta nota en la mesa- Y cierra la puerta detrás de sí.

Oh... mi día mejoro.

Voy hasta la mesa y tomo la nota; me dirijo a mi habitación para abrirla a solas. Una vez ahí recuerdo mejor la noche anterior: Estuvimos cenando y le di a Anna su regalo... le gusto y Olaf se terminó los dulces, Mavis abrió el regalo de su padre y Merida estuvo soñando un buen rato, sospecho que mi amigo de ojos verdes tiene algo que ver. Tome un vaso de vino y me dio mucho sueño, Jack y yo nos sentamos en el sofá frente a la chimenea y me quede dormida en sus brazos. Sin saberlo estoy sonriendo como idiota.

Debería hacer eso más seguido, aunque esa horrible pesadilla me despertó después, fue muy extraño... tengo que contárselo a Jack, no debería estar soñando esto...

Me siento en la cama y con la nota en manos doy un suspiro y la leo: "Disculpa por haberme ido así, desearía quedarme contigo pero surgió algo importante, quédate tranquila... mi reina"

Aawwwwwwwwww...

Después de cambiarme la ropa y arreglar mi pelo salgo a la cocina, encuentro a Rapunzel de espaldas a mí preparando lo que parecen galletas. Siente mi presencia y se da la vuelta.

-Elsa... que bueno que viniste, ya me estaba preocupando- Dice batiendo masa en un gran tazón.

-Bueno tengo hambre... además que quería ver si podrías ayudarme con algo- Digo mientras busco un taburete para sentarme.

-Claro- Responde.

-He tenido un sueño raro, y ha sido una pesadilla...- Digo con algo de nerviosismo al recordar la aterradora escena.

-Mmm... ¿Y más o menos de que trataba?- Ha cambiado a un tono serio y preocupado. Le cuento todo exceptuando uno que otro detalle pero siendo bastante especifica hasta que llego a la parte final.

-¿De quién era el nombre en la lápida Elsa?-Pregunta Punzie muy intrigada como temiendo lo peor, muy metida en mi historia sin duda.

Doy un suspiro, me cuesta decirlo en voz alta- Era de Jack...-Digo un una opresión en mi pecho, Punzie solo abre los ojos incrédula.

-¿En... enserio?- Pregunta.

-Si muy enserio- Respondo.

-MMmm... bueno, es solo un sueño... eso no podría ocurrir- Dice Punzie.

-Lo sé, pero me inquieta... hace un tiempo tenia pesadillas casi todas las noches hasta que descubrí que...-

-¿Pitch?- Interrumpe Punzie.

-Si...-¿Acaso lo sabe?- ¿Cómo lo sabes?- Pregunto.

-Jack me conto algo de eso hace unos años, no fue especifico pero me dijo que si tenía pesadillas recurrentes le avisara- Dice Punzie mientras acomodaba la masa en la mesa para sacar figuras.

-Yo le oculte eso por mucho tiempo... al final esas pesadillas terminaron por tirarme de borda- Digo mientras me apoyo en la barra con un brazo, ese recuerdo es amargo.

-¿Tirarte de borda? Bueno creo que eso es otra historia que algún día me contaras... ahora lo que me intriga es esa sombra de ojos brillantes que viste- Dijo Punzie mientras metía las galletas al horno, su voz era seria pero no caía en lo paranoico.

-¿Crees que me esté persiguiendo de nuevo?- Ojala que no.

-No sabría decirte, lo que sí sé es que debes decírselo a Jack- Punzie se sienta sobre la barra y me señala con un guante para el horno.

-Lo hare en cuanto vuelva...- Digo un poco más relajada, inconscientemente llevo mi mano al anillo dorado en mi mano, el recuerdo de mi cumpleaños número 17 es tan dulce que me encarámela la cabeza; que haría yo sin ese recuerdo. Antes de que me cuenta Punzie me mira y sonríe... creo que sabe en qué estoy pensando.

-Sabes Elsa, te tengo envidia- Dice con una sonrisa.

-¿Eh? ¿Por qué?- Enserio... ¿Por qué?

-Tú y Jack se quieren tanto, he visto cómo te mira y viceversa, si su amor fuera hielo congelarían el mundo; aunque creo que si lo es-Dice con las manos en las caderas-Yo nunca he salido de mi torre hasta hoy... pero he leído lo suficiente para saber que su amor es eterno, -

-Eso espero Punzie, no me imagino mi futuro sin él- El color sube a mis mejillas.

-¿Quieres?- Punzie me ofrece una limonada yo asiento y tomo el vaso.

-Quisiera encontrar un amor como el suyo, un chico que me mire y me quiera por lo menos la mitad de lo que se aman ustedes- Dice como soñando.

-Lo encontraras Punzie, solo dale tiempo al tiempo- Se nota tan soñadora, es una chica sencilla pero alegre.

-Eso si... pero bueno...-Retomando conciencia-Quiero que lo cuentes todo, te vi la otra noche muy alegre con Jack ehehe...-

Ops...-Este... no pasaba nada, solo...-"Dile lo del beso y ya..." Ok. Termino contándole acerca de la apuesta de Jack de lo del beso hasta navidad, incluso le cuento de cuando llego herido (cosa muy rara) solo omito la parte en la que me sentía perseguida... un minuto.

En el polo Norte...

POV JACK

-Algo está ocurriendo... - Dice Hada un poco exaltada.

-Es verdad, no podemos quedarnos así... - No sé si lo que siento es enojo o frustración. ¿Cómo es posible que nadie se diera cuenta de esto?

-Es verdad Norte, Pitch está planeando algo- Conejo habla con su típico tono serio. Meme muestra figuritas rápidamente, creo que está de acuerdo.

-Lo sé muchachos, pero ¿por dónde podríamos empezar? -Dijo Norte con la mano en su barbilla muy preocupado.

-Bueno, quizás en sus memorias...- Dice Hada.

-Hada, ¿desde que tan temprano se ve la sombra de Pitch en la vida de Elsa?- Digo, uff... quisiera matarme por no darme cuenta antes... no entiendo como no vi las sombras.

-Prácticamente desde que nació- Dice Hada.

-¿Qué motivos podría tener?- Dice Conejo. Meme expresa con figuras que necesitamos más información.

-Meme tiene razón Jack, necesitamos ir a Arrendell para buscar pistas- Dice Hada.

-No, Elsa no sabe nada es esto... no quiero asustarla-Es enserio, mucho menos ponerla en peligro... apenas pudo superar el miedo a sí misma.

-Necesitamos saber más... hay que preguntarle si ha tenido más pesadillas- Dice Conejo.

-Dije que NO- Acaso no entendió.

-Jack, es necesario... debe estar prevenida, si es posible enviarla donde Pitch no pueda encontrarla por un tiempo-Dice Hada.

-No, ella no debe enterarse...- Dice Norte sorprendiendo a todos-Antes Pitch se alimentaba de su miedo y recobro mucho poder... ahora está muy débil, pero si Elsa vuelve a temer solo alimentara más a Pitch-

-¿A qué te refieres Norte?- Dijo Conejo.

-Deja que explique...- Norte mando a un Jeti por algo, no alcance a escuchar que cosa - Nosotros poseemos la inmortalidad... cosa que nos hace inmunes de a ciertos poderes entre unos y otros por eso Pitch no puede alimentarse de nuestro miedo dependiendo de qué tan fuerte sea cada inmortal- El Jeti trajo un baúl con muchos mapas- Nosotros tenemos esto...- Abrió uno de los pergaminos y 5 dibujos de muñecas rusas con imágenes de cada uno estaban ahí-

Meme sonrió, él si sabía lo que eran, yo igual... bueno todos pero no entendíamos que tenía que ver, excepto Meme claro.

-¿Las muñecas?- Dijo Hada.

-Yo no sabía que tenía una- Dijo Conejo.

-Es algo nuevo del Hombre de la Luna, solo olvide comentárselos es todo hace ya varios años esto está vigente- Dijo Norte enrollando el pergamino-Bueno, daré una breve explicación, dentro de las muñecas en el centro está la inmortalidad de cada uno, y están ocultas porque en manos incorrectas podrían matarlos-

-¿En serio?- Dijo Conejo, ni tan valiente no.

-Bueno, si... algo así... el Hombre de la Luna no fue especifico- Dijo Norte -Bien, volviendo al tema de Elsa, ella siendo humana es vulnerable a Pitch... sus poderes hacen que su miedo también sea poderoso, causa el mismo efecto que si uno de nosotros alimentara a Pitch sin la inmortalidad, por ende no podemos causarle emociones negativas... eso solo empeoraría las cosas-

-Entonces ¿Qué hacemos?-Dijo Conejo.

-Por lo pronto... debemos averiguar si ha habido rastros de Pitch en Arrendell...- Dice Norte-Jack, debes sacarla de ahí-

-Podría llevármela a otra parte...- Sugiero.

-¿A dónde?-Dice Conejo.

-Mmmm... ¿Cuál es el siguiente lugar al que debes llevar el invierno?- Pregunta Norte.

-Al este... muy lejos, al otro lado del mar de Arrendell- Esperen, es una buena idea... debo alejarla por unos días.

-Perfecto, bien... Conejo ira a ver si hay rastros de Pitch...- Dice Norte.

-¿Yo?-Interrumpe Conejo pero nadie le hace caso, Canguro.

-Hada, tu busca alguna pista en las memorias de Elsa; Meme tu trata de ubicar a Pitch...- Organiza Norte.

-Está bien... Meme creo que en las memorias hay algo que podría ayudarte, vamos a mi palacio- Dice Hada y ambos se van rápidamente.

-¿Cuándo te la llevaras Jack?- Pregunta Conejo.

-Lo más pronto posible...-Norte interrumpe antes de que pueda responder-Yo te avisare, mientras vigila bien tu madriguera- Dicho Esto Conejo hizo un agujero y se fue. Esto es demasiado esfuerzo mental, he pasado las últimas horas devanándome la cabeza intentando recordar, alguna sombra, sé que Elsa tenia pesadillas pero eso fue dentro de su cabeza... no entiendo nada.

-¿Qué te pasa Jack?- Norte me toma del hombro.

-Es solo que...- No sé explicarlo.

-Te preocupa verdad...- Dice con voz suave.

-Demasiado, no quiero asustarla, pero también quiero decirle la verdad; y me frustra no saber por qué Pitch hace esto-Mi rabia interna me deja un sabor metálico en la boca.

-Tienes que mantener la calma... si ella te ve alterado sabrá que algo anda mal-Norte se cruza de brazos y me mira comprensivamente.

-Es solo que no quiero que le pase nada... no me lo perdonaría- Me paso la mano por el rostro, me siento muy cansado mentalmente.

-Mmmmm... para tu tranquilidad te daré algo que puede ayudar-Después abre un cajón desde un mueble cercano y saca un atrapa sueños-Esto parecería cualquier artesanía de pueblo pero es mágico... unos amigos míos lo hechizaron para que sea más potente que cualquier atrapa sueños; no te aseguro que Pitch no logre corromperlo pero le hará más difícil la tarea de rastrear a Elsa con sus pesadillas, más difícil aun que le mande pesadillas al dormir-Me lo entrega, es pequeño... de madera y no mide más de mi dedo meñique, de un lado cuelga un cordel negro.

-Gracias Norte- Sonrió con el poco buen humor que me trae esta defensa para Elsa.

-Solo has que se lo ponga o colócalo en la cabecera de su cama- Dice Norte.

-Claro, no lo olvidare- Y lo guardo en mi bolsillo. Estoy a punto de irme cuando recuerdo algo que le quería preguntar -Hey amigo ¿podrías explicarme más acerca de ese asunto de las muñecas?-

-Claro Jack, ¿Qué quieres que te explique?- Dice Norte.

-La verdad no entendí bien eso de la inmortalidad... ¿no que eso solo representaba nuestro centro?- Si, me tiene muy confundido.

-Bueno el Hombre de la Luna decidió que para protegernos encerraría esa chispa dentro de las muñecas, aparte de nuestro centro esa energía inmortal vive en nosotros... -Dice Norte-Están ocultas en lugares imposibles, así que no debemos preocuparnos-

-Que extrañas formas tiene el Hombre de la Luna para hacer las cosas- Digo, la verdad sí, pero es cosa de él.

-Jajaja ni te imaginas, por ahora solo ocúpate de Elsa, por cierto ¿cómo lograras sacarla de Arrendell?- Pregunta.

-Bueno, su cumpleaños es el último día de invierno lo cual se me hace conveniente, tratare de convencerla de que me acompañe al este- Explico con las mayores esperanzas que tengo.

-Suerte Jack, y no te preocupes... haremos lo posible para averiguar lo que Pitch planea- Norte trata de animarme, me alegra contar con apoyo.

-Solo no quiero ponerla en riesgo- Digo y salgo por la ventana.

En Arrendell...

Llego al castillo antes del atardecer, y busco a Anna por todos los rincones pero no está... ella podría ayudarme a convencer a Elsa. Debería decirle a Elsa... pero no quiero asustarla, me duele demasiado mentirle, no puedo jugar con su confianza así. No, Norte dijo que lo mejor es que no se entere por ahora.

Se escucha una risa tímida desde el cuarto de Elsa, ¿Qué pasa ahí adentro?

POV ELSA

Estoy en mi habitación, estaba ordenando mis cosas cuando encontré la conversación que tuve con Jack hace años con mensajes bajo la puerta, no sabía que aun tenia esos papeles... después recuerdo que se enfermó ¿Cuánto? ¿Una semana? No recuerdo.

Tocan la puerta, ser que Anna y ¿las chicas regresaron? Abren la puerta levemente y ya distingo quien es.

-¿Puedo pasar?- Dice con una encantadora sonrisa.

-Siempre- Respondo.

-¿Dime que estás leyendo?- Dejo su cayado, se sentó junto a mí en la cama y agarro un papel, abrió mucho los ojos y lo reconoció de inmediato se rio y agarro otro papel.

-Mi letra no es muy buena- Dijo.

-Mientras escribas en el mismo idioma, yo creo que estaremos bien- Lo miro y algo es diferente, ya sea la pesadilla y el hecho de que me hiciera valorarlo más; o tal vez algo nuevo. Se me olvidaba aun debo contarle de la pesadilla.

-Creí que no conservarías esto- Dice con una sonrisa.

-No lo sabía hasta que revise en los cajones- Digo al tomar el siguiente papel, Jack igual toma otro y parece que al llegar a una línea abre mucho los ojos.

-¿Qué sucede?- Le pregunto extrañada. No es posible, ¡esta rojo! Tomo el papel de sus manos y entiendo porque. No puedo evitar reírme, leo de nuevo la "vergonzosa" parte de la conversación:

"ELSA: ¿De qué hablas?

JACK: Puedo sentir la puerta más fría desde hace rato ja ja ja.

ELSA: ¡¡¡Por favor Jack!!! Solo te pido que me apoyes con mis nuevas responsabilidades, ni que te estuviera pidiendo ser mi esclavo sexual.

JACK:Ja ja ja ja ¿¿Quieres??

ELSA: ¡CÁLLATE! >:-/

JACK: Ja ja ja es solo una sugerencia.

ELSA: Sueñas..."

Quién lo diría, una simple conversación puso rojo a Jack... mira a otra parte con una leve sonrisa y pasándose la mano a través de su pelo. ¡Pero si el mismo hizo la broma!

No puedo evitar sentir compasión así que me pongo de rodillas y le doy un beso en la mejilla que él toma por sorpresa, se gira y me mira con dulzura, me toma de la nuca y me estampa contra sus labios. Me sorprende un poco pero después le sigo el beso, sí hay algo diferente... más cálido.

Cuando me suelta veo sus ojos grises sosegándome el alma, me he enamorado de verdad... y el recuerdo de esa pesadilla viene a mi recordándome un sentimiento de vacío y soledad y lo mucho que podría empeorar si tal cosa sucediera.

-Hay Elsa... te amo- Dice derritiéndome por dentro.

-Yo te amo más- Digo y me acurruco en sus brazos, juro que si pudiera ronronear lo haría en este momento, junto a él en sus brazos. Permanecemos unos minutos así, con su mano acariciando mi brazo y yo apoyada en su hombro con todos los papeles aun desparramados sobre mi cama.

Al abrir los ojos me doy cuenta de que estoy justo donde el cuello de su sudadera empieza, prácticamente veo como respira aunque no escucho ningún latido. El color sube a mis mejillas y una sensación extraña invade mi espalda.

Yo me decido a romper el silencio- ¿Jack?-

-¿Si?- Dice sin soltarme.

-¿Por qué te sentiste avergonzado de esa parte de la conversación?- Pregunto no muy concentrada.

-Ehee... -aunque no lo veo estoy segura de que esta sonriendo nervioso.

-No lo sé... - Dice evitando que me levante.

Sonrió para mí misma, es adorable verlo, o en este caso sentirlo nervioso. "Vamos admítelo..." mi subconsciente reclama; ¿Qué cosa? "Algún día tenían que hablar de eso"; Oh.

Una parte de mí se niega pero la otra sabe lo que se refiere, es un asunto que no debería hablarlo ahora... no aún no.

-Jack debo contarte algo- Buen cambio de tema, pero ahora me siento melancólica, Jack me deja sentarme y estamos frente a frente.

-¿Sucede algo?- Me mira muy preocupado.

-He tenido una pesadilla-