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--¿Seré abuelo? --decía el señor Kim incrédulo.

--No fue planeado, obviamente, papá. --explicaba rápidamente Jin. --Con Taehyung sí nos cuidamos, pero al parecer lo concebimos el día que lo marqué.

--Debieron ser más cuidadosos aún --regañaba el padre de Jin. --No es fácil criar un cachorro.

--Papá, el cachorro ya está aquí. No hay nada más que hacer que celebrarlo. --exponía Namjoon contento. --Pensé que yo sería padre primero, pero resulta que mi hyung se me adelantó.

--Si fueras serio con tus novios, tal vez tendrías alguna posibilidad. --decía el alfa rubio.

--Soy serio. Es solo que cuesta encontrar al indicado. --explicaba el alfa castaño, estirándole una servilleta a su hyung al ver sus labios manchados. --no es fácil.

--¿Cuánto ha sido lo máximo que has durado en una relación con un omega? --preguntaba Jin, recibiendo la servilleta para limpiarse las manos.

--Lo máximo que duré en una relación... Mmm... Creo que fueron seis meses... Con... Con Taehyung. --confesaba el castaño y el aludido abría los ojos como platos. --Es un buen compañero. No tiene ataques de celos, no me hacía problemas por estudiar hasta muy tarde. Me daba mi espacio y jamás me prohibió salir con mis amigos, incluso ir a fiestas. Taehyung... Eras demasiado bueno para mí. Me alegro que ahora estés con mi hermano, son perfectos el uno para el otro.

--Lo somos --se apresuraba a decir Jin. --Mi omega es el más bonito y el mejor compañero. Por eso oficialmente nos iremos a vivir juntos.

--¿Y dónde van a vivir? --preguntaba el señor Kim, bebiendo de su copa.

--En mi casa, señor. Mi mamá me la heredó. Le he hecho algunas renovaciones, pero está en perfectas condiciones. Tal vez más adelante la podemos vender y comprar un apartamento en el centro de la ciudad. --explicaba el omega algo tímido.

--Necesitarán muchas cosas ahora que viene un cachorro. Jin pronto entrará a trabajar, pero aún así...

--Siempre he trabajado, papá. --agregaba rápidamente Seokjin. Estaba acostumbrado a que lo ningunearan en casa, pero por alguna razón, no lo iba a permitir delante de su novio.

--Me refiero a un trabajo real, hijo. --interrumpía el señor Kim. --No hablo de... lo que sea que hagas ahora. Hablo de dinero en buena cantidad.

--Trabajo o no, siempre me han pagado bien. Mira... --Jin extendía hacia su padre su teléfono enseñándole la aplicación de su banco. El señor Kim se atragantaba con un trozo de carne.

--¡¿Cómo es que tienes tanto dinero, hyung?! --lograba preguntar Namjoon asombrado, echándole un ojo a la cantidad de ceros que tenía la cuenta de su hermano mayor.

--Pues... "trabajando" --decía el alfa, haciendo énfasis en las comillas, casi burlándose del par. Taehyung soltaba una risita. --De hecho nos compraremos un auto. Le pediré a Yoongi que nos acompañe el sábado, el sabe de esas cosas. --decía el rubio despreocupado. Las miradas de Namjoon y el señor Kim se posaron en Taehyung.

--No me miren así, Jin me contó sobre esto la semana pasada, tampoco sabía que él tenía esa cantidad de dinero. Me pidió que dejara mi trabajo, pero no sé si sea lo correcto... --explicaba el único omega en la mesa. No quería que pensaran mal de él.

--En realidad me siento aliviado. Al parecer ustedes ya tienen todo resuelto y es hora de que Jinnie haga su vida. Supongo que planean casarse... --decía el alfa mayor, ya más relajado.

Taehyung se atragantaba con el jugo. Jin le sobaba la espalda. --¿Estás bien? --preguntaba al omega, este asentía. --No, papá, aún no está en nuestros planes casarnos, aunque puede que lo hagamos pronto. De todas maneras es solo un trámite. Mi omega ya tiene mi marca y ahora tendremos un cachorro.

Y tenía razón. No tenía sentido temerle al matrimonio si ya estaba marcado. --Creo que podríamos hacerlo, pero no quiero una ceremonia. No tiene sentido para mí. Podríamos hacer una comida y podría invitar a la familia Park y a Jeon. Tú podrías invitar a Yoongi y a su novio. Para mí no tiene sentido hacer una ceremonia si mi madre no podrá estar. Prefiero hacer algo privado y sencillo.

--Entonces así lo haremos, yo tampoco tengo muchos amigos y mi familia es pequeña. Podríamos ahorrar ese dinero y al fin viajar a Japón o tal vez a Europa. --concluían.

--¿Te gusta este, bonito? ¿O prefieres el azul que vimos hace un rato?. --preguntaba Seokjin a su novio. Al fin estaban buscando un auto y Taehyung se sentía emocionado, irradiaba palomitas y caramelo de felicidad.

--Me gusta más este. Es grande y tiene espacio para poner cómodamente una sillita a contramarcha para nuestro cachorro y una pareja de adultos. Es perfecto. Además está justo en el presupuesto. --respondía emocionado el omega.

--Entonces este es el elegido. Le diré a Yoongi. Su primo nos hará el papeleo. --decía el alfa antes de salir del auto. El azabache no quería abandonar el vehículo. Ya se estaba enamorando del olor a nuevo y no quería deshacerse del plástico de los asientos. Quería comprarle mil accesorios a este nuevo juguete.

Después de una hora, al fin estaban listos para llevarse el vehículo a casa, pero extrañamente Jin subía a la parte trasera y Yoongi al asiento del piloto.

--Kim, deberías acompañar a tu novio, no se siente muy bien y yo debo juntarme con Hobi así que solo conduciré hasta el centro de la ciudad. --informaba el alfa de ahora pelo gris.

Taehyung sin pensarlo se bajaba del auto y abría la puerta de atrás para sentarse al lado de su novio. --¿Qué ocurre, amor? --decía, para luego acercarse al alfa rubio y tocar su frente.

--Mmm... No estoy muy seguro, creo que estoy algo mareado. Debe ser porque no he almorzado aún. Una vez se baje Yoongi comeremos algo, ¿está bien? --avisaba Jin con una sonrisa débil. Taehyung asentía preocupado.

A los pocos minutos Yoongi descendía del vehículo entregándole la llave a su amigo. Taehyung miraba por la ventana el intercambio. Ya estaba en el asiento del copiloto.

Jin se subía, pero Taehyung notaba como las manos del alfa temblaban. Manejaba un par de minutos, pero de pronto se detenía. Eran las 7 de la noche y estaba haciendo algo de frío.

--Estaciónate aquí. --se precipitaba el omega, preocupado de que su novio tuviera un accidente. --Dime, ¿qué es lo que pasa?.

--Creo que es mi celo. Yo, por lo general casi pierdo la conciencia cuando llega, pero el médico dijo que como tú estabas marcado y además estás encinta, mi celo no sería tan fuerte. Aún así, las manos me tiemblan y tu aroma me está volviendo loco. No puedo conducir así. --explicaba el alfa, con la respiración un poco agitada. Taehyung lo miraba preocupado.

--Mira, Jinnie. Por ahí hay una farmacia. Te compraré unos supresores, ¿está bien? --avisaba el omega, antes de quitarse el cinturón. Tomaba su teléfono y su billetera. --No te muevas de aquí.

--Bonito, no me puedo mover... --decía el alfa con voz débil, antes de reclinar su asiento por completo.

Taehyung salía casi disparado del auto y corría hacia la farmacia. Hacía una corta fila, pero al estar ahí las personas lo miraron raro.

El guardia de seguridad se acercó sigiloso al omega y miró su marca en el cuello. --Hola. Disculpe, joven ¿viene por supresores para alfa? --le preguntaba de repente.

--Mmm... Sí. Mi novio entró en celo y no tenemos... --explicaba el azabache en voz baja.

--Ya lo imaginaba, está cubierto de feromonas protectoras, nos puso nerviosos a todos. --respondía el alfa ya un poco más tranquilo con la explicación. --pase primero, estoy seguro que a nadie aquí le molestará.

--Seré rápido, gracias --se limitaba a decir el omega antes de pasar rápidamente a la caja.

Finalmente llegó al auto. Abrió la puerta y sintió de golpe les feromonas de Jin. El aroma a canela le hizo picar la nariz, rara vez Jin dejaba sus segundas feromonas salir.

--Toma esto, corazón. Pronto te sentirás mejor. --le dejaba dos tabletas en la boca y le pasaba la botella con agua. Jin las tomaba presuroso, semisentándose en el asiento del piloto. Su respiración era agitada. --te sentirás mejor...

--Nooo... --decía el alfa, negando con la cabeza y apretaba con fuerza los costados de su asiento con sus manos. --Tae... Taehyung... Navi... --lograba expresar con agitación.

--Aquí estoy, mi amor... --Taehyung tomaba su mano. Nunca lo había visto en ese estado y hace meses no lo llamaba así.

Jin besaba la mano de novio antes de llevarla a su propia entrepierna y el ciego del omega recién notaba esa tremenda erección apretada entre las ropas del alfa. --A-ayudame... por f-favor. --decía con dolor el rubio.

Taehyung no tenía que pensarlo dos veces. Miraba a su alrededor y no había nadie más. Eran casi las 8 en el reloj y ese lugar estaba prácticamente vacío y además recordó que los vidros tenían algo de polarización. Así que velozmente, pero con cuidado, bajaba el cierre de los pantalones del alfa, quien colaboraba levantando su trasero del asiento y asimismo bajaba su ropa interior.

El azabache casi pega un grito cuando ve la erección de su novio, jamás se había visto así de monstruoso. Quitaba la mano de Jin, quien ya había comenzado a masajearse y escupía la suya, antes de comenzar a trabajar en su novio. El alfa tomaba a su chico del ante brazo, como guiándolo.

--Te la chuparía, pero así no cabe en mi boca. Está más grande de lo normal... --explicaba nervioso el omega. El rubio asentía, comprendiendo. Aún así, Taehyung estaba hipnotizado. Esa polla se veía... tentadora. Así que sin pensalo demasiado, lamía la punta, una y otra y otra vez, como si se tratara de una paleta. No era muy experto en mamadas, sus prácticas solo habían sido con su alfa, pero iba mejorando con el tiempo. Trato de meterlo en su boca, pero era casi imposible que esa cosa entrara ahí, así que la pasaba por sus labios y su lengua, mientras era ayudado por su mano.

Jin gemía como desquiciado, acariciando con ternura los rizos de su omega, quien lo miraba con ojos de borrego desde abajo. Al alfa la sola vista lo hacía gruñir y por su parte, el azabache ya había comenzado a lubricar, toda la situación le resultaba erótica.

Estaba en su auto nuevo, con un alfa en celo, encerrados. Tal vez podía cumplir una de sus tantas fantasías. Así que sin pensarlo tanto, se quitaba la chaqueta, se bajaba su pantalón deportivo y su ropa interior, pero no sería suficiente. Gruñía de frustración. Se apartaba de Jin un momento y con destreza se desprendía de toda su ropa, excepto su camiseta. Se subía al regazo de su novio, a horcajadas y comenzaba a moverse sobre él de manera sensual, casi suspirando de alivio, tomando entre sus manos las dos pollas.

--O-omega... --susurraba el rubio con voz ronca y profunda. Se semisentaba otra vez, solo para tantear la entrada de su novio con sus dedos y notar lo mojado que estaba. Sonreía satisfecho, antes de introducir dos de sus dedos ahí y hacer gemir al azabache. El lubricante escurría hasta sus nudillos. Quitaba su mano y acercaba los dedos a su boca para lamerlos. Volvía a sonreir.

Caramelo y vainilla.

Pero Taehyung no era muy dado a la paciencia cuando se trataba de su novio, porque el ser tan precavido y tan respetuoso con él lo desesperaba y excitaba todo el maldito tiempo. Así que sin más, agarraba entre sus manos el miembro casi rojizo de su chico y lo llevaba a su entrada palpitante.

Lentamente fue sentándose sobre él, pero la misión era difícil. El tamaño lo complicaba un poco, pero no se rendiría. Jin se mantenía quieto, no se movía, lo único que lo hacía era su pecho por la hiperventilación, se mordía el labio y mantenía los ojos cerrados, probablemente estaba concentrado, cantando mentalmente el himno nacional.

Cuando el rubio sintió que estaba completamente hundido en su novio, abrió sus ojos de color turquesa. Un gruñido salvaje liberó su pecho. Ya no había vuelta atrás.

--Omega, muévete. --demandaba el alfa y al azabache lejos de molestarle la orden, en realidad le gustó sentirse dominado. Comenzó a moverse lento sobre el alfa.

--¿Te gusta... así, alfa...? --lograba preguntar coqueto, pero las feromonas del alfa lo estaban volviendo loco. Sus ojos brillaban intermitentes entre el marrón y el dorado.

--Sabes... como complacerme, bonito... --respondía el alfa, pero aún así tomaba los prominentes glúteos del omega y lo ayudaba para que se moviera más rápido. --Así está mejor...

--Mmm~... ¿Sí? Oh, mierda... --Taehyung no quería ensuciar su ropa, así que tomaba su camiseta con los dientes para no mancharse, ya sabía lo que pasaría.

--¡Gírate! --demandaba otra vez el alfa, tomando al omega de las caderas, para sentarlo sobre él mirando hacia el parabrisas. Antes de sentarlo, le daba una nalgada que resonaba dentro del vehículo.

--¡Oh! Joder, Seokjin. Sí... --Taehyung nunca había experimentado con Jin en su celo y parecía ser otro alfa. Se volvía a sentar sobre su novio, quien lo ayudaba ingresando casi sin cuidado en él. --Oh, mierda... se siente tan bien... --decía el omega entre suspiros.

El azabache tomaba a duras penas su bolso y tomaba unas toallitas húmedas que mantenía ahí. Estaba caliente, sí, pero aún así no olvidaba que ese auto era nuevo y debía limpiarlo si lo ensuciaba.

--¿A-alfa? Voy... Mmm~ oh ¡Mierda, voy a correrme, Jin!... --casi gritaba el omega, mientras el alfa lo movía sobre él sin misericordia.

--Quiero verlo... --es lo único que decía el rubio, esta vez, bombeando la polla del omega.

--A-anúdame, hazlo... alfa... --rogaba el omega lo que provocaba que el alfa se excitara aún más.

Jin se acercaba a la oreja de su novio y mordía su lóbulo... --¿Quieres mi nudo, omega? --decía, hundiéndose en el chico con violencia. --A mi omega... le doy lo que me pida... --decía antes de correrse dentro del chico. Taehyung sentía como el nudo se formaba y se corría de manera violenta sobre el tablero del vehículo.

--¡Oh, jodida mierda... Seokjin! --gritaba el omega, sintiendo como chorros y chorros de semen caliente se derramaban en su interior. Sentía además cómo el alfa acariciaba su vientre y lamía su cuello con cariño, como si el azabache fuera lo más preciado.

--Lo que... mi omega quiera, eso... le daré... --expresaba con la voz entrecortada.

Afuera ya estaba oscuro, ya la noche había caído. Pasaron unos minutos y el nudo se desinflamó.

El alfa tomó las toallas y con cuidado limpió al omega, este último buscó entre sus cosas una bolsa plástica y fue dejando ahí las toallas húmedas sucias. Luego tomó su teléfono.

--¡Minnie! Necesito tu ayuda, Seokjin entró en celo, estamos en el auto, no puede conducir así. --decía rápidamente, mientras el alfa besaba su cuello y lamía su oreja.

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