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Lo veo alejarse.
Cayéndome,
Lloro y grito tu nombre
Y de nuevo la lluvia cae
Junto conmigo

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Qué irónica era la vida, casi como un bufón, haciendo reír a unos a costa del dolor de otros. Pero la sensación de déjà vu no abandonaba la mente de Taehyung.

Ya había estado en ese lugar antes, mojado de pies a cabeza, temblando de frío. Y ahora era todo casi igual. Estaba lloviendo, él estaba empapado y con el corazón roto, igualito a esa ocasión ¿la diferencia? esta vez Seokjin no vendría a su rescate. Sintió una punzada de dolor en su cuello, justo donde Jin había mordido y su lobo aulló al borde de la agonía. Su alfa lo había rechazado.

Tomó su teléfono y con un dolor abrumante bloqueaba el contacto del alfa, para luego discar el número de su mejor amigo. Sabía que si no lo hacía, el alfa lo acosaría... todos los alfas lo hacían, todos eran iguales.

--TaeTae, bebé-

--J-Jimm... Jimin... hip. Por f-favor...

--¡Taehyung, ¿qué ocurre?!

--MM-Minnie, v-ven a hip ven a b-buscarme...

--¿Dónde estás? ¿Dónde está Seokjin? ¿Estás herido? Dame con Jin...

--¡NO! N-no. No lo llam-mes. Bloquéalo. V-ven... S-solo ven hip por mí.

--Envíame tú ubicación, estaré ahí en menos de 10 minutos. ¡JEON! --gritaba a su alfa antes de colgar.

Park llegaba al lugar en menos de 10 minutos, en tanto Taehyung lo esperaba aún mojándose en la lluvia.

--¡Taehyung! Bebé, ¿Te hicieron daño? ¿Estás herido? --corría Jimin hasta encontrarlo.

--El... El daño no es físico. S-solo llévame a casa, no quiero estar aquí. --explicaba a duras penas el azabache.

Rápidamente, el pelirrosa lo tomaba por la cintura, llevándolo hasta el auto y lo metía a los asientos traseros. Jungkook encendía el auto. A los 5 minutos ya estaban fuera de su casa. El azabache corría hacia la puerta desesperado, buscaba las llaves, pero no había tiempo, no alcanzaba a llegar al baño, así que entre unos matorrales vomitaba de manera violenta. Aferrando una de sus manos a su estómago.

--¡Tae! --Jimin corría a sobar la espalda de su amigo. Quien hacía arcadas, pero ya no había nada más que devolver.

Jimin tomaba el bolso de su amigo y buscaba con rapidez las llaves.

--¡Kook! Sostén a Tae, por favor. --pedía Jimin, a la vez que abría la puerta.

El alfa tomaba al débil omega en sus brazos y lo llevaba a su habitación.

Jimin revolvía el armario de su amigo en busca de ropa seca. --Quítale la ropa --demandaba el omega a su novio, quién lo miraba nervioso.

--Pero... ¡es un omega! --susurraba nervioso -- y es tu mejor amigo.

A Jimin no le habría importado y estaba seguro que a Tae tampoco, pero su novio parecía incómodo. --Tienes razón. Pon agua a calentar, yo lo haré. --y sin esperar más tiempo, se disponía a desnudar a un empapado y casi hipotérmico Taehyung.

A los pocos minutos, el azabache yacía acostado y calentito en su cama, pero el frío en su pecho no lo abandonaba. Suspiraba medio dormido. Mientras Jimin acariciaba sus rizos.

Taehyung abría los ojos de golpe, apretando con fuerza su cuello. El dolor era insoportable --Ji-Jimin... --lograba pronunciar de manera débil.

Park se apresuraba, tomando un bote de basura con él, justo a tiempo para que el azabache devolviera una vez más el poco contenido de su estómago.

--Bebé... tranquilo. Estoy contigo, siempre estaré contigo, bonito. --susurraba tiernamente el pelirrosa, sobando la espalda de su alma gemela y derramando lágrimas involuntarias por él.

--Él... Él me dejó, Minnie. Es... Jin es hermano de... de Namjoon. --explicaba ante un sorprendido Jimin.

--¡¿QUE?! Pero, ¿cuáles eran las posibilidades? --preguntaba asombrado el pelirrosa.

--Lo... Lo mismo pienso, pero... Namjoon cree que estuve con Jin para vengarme de él y al parecer, Seokjin le creyó. ¿por qué haría yo algo así? ¿Por qué no me creyó mi alfa? --volvía a llorar desconsolado Taehyung, temblando una vez más. De repente se ponía de pie. --Yo... yo necesito... necesito. --comenzaba a moverse de manera errática, dando vueltas a su alrededor, con las manos en la cabeza.

--¿Qué estás haciendo, TaeTae? Ven aquí... --insistía Park asustado, pero su amigo no lo escuchaba. El azabache se dedicaba a murmurar un par de incoherencias mientras revolvía sus muebles, sacando todo el contenido de las gavetas y de su armario.

--Minnie, debes salir. Sal. --indicaba a un confundido Jimin, pero que su lobo le decía que obedeciera.

Era mejor darle privacidad, después ordenarían ese desastre. Iba hasta la cocina en donde Jungkook estaba preparando una sopa. Olía increíble.

--¿Cómo sigue Taehyung? --preguntaba el alfa preocupado. A pesar de haberse presentado algo tarde como alfa, agradecía para sus adentros no haber sido un omega. Después de conocer la historia de Jimin y Taehyung, lo que él había experimentado, no era nada en comparación a ellos dos, solo por ser omegas.

--Se volvió loco, pero lo dejé ser. Creo que se deshará de las cosas que Jin le ha regalado. ¿por qué los alfas tienen que ser tan imbéciles? --Jeon le dedicaba una mirada acusatoria --No tú, precioso, tú eres el mejor del mundo. Pero la mayoría son un asco, no lo niegues. Hasta tu abuelo fue un hijo de puta, que en paz descanse --decía lo último con ironía.

--Lo era --coincidía el alfa con una sonrisa. Jeon aún conservaba las cicatrices por los golpes que su abuelo le había dado por años. Los últimos fueron porque a los 16 años aún no se presentaba como alfa. Luego de eso, no lo volvió a ver porque falleció. --la sopa está lista.

--¿Puedes ir a dejarle un cuenco? Necesito ir rápidamente al baño. --pedía Park.

--Está bien, yo lo haré. Ve, que ya sé que tu vejiga es muy pequeña. --lo apresuraba el alfa, no sin antes darle un tierno beso en la coronilla. Se disponía a servir un plato al amigo de su novio, a la vez que el pelirrosa corría al baño.

Jeon tomaba una bandeja y ponía el cuenco recién servido, una cuchara sopera y unos palillos, una servilleta y un vaso de agua. Y se dirigía a la habitación de Taehyung.

Al abrir la puerta se sorprendía al ver un revoltijo de ropa encima de la cama. Solo podía ver los pies del omega que sobresalían de entre las prendas. --Ji... ¡Minnie! --llamaba el perplejo alfa a su novio.

El pelirrosa salía del baño secándose las manos en sus pantalones. --¿ocurre algo? --preguntaba acercándose a la puerta de la habitación de su amigo. --¿Qué es toda esta mie-

Pero el alfa horrorizado, le tapaba la boca con urgencia. -Shh... Taehyung ha hecho un nido --le susurraba cuidadoso.

--¿Y para qué o qué? --preguntaba Jimin sin entender un carajo. Jamás había visto algo así.

--Los omegas suelen hacer nidos por dos motivos. O están muy tristes o... cuando están embarazados. --respondía Jungkook con advertencia.

Jimin se tapaba la boca, recordando lo que les habían enseñado en la escuela preparatoria sobre los omegas y sus nidos. Era primera vez que veía algo así de cerca. Su madre nunca pudo hacer uno embarazada de JiEun, pasaba la mayor parte del tiempo trabajando. --Debemos comprar una prueba ahora mismo.

--Yo iré. Tú quédate con él y hazle compañía. Pero, pollito, es importante que le pidas permiso antes de entrar. A mi todavía me duele el zape que me dio mi primo por no hacerlo. --daba un tierno beso en los labios del omega pelirrosa, le entregaba la bandeja con la comida y tomando las llaves de su auto, salía.

Park cauteloso se acercaba a la cama y dejaba la bandeja encima de la mesita de luz --TaeTae... --susurraba con ternura --¿me das permiso para acompañarte?

El azabache le devolvía la mirada con los ojos hinchados y rojos, pero asentía y le extendía la mano. Jimin la tomaba y entraba al revoltijo de ropa hasta llegar al lado de su amigo y acurrucarse junto a él.

--¿Te gusta? Es primera vez que hago uno. Otras veces intenté hacerlo, pero Cho los desarmaba. --expresaba con tristeza, recordando cuando su madre recién había muerto y el quiso hacer uno, pero Cho se deshacía de ellos cuando él omega volvía de la escuela.

--Es un nido muy bonito, TaeTae. --le decía el omega con dulzura, acariciando la mejilla hinchada de su amigo. --Me tienes que enseñar a hacer uno también.

--Claro que sí --decía con orgullo el azabache, antes de suspirar y acurrucarse un poco más, olisqueando una camiseta que al parecer tenía aroma a tierra mojada. --Minnie... Yo... yo creo que hay un cachorro aquí en mi panza.

Jimin lo miraba sorprendido --¿Estás seguro? --decía mientras levantaba la camiseta de su amigo, miraba su abdomen y ponía su mano ahí.

--Mi lobo está muy seguro, pero se siente débil. No tengo prendas de mi alfa. Solo tengo esta camiseta y huele más a caramelo que a tierra mojada. --confesaba desolado --Tú... ¿me dejarías algunas prendas de Jungkook?-

--Por supuesto que sí, bebé. --respondía sin dudar su amigo. No tenía que escuchar motivos.

--Es solo porque mi lobo necesita sentirse seguro y como él es de confianza, necesito sus feromonas y-

--No tienes que explicarme nada, bonito. Si quieres te lo presto desnudo. --respondía el pelirrosa en tono bromista a lo que el azabache hacía una mueca de asco.

--Eww, no gracias, ya está baboseado por ti y no es de mi gusto. Ya lo chupó el diablo --ambos omegas se carcajeaban ante las palabras de Taehyung. Pero luego el omega sollozaba otra vez.

--Ven aquí, bebé. --expresaba Jimin, atrapando a su amigo en un apretado y fraternal abrazo. Justo lo que el tierno y desolado corazón de Taehyung necesitaba.

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