Jungkook casi entra en pánico cuando no encontraba el hilo rojo adecuado para su juego.

¿¿Como se atrevía el dependiente a decir que daba igual el tono??

Jungkook sabía muy bien que tono de rojo quería, y no compraría cualquiera, así que buscó en al menos 10 tiendas distintas hasta que lo encontró. El rojo perfecto.

Compró también un poco de tela para hacerle más parches a Chim, el pobre había sufrido una operación muy arriesgada y había perdido mucha piel irrecuperable, tendría que ponerle una nueva.

Mientras volvía a su casa, se encontró por la calle a Jimin, y sin saludarlo, sonrió ampliamente.

"Lo pasaremos tan bien juntos jugando..." pensó Jungkook.

Al llegar a casa, operó de nuevo a Chim, implantándole su nueva piel a cuadros.

Sintió el placer recorrer su columna al cortar la yema de su octavo dedo.

" Falta tan tan tan tan poco! "

Sólo 2 dedos más. Jimin iba a pasarlo como nunca!