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Llegando a Marineford. Amie la... ¿Marina?

La castaña no dejaba de moverse de un lado a otro, entrelazaba sus dedos en movimientos rápidos y nerviosos, se pasaba las manos por su cabello incontables veces, en parte era por lo de Ace, su hermano mayor que tomaba también como su mejor amigo estaba a punto de ser ejecutado por razones desconocidas aún, pero... También fue por sus acciones y sus consecuencias.

La chica había decidido actuar demasiado rápido sin pensar en las consecuencias, no, no era miedo de morir, la chica podía muy bien dar su vida por alguno de sus dos hermanos si la situación lo indicaba, oh claro que no, si la chica se preocupaba entonces la situación era seria, muy seria. Como ya dije, la situación ya es aguda por lo de Ace pero también había alguien por el que preocuparse.

Si no lo olvidan, la chica tiene algo dentro de ella... Un demonio, Abrahel, su nombre era así, ese demonio se podría apoderar de Amie si ella bajaba la guardia, pero... ¿Porqué no dejarse manipular por ese demonio? La chica recibía superior fuerza, su manipulación a las otras personas se volvía asombrosa sin mencionar el estilo que tenía, si tenía ese "poder" probablemente salvar a Ace sería sencillo, y solo tendría que preocuparse de los almirantes, sí, sí... eran fuertes por sus frutas del diablo, ó en otras palabras, frutas del demonio, y ella tenía un demonio original dentro de ella, pero en un cuerpo humano era imposible sacar todo su potencial.

Además, cuando sacaba ese demonio ella perdía total control, no importa la chica amable, tierna y comprensible que era la chica, si ese demonio se apoderaba de su interior, cambiaba.

¿Qué pasaba si ese demonio se apoderaba de ella sin darle permiso? ¿Qué tal si Luffy estaba ahí y ella le hacía algo malo? ¿Qué tal si pierde su verdadero objetivo que es Ace y se iba por otro? Debía hacer las paces con Altaxar.

Tocaron la puerta, Amie se sobresaltó e intento no sonar nerviosa.

-¿Quién? -preguntó con la voz en diferentes tonos.

-Amie-sama ¿Está bien? Soy yo, Kuuso. -El viejo habló con preocupación.

-Estoy bien. -dijo cuando definitivamente NO estaba bien. -Kuuso, avisa a todos que nadie me moleste, estaré ocupada.

Se escuchó un "muy bien" por detrás de la puerta y después silencio. La chica se preparó a hacer el ritual para contactarse con Abrahel.

Ya todo preparado, meditó... y meditó.

-Abrahel. -habló Amie, todo su alrededor se volvió oscuro y se observó la silueta de una mujer.

-Oh, Amie-chan, hace mucho que no me visitas. -dijo y apareció una mujer alta, pelo café, ojos rosados y vestimenta negra.

-Sin redondos Altaxar, vengo a hacer las paces. -dijo Amie seria.

-Vaya, vaya, Amie-chan está seria. Qué monada. ♡ -sonrió tiernamente.

-Abrahel. -dijo Amie apretando los dientes. -No es juego.

-Mmm... ¿Porqué estás tan seria? Oh, espera ¡Ya lo sé! Furararararararara.

-¡Estamos hablando de la vida de una persona! ¡Ace! ¡Mi hermano no perdamos tiempo! -dijo Amie tratando de no llorar.

-Ace-kun, ¡Ah! El chico que conociste antes de estar conmigo por toda la eternidad, claro. -sonrió. -Vale acepto.

-¡Pues no me importa si no aceptas porqué...! ¿Qué?

-Amie-chan, hace mucho que no veo que alguien comparta mi poder, lo haré, solo si tú  lo deseas apareceré, pero... si tu odio llega a apoderarse de ti... Furarara- rió de forma picara. -Yo tomaré el control.

-Hecho. -dijo Amie y se despidió.

[...]

-De aquí en adelante la puedo ayudar, Amie-sama. - Kuuso habló. -La cubriremos.

-Muchas gracias, Kuuso pero... guarden todas las armas hasta que la guerra, si hay una, comience. -habló Amie. -Nuestro objetivo es Portgas D. Ace... es decir... No le disparen a él ¿Ok? -dijo nerviosa, asintieron todos. -Ahora necesito una forma de camuflajarme mientras Barbablanca llegue.

-Disfrazate de Marine. -dijo el chico. -Así nadie sospechara.

-Buena idea, niño. -Amie sonrió. -Me preguntó que dirá Luffy-san si me ve así. -sonrió enamorada.

-Ese Luffy es muy importante. -habló Kuuso.

-¡Obvio! -dijo sonrojada. -¡Él es el chico que se convertirá en el rey de los piratas! -gritó.

Todos se quedaron plasmados.

[...]

-Aquí en adelante, estamos separados pero unidos, te cubriremos. -dijo Kuuso y se fue.

Amie traía unos pants color azul y blanco y una blusa de marines junto a la gorra que destacaba a estos, pero Amie ya había dejado en claro su lealtad hacia Luffy, por lo tanto, traía un pedazo de tela negro con la marca de los sombrero de Paja, ese pedazo de tela amarraba su cabello en una coleta.

-Voy por ti, Ace. -suspiró.

[...]

-¡Mierda! ¡Mierda! -no paraba de maldecir mientras corría lo más cerca a Ace, la guerra ya había comenzado, y había recibido un disparo en su brazo por parte de unos piratas.

El tiempo avanzaba, <<Tic toc>> El suelo apedreado hacía que se sintiera más veloz al despegar sus botas, se suponía que Ace era su objetivo pero... Amie avanzaba justo al lado contrario, tenía que hallar un lugar donde esconderse, ya sea en un pozo, ó justo al lado del barco de Barbablanca, pero tenía que parar el desangrado.

-¡Ace! -se oyó un grito en el cielo, de repente todo se quedó en silencio, volteó arriba y vio a Luffy caer.

-¡Luffy! -dijo Amie sorprendida.

[...]

Se encontraban corriendo juntos, sí, sí se lograron ver desde su separación pero se encargarían luego de abrazarse y todo lo demás, su prioridad era...

Ace

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