Junio 2020

Maddie había fallecido una semana antes que Charlie y yo hubiesemos estado a punto de comprar la casa. Charlie y yo estuvimos largo rato hablando en el interior de nuestra casa alquilada recordando viejas anécdotas tanto de nosotros con la familia Fierman como de su hija, aún no podía creer que estábamos hablando de Maddie en pasado, en algunas ocasiones decía "Maddie es" y cuando caía en la cuenta de lo que había dicho me corregía a "Maddie era".

Era una chica joven, tenía una vida por delante, aún me arrepiento de no haberla detenido en su momento cuando me habló de su descabellada idea de ir en busca de ese chico, pero me digo mentalmente que nada de esto es mi culpa, por mas que yo se lo impidiera, ella iría de todas formas.

Marzo 2014

—Charlie... no puedo creerlo, era muy joven

—La vida no está programada, un día estamos y al otro ya no

CHARLIE

Abril 2020

Mi celular vibra en el bolsillo trasero de mi pantalón, observé la pantalla y un corto mensaje apareció en el aparato,

Mensaje de Marcus: "Hola Charlie, ¿cómo te va? Emma y yo necesitamos hablar contigo, estas disponible en este momento?"

Mensaje para Marcus: "Hola Marcus! Si, estoy disponible ¿qué sucede?"

Guardo mi celular en  bolsillo pero este rápidamente vuelve a vibrar, esta vez es una videollamada. Salgo de la habitación muy silenciosamente ya que Millie se encuentra durmiendo y me dirijo hacia el patio trasero para hablar mas tranquilo

—Hola Charlie—saludan ambos frente a la pantalla—tanto tiempo

—¿Como les va?—pregunto—hace tiempo que no he sabido de ustedes

—Si, tu sabes... cuando sucedió lo de Maddie nos hemos aislado completamente de todos y todo

—Si, lo entiendo

—Sabes, te llamábamos por lo siguiente,—dice Marcus acomodándose en el sofá que se encuentran sentados—¿aún siguen en Dallas?

—Si, Millie y yo estamos muy tristes...—respondí —Aún no hemos podido mudarnos, hemos tenido algunos problemas financieros y no nos podemos permitir pagar los precios de las casas que nos han ofrecido—hago una pausa—estábamos muy emocionados de poder volver al barrio hace seis años atrás, ambos hemos crecido allí, nuestra infancia está en esas calles.

Anna y Marcus encontraron sus miradas, él asintió y ella fue quien, luego de varios minutos de estar callada habló—Aún no se lo hemos comentado a nadie...—hablaba pausado, casi en un susurro y con la voz cansada, como si no durmiese hace días—Pero Marcus y yo hemos tomado la decisión de vender la casa, se que puede ser algo apresurado teniendo en cuenta el poco tiempo que... que ella ya no está—hace una pausa, limpia una lágrima que comenzaba a caer por su mejilla—pero no podemos seguir estando aquí, todo nos recuerda a ella, cada rincón de esta casa tiene su huella, su aroma, incluso aún siento su presencia—no comprendía a donde quería llegar con lo que decía

—Ustedes...—digo confundido—quieren decir que...

—Si—respondió Anna—Hoy mismo podríamos comenzar los trámites, claro, si tú estás de acuerdo—ella miró a su esposo con ternura y acomodó su cuerpo mas cerca del de él—Quizás te parezca una idea descabellada, pero en este momento, ustedes son los indicados para vivir bajo este techo, sus familias fueron nuestros primeros vecinos con los que entablamos una amistad, a Millie la conocemos de desde que era una bebé—en su rostro se dibuja una media  sonrisa—te hemos llamado a ti porque recuerdo como le afectó la noticia en su momento cuando se enteró. no sabría como podría reaccionar si nombrábamos a Maddie.

—Nosotros recordamos que hace unos años estaban en busca de una casa aquí en el barrio, y dije: "por qué no llamar a Charlie y preguntarle directamente, quizás aún estén interesados en volver". Por el precio de la casa no tienen porqué preocuparse, podríamos financiarlo a como mejor les convenga

—Sí, por supuesto—dije sin pensar. Desde que nos habían rechazado la casa hace seis años no hay un día en el que Millie no hable del tema, "Quiero volver a Louisana" repite continuamente, y hoy por fin se dará

MILLIE

Junio 2020

—Por qué no me lo habías dicho?—pregunto llorando—por qué me lo habías ocultado?

—Millie, por favor tranquilízate—coloca su mano sobre mi hombro

—No me toques! dime por qué me has mentido

—No te he mentido, tan solo te he ocultado la verdad

—Es lo mismo!—grito—Desde cuando lo sabes? desde cuando sabes que esta casa perteneció a el señor y la señora Fierman?

—Cariño, déjame explicarte...

—Deja de dar vueltas al asunto, y habla!

—Marcus y Anne me llamaron en abril—hace una pausa—, habían decidido vender su casa y recordaron que nosotros estabamos en busca de una, pues entonces ofrecieron vendérnosla a un precio increible

—Quieres decir que no has conseguido esta casa a traves de un conocido como tu me habías dicho?—el niega con su cabeza

—No podía decirte la verdad, estas embarazada Millie, no podía permitir que recordaras a Maddie en este momento, el medico dijo que intentaras estar tranquila y sin emocionarte o disgustarte demasiado porque podría afectar de forma riesgosa al bebé, ya ha sucedido antes, o no recuerdas?

—Te has aprovechado de mi situación

—Claro que no! al contrario, estaba protegiéndote. El barrio ha cambiado mucho desde la última vez que estuvimos aquí, hay casas que antes no estaban, y las que aún permanecen han sido remodeladas de tal forma que quedaron irreconocibles, la casa de los Fierman era una—toma mi mano y yo la alejo—iba a ser imposible que reconocieras la casa, y eso me daría un poc mas de tiempo antes de decirte la verdad, pero juro que luego del embarazo te hablaría sobre la casa, te iba a decir a quien pertenecía realmente—cierra los ojos como si el hablar y confesarse en voz alta le doliera—pero no contaba con que encontraras estas cosas. Perdóname Millie—dice volviendo a tomar mi mano y esta vez no niego su cálido agarre—yo solo quería hacerte feliz, sabía cuanto anhelabas y deseabas volver a Luisiana.

Dejo el manojo de cartas que aún tenía en mi mano libre y envuelvo mis brazos alrededor de su cuerpo

—Lo sé—digo sorbiendo mi nariz—pero a veces ocultar las cosas no es la mejor solución a los problemas...