Esa noche me lo pasé genial con todos, me divertí como nunca antes lo había echo, al llegar al hotel Yoongi y yo hicimos el amor, tres o cuatro veces, creo. Por culpa del alcohol no podía recordar bien; más lo que no sabía que por eso perdería todo.

Los rayos de sol se veía en la ventana, eso hizo que me despertará me dolía un montón la cabeza y vi a mi lado de que estaba dormido, era un ángel. Me acerqué y le di un tierno beso en la mejilla; mi celular empezó a sonar como nunca, lo cogí enseguida no quería despertarlo.

Me levanté de la cama y me dirigí al servicio para atender la llamada e hablar mejor: vi que era mi amiga Alba que me está llamando. Tomé su llamada y de repente escuchó.

Alba: Tía porqué no me la has dicho antes, estoy muy feliz de que estés saliendo con Suga....te lo mereces.

No dije nada ya que me había sorprendido por eso, no le dije nada de esa relación, sólo sabía mi familia; empecé a pensar que si ellos se lo ha dicho pero no podía; ellos no son así. Me tenía que calmar más no podía; Alba no dejaba de hablar sobre eso mientras que yo callaba hasta que dije con pocas fuerzas, "como lo sabes" sonaba frío pero quería saber la razón: me comentó de que lo subí a Instagram anoche; al decirme eso empecé a recordar levemente, les dije a los chicos que tomáramos una foto.
Le dije de que le iba a llamar después, tiré el celular al suelo con todas mis fuerzas; mis lágrimas salían sin parar junto con un grito; no paraba de maldecirme una y otra vez; todo esto es mi culpa.

Yoongi vino a mi, lo había despertado, el no entendía que estaba pasando pero no podía decirlo, no ahora. Fui hasta el y lo abracé; no dejaba de llorar. No sabía como arreglar este desastre; tocaron la puerta, me asuste, no sabía quién podría ser.

No le soltaba, no quería que el fuera para allá; pero con un pequeño empujón me apartó de él, enseguida fui hasta la puerta pero era demasiado tarde.
Delante de la puerta estaba Jin con una lágrima en sus ojos y con aquella mirada triste.

Yoongi se preocupó por el, no entendía de porque estaba llorando pero yo sí; vio mi foto en esa red social.
El lo invitó a pasar pero este se negó, con pocas fuerzas dijo que tenía que hablar con él y que era muy importante.

Yo miraba desde la habitación, todo esto es mi culpa; me dolía el pecho, quería que fuese un sueño de mal gusto pero no es así.
Antes de irse me miró y negó, entendí de que esa conversación sería de mi.

El cerró la puerta, me miró muy preocupado; lo entendía no sabia nada de que estaba pasando.

Laura: Fue mi culpa Min Yoongi

El se quedó aún más sorprendido que antes, le dije de que tomará asiento ya que le iba a contar lo sucedido; tardé muy poco en decirle todo: no hablo, no me miraba, se había quedado helado. Miré hacia abajo y en llantos decía de que lo sentía mucho.

Yoongi: Iré a hablar con los demás, quedate aquí.

Se preparó enseguida, apenas me decía algo; yo solo observé de como se iba de la habitación. Pero volvió atrás y cerró la puerta de un portazo.

Yoongi: ¿Qué estabas pensando?

Me sorprendió aquella lágrima que estaba derramando, nunca lo vi así; miento lo vi llorar una vez en un concierto.
Pero de cerca era más sorprendido, el es un chico fuerte aunque tenga sus cosas pero siempre fue así.

No dije nada, solo miré hacia otro lado; comprendió de que no iba a discutir y ahora sí, se fue.
No lo detuve; me abrace a mi misma, he sido una idiota.
¿Como pude hacer esto? Las horas pasaron y yo estaba en esta habitación donde había pasado buenos y lindos momentos con él.

No me esperé para nada que la puerta se abriera, y allí estaban los sietes; todos me miraban con esa tristeza, como yo lo hacía.
Hoseok se acercó a mí y me dijo de que teníamos que viajar a Corea del Sur, Big Hit cómo así se llama la empresa, llamó al líder y quería vernos a todos.
Los gastos lo pagaría ellos, pero yo me negué.

Fue en cuestión de horas que estuvimos en el aeropuerto, le dije a mi madre que tenía que viajar a otro país; le mentí no quería preocuparla.
Durante el trayecto todos estamos mal pero especialmente Yoongi y yo; en un momento le dije de que no había que llorar, ya que lo íbamos a arreglar pero para que mentir, esto no puede arreglarse.