Apenas era las nueve de la mañana aquel sueño tan real como vida se acabó pero se suele decir de que todo lo bueno se acaba; me sentía ansiosa no sabía el porqué más me imagino de por aquel sueño estúpido; el celular empezó a sonar era una llamada; me asuste un poco ya que en mi sueño empezaba así, con una llamada. Fui demasiado despacio para ver quién era, y no me podía creer que era mi mejor amiga; esto no podía pasar, era como el sueño, aquella llamada. Tomé el celular y cogí la llamada: nos dijimos buenos días al mismo tiempo, todo esto no podía ser una coincidencia porque eso no existe; mi mejor amiga me pregunto de qué tal me lo pase, al igual que en ese sueño estúpido me quedé callada, Alba cómo así se llama mi mejor amiga me pregunto que si me pasaba algo: ¿Es bueno ocultar algo? Le formulé aquella pregunta de la nada, me respondió, "Si te pasa algo, sólo dímelo". Aquellas palabras llegaron a mi ser y para no llorar tuve que sonreír falsamente como siempre lo hacía; estuvimos casi media hora hablando, pero justamente tocaron en mi puerta. Ahora así que me estaba preocupando ya que todo en el sueño se estaba realizando, le comenté a ella que tuve un sueño y lo que pasaba ahí, estaba pasando ahora: se quedó sorprendida y me dijo que eso era un deja vu, le dije de que tenía que abrir y que estaríamos en contacto.

Me levanté de la cama, iba hacía la puerta desconfiada ya que no sabía lo que podría pasar, me puse en la puerta y sin abrir dije.

Laura: ¿Quién eres?
Yoongi: Min Yoongi

Al oír ese nombre me puse como mal y feliz al mismo tiempo, no entendía de que hacía el delante de mi puerta: mis manos se formaron en forma de puños.

Laura:¿Cómo sabes donde estoy?
Yoongi: Me acuerdo fácil de una mujer bella cómo tu, pero eso no importa de cómo se que dónde estás, quiero que me digas tu nombre, solo eso.

Ya basta, por favor si no te vas, esto puede ir a más, no me quiero ilusionar como hace dos años, no quería ser lastimada al igual que aquella vez: puse un puño en la puerta pero no movía la mano, y con gritos le dije de que se fuera que yo era solo una fan, como los demás.
Se podía notar de que el silencio reinaba, por favor solo vete y haz lo que tenga que hacer.

Mis sentimientos no podía controlar, ya no tenía control en mi; mis lágrimas brotaban de mis ojos; y con el dolor le dije de que se fuera que no quiero saber de él, ya que mi bias era Jungkook. Al decir eso escuché sus pasos alejándose de mi puerta, caí al suelo y puse ambas manos en el piso. Me sentí mal por el, no se merecía aquellas palabras que dije, yo no quiero esto: me acordé de aquellas palabras que me dijo mi amiga cuando le dije de porqué me sentía así, a lo que ella me respondió que eso era amor.

Me estaba enamorando de un Idol, de una persona que no puede ser alcanzada tan fácilmente más esta vez si.

Mis lágrimas seguía saliendo, no podía  parar de llorar; yo no soy así pero el me hace ser así no lo entiendo. Me puse de pié y intenté de limpiar mis lágrimas pero era imposible; entonces una parte de mí me dijo de que viera aquel papel. Me dirigí a la mesa y tomé ese papel, cuando lo abrí era un numero de una habitación; empecé a pensar de que ese sueño era por algo como especie de un aviso.

Mi cuerpo se empezó a mover, empecé a correr en busca de Yoongi, quería decirle la verdad. No me importa de como estuviera, salí corriendo de mi cuarto para buscar aquél número; tomé el elevador y le di al número 9: no tarde en llegar, cuando me baje del ascensor, estaba el yendo a su habitación lo más seguro. Se veía tan hermoso, tan elegante.

Laura: mi nombre es Laura Winchester, lo siento lo siento

En verdad no podía dejar de llorar pero una parte de mi se quería morir por lo que estaba haciendo; observé de que seguía caminando y no me hacía caso: "No"; al gritar eso corrí hasta él y lo abracé por detrás.
Le empecé a decir de que yo no soy así y no quería ser una privilegiada, y que cuando lo vi e cruzamos miradas por primera vez noté de que había cambiado.

No entendía de porque no decía nada en ese momento, la situación cambió; me estaba abrazando.

Yoongi: No llores, entiendo de que cada uno sea como es pero no te pongas así ( me abraza aún más)

Se podía oír mis llantos, era en verdad como una niña pequeña, odio de que me vean así como una llorona más eso está de más, lo importante es que le había echo a mi corazón y quería que esto durase por siempre.