Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

3

—No, mamá dice que no lo recuerda—respondió James a la pregunta de Carlos.—Pero no hizo tanta falta.—mintió.

—¿No te da curiosidad saber quién es tu padre?—le preguntó Janeth, ella daría lo que fuera por tan solo saber quién era su mamá.

—Si, quisiera saber el porqué no estuvo conmigo—respondió el pequeño.—Pero no puedo hacer nada por eso, así que así estoy bien.

Los cuatro villanos sintieron algo de tristeza por el niño, sabían perfectamente lo que se sentía ya que Janeth pasaba por lo mismo, todos sentían un tipo de impotencia al no poder descubrir aquella verdad, ¿Por qué nadie recordaba nada?

—Te reto a un juego de tourney—dijo Jordan observando a Jay, la pequeña quería que todos dejaran de hablar sobre el tema de los padres.

—Oh, no es necesario pequeña rata—se burló Jay—Ya sabemos que yo ganaré, no te molestes.

—Pfff, en tus sueños me ganarás—dijo Jordan un poco molesta al ver la seguridad de Jay—¿Acaso tienes miedo de que una niña te gane?

—Si no conociera a Jay, diría que esa niña es hija de él, son idénticos—susurró Evie a Carlos, quien asintió un poco asombrado. Si bien físicamente la niña se parecía a Jay, en actitud realmente era su copia, lo cual se les hacía demasiado extraño, era una completa coincidencia.

—No empieces Jordan—la regañó James—Recuerda lo que dijeron nuestras madres, no hay que causar problemas, es mejor estar tranquilos.

—Me cae mejor tu mamá que tú—le dijo Jordan sacándole la lengua, James le sacó la lengua de vuelta y luego ambos rieron juntos.

—¿Crees que pueda conocer a tu mamá?—Janeth se acercó un poco más a ambos niños, le causaba algo de intriga saber cómo era la mamá del único niño de aquellos amigos.

—¡Por supuesto! la tía Jane es demasiado divertida—Se apresuró a responder Melissa emocionada, si Jane conocía a la pequeña Janeth, las dejarían hacer pijamadas juntas.

—Y bien, ¿Cuál será nuestro siguiente paso?—Mal dejo de prestarle atención a los niños y se dirigió a Carlos y a Evie, ya que Jay accedió al reto de Jordan y ambos salieron de la casa a jugar.

—No lo sé, ¿Están seguros de querer hacerlo?—preguntó Evie dudosa, el conocer a aquellos niños la habían hecho cuestionarse respecto a el malvado plan de su madre.

—Yo no, no pienso exponer a mi hija, lo dije desde un principio—respondió Carlos—Yo estoy aquí solo para responder algunas de mis dudas, pero solo me surgieron más.

—¿De qué hablas?—preguntó Mal confundida.

—¿No les parece extraño que todos estos niños literalmente sean una mini copia de nosotros?—preguntó algo obvio y sin bajar la voz, ya que los niños habían ido detrás de Jay y Jordan para alentar el juego.

—Es solo una coincidencia, Carlos, son niños de Auradon, ¿Qué podría significar eso? jamás en la vida hemos coincidido con ellos ni por si acaso—exclamó Mal.—Si no quieren seguir el plan, está bien. Yo lo haré sola.

—Mal, razona un poco—le dijo Evie—¿De verdad esos pequeños no causaron nada en ti?

La conversación de aquellas chicas fue interrumpida por el sonido del timbre, Carlos decidió ser él quien fuese a atender.

—Hola, lamento tanto que Ben tuviese que dejar a los niños aquí—la chica que había tocado el timbre empezó a hablar sin siquiera ver quién la había atendido, se sentía algo avergonzada.

—Vaya—pensó Carlos en voz alta, analizando a la chica de pies a cabeza, vaya que era linda—Digo....Hola, soy Carlos.

—Soy mamá de James, Jane. Mucho gusto—Jane observó a aquel chico y sintió un pequeño escalofrío recorrer por su cuerpo, se sentía extraña.

Carlos no dio respuesta alguna, seguía observando a aquella chica algo embobado. Mal decidió acercarse a ellos.

—¿Vienes por tus demonios? adelante, llévatelos—exclamó la pelimorada señalando el patio de la casa en donde Jay jugaba con los niños.

—Oh no, yo solo vengo por James. Lonnie y Ben aún estan ocupados y yo debo ir a visitar a mi mamá, no puedo llevar a todos esos traviesos—explicó Jane amablemente. Mal solo torció sus ojos.

—¿James es tu hijo?—preguntó Carlos sacudiendo su cabeza, para así salir de aquel pequeño embobamiento que había tenido con Jane.

—Si—respondió algo confundida, no había observado bien a aquel chico y pudo notar que este tenia las mismas pecas que tenía su hijo—Ya sé que es un gran trabajo estar con él, por eso les agradezco tenerlo aquí. Si necesitan algo cuenten conmigo.

Carlos no respondió, la voz de aquella chica era tan dulce y ella era tan amable, a pesar de saber que ellos eran hijos de villanos. No entendí el porqué él padre de James simplemente había desaparecido.

—Carlos, te están hablando—lo regañó Evie, pero al notar que él seguía sin decir nada, decidió ser ella quien respondiese—Muchas gracias, Jane. Soy Evie por cierto, hija de la reina malvada.

Jane observó a Evie, sin quitar su mirada confusa, el color de su cabello llamó su atención, era el mismo color que tenía la pequeña Evelin. Las similitudes de los pequeños con aquellos chicos le parecían algo extrañas.

—Me estoy volviendo loca—se susurró a sí misma.

Antes de poder decir algo en voz alta, los niños, a excepción de Janeth, se dirigieron a ella corriendo. Habían terminado aquel juego en donde Jordan salió triunfante, al entrar a la casa notaron la presencia de Jane y no dudaron en correr hacia la chica para saludarla con besos y abrazos.

—Mami te extrañé.

—Cállate, yo la extrañé más, tú la ves todos los días—exclamó Jordan abrazando más fuerte a Jane. Aquella chica no sabía cómo escapar de los niños, sus abrazos eran demasiado fuertes como para ser tan pequeños.

—De acuerdo, muchos abrazos por hoy—Jane se alejó un poco de los niños sonriendo para que estos no se sintieran mal, pudo notar a una pequeña alejada del resto, de inmediato supo que era la hija de Carlos.

—Tia, ella es Janeth—exclamó Melissa yendo con su nueva amiga y acercándola a Jane.

—Hola linda, soy Jane—se presentó aquella chica, si de por sí ella adoraba a los niños, esa pequeña había causado algo en ella que el resto de pequeños, a excepción de su hijo, no le causaba.

—Es mi mamá—dijo James orgulloso mientras le daba la mano a Jane.

Jane se quedó en silencio un momento, la similitud de la pequeña niña con su hijo era enorme, se le hizo extraño, ya que la única diferencia notoria entre ambos era el color de ojos de la niña, casualmente eran del mismo color que los de ella.

—Cielo, despídete, vamos a ir a ver a la abuela y ya estamos tarde.—dijo desviando su atención de lo que pensaba era solo una coincidencia.

—Janeth y la tía Jane son muy parecidas...

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro