Pov.narrador/ra

Hoy era un día especial para nuestro pequeño Litten y sus hermanos, pues irían a su primer día de clases en la PokeScuela platinum Lugia.

El trío de hermanos estaba emocionado, unos más que otros pues el pequeño Kyori no estaba tan alegre como sus hermanos, el pobre estaba nervioso, iría a un lugar lleno de pokemones que no conocía de nada, sin sus padres para que le acompañaran ni le defendieran o a sus queridos hermanos pues se había enterado de que no asistirían a los mismos salones, estaría solo en aquel lugar, solo con un montón de extraños.

—Ryu, Yuki, Kyori es hora de irnos.

Llamo Rosed a sus cachorros desde el piso de abajo, esta les esperaba para llevarlos a la escuela.

No faltó mucho para que los tres bajaran casi corriendo por las escaleras riendo y empujandose, peleando por quien sería el primero en llegar; siendo esta Yuki proclamándose ganadora, detrás de ella Kyori siendo el segundo y finalmente Ryu el cual había llegado al último debido a que se calló en el último escalón de la escalera. La Mienchao río enternecida por las travesuras y ocurrencias de sus pequeños, feliz de finalmente ver a los tres poder jugar juntos pues antes de que se amado esposo se los llevará a su trabajo, el menor de ellos, Kyori, no jugaba con sus hermanos, siempre se la pasaba en su cuarto leyendo, tímido al contacto con los demás y penoso al momento de hablar. Pero ahora, el pequeño se veía más vivo, más alegre, más juguetón; y eso le alegraba enormemente.

—¿tienen sus cosas?.— pregunto dulce a lo que los pequeños asintieron de manera afirmativa —bien, vámonos o llegaremos tarde.

Y sin más, marcharon de su hogar en dirección a la escuela.

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El camino no fue muy largo, para suerte de la pequeña familia la escuela estaba cerca de su hogar, luego de unos quince minutos de caminata finalmente llegaron a la gran institución de aprendizaje, un edificio muy grande pintado de blanco, con ventanales enormes de tonos azules, una fuente en la entrada acompañada de una enorme estatua de un Pokémon con apariencia de algún lagarto o dragón volador.

(Más o menos así se veía la estatua).

Rosed les acompaño al interior de la escuela, más específicamente el gimnasio donde el director daría la bienvenida a los pequeños de nuevo ingreso para después enseñarles sus salones.

La charla fue larga y aburrida, tanto que ya varios niños no dejaban de bostezar somnolientos, los pequeños fueron empezados a llamar uno por uno para ir con sus profesores asignados quienes se los llevaban a sus salones, poco a poco el gimnasio se fue quedando cada vez más y más vacío.

En un momento dado, Kyori fue llamado para ir con su profesora y grupo, el pequeño miro a su madre quien le regaló una sonrisa, animandole para que fuera con su maestra y sus compañeros, lo cual el pequeño hizo.

La maestra era una encantadora Audino que poseía una de las sonrisas más cálidas que alguna vez había visto en su joven vida, la pokemon se presentó como la señorita Luz y les informo que si tenían dudas sobre cualquier cosa no dudarán en hacercelo saber, también les llevo a su salón, era el número cinco de los de nuevo ingreso, les dejo escoger su casillero y haciendo, luego llamaría a alguien para poder decorar estos al gusto de cada niño.

Luego de aquello, les pidió a cada uno que se presentara para así irse conociendo mejor, el primero en levantarse fue un Pokémon tipo agua de copete quien tras arreglar su plumaje hablo.

—bueno, mi nombre es Yolde y planeo ser el más fuerte del Ranking de peleadores.— soltó el Quaxly arreglando nuevamente su plumaje para volver a sentarse en su puesto.

Al momento otro alumno se levantó e hizo su breve presentación, y así fueron hasta que llegaron al turno de Kyori el cual, se levantó lleno de nervios, pues todos le miraban atentamente, el odiaba sentirse observado, pues sentía que le juzgaban, cada movimiento que hacía, cada vez que respiraba, todo parecía que lo hacía mal, que se reirán de él por cualquier cosa que hiciera.

—m-mi nombre es Kyori.— su voz tembló un poco debido al miedo que sentía —y me gusta leer libros s-sobre aventura.

Creyendo que era suficiente de él, decidió sentarse en su asiento y dejar que sus compañeros siguieran presentándose, hasta que finalmente le tocó al último quien era una Sprigatito, esta se levantó entusiasmada de que finalmente fuera su turno, aclaró su garganta y comenzó con su presentación.

—¡hola a todo el mundo!.— saludo entusiasta cosa que llamo la atención de Kyori —Mi nombre es Kelly y me gustan los cómics de superhéroes, tanto que de grande me gustaría ser una superheroína.

Nuestro querido Litten sonrio al escucharla, la tipo planta se oía tan decidida y animada a cumplir con aquella meta, no sabia por que pero, aquella positividad que emanaba la chica le motivaba a él también.

—ey loca, bájate de tu nube.— se escuchó la risa de varios de sus compañeros después del comentario del tipo agua —los superhéroes no existen.

—¡por supuesto que sí!.— reclamo ella con molestia al escuchar las risas de los demás.

—niños, niños dejen de pelear.— Luz intervino cuando vio que las cosas se estaban pasando un poco de la raya —no se rían de su compañera, cada uno tiene una meta y gustos diferentes.

Pero las risas y burlas no pararon, así que la Audino no tuvo más remedio que castigar a aquellos que no paraban de burlarse, la pequeña Kelly se sentó en su puesto molesta por las palabras de los demás, mientras que Kyori solo le miraba desde lejos, sintiendo algo de pena por ella, la Sprigatito solo quería expresar sus gustos, no entendía por qué los demás podían reírse de ella por eso.

Ya cuando las cosas por fin se había calmado un poco, la maestra se dio la vuelta y camino hacia el pizarrón dispuesta a dar su primera clase.

Cuando de repente la puerta fue abierta de un golpe asustando a los alumnos y a la profesora quien pegó un pequeño grito debido al susto.

—¡dizkulpe phofesora! ¡Aki li traijo oto aluno!.

Un Lycanroc crepuscular hizo aparición, en su hocico cargaba a un pequeño Rockruff que gruñia con molestia.

—¿Max, Sam...?

Se pregunto confundido y sorprendido al ver a ambos hermanos.

Continuará...

Nota; las imágenes usadas en este capítulo obviamente no son de mi propiedad; créditos a sus respectivos creadores/autores.