Capítulo 06 - Final 2da pt.
Final 2/2.
Pov narrador.
Las calles de aquella ciudad estaban decoradas; algunas bandera de arcoíris pegadas en las paredes o colgadas de algunos árboles. También había personas caminando de un lado a otro con listones de colores y con ropa llamativa. Era un día festivo para muchas parejas en la comunidad LGBTQ.
Todo eso y mucho más estaba por ocurrir en la marcha Pride en algunas horas. Jimin siguió el consejo de Jungkook, dejó que el castaño decidiera revelar su relación a su familia; aunque estaba un poco preocupado ya que aún no regresaba. Eran casi las siete de la mañana y el pequeño rubio se encontraba en el departamento de sus mejores amigos: Yoongi y Taehyung.
Después de ir a esa marcha, tenían planeado ir al parque de feria que abriría especialmente por este día, pero Jungkook aún no aparecía y empezaba a creer que no podrían ir a la marcha y tampoco subir a la noria.
— Jimin, ¿podrías calmarte? Quizás se retrasó un poco, él vendrá. —dijo un pelinegro mientras acomodaba su vestuario.
— Te ves hermoso, hyung. —halagó Jimin cuando vio a su mejor amigo con aquel atuendo delicado y hermoso.
Yoongi sonrió orgulloso, le gustaba usar faldas algunas veces, su cabello estaba un poco largo y su fisonomía se veía delicada cuando usaba ese tipo de prendas. Cualquiera pensaría que es una chica y eso no le molestaba, pero a veces se divertía molestando a su novio de vez en cuando.
Jimin por otro lado, solo traía un suéter cardigan color rosa y unos jeans ajustados; sus zapatos eran amarillos y tenía ligeramente el rostro maquillado y unas cuantas hebras de cabello rubio sobre su rostro.
Se veía como un ángel inocente.
— Ya no te agobies mucho, Jimin. Te prometo que, si Jungkook no aparece, yo mismo le pateo las canicas. —Jimin rió al escuchar a Yoongi decir eso.
Taehyung se encontraba fuera de su apartamento esperando señales de Jungkook, este le había enviado un mensaje diciéndole que estuviese solo para poder recibir su llamada.
— Jodido idiota, no quiero estar aquí afuera. —gruño cuando contestó la llamada que había entrado recién.
— También te amo, amigo.
— ¿Vendrás, sí o no?
— Solo cuida a Jimin mientras están en esa marcha. Yo... no puedo llegar ahora.
— ¿Te encuentras bien, Jk?
— Solo hazme ese favor, Taehyung. Dile que me perdone por no llegar ahora.
Y la llamada se colgó del otro lado del teléfono, dejando a un confundido Taehyung en aquella acera por haber escuchado a su amigo decir aquello. Iba a regresar adentro, pero las voces de Jimin y Yoongi se acercaban más, así que no pudo hacer más que fingir que no recibió la llamada e irse junto a su pareja y el novio de su mejor amigo.
— Amor, ¿nos vamos? —preguntó Yoongi cuando estuvo en frente de Taehyung.
— Ah, s-sí.
Jimin busco a su alrededor a su novio, tenía la esperanza que lo encontraría con Taehyung cuando estaban bajando, pero tampoco se encontraba ahí.
— Bien, primero iremos a la marcha; después a comer algo, y por último al parque de feria. —informó Yoongi.
— ¿A comer de nuevo? Pero si lo hicimos antes de salir, hyung.
— Jiminie, después de horas de caminata y gritar como unos desquiciados el amor que nos tenemos, querrás hasta comerte un gigante.
— ¿Jungkook vendrá? —no pudo evitar preguntar el rubio, viendo por la ventana sin darse cuenta que Taehyung le veía desde el espejo retrovisor algo preocupado.
— Probablemente se le hizo tarde, estoy seguro que vendrá. —dijo el castaño, sin saber que probablemente lo que acababa de decir podría ser mentira.
Mientras más se acercaban a la central, más podía escucharse la música y los gritos de las personas. Los colores abundaban y las personas homosexuales y otras orientaciones sexuales se demostraban amor entre sí. Jimin solo abrió los ojos emocionado, viendo a través de la ventana del auto lo hermoso y alegre que estaba siendo todo.
Tuvieron que relacionarse un poco más atrás, ya que si iban en el auto podrían atropellar a alguien. Cuando bajaron del auto y empezaron a caminar entre la multitud, Jimin empezó a sentirse decaído. Yoongi le había dado una bandera y un trompetín para que hiciese escándalo como todos a su alrededor, pero Jimin solo quería a Jungkook a su lado.
Desde su lugar observó a sus dos mejores amigos disfrutando de su compañía, pero el estaba solo ahí, su Jungkook no había vuelto por la mañana y al parecer tampoco vendría esa tarde. Trató de sonreír y animarse a sí mismo; hasta que de repente todo se detuvo y sobre un pequeño camión con una tarima en ella, una drag queen empezó a cantar de la nada, atrayendo varios aplausos de inmediato.
No encontraba a Yoongi y a Taehyung por ningún lado, así que empezó a buscarlos entre el gentío. Mientras los buscaba empezaba a sentirse frustrado; ya no quería estar ahí, quería irse a su hogar y sacar su enojó comiendo helado de galletas mientra veía series en Netflix. La persona que amaba no estaba junto a él, no tenía ánimos de estar ahí con los demás.
Cansado de buscar y no encontrar a sus amigos, decidió irse de ahí, ya con traicionera lágrimas apareciendo en sus ojos.
— Eres un completo idiota, Jungkook. Dijiste que vendrías aquí conmigo y que la pasaríamos bien juntos, pero no viniste y me dejaste solo...
Cuando estuvo a punto de salir del centro de aquella multitud; alguien tomó su antebrazo y lo haló con algo de fuerza hasta que chocó de frente contra un pecho ajeno al suyo.
— ¡¿Qué te pasa, idio-...
El rubio casi se atragantó con su propia lengua cuando vio al chico a quien amaba en frente suyo con una sonrisa tímida y una ropa que hacia conjunto a la suya.
— Hola, cariño... —sonrió Jungkook.
Jimin no pudo contener más sus lágrimas y lloró de frustración y preocupación, claro que el más alto se preocupó y le abrazó con fuerza, sin lastimarle, besando repetitivas veces su cabeza mientras susurraba muchos «lo siento, bebé» después de cada beso.
— Pensé que tus papás te habían hecho algo. —sollozó el menor— T-También pensé que no podrías estar conmigo.
— Perdóname, bebé. —dijo con voz tenue mientras abrazaba a su pequeño— No terminé en buenos términos, así que tenía que hacer algunas cosas antes de venir acá.
— ¿Tus papás lo tomaron con calma? —moqueo un poco el rubio, sacándole una leve risa a Jungkook por lo tierno que se veía con su naricita de botón rojiza.
— No, pero ya no me molestará más ese asunto, soy libre ahora.
— ¿Libre...? —Jungkook asintió.
— Ya no tendré que ocultarme de mis padres y podré besarte frente a todo el mundo sin que el miedo a que me descubran me moleste. —Jungkook sonrió de tal manera que contagió a Jimin y sonrió al igual que él— ¿Te molestó que llegase tarde?
Jimin negó.
— Ya no importa, solo importa que estés aquí conmigo. —dijo mientras abrazaba a Jungkook— Te amo, Kookie.
— Yo también te amo, Jiminie.
Jungkook tomó con ligereza el rostro de Jimin y le dio un beso frente a todos los que se encontraban allí. Escucharon algunos aplausos a su alrededor, decir que eso no le causó euforia y nervios, simplemente estarían mintiendo. Jungkook se sentía feliz junto a Jimin de esa manera; se sentía libre en todos los sentidos.
Ya no tendría a sus padres vigilándole.
Ya no fingiría no tener una relación con un chico.
Ya no tendría que ocultar su amor por Jimin.
Ambos sabían eso y les encantaba de esa manera.
No pasaron muchos minutos cuando Yoongi y Taehyung aparecieron tomados de la mano en frente suyo. Ambos estaban felices por sus dos amigos, así que entre los cuatro amigos, se regalaron un fuerte abrazo y sonrieron después de haberse separado.
— Me alegra que hayas venido, Kook. —dijo Taehyung mientras sonreía.
— Perdón por la llamada, no sabía cómo explicarte lo que tenía que hacer antes de venir acá.
— Imbécil.
Jungkook solo rió al ver el ceño fruncido de su amigo. Los cuatro empezaron a caminar en la marcha, gritando cualquier tipo de frase llena de amor y unos cuantos insultos de Yoongi cuando un hombre mucho mayor que el trataba de coquetearle.
Sin duda, la primer y mejor marcha que tanto Jungkook como Jimin han tenido, ya que asistieron ambos a ella, como pareja y no fingiendo ser amigos.
🏳️🌈
Las horas pasaron rápido, la marcha ya había acabado y las parejas empezaron a dispersarse e ir a diferentes lugares. Jungkook iba de la mano con Jimin, ambos mientras escuchaban a Taehyung y Yoongi reír por sus bromas y comían algo de helado que habían comprado justo después de irse del lugar.
— ¿A dónde iremos? —preguntó Jimin.
— ¿Lo olvidaste, Park? Iremos todos al parque de feria, quiero subir esa cosa de los corazones andantes. —dijo emocionado Yoongi.
— Yoongi, no es San Valentín.
─ Taehyung, no me arruines el momento; ahí venden salchichas quemadas y yo las quiero. —alegó el peli-negro.
Jungkook desvió su mirada de sus amigos y miró de reojo a su novio, quien se encontraba sonrojado y con la mirada en el suelo.
¿En qué estaría pensando? Se preguntó Jungkook en sus pensamientos.
Lo estuvo pensando unos minutos hasta que recordó lo que dijo antes de haberse ido a casa de sus padres: Después de enfrentar mis miedos y demostrar quién soy en realidad, iremos juntos a la Noria y cuando estemos en la cima, te besaré frente a todo el mundo, la Luna llena siendo testigo de mi inmenso amor por ti.
Ahora lo recordaba. Su pequeño estaba ansioso, Jungkook no pudo evitar sonreír por ello.
— Chicos, Jimin y yo iremos a otra parte. —avisó Jungkook, Taehyung y Yoongi asintieron, estos yéndose a cualquier lugar, mientras Jungkook y Jimin se quedaban en un silencio que estaba incomodando al pequeño rubio.
— Vamos, Mochi. —le llamó Jungkook.
La pareja atravesó todo el campo, esquivando personas que caminaban de un lugar a otro, mientras iban de las manos y sonreían como dos preadolescentes enamorados. Después de varios minutos de caminata, Jungkook se detuvo en un lugar, Jimin al instante dándose cuenta en donde se habían detenido y lo que harían frente a aquella rueda gigante.
— Te dije que te traería aquí cuando me haya liberado de mis cadenas. —le miró atentamente el pelinegro— Ya no las tengo, Jiminie.
El mencionado solo asintió y con timidez tomó la mano de su pareja, diciéndole de esa manera que estaba feliz que fuese el mismo y estuvieran ambos juntos en ese momento. Ambos estaban felices de estar juntos en ese momento, no como amigos a ojos de los demás, sino como pareja.
— ¿Subimos?
— Sí. —sonrió Jimin.
Ambos pidieron sus ticket y fueron hacia el lugar en el cual subirían hasta la cima. Cuando ambos estuvieron dentro de aquella cabina, la máquina empezó a girar, subiéndolos a ambos hasta la cima mientras ambos se tomaban de las manos y se mantenían muy cerca del otro porque así les gustaba estar.
— Se ve hermoso... —halagó Jimin cuando por fin llegaron a la cima de la noria.
La ciudad de Seúl se veía desde su sitio y la luna brillaba en su máximo esplendor. El lugar era etéreo para ambos, estaban embelesados por tal imagen, les hacía bien estar ahí juntos. Ambos están felices de estar juntos fuera de paredes y escondites para poder amarse.
— Jiminie, ¿recuerdas lo que dije antes de salir de tu casa? —Jimin asintió. Jungkook solo sonrió y tomó con sus manos las contrarias— Te amo como no tienes idea, Park Jimin, y por eso quiero compartir mi vida contigo; hasta a donde nos lleve el destino. Prometí traerte aquí y besarte frente a todo el mundo. Ya no necesito a mis padres, yo no los perdí a ellos; ellos me perdieron a mí. El dinero, no hay problema, tengo años de ahorros y trabajaré para poder darnos una buena vida. Te amo, mi Jiminie y quiero estar contigo siempre.
El rubio sonreía mientras sus mejillas estaban impregnándose de un color carmesí, derramando pequeñas lágrimas de felicidad por lo que Jungkook decía. El pelinegro solo tomó con ligereza el rostro de Jimin y lo acercó así mismo, quedando a solo pocos centímetros de distancia.
— Jimin, quiero besarte. —demandó Jungkook.
Y con ojos entrecerrados y una hermosa sonrisa tímida en sus labios, Jimin susurró un casi inaudible: — Hazlo entonces, Jungkook.
Y Jungkook le besó con pasión, Jimin cediéndole el total control a su novio, ambos besándose como si no lo hubieran hecho hace meses, a veces escapandose leves risas de felicidad de ambos por lo demandante que ambos podrían llegar a ser y lo bonito que resultó ser ese día, el cual nunca olvidarían. Ambos se encontraban en la cima de aquella rueda gigante mientras la Luna presencia su hermoso amor sincero.
Jungkook y Jimin ya eran libres de demostrar su inmenso amor sin restricciones familiares.
Fin.
-🏳️🌈-
Espero les haya gustado este fanfic.
Gracias a las personitas que le están dando apoyo.
Les mando un abracito por si alguien acá pasa por una situación similar a la que refleje en el fanfic. 🏳️🌈
Sean felices y amen mucho a los dueños de su corazoncito.
Att. Gigi ♥️
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