♡Don't trust anyone below the sun
Chang dio algunas vueltas en su motocicleta antes de aparcar frente a la entrada del apartamento de Nunu y Hoseok. Había logrado aplacar un poco el sentimiento de rabia que lo había acompañado todo el día. Se sentía traicionado. Hoseok lo había traicionado. Quería molerlo a golpes por haberse atrevido a poner las manos en HyungWon. Tiró el cigarro en la vereda y lo aplastó con el taco de su bota. Así quería aplastar la cabeza del traidor de Hoseok.
Subió los escalones de dos en dos y cuando llegó tocó el timbre. Puso su mejor sonrisa cuando Hoseok abrió la puerta y lo invitó a pasar.
—¿Cómo estás, bro? —saludó chocando los puños y entrando a la sala.
—Bien, bien —Hoseok cerró la puerta y lo siguió— ¿cerveza?
Chang asintió y se sentó en el sofá, apoyando los pies en la mesita ratona de la sala.
—Claro. ¿Y Nunu? —preguntó.
Hoseok salió de la cocina con dos botellitas de cerveza en la mano.
—Vendrá tarde. Tiene que entregar una moto mañana y los respuestos llegaron tarde.
—Vaya, ¡qué mierda! ¿Todo bien aparte de eso? ¿De qué querías hablar?
Intentó poner una expresión apacible aunque por dentro estaba muriendo de rabia. Vio a Hoseok inclinarse hacia adelante con la cerveza en la mano y la mirada sobre la mesa.
'No se atreve a mirarme. Maldito cobarde traidor'.
—Quiero hablarte sobre HyungWon.
Chang asintió y también se inclinó hacia adelante adoptando una postura relajada.
—¿Qué pasa con él?
Hoseok suspiró y levantó la mirada.
—Yo no quiero seguir adelante con tu plan.
Chang quiso echarse a reír. Pero en cambio levantó las cejas y frunció los labios.
—¿A qué te refieres con eso de que no quieres seguir adelante? Dijiste que me ayudarías a vengarme de ese idiota.
—Hey, no hables así de él —el tono con el que Hoseok lo interrumpió lo tomó por sorpresa.
—Wow... veo que también logró engatusarte. Al final no eres diferente al resto de los imbéciles que cayeron antes que tú. No te culpo —dijo echándose para atrás y sonriendo de costado— el tipo ese sabe cómo jugar sus cartas.
Hoseok resopló molesto.
—No sabes lo que dices. Él no... HyungWon no es así.
Chang soltó una risa despectiva y se levantó.
—Esto es francamente increíble. Ahora piensas que tú lo conoces mejor que yo. Pero te diré algo, tú no sabes nada de ese...
—Ten cuidado con lo que vas a decir.
Chang se quedó viéndolo con el ceño fruncido entre sorprendido y divertido.
—Mira, Chang —Hoseok también se paró y comenzó a caminar de un lado a otro—. Al principio pensé que tu plan era una buena idea y hasta me reí un poco de él. Pero con el paso de los días, nos fuimos conociendo mejor y... lo siento, pero yo me enamoré de él.
Ahora la carcajada de Chang se escuchó en todo el piso.
—¿Enamorado? ¿Me dices que te enamoraste? Tienes que estar bromeando.
Hoseok se puso serio y se cruzó de brazos.
—No estoy para bromas. Estoy hablando muy en serio. Me gusta, la paso bien con él y si te llamé fue para decirte que no pienso seguir con esto.
Chang asintió despacio y al cabo de un rato, suspiró y volvió a tomar asiento.
—¿Tú de verdad lo quieres? —le preguntó.
Hoseok asintió.
—Si. Me gusta mucho. ¿Puedes entender eso?
—Bien, si es así entonces creo que ya no tiene sentido seguir con esto. Yo estaba dolido, HyungWon me había rechazado delante de toda la universidad y supongo que hirió mi orgullo. Pero tú eres mi amigo y si tú lo quieres —hizo una pausa— supongo que deberé aceptarlo.
Hoseok se acercó y lo abrazó.
—Sabía que lo entenderías. En serio, él es una persona genial.
Chang intentó sonreír y luego de un rato, salió del apartamento.
—Me las van a pagar. Ambos.
Hoseok se echó a reír y tropezó con un almohadón cayendo de bruces al piso.
—¿Ahora quién se rie de quién? —preguntó HyungWon agarrándose el estómago.
Hoseok se sentó en el piso y siguió riéndose.
—Lo siento, ojitos, pero esas pantuflas son ridículas.
HyungWon entrecerró los ojos y se miró los pies.
—Hey —dijo haciendo un puchero— la tortuga es mi animal favorito. Además, ¿qué tienen de feas?
Hoseok puso una mano bajo su mentón y adoptó un aire pensativo.
—Por empezar, esas tortugas tienen un cuerno en el medio de la cabeza. ¿Acaso es un híbrido entre una tortuga y un unicornio?
HyungWon se quitó una y se la lanzó a la cara.
—Cállate. Y las compré porque estaban en oferta.
Hoseok se arrastró hasta su novio y le abrazó las piernas.
—No me pongas esos ojitos, tus pantuflas son horrendamente lindas. Ahora ven y dame un beso.
HyungWon se agachó y le tomó la cara entre las manos.
—No te lo mereces, pero haré una excepción, solo porque aceptaste ver Los puentes de Madison conmigo.
Hoseok sonrió y recibió un beso que lo dejó mareado.
—Si vas a besarme así cada vez que acepte ver un película, ve haciendo una lista y prepara ese sofá porque no me moveré de allí en años.
HyungWon dejó escapar una risita y lo ayudó a levantarse del piso.
—Deja de decir tonterías y ponte cómodo. Iré a preparar palomitas.
Hoseok caminó hasta el cuarto de baño y se dio ducha rápida para sacarse el olor a aceite de motor del cuerpo. Luego se puso unos shorts y una playera y se echó en el sofá.
HyungWon apoyó el bowl de palomitas en el regazo de su novio y luego se acurrucó a su lado.
—Mmm, hueles rico —dijo apoyando la nariz en el cuello de Hoseok.
—Si quieres que vea la película, deja de hacer eso o no respondo por lo que pueda pasar a continuación —dijo girando la cara de golpe y atrapando los labios de HyungWon entre sus dientes. Este jadeó.
Pronto la película y las palomitas quedaron relegados a un segundo plano y la sala se llenó de suspiros. El gran cuerpo de Hoseok lo tenía atrapado contra el sofá y HyungWon tenía las piernas enredadas en la cintura y los brazos alrededor del cuello contrario.
—Esto no puede ser normal —murmuró Hoseok con los ojos cerrados y dejando un camino de besos sobre el cuello de HyungWon— podría besarte todo el día...
—...pero es de noche... —dijo HyungWon echando la cabeza hacia atrás para que la boca de Hoseok siguiera con lo que estaba haciendo tan bien.
—Resultaste ser todo un bromista —Hoseok desprendió los botones de la parte superior del pijama de su chico y bajó la boca hasta el botón rosado para luego succionar con fuerza. HyungWon cerró sus dedos sobre la espalda ancha y gimió—. ¿Quieres ver lo que le pasa a los bromistas?
HyungWon asintió con fervor y se dejó llevar por las caricias. Pronto estaban ambos desnudos y rodando por el piso haciendo el amor escandalosamente. Era inceíble como en tan poco tiempo sus cuerpos habían encontrado el ritmo perfecto y descubriendo el placer de sentirse deseado y cuidado. Para ambos, todo estaba resultando abrumadoramente perfecto.
—¿A... Aún quieres ver esa película? —Hoseok yacía recostado sobre el pecho agitado de Wonnie.
—Apenas si puedo respirar... —dijo HyungWon llevándose una mano al pecho.
Se quedaron sin ver la película porque se quedaron dormidos sobre la alfombra. Cuando se despertaron ya eran pasadas las ocho se la mañana y ninguno quería salir de la casa.
Hoseok lo llevó hasta la universidad y se despidieron a regañadientes.
—El objetivo es encontrar soluciones no triviales en forma de producto de funciones de una variable para esta ecuación de onda... —Chang bostezó y apoyó la frente en la mesa de la biblioteca donde se encontraba estudiando matemáticas—. Chang, no es tan difícil, presta atención a esto... —HyungWon le señaló algo en un apunte y Chang parpadeó intentando ahuyentar el sueño.
Cuando HyungWon amenazó con irse, Chang se sentó derecho e intentó enfocarse en la hoja que tenía enfrente. Pero entre que el ejercicio era difícil y aburrido y HyungWon olía maravillosamente bien y se veía demasiado hermoso, Chang no pudo procesar una palabra de lo que el alto le decía.
—Ya, no tiene sentido. No puedo concentrarme —Chang golpeó el puño sobre la mesa y recibió un reto por parte de otros alumnos que se encontraban estudiando.
—Hey —HyungWon le palmeó los hombros y le sonrió— no digas eso, yo sé que puedes hacerlo. Vamos, haz un último esfuerzo...
Chang solo pudo ver que los hermosos y apetitosos labios de HyungWon se movían y sin detenerse a pensar que estaba haciendo, se inclinó hacia adelante y le dio un beso. HyungWon, horrorizado, se echó hacia atrás violentamente y lo miró con abierto desprecio.
—¿Qué mierda haces? —dijo intentando mantener una calma que no sentía—. ¡Tengo novio! Eres un idiota, no debería haberte ayudado... —se levantó haciendo demasiado ruido y salió de la biblioteca hecho una furia.
—Hey, Chang, ¿te rechazaron otra vez? —gritó alguien en voz alta. Hubo algunas risas y poniéndose rojo, salió del lugar arrastrando su mochila.
Corrió por los pasillos hasta llegar al aula donde HyungWon debía tener la clase siguiente, pero luego recordó que se habían saltado el almuerzo para estudiar. Y entonces supo donde encontrarlo. Caminó rápidamente sin prestar atención a la gente que se llevaba por delante ni a los insultos que algunos alumnos le decían. Sólo podía pensar en cómo iba a cobrarle todas las humillaciones al idiota de HyungWon.
Lo encontró en la mesa de siempre, con los idiotas de sus amigos rodeándolo. Se acercó y Jooheon, al verlo, le salió al paso.
—Vete de aquí, Chang. Déjalo en paz —dijo poniéndole una mano en el pecho. Chang le dio un manotazo y lo empujó.
—Tú no te metas, no es tu maldito problema.
HyungWon se levantó, con la cara tensa.
—¿Acaso no puedes entender que no me gustas? Estoy en pareja con alguien, tengo novio. Métetelo en la cabeza.
Chang entonces sonrió y sacó su celular. Abrió su galería y miró a HyungWon con una sonrisa socarrona.
—¿Tu novio? ¿Quieres saber quién es tu novio, estúpido? —puso play y apoyó el celular frente a HyungWon.
'—Cállate... Besé a un hombre...
—¿Eh? Quiero besar a alguien yo también...
—¿Sabes lo que eso significa, idiota?
HyungWon bajó la mirada hacia la pantalla y vió a Hoseok con el torso desnudo y dos muchachas que besaban su pecho. Entonces una de ellas se levantó y Hoseok la jaló hacia su regazo nuevamente y le apretó el trasero.
-¿Qué significa qué?
-Un tipo me besó.
Hoseok besó a la chica en los labios.
—Necesito borrar el maldito asco que siento...
Hubo algunas risas y luego Hoseok siguió besándose con ambas mujeres. HyungWon sintió que se le revolvía el estómago.
—No puede haber sido tan malo —la voz de Chang se escuchaba distante.
Hoseok miró a la cámara y su mirada se oscureció. —No soy un maldito puto. Entiéndelo...'
Min agarró el celular y lo lanzó al piso.
—¡Estás enfermo! —le gritó.
Chang alzó las cejas.
—¿Yo? Ah, y agradece que yo tomé esto sino quién sabe qué hubiera hecho Hoseok con estas fotos... —abrió su mochila y sacó un sobre para luego sacudirlo sobre la mesa esparciendo varias fotos ante la mirada horrorizada de los presentes—. Ahora dime, Wonnie, ¿quién es el enfermo entonces?
Nobody Else
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