P.D.V. DE STILES:

- "Creí que eras un depredador"..."No, un cuerpo de agua"..."No hay lobos en California"..."¡Ese era Derek Hale!"..."Siempre me haz gustado, como amigo"..."Defino mentir como ocultar la verdad"..."¿Quieres que te muerda?"..."¿De verdad crees que Stiles, el pequeño y débil Stiles, es el Nogitsune?"..."Tengo mil años ¡No puedes matarme!"..."O me cortas el brazo o te corto la cabeza"..."Stiles"..."Hermano"... ..."Stilisnki"..."Enciende el auto o te arranco la garganta con mis dientes"..." No confío en ti"... "Es la forma en que lo miras"..."¿Te gustan los hombres?"..."Si ¿Y a ti?"..."Derek Hale fue quien me mordió"..."Mi primo, Miguel"... "Ya deja de hablar" ..."Ustedes dos hacen una muy bonita pareja"

. ¡DESPIERTA!

- ¡AH! - Pegué el grito en el cielo al despertar de ese extraño sueño.

Abrí los ojos como platos intentando ver, pero podía sentir una superficie fría y rugosa cubriéndome los ojos. Un horrible dolor invadió todo mi cuerpo, podía sentir como era mantenido en el aire por unas cadenas que estiraban mis brazos cual su fuera Jesús en la cruz. Intente liberarme de esas cosas pero solo conseguí sentir aun mas dolor.

- Al fin despiertas - Reconocí esa voz al instante - Creí que ibas a morir.

- No sin antes darte una paliza, Raeken - Le gruñí mientras intentaba quitarme esa cosa de los ojos.

- ¿Tu mamá no te enseñó a cuidar tus modales? A cierto, no tuvo tiempo, estaba muy ocupada muriendo en un hospital como para ocuparse del bastardo que tenia como hijo.

Me impulsé hacia adelante intentando lanzarme sobre él, pero esas malditas cadenas eran mas resistentes de lo que pensaba y ni siquiera llegué a tocarlo, pero nuestros rostros quedaron realmente cerca. Theo reía con burla y deduje que sus ojos brillaban de un color rojo sangre, era realmente repulsivo, nunca llegué a entender como semejante escoria podía llegar a ser un alfa y mucho menos como se convirtió en un Hombre-lobo.

- Antes de salir de México me encontré con Cora, estaba acompañada de un tío de seño eternamente fruncido ¿Ese era Derek Hale? - No le respondí - Mas te vale hablar si no quieres que te hagamos sufrir.

Use mi "Sexto sentido", como me gustaba llamarlo, y pude ver como un Dread Doctor detrás de él sujetaba un pequeño aparato con una palanca. Seguí el cable del artefacto y note que estaba conectado a las cadenas de las que yo estaba colgado. En la pared había un letrero.

"Peligro, alto voltaje"

Mis ojos se abrieron como platos, esos malditos planeaban electrocutarme. Comencé a retorcerme intentando liberarme, pero un golpe impactó en mi rostro, el maldito Raeken me había golpeado directo en la mandíbula. Sentí el sabor metálico de la sangre y esta misma mezclándose con mi saliva y no pude evitar que me dieran nauseas, el golpe había hecho que me mordiera la lengua y ahora me dolía como mil demonios.

- ¿Vas a cooperar? - La risa socarrona de Theo me hizo odiarlo aun mas.

Hice algo de lo que, por mas que me electrocutaran o torturaran, no me iba a arrepentir. Junte toda la sangre que pude en mi boca y le escupí de lleno en la cara. Raeken se retorció y me maldijo mientras intentaba quitarse mi sangre de la cara.

- Me las vas a pagar - Me dijo apretando los dientes - Por cierto, bienvenido a Beacon Hills.

Luego de decir eso le hizo una seña al hombre de la mascara que sostenía aquel artefacto extraño y salió de donde yo estaba encerrado, cerrando la puerta detrás de él. El hombre me miro y una pequeña risa escapó de sus labios, para luego mover la palanca y electrocutarme. El dolor fue horrible, comencé a gritar como si no hubiese un mañana, aunque quizás para mí no hubiera un mañana. Lo mas probable es que si no me mataba la electricidad iban a matarme los experimentos que hicieran en mí. Estaba aterrado, de verdad iban a matarme y yo no volvería a ver a mis amigos.

Comencé a arrepentirme, me arrepentí de no haber pasado mas tiempo con mi padre, me arrepentí de haber peleado con Scott, de no haber disfrutado mis momentos con la manada, de no haber sido lo suficientemente fuerte como para proteger a Cora sin la necesidad de entregarme, pero de lo que mas me arrepentía era de algo que ninguno de ellos sabía y era de no haber intentado demostrarle a Derek lo que siento por él. Desde lo del Kanima comencé a sentir algo, no sabía que era hasta hace poco, pero cuando lo descubrí ya era muy tarde y él se había ido de Beacon Hills. Ahora lo había vuelto a ver y había sido demasiado tímido como para declararme, aunque él estaba con Braeden, era obvio que no iba a prestarme atención.

Mis pensamientos se vieron bloqueados cuando la potencia de la electricidad aumentó. Otro gritó escapó de mi boca, provocando que me doliera la garganta. Quería que me rescataran, quien sea.

- Ayúdenme.

(...)

P.D.V. DE DEREK:

- "Ayúdenme" - La voz de Stiles llegó a mis oídos.

Estábamos a las afueras de Beacon Hills, habíamos conducido sin parar por varias horas siguiendo a ese tal Theo Raeken. Pero de un momento a otro desapareció son dejar rastro.

Llegamos junto con Cora, el perro de Stiles y Braeden a la veterinaria de Deaton. En la entrada vimos la motocicleta de Scott y el auto de Lydia, por lo que supusimos que estaban adentro. No me importó que mi hermana y Braeden me gritaran que me detuvieran, abrí la puerta del local de una patada y todos me quedaron mirando.

- ¿¡DEREK!? - Todos se notaban sorprendidos.

- ¡SON UNOS IDIOTAS! - Les grite con furia, ellos me miraron extrañados - ¿¡CÓMO SE LES OCURRE CONVERTIR A STILES EN UN OMEGA!?

Scott se quedó mirándome con el seño fruncido. Cora y Braeden entraron y se quedaron aparadas junto a mí. El alfa verdadero se acercó con pasos retumbantes.

- ¿Crees que puedes venir y gritarnos? Tú no sabes lo que hizo.

- Si lo se, intentó razonar contigo y tú lo remplazaste por un lame botas traidor - Scott me miro con los ojos brillando en rojo, yo los tenía igual - Cuando Raeken regrese pregúntale por qué estuvo en México y en los mismos lugares que Stiles.

Un olor invadió mi nariz, Stiles, la sangre de Stiles. Scott pareció olerlo ya que se puso tenso, la puerta se abrió y por ella entró Malia seguida de ese tipo Theo. Lo levanté por la camisa y lo arrojé contra la pared, para luego comenzar a golpearlo.

- ¿¡DÓNDE ESTÁ!? - Rugí sin dejar de golpearlo.

Pude notar que su cara y sus puños desprendían el aroma de Stiles, lo cual me hizo ponerme furioso. Ese maldito hijo de perra le había hecho daño a Stiles y eso no se lo iba a permitir, nadie golpea a uno de mis betas excepto yo. Mire hacia donde se encontraba Scott, él observaba a Theo atónito, parecía que un no se crea que era un traidor. Levanté a Raeken por el cuello y comencé a estrangularlo, él clavó sus garras en mis brazos, pero yo no pensaba soltarlo.

- ¿Dónde está? - Volví a preguntar apretando mi agarre - Te voy a romper el cuello, maldito.

Cuando estaba a punto de cumplir mi amenaza, él saco algo de su bolsillo y lo arrojó al suelo. Era Mountain Ash, esa mierda nos hizo volar a ambos. Pero el aprovechó que yo estaba en el suelo para salir corriendo. Braeden intentó detenerlo pero él la empujó contra Isaac y Scott.

- Derek ¿Qué está...? - Antes de que Lydia pudiera hablar fue interrumpida por Braeden.

- Todo salio de acuerdo al plan - Dijo la mercenaria con una sonrisa - Ese idiota tiene un rastreador, solo tenemos que seguir la señal.

(...)

P.D.V. DE STILES:

Luego de la sesión de electro shock en la cual casi pierdo la vida, dos guardias con mal genio me arrastraron y encadenaron en una celda. En ella pude sentir que no estaba solo, aunque hubiera preferido estarlo.

- No me lo puedo creer - Dije dándome un facepalm mental - ¿En serio Peter? Debí sospechar que me encontraron por tu culpa.

El mayor de los Hale estaba con la cabeza gacha, gracias al Nogitsune pude saber que las cadenas que nos sujetaban contenían acónito. Lo cual a él le debilitaba. Intente escapar varias veces, pero estaba muy débil y me era imposible, por lo que me resigne.

- ¿Cuanto te ofreció?

- ¿De qué hablas?

- De Theo... es obvio que no me entregaste por buena voluntad - Lo escuché reírse.

- Me ofreció protección, iban a irse de Beacon Hills si les decía donde estabas.

- Y tú fuiste tan idiota como para creerle - Lo escuché gruñir - Guárdate el humor de perros para cuando salgamos de aquí.

- ¿Planeas escapar?

- Si y si no lo dijeras en voz alta me ayudarías mucho.

Peter no volvió a hablar mientras yo aun intentaba liberarme, malditos sean Theo y todos estos idiotas enmascarados. Las cadenas estaban realmente apretadas y me provocaban dolor. En ese momento algo hizo click en mi cabeza.

. Dolor, dolor del lobo.

- ¿Si te mueves te duele?

- Creo que eso es algo obvio.

- Muévete lo mas que puedas - Deduje que el Hale levantó una ceja, era algo normal - Si huelo tu dolor perderé el control y haré lo que sea para llegar a ti.

- Y luego me mataras.

- Es probable, pero a ti no te molestaría golpearme - Peter negó sonriendo - Muy bien, hazlo.

El lobo comenzó a moverse con todas sus fuerzas, yo sentí como el Nogitsune comenzaba a arañarme por dentro intentando salir. Era obvio que deseaba el dolor, podía sentirlo y de seguro Peter también lo hacía. Comencé a sentir como si me desmayara, me quedaba poco tiempo de control, solo espero no lastimar a Peter. Quiero guardar mis fuerzas para acabar con Theo.

P.D.V. NORMAL:

- ¿Stiles? - Petter observó al chico que ahora mantenía la cabeza agachada, seguía teniendo los ojos vendados - Hey niño, me estás asustando.

Una risa enfermiza comenzó a salir de los labios del ojimiel. El lobo lo observaba intentando liberarse, estaba aterrado, los psicópatas se reconocen entre sí y en ese momento Stiles se reía y lucía como un verdadero psicópata.

- Hey, Stiles. Te estoy hablando - La carcajada se detuvo.

El castaño levantó la cabeza mostrando una sonrisa enfermiza, los ojos del ex-alfa se abrieron de par en par y la sonrisa del chico frente a él se agrando.

- Stiles ya no está aquí, perro sarnoso.

Con un movimiento rápido el Nogitsune rompió las cadenas, la parte que le inmovilizaba las muñecas quedó sujetada a su brazo. Pero ya no le importaba, estaba libre, tenía el control e iba a hacer lo que él y su ancla al mundo humano querían, acabar con ese maldito de Raeken. Se acercó al lobo que estaba aun encadenado y colocó una de sus manos en la cabeza de este, comenzando absorber el dolor del pelinegro, este se retorció intentando liberarse, pero solo provocó que el Nogitsune soltara una carcajada.

- Tranquilo perro, aún no te matare - El Nogitsune hizo énfasis en la palabra "Aún".

La venda en los ojos del castaño comenzó a caerse, dejando ver esas iris que alguna vez fueron del color del caramelo completamente negras.

- ¿Qué planeas? - Preguntó Peter, el zorro sonrió.

- Te liberare para que traigas a tu grupo de chuchos.

Lo único que escuchó el Hombre-lobo fue un pequeño "Clink" y luego sus brazos cayeron a los lados de su cuerpo. Peter comenzó a levantarse mientras que el Nogitsune doblaba los barrotes de la celda con las manos.

- Por cierto, perro... - El castaño volteó - Si no regresas con los demás asegúrate de huir lo mas lejos posible, porque te encontrare y te haré desear nunca haber revivido.

Luego de decir eso el Nogitsune salió y Peter pudo escuchar los gritos y disparos de los guardias. Pero estos fueron rapidamente remplazados por el sonido de huesos rompiéndose y sus corazones dejando de latir. El pelinegro no pensaba quedarse a ver el espectáculo que estaba armando ese zorro del demonio, por el bien de su vida iba a hacer lo que el castaño le había pedido.

- ¡MAS TE VALE NO TRAICIONARME, HALE! - La voz del ex-humano lo hizo temblar.

Una carcajada completamente psicópata invadió los oídos del mayor de los Hale. Corrió hasta el ascensor de servicio y solo se destapó los oídos para oprimir el botón que lo haría comenzar a subir. Una vez salió de aquel lugar, saltó por una ventana y comenzó a correr por el bosque, todo este tiempo la guarida había estado debajo de la fabrica abandonada de Beacon Hills. Ese lugar estaba vació y abandonado desde antes de que su padre naciera, la estructura era vieja y al ser 95% madera estaba mayormente podrida, por lo que seria el ultimo lugar en que cualquier persona o criatura buscaría a un grupo se locos científicos asesinos de criaturas sobrenaturales. Lo cual lo convertía en el escondite perfecto, no entendía como pudo ser tan ciego teniendo a esos idiotas escondidos frente a su nariz.

El aroma de sus sobrinos invadió sus sentidos. Estaban cerca, eso le aseguraba mantener a salvo su cuello. Iba a decirles donde estaba el zorro e iba a salir pitando de la ciudad, no pensaba quedarse en el mismo lugar que ese monstruo maníaco.

Fin del capítulo

NOTA DE LA AUTORA:

Wojojojo... el suspenso, la cosa se está poniendo intensa ¡Pero HEY! ¡El nogitsune is back bitches! Y ahora mas sediento de sangre y muerte que nunca ¿Qué creen que pasara? ¿Podar la manada salvar a Stiles? Fíjense en los próximos capítulos porque soy mala y no les diré.

En fin, sin mas que decir me despido mandandoles a todos besos y abrazos. Adiós mi linda manada.