Agosto-Zoe

Cuando conoces a los novios de tus mejores amigos sueles mostrarte escéptico a la primera, eso me paso cuando Skyler hizo que conociera a Tom. Debo ser honesta, no me cayó bien a la primera vez que lo ví, y es que había algo en el que no me cuadraba, no podía mostrarse como el chico perfecto para mi amiga. Había algo raro en él.

Y no, no hablo de todas esas veces que la a dejado plantada, si no había algo mas que me decía que no confiara en aquella persona. Pero le di mi visto bueno, y Skyler anduvo con él por dos años, y Midas King volvió a nuestras vidas. Percy volvió a su vida.

Toda la vida de mi mejor amiga dio un vuelco patas arriba que ni yo misma pude procesar la información, iba a casarse y mudarse a Canadá, iba a irse y a la vez volver a dejar a Percy del que tanto ama. La vi a punto de perder la calma en su vestido de novia, la vi leer la carta que Percy le escribió diciendo lo mucho que la amaba y como renunciaba su amor por ella para que Sky sea feliz. La vi dudar.

Y llego una rubia a salvar un gran error. Así que mientras todos nosotros estábamos en el pasillo, Skyler fue a hablar con Tom sobre lo que había descubierto recientemente, y yo me mordía la uña de mi dedo pulgar desperdiciando mi esmalte perfecto, aunque ahora ya no era tan perfecto.

Todos seguro preguntándose porque la boda estaba tardando tanto, los invitados de la novia y del novio impacientándose. Cuando vimos a Skyler salir de lo mas agitada y acercarse a nosotros.

—No hay boda, ¿Zoe, puedes cancelarla? Dile a mi padre o a quien quieras, necesito las llaves de un auto, ahora.—dice ella y todos nos quedamos perplejos. Skyler aplaude llamando nuestra atención con una clara muestra de impaciencia.—¿No me escucharon? No hay boda, ¡ahora!.

Pegue un pequeño brinco mientras comenzaba a caminar por los pasillos, escucho las pisadas de Klaus siguiéndome mientras acaricio mi cabello rapado viendo a mi amigo de reojo.

—¿Tienes un plan?—pregunta Klaus.

—No, lo lamento, no lei el libro de dama de honor "¿Qué hacer si la novia decide fugarse en su propia boda para correr con el amor de su vida y como contárselo a la familia?"

—Pues es un titulo largo.—opina Klaus.

—Solo...supongo que sere honesta.—dije viéndolo.—Que puede salir mal...¿no?

Klaus alza los pulgares mientras que yo tragaba saliva y abro las puertas, todos los que estaban en la iglesia se voltean a verme tras hacer un gran ruido. El pasillo tenía una alfombra roja y flores blancas decorando las sillas, el cura esta parado en el centro del altar, y el padre de Skyler está en primera fila al igual que su madre y la novia de Edward. Trague saliva mientras alzo la cabeza intentando caminar con un paso seguro hasta el altar.

—¿Esta todo bien? Tengo otra boda en unos minutos.—me dice el cura, me apiado de ese señor que debe estar cansado de oficializar tantas bodas. Le doy una media sonrisa mientras me volteo recibiendo todas las miradas en mi rostro.

Los ojos de Edward me miran preocupados seguramente imaginándose lo peor para su hija.

—Hola, buenas tardes...soy Zoe, mejor amiga de la novia...Debo informarles que Skyler decidió cancelar la boda y lamenta profundamente todo lo que los hizo venir y gastar. Pero es oficial, no va a casarse con Thomas.

La iglesia se llenó de murmullos, comencé a sentirme pequeña cuando la mamá del novio comenzó a gritarme exigiendo explicaciones. Y para mi suerte Edward se interpuso gritándose con los padres de Tom.

La puerta se abre de golpe en donde ingresa un Tom demasiado furioso y lo veo caminar dando zancadas hacia mi.

—¿¡Que diablos es esto, Zoe!?—me grita Tom. Intente no ponerme a la defensiva, pero fue una tarea difícil. 

—¡No te vengas a dar lastima!—le grite de nuevo.—¡Tu le robaste!

—¡Iba a devolvérselo!—grita furioso, su rostro estaba poniendose rojo y la vena en su frente se hacía cada vez mas grande. 

—¡Si se lo ibas a devolver le hubieras avisado!—le grite de regreso demasiado molesta, por esto no me gustaba Tom. Era un mentiroso, un ladrón, un oportunista.—¡No me consta que hiciste todo este circo porque querías mantener a Skyler lejos de Percy!

—¡Tu no sabes nada de lo que estas hablando!—dice Tom jalándome del brazo con fuerza, intente soltarme de él, pero estaba demasiado furioso. Estaba a punto de propinarle un golpe en su estúpida cara si no me soltaba.

Pero antes que pueda decir o hacer algo, Magnus jala del brazo de Tom haciendo que me suelte mientras lo mira.

—Vuelves a tocarla, vas a perder tu mano.

—Oh genial, llego la caballería de Mantys Vins.—dice Tom, ya estaba mas que claro que le importaba medio huevo el nombre de la banda que incluso la mencionaba mal a propósito aunque sabia exactamente bien de lo que estaba hablando.—Estoy hablando con ella.

—Le estas gritando.—dice Magnus de manera seria.

—Es la maldita culpable de que la boda se haya cancelado, le lleno la cabeza de Skyler con mentiras y todo se ha acabado.

—Skyler no se lleno de mentiras.—habla una voz femenina haciendo que todos nos volteemos, Rosie estaba viendo fijamente a Tom.—Yo le dije, le mostré lo que has extraído del banco y la propiedad en Canadá, le dije la verdad porque debía saberlo.

—Asi que es tu culpa.—dice Tom molesto mirando a Rosie y toda su rabia va para la rubia.—Fue toda tu maldita culpa, ¿no es asi?

Caleb se interpone entre su novia y Tom, pero no es Caleb quien lo frena, o Magnus. Soy yo la que jala del brazo de Tom y le da un puño en la cara. Me provoco un ardor horrible en la muñeca, pero no iba a mostrarme débil delante de él. Tom me mira demasiado furioso.

—No te atrevas a acercarte a Rosie, o a Sky, o Midas King. Ni mucho menos a Klaus o a mi, no te hagas el inocente Tom, sabias desde el inicio lo que estabas haciendo, ibas a darle una vida infeliz a Sky. Asi que dejala tranquila y olvídate de tanto drama.

Tom me mira furioso, me suelta un insulto antes de salir furioso de la iglesia, cuando Tom se va es cuando me permito derramar unas lagrimas por el dolor de mi muñeca donde comencé a sollozar sintiendo mas fuerte el ardor.

Debo ser honesta, el drama no termino ahí, la familia del novio y la familia de la novia estuvieron gritándose los mil insultos. Nosotros nos interpusimos por momentos, yo aun podía dar unos buenos golpes arriesgando la mano sana.

Para cuando terminaron de discutir, la familia del novio decidió irse por su lado, dejándonos solos. Edward solo suspiro, y llego a una conclusión. "Bueno, gaste dinero en un banquete...¿tienen hambre?"

Minutos después, estábamos en el banquete de recepción, sin ninguno de los novios, pero disfrutando el gasto para que no se desperdiciara, me había sacado los tacones cuando sentí que mis pies dolían los mil demonios, y unos meseros me habían dado una pequeña bolsa con hielo. Estaba sentada en una de las sillas de plástico que estaba cubierta por una elegante tela color champange mientras aplicaba frio a mi dolor.

La decoración de la recepción era bastante bonita. Los colores que predominaban era el champange y el rosa, con centro de mesa de flores blancas con pequeñas velas a su alrededor, el salón era lo suficientemente grande para toda la familia, y todos estaban bailando o comiendo sin seguir ningún horario.

—¿Puedo ayudarte?

Alzo mi mirada para encontrarme a Magnus, se había sacado su saco del traje sosteniéndolo por encima de su hombro, su cabello estaba despeinado y con su otra mano sostenia con esfuerzo dos copas de champange, asentí y él deja las copas en la mesa sentándose junto a mi lado agarrando mi mano y sosteniendo la bolsa de hielo.

Suspire cerrando los ojos, sentía que habían pasado días en lugar de horas.

—¿Sabes algo de la novia fugitiva?—me pregunta él.—Solo se que Dylan encontró mi auto al frente del departamento de Percy.

—Sky solo me mando un simple mensaje, "regreso pronto".—dije y negué riendo.—No sé cuándo es pronto para ella, pero yo solté la bomba.

—¿Te han dicho que te ves sexy enojada y golpeándole el rostro a alguien?—me dice con una sonrisa y reí golpeando su hombro con mi mano buena mientras él sostenía el hielo.—Enserio, me provocaste cosas.

—Eres tan idiota.

Él solo me sonríe mientras que se estira agarrando su copa de champagne dejando los hielos apoyados en mi muñeca adolorida, con mi mano buena agarro de la copa y ambos brindamos en silencio dándole un trago observando a nuestros amigos bailar en la pista del baile.

Era impresionante la facilidad que Klaus tenia para emborracharse, sin contar que parecía el alma de la fiesta mientras le robaba a Rosie de Caleb bailando con la rubia.

—¿Sigue enojado conmigo?—pregunta Magnus y me volteo a verlo.—¿No te dijo? Se enojó porque insinué que era gay.

—De hecho, no tuvimos mucho tiempo para hablar...pero el enojo de Klaus no dura mucho.—dije bebiendo de mi champagne. —No te sientas mal Magnus, cuando estuvimos en la pubertad yo también lo crei...es que miraba mucho a los chicos del equipo de Basquet y algo me dice que no era solo por el uniforme.

El rubio sonríe bebiendo de su copa mientras nos seguíamos quedando sentados, solté un pequeño bostezo apoyándome en su hombro.

—¿Quieres hacer algo divertido?—pregunte. Magnus me mira intrigado, le sonreí levantándome, patee mis tacones debajo de una silla y comencé a caminar indicando que me siguiera, el rubio me sigue algo confundido.

Minutos después, estábamos devorando grandes cantidades de postres y abriendo los regalos que se supone que eran de Tom y Skyler, no se que harían con ellos, lo correcto seria devolverlo. Pero en ningún lado dice que su mejor amiga no se pueda quedar con algo.

—Pero...mira que cosa horrible.—dice Magnus sacando un adorno de una forma geométrica extraña lleno de colores.—¿Qué se supone que es esto?, ¿Dónde lo pones?

—Creo que va en el baño.—dije comiendo del postre.

—Yo lo tiraría a la basura.—dice él y me reí mientras que él buscaba otro paquete de regalo y lo abre empezando a hurgar.—Nunca supe que regalar en una boda.

—Yo tampoco, con Klaus le regalamos una cafetera pero creo que me la quedare...¿tu les compraste algo?

—Iba a darle dinero.—dice sacando unas copas a juego y las vuelve a guardar.—Pero dado que no se caso supongo que puede quedarse con mi mejor amigo.

Me reí terminando el postre de chocolate y agarre una pequeña caja celeste de una joyería bastante cara que reconocí al instante. Mi boca se abre en un circulo al ver dos anillos, uno para Tom y el otro para Sky, anillos a juego.

Saque el que supuse que era para mi amiga mientras lo examinaba, era un circulo plateado bastante delicado, con pequeños detalles de piedras. Magnus me mira y me quita el anillo, agarra mi mano sana colocándomelo en el dedo índice.

—Listo, ahora estamos casados.

—Pero...no dije que acepto.

—Es que si lo digo asi rápido no te doy tiempo a pensar.—dice y se toca la cabeza.—Es táctica.

—Tengo derechos de decidir, ¿sabías?

Magnus se ríe y echa la cabeza hacía atrás apoyándola en la pared, algunos mechones rubios caen de manera despreocupada en su cara. 

—Podríamos fingir que es nuestra boda, con nuestros invitados y nuestra fiesta...así no suena a tanto desperdicio. —dice Magnus, mire el anillo decorando mi dedo y le di una vuelta mientras lo contemplaba. Luego me lo quite volviendo a guardarlo donde le correspondía, Skyler sabría que hacer con el.

Y por el bien de nuestra amistad, espero que dármelo.

—No nos casaremos nunca Magnus.—dije viéndolo.—Porque yo a ti te gusto, y tu a mí no.

El rubio rueda los ojos dejando los paquetes de lado y se levanta, me extiende su mano y la tomo mientras me ayudaba a levantarme. Salimos de nuestro pequeño escondite para volver a la fiesta, para nuestra suerte nadie se había dado cuenta que nos habíamos fugado a abrir los regalos de los novios y hurgar en ellos.

La pase de maravilla junto a Magnus, bailamos con el resto de nuestros amigos, nos reimos como niños pequeños y cantábamos a gritos las canciones que sonaban. Para cuando la fiesta estaba terminando (o se suponía que era hora de que terminara), Klaus, Rosie y yo junto a Midas King nos íbamos dando gritos de felicidad y risas mientras dábamos vueltas.

De a poco los chicos iban despidiéndose cuando llegaban el camino para ir a su casa. Magnus me acompaño hasta la mia, hablábamos de todo y de nada a la vez, era increíble que llevaba conociéndolo hace tiempo, y a pesar de la brecha del tiempo entre nosotros, es como si las cosas no hubieran cambiado.

Al llegar a mi edificio, Magnus hizo una reverencia de lo mas tonta y lo vi alejarse, subí a mi piso donde me tire en la cama abrazándome a la almohada.

Por las siguientes semanas, me hice cercana a Magnus.

Pero nuestra cercanía y amistad fue tan efímera como empezó. 

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Ig: Julxswatt99