El segundo me aleja regresando con Naruto y yo me crucé de brazos pero Naruto me abraza sonriendo por atrás haciendo que yo sonriera también y me sonrojada un poco por la pena.

- Oye ¿Cómo lo supiste? - Pregunta el Segundo.

- Cuando lo golpeé con el rasengan la primera vez, yo tenía el modo sabio y como esa sustancia se agrietó tuve una sospecha. Y para confirmarla le dije a Gamakishi si podía lanzar algún ataque y así fue como supe que su debilidad... es el senjutsu -

- Eso fue genial. Dattebayo - Dice Naruto. Sonreí cerrando el ojo.

- Eso que dijiste... - Todos miramos a Minato - Gracias... -

Negué.

- Nada, nada, usted es muy importante para Naruto, en todo caso sería importante para mi también - Respondí. Él sonríe y yo también.

- Es cierto que le afectó, pero ya se recuperó - Dice el Segundo haciendo que todos miremos de nuevo a Obito quien pone las manos en el suelo.

- Debo comenzar con el Mugen Tsukumoyi, así que empezaré con la limpieza -

Hace crecer un tallo gigante con cuatro flores parecidas a cuando el Juubi abría la boca y su lengua se hacía como una flor.

Abrí el ojo de par en par.

- Lanzará Bijuudamas - Dije llamando la atención de todos.

En ese momento se crean las Bijuudamas y Obito crea una barrera como la de los Hokages alrededor de toda la alianza.

- Mierda... - Murmuré.

Naruto camina hacia Minato y Dice que choquen puños a lo que él lo hace pero Obito comienza a hablar mientras se encapsula en la sustancia negra para protegerse.

- Naruto, el no puede hacer nada. Como no pudo salvar a tu madre -

- Agh, aquí vamos de nuevo - Dije con cansancio.

- ¿Sabes que día es mañana? El aniversario de la muerte de Kushina y Minato -

- ¡Ya cierrate! - Dije lanzá dole unas balas de hielo haciendo que así sea - No soporto a ese tipo - Dije cruzándome de brazos.

Minato y Naruto se ríen un poco.

- Por cierto Naruto... - Lo miré y sonreí - Mañana comeremos de nuevo ramen y pasaremos el día juntos como antes ¿Esta bien? Confío en ti -

Él asiente.

- ¡Si! ¡Aún estamos en este mundo y no pienso morir! -

- ¡Eso es! - Dije orgullosa y levantando mi pulgar.

Minato mira a Naruto sonriendo orgulloso.

- ¿Naruto que piensas hacer? - Pregunta Sasuke.

- Por ahora deja que me concentre -

Luego de un tiempo a mi me aparece la cubierta de Kurama y me miré sorprendida ya que estaba fluyendo con más intensidad que antes.

Será por tener a la otra mitad de Kurama juntos...

Sonreí y miré a Naruto quien me mirándo y luego sonríe y ríe un poco.

- Son geniales Neko, Minato-San - Dije y ellos sonríen más ampliamente.

Las bijuudamas se disparan pero Naruto y Minato nos sacan a todos junto a la alianza de la barrera haciendo que la explosión no nos alcance.

Sasuke le pregunta como lo hizo y el se lo explica.

- Y se conectan ind... in... -

- ¿Indirectanente? - Pregunté riendo.

- ¡Eso! Se conectan indirectamente, gracias ____-chan Dattebayo -

Sonreí.

- ¡Bien! ¡Ahora hay que seguir! - Dice Naruto y salta haciendo que aparezca Kurama y se coloca en su boca.

- ¡Naruto! ¡Es bueno que levantes la voz y seas pretencioso pero espero que no te hayas olvidado que solo le afectan los ataques de Senjutsu! ¡No eres tan idiota! -

- Bueno... - Murmuré sonriendo y rascando mi nuca poniendo en duda eso.

- ¡Es verdad! - Dice Naruto.

- ¡Bien, si eres un idiota! -

Me reí junto a Minato, pero su risa era nerviosa.

- ¿Como te enamoraste de él? - Pregunta el Segundo viendo lo tonto que es Naruto.

Yo me reí más fuerte.

- Ya lo dije, ni yo misma lo sé. Pero... así fue - Dije y puse una mano en mi cintura.

Esperamos un momento y Minato salta junto a Naruto haciendo lo mismo que él.

Pero luego sentí que Naruto usaba el modo sabio.

- Huh... ah con que por fin ese Kitsune testarudo cedió - Dije cruzándome de brazos y sonriendo.

- ¿Eh? ¿A qué te refieres? - Pregunta el Segundo.

- Cuando Naruto y yo entrenamos el Senjutsu con el Sapo Sabio Fukaku, él y Naruto intentaron hacer el Sennin no Jutsu pero a Kurama no le gustaba la idea y los rechazaba - Respondí.

- Pero tú no tienes ningún Bijuu adentro ¿No puedes hacer ese Jutsu? -

Me rasqué la nuca nerviosa y reí un poco.

- Es cierto que soy más lista que Naruto pero... no conseguí sincronizarme con Fukasaku por lo tanto soy un desastre con ese Jutsu - Respondí.

El Segundo me mira y luego suspira aceptándolo.

Miramos al frente en el momento que padre e hijo hacen un rasengan gigante.