Alexis solo me mira sin decir nada, no sé a qué punto eso sea bueno.

Observó su aspecto, son muy notorias esas ojeras que cubren parte de su rostro, lo demacrado que luce y el venir todo desalineado es sinónimo de que ahoga sus penas en alcohol.

No me quiero imaginar cómo lo lleva su bestia, aquel ser distinto al humano, dispuesto a conocer a su mate y ahora ambos quedarse sin nadie a quien amar.

¿Duele hablarle así?, obvio es como mi hermano, ¿se lo merece?, ¡claro!, en ningún momento mostró interés de conocer a su mate, una persona tan curiosa y llena de bondad. Recuerdos de ella y ese brillo al conocerla, muy distinto a como ahora está.

Alexis siempre a queriendo salir adelante dando su mejor cara a toda situación, pero no creo que de esta salga fácilmente.

La historia de ella era para merecer un mejor final, de qué servía que la bestia la quisiera y todos la protegiéramos, si con el humano se convertía en su verdugo en todo el tiempo.

Haciendo que ultrajaran a su pareja, obligada a tareas interminables, pero debía de estar libre en la noche para el alfa, sus necesidades sexuales eran prioridad en los días de celo, lo bueno que el lobo se encargaba de ello y ninguna vez su cuerpo fue tocado por Alexis. Todos piensan que sí, pero yo sé que no es así, no es tan desalmado como lo hacen ver todos.

Por eso mandaba a Dayana hacer infinidades de tareas, teniéndola lejos, él estaba "tranquilo" y muchas veces ayudábamos todos a sus quehaceres, pero no sabemos cómo se enteraban los soldados y bueno solo recordar cada amenaza impuesta por ellos a su luna es algo imperdonable y era frustrante no dar con el informante.

Ha demostrado mi amigo, algo que sabíamos iba a pasar, su mala decisión trajo una consecuencia alta y ahora sufre por ella, pero no es justificación, cada acción tomada contra de ella, llevarse por su mal prejuicio hizo que ahora sufra sus propios frutos.

―¿Alfa?―lo llamo algo preocupado.

Todo el rato se ha quedado pasmado ahí, con la diferencia que está luchando con su lobo por algo, tiene un ojo de color negro y el otro café; su color habitual.

Es sabido que los licántropos nuestro color de ojos cambia por dos razones: una nuestra bestia quiere tomar el control haciendo que todo nuestro ojo sea negro y el otro color es amarillo, esté se presenta cuando estamos excitados.

Alexis por fin reacciona y sale de la habitación alterado, como si le doliera respirar el mismo aire que yo, me alegra que sienta lo que nos hacía pasar a todos al no poder ayudar más a aquella pobre chica.

Me alegra saber que por fin reacciona a lo sucedido, debería de agradecer que solo hable lo justo para hacerlo reflexionar, sé que no es el momento, pero di en el punto exacto para demostrar su erróneo comportamiento, según su hermana esto es parte de un plan para un bien.

Lo primero es mejorar muchas cosas en la manada y personales, teniendo como único objetivo enmendar el pasado... bueno eso me dijo la bruja que tiene de hermana.

*

Después de ver correr a Leonardo con Dayana en sus brazos y dejar a todos en shock, dos soldados jóvenes  acuden a mi auxilio, poniendo cuidadosamente mis brazos al rededor de sus hombros. Pero antes de irme quiero limpiar a fondo esté desorden.

―Antes de irme daré una última orden―todos se ponen en formación frente de mi persona―general―da un paso al frente―queda destituido de su rango y pasará a ser un soldado común sin privilegios y sí quiere reclamar algo, le digo desde ya que su vida aquí como afuera correrá el mismo rumbo, la muerte.

Sin esperar respuesta soy llevado a mi habitación, ambos soldados me ayudan a subir los escalones y fue algo difícil de hacer, pero sé logró. Una vez ya tocando mi cama escuchamos el llanto de mi madre, los soldados incómodos salen inmediatamente de nuestra vista y tengo que soportar los lamentos de mi progenitora.

―Es muy lamentable toda esta situación, ¿no lo crees hijo?―pregunta mi mamá hipeando.

Después de calmarse se puso a desinfectar los golpes y heridas.

―Así es mamá, pero qué podemos hacer, el alfa lo decidió así―tomó su mano.

―Lose, pero todo es un caos, se volvió más temerario y ajeno con su familia―solloza.

Mi tiempo me da a responder cuando sé abre la puerta abruptamente, mi madre y yo nos sorprendemos al ver a la mujer que está recargada en el marco de la puerta.

Tiene tiempo que no la veía y tras observarla caigo en cuenta que ahora da miedo con esa mirada, antes transmitía amor y ahora no expresa sentimiento alguno, ha cambiado y no sé si para bien.

Se adentra a la habitación y nos observa cuál desconocido, como si analizará algo o tal vez situación.

―Tranquila señora, si llora se va a marchitar, ¿no lo crees Walter?―comienza a hablar Alexa.

Ese tono de voz es diferente al que recuerdo, pero nada se conserva igual.

―Si, ya le he dicho que no lloré, pero no hace caso, sigue igual de sensible. Por cierto ¿a qué se debe tu visita?―pregunto viendo directo sus ojos negros―tenemos tiempo de no verte y déjame decirte que das miedo―hago referencia a sus ojos.

No pude ocultar mi extrañeza.

―Ya sé, pero son lindos mis ojos, me sirven para conquistar chicos―dice con un guiño, pero endurece todo gesto de su rostro―pero mi visita tiene otro fin. Necesito su ayuda, el asunto aquí es grave y quiero convocar a toda la familia, sabrán de sobra mi motivo ¿verdad?

Mi madre y yo nos miramos entendiendo en silencio a que se refiere, volvemos a verla y solo acertamos en afirmar con la cabeza.

*

Su ayuda aquí es como ver a un ovni, inexistente y raro, por los problemas del pasado los tres hermanos se distanciaron, a un principio pensamos que es por los diferentes rangos que tienen cada uno.

Es extraño que entre los hijos de un alfa nazca una híbrida como ella y una hija omega; débil para el combate, aun así Alex pulió otras habilidades así como su hermana.

Haciendo ver que el hermano del medio era el menos agraciado, nadie sabe por qué fueron así los hermanos, pero sus padres buscaron respuesta a esta condición.

Conforme crecimos Alexa fue la que se alejó más, aun cuando éramos unos cachorros en entrenamiento, ella tenía potencial para la magia y ser alfa a la vez.

A todos los sorprendía cómo es que dominaba con tanta facilidad algo tan complejo, pero como ella no mostraba interés en ser alfa, fue dado a su hermano menor, todos sabíamos que eso iba a pasar, pero nadie creyó que sería en tan poco tiempo.

Pensamos que después de nuestra primera transformación probaría ser alfa, pero todo pasó tan rápido que sigue siendo un misterio el porqué Alexa prefirió irse y no volver más.

Por eso es que me extraña ver que ande por aquí y sobre todo que conozca a Dayana. No me quiero imaginar hasta qué punto está enterada de esto.

Ahora lo importante es que el plan sea exitoso y rápido, toda la familia lo desea, pero por lo mientras lo haremos sufrir, haciendo que su dolor sea igual o peor al de nuestra luna, enseñarle que por ser nuestro líder no pasará desapercibido su castigo.

Dayana tu dolor será vengado y encontrarás la libertad que buscabas y necesitas, deja en nuestras manos todo que nos encargaremos que se cumpla aquel deseo.