Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

- 4 -

Dedicado a: dazaiistyping

Despierto con pesadez, la noche anterior Sasha se había quedado balbuceando cosas y me interrumpía el sueño, pero no me puedo quejar ya que yo también tuve mi rato de hablar.

Para el desayuno nos tardamos un poco en llegar al comedor con los demás. Ella se fue con Connie, y yo me quedé en una mesa esperando a Mina.
Me gusta ver a las personas, no porque sea chismosa, pero es algo que se me da desde que era pequeña, ya que normalmente estaba sola o rodeada de adultos, solo podía limitarme a observar. Aquí todos son tan distintos, pero conviven bien con otros (hay sus excepciones, claro), vienen de diferentes lugares, con una historia única y sueños que de alguna manera se conectan. Hay quienes ya han resaltado por sus ideales y talento, otros, que he notado prefieren ser más discretos.

— Perdón — Mina llegó algo agitada —, se me cayó la comida y tuve que ir a cambiarme.

— Descuida.

Franz y Hannah se nos unen poco después. Tomamos nuestro desayuno a gusto, platicando entre espacios y mencionando que las clases ya comenzarían formalmente, pues hasta este día solo nos habían dado acondicionamiento.

— Oye — me dice la pelirroja moviendo sus cejas de arriba a abajo —, ¿no sientes que te miran?

— ¿Eh?

— Espera — detiene mis acciones, pues estaba a punto de voltear a los lados —, es Eren. Está a tus espaldas, no seas obvia.

— Tal vez me odia.

— ¿Por qué dices eso? — Mina me mira preocupada.

— ¿Que no lo escuchaste hace unos días? — pongo mala cara — Dijo que los que se van a la policía militar son cobardes, nos desprecia.

— ¡Oye, Eren! — Hannah le llama — Ven a sentarte con nosotros.

— ¿Qué haces?

— Eren no odia a nadie — susurra —, tal vez solo es tímido para hacer amigos... Cómo tú.

— Es cierto, es como si estuvieras en un pequeño cascarón — sigue el castaño.

— ¡Oigan!

Pasaron unos segundos cuando él ya se estaba acercando, esta vez le miraba con detenimiento, para ver qué hacía. Antes de que pudiera sentarse, sin embargo, nuestro tiempo de sobremesa acabó, por lo que debíamos alistarnos para clases, después de reocoger nuestros lugares. Me levanto primero que todos, para llevar mis platos a la cocina.

...

Nos dirigimos a los salones en diferentes grupos ya que no todos cabían en uno solo. El trío de amigos inseparables están con nosotros, y se sientan al frente, en medio. Elijo el lugar de atrás junto a Mina. 

— Hola — me dice un joven de cabello negro y pecas —, ¿está ocupado?

— No, adelante — contesto —. Marco, ¿verdad? — asiente, poniendo sus cosas en la mesa y sentándose — Un gusto. 

— Igualmente — sonríe — TN, ¿cierto?

— Sí.

Hasta ahora, son otras personas que se presentan conmigo. Naturalmente soy una persona introvertida, pero creo que debo hacer un esfuerzo para llevarme bien con todos. Mi abuelo solía decir eso, que había que formar una relacion estrecha con los compañeros.
Por favor alguien dígame como hacer amigos.

Bueno, no tuve que atormentarme tanto, ya que Jean entró de pronto, y junto al de pecas se fueron a la banca de atrás. Quedaba un espacio libre a mi lado, y Sasha, para variar llegando tarde, lo tomó de inmediato.

Shadis entró un momento a darnos la introducción, insultándonos en el proceso. Se quedó ahí para "supervisar" y mantener el control de la situación, pero es porque todos le tienen miedo.

El profesor, antes que nada, empieza con una breve historia de la humanidad para saltar a las facciones, las tres tropas de las murallas, y el propósito de cada una. Se detiene en la legión del reconocimiento, hablándonos un poco acerca de los titanes. Dejo de anotar, pues me parece tan interesante que prefiero escucharlo en vez de escribir.

Casi no hay información de esas bestias. Lo que se conoce es que hay dos tipos, los titanes comunes, y anormales, los últimos siendo capaces de correr, escalar, brincar, y presentar el más mínimo nivel de inteligencia, dice que esos son los más peligrosos, además de que el tamaño influye en su riesgo. Cualquiera que sea, la manera de derrotar a los titanes siempre es la misma, cortando debajo de su nuca; no saben por qué, ya que no tienen órganos, pero ha sido efectivo, y por eso se crearon armas especiales capaces de atravesar su piel para poder darles fin. Ya que no tienen órganos, tampoco pueden sentir dolor.

¿Que propósito tienen entonces, si cuando devoran, después vomitan a las personas?

— ¿Quieres? — Brauss interrumpe, y muestra una patata.

— ¿¡Trajiste comida a clases!? — susurro de vuelta, en una forma agresiva — ¡Guarda eso!

— No se va a dar cuenta.

— ¿¡QUIÉN TRAJO COMIDA!? — ¡es como si lo hubiera invocado! Ambas nos quedamos petrificadas, pero al menos ella llevó la patata debajo del escritorio. Si nos atrapa estaremos como la patata, fritas. O hervidas, mejor dicho — ¡Pedazos de basura, QUIÉN FUE?

El instructor comenzó de derecha a izquierda, pasando por los pupitres para encontrar quien había llevado alimento. Honestamente, tiene la mirada de un maniaco, me pregunto que lo habrá llevado a ser así.

Cuando se acercó a dónde estaba Armin, tomé la patata de la mano de mi amiga y fingí estornudar, tan fuerte que me pegué con la mesa en mi frente. Me aparté aún sentada para poder sobar mi cabeza, y mientras tanto, metí el tubérculo en el bolsillo de mi ropa. Como traía una sudadera no se iba a notar.

— Cadete — me dice el calvo —, ¿¡acaso va a estornudar así siempre!?

— N-No... — murmuro, cubriendo mi nariz y sorbiéndola — ¿Puedo ir por un pañuelo?

— Nadie quiere tus mocos, esocoria — sentencia, como si eso fuera lo más grave del mundo — ¡MUÉVETE!

Me fui del otro lado, para evitar así que oliera.
Regresé a las habitaciones, ya que compartía litera con Sasha, dejo su papa debajo de la almohada.
De vuelta al salón, todos están en silencio mientras Shadis los mira con sospecha.

Trato de entrar lo más calmada que me es posible, pero llevo los nervios a flor de piel. La clase termina con normalidad, afortunadamente.

— ¡Gracias, TN! ¡Me salvaste!

— No lo menciones.

Después de eso, y de que nos explicaran como funciona el equipo de maniobras tridimensionales de manera técnica, en el entrenamiento esperan que los usemos; por ahora se conforman con que podamos elevarnos y cortar un tipo de esponja que simula el cuello de un titán, incluso lo marcaron para que nos sea mas fácil acostumbrarnos.

Llega mi turno, y no puedo evitar sentir un nudo en mi estómago. Si mi abuelo estuviera aquí, probablemente me diría que puedo hacerlo, y que si no podía, era una debilucha.

Maldito viejo, aún muerto sigue atormentándome.

Sacudo mi cabeza para quitarme esos pensamientos. Con abuelo o no, prometí ser de las mejores, y no puedo fallar, ya tengo un plan, un destino que debo cumplir.

Hago que los cables se claven en los árboles. Siento que mis manos comienzan a sudar, y solo para tranquilizar mi mente aprieto el mango de las espadas un par de veces. Otros se tardaron bastante, así que no pueden quejarse de mí.

Puedo hacerlo, para esto tanto tiempo entrenando. Es mi momento.

Dejo que el gas salga, impulsándose al cielo aproximadamente 10 metros, que es lo que este titán imaginario medía. Me aproximo a la nuca, y giro mi cuerpo a la par que entierro las espadas y las paso siguiendo la línea roja. Me apoyo con mis pies en la madera, y veo caer el pedazo de esponja, miro de nuevo, y me siento orgullosa porque el corte se veía limpio, y mis espadas están bien, significa que el uso de fuerza fue el adecuado. Repetí dos veces, como pidieron.

Me retiro del titán, bajando con cuidado usando el equipo.

— ¡Bien hecho! — dice uno de los instructores — ¡Siguiente!

Suspiro, y pensar que iba a ser más complicado, creí que haría el ridículo. No me puedo dar el lujo de hacer algo así.

Me recargo en Mina, su turno ya había pasado pero se quedaba a ver a los demás junto con otros compañeros. Era más bajita que yo, así que apoyo mi brazo en su hombro, mientras ella se concentra en el siguente.

— Te fue muy bien, ¡felicidades!

— Gracias — sonrío un momento —, y a ti también.

Rodea mi cuerpo con sus brazos de forma cariñosa. Le abrazo de vuelta mientras esperamos.

Eren sigue en la fila después de Mikasa y Armin. Se ve bastante confiado, pero también noto algo de duda en sus movimientos, son algo torpes y lentos. De todas maneras, si no lo hace bien a la primera te dejan intentar hasta que lo logres.

Dicen que la tercera es la venida. La primera vez su corte fue superficial, a la segunda sus espadas se rompieron.

— ¿Para qué pierde el tiempo? — escucho a Jean quejarse, sobando su sien.

— Pero si tú hiciste los mismos intentos.

— Es una plática privada.

— Entonces baja la voz.

Que irritante, espero que nos toque en sectores diferentes cuando vayamos a Sina.

Cuando todos acabaron, nos movimos a otro tipo de entrenamiento que dijeron iría de la mano con la precisión. Usando flechas, y rifles, debíamos dar en el blanco en pedazos de troncos marcados.

Nos colocan a ciertos metros de distancia, por supuesto, y como ya nos enseñaron a portar armas, dejan que lo hagamos solos. Espero que mi vista jamás se llegue a desgastar, porque si no estaría perdida.
Solía cazar y jugar a lanzar cosas cuando era pequeña, creo que por eso mi puntería es buena. Noté que a Sasha se le daba muy natural, quizá ella cazaba en su aldea.

No me percaté, pues estaba mirando a mi amiga, pero alguien toca mi hombro y cuando volteo Eren está ahí, sinceramente no lo esperaba.

— ¿Se te ofrece algo?

Quizá soy algo cortante, pero por como habló de la policía, no puede esperar que le hable con cariño.

— Es que estás dando a todos — musita, algo decaído —, eres tan buena como Sasha.

— Gracias, tengo práctica...  ¿Te imaginas? Con cañones — apunté la pistola a él, obviamente con el seguro —, apuesto a que puedo darle a los titanes sin problemas

— ¿Titanes? — hasta sus ojos se iluminaron.

— La clase me gustó, fue interesante aunque no haya mucha información — me encojo de hombros —, cosas así hacen que me interese en... bueno, en todo.

— Dime... ¿estás considerando elegir la legión?

Se me sale un bufido, tratando de aguantar mi risa — No, es un suicidio.

— Pero, ¿no te gustaría conocer el exterior? ¿Lo que hay detrás de las murallas? Alguien nos puso aquí como pájaros enjaulados, ¿no te gustaría tener libertad?

Que insistente es este chico...

— No es para lo que estoy aquí.

— Mm... — comienza a rascar su mejilla, luego mira al cielo como si fuera lo más interesante — ¿me puedes dar algunos consejos?

Solo era eso.

— Claro — curvo mis labios levemente —, bueno, primero, debes sostener el rifle a la altura de tu...

— ¡HALE, JAËGER! ¡PAR DE HOLGAZANES, VUELVAN A TRABAJAR!

— Será en otra ocasión — suspiro — Vete antes de que nos vea otra vez.

— TN — me detiene, colocando su mano en mi brazo.

— ¿Sí?

— Lo que dije sobre la policía militar... bueno, no me refería a ti, se lo decía a Jean.

— Está bien.

Tras esa prueba, fui tan feliz al ser de las dos mejores por tener un puntaje alto, siendo así, Sasha Brauss, y yo.

— ¡El escuadrón 104 tiene excelentes tiradoras! — exclamo, levantando el brazo de la pelirroja con el mío.

— ¡Sí! — me sigue — ¡¡Merecemos doble merienda!!

— ¡No te pases después de lo que hice!

~ ~ ~ ~

¡Hoy se estrenó la cuarta temporada de Shingeki! ¿Alguien lee el manga aparte? xd

Gracias por leer,

JadeOkumura.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro