Cámara vs reproductor de música
Transcurrieron un par de meses y el cabello de Christopher estaba largo a petición de la empresa, algo que no le molestaba pero era un nuevo estilo para él. Aunque perdió peso gracias a la nutrióloga no se sentía diferente pero sus amigos se lo mencionaban algo que al principio le molestaba pero ya se estaba acostumbrando y esperaba que poco a poco dejara de ser molesto.
Esa mañana mientras desayunaban Maryam menciono un evento que no le intereso a Christopher de hecho seguía tomando su café mientras escuchaba que el evento seria en un lugar abierto y que sería ese día por la tarde.
- Vamos Christopher, seguro te divertirás viendo los robots – le animo Jorge
- ¿Eso no es ilegal o algo así?
Al resto de los chico los hizo sonreír pues realmente a nadie le importaba eso, solo quería divertirse y no conocían a alguien que fuera llevado a la policía por estar en un evento de robots.
- No son peleas de perros o de gallos, simplemente es para poner a prueba la inteligencia y creatividad de los chicos de la escuela
Christopher al escuchar eso de la boca de Uriel su puso demasiado triste aunque nunca en su vida había presenciado una de esas peleas que menciono era muy difícil para el aceptar que existían y que las personas lucraban con el dolor y muerte de unos animalitos, y siempre esperaba que el karma para esas personas llegaran pronto.
- Christopher incluso tocara una banda además ¿Cuánto tiempo tienes que no sales a divertirte?
Eso fue lo que termino convenciendo a Christopher pues le encantaba la música, no quería además quedar mal con sus amigos, así que cuando terminaron las clases no tuvieron tiempo para descansar.
Llegaron al lugar del que hablaba realmente era un espacio muy bien iluminado con todo tipo de luces, ellos se dirigieron a una carpa donde solamente las personas que alcanzaron boleto podían tener acceso además un chico estaba ahí ofreciendo bebidas y vendía playeras que tenían el nombre del evento con imágenes de algunos robots que Christopher se imaginó que eran de los mejores en los eventos pasados.
Su mesa era solamente para ellos eso le agrado a Christopher porque realmente no sabía si estaba de humor de socializar con otras personas que no fueran sus amigos.
- Va a comenzar en diez minutos – anunció Maryam que se miraba emocionada
La mesa mostraba el menú, lo desbloquearon y comenzaron a explorarlo Jorge pidió una bebida que se llamaba campari era una bebida roja que realmente se veía dulce pero Christopher desconocía de esas bebidas pero por recomendación de Denisse tomaron lo mismo.
La bebida le gustó mucho a Christopher y fue fácil de tomar para el que no estaba acostumbrado al alcohol de hecho solamente una vez había probado una cerveza y en esa ocasión fue con uno de sus primos estando de fiesta pero no termino borracho, ahora lo más importante era que desde su lugar verían perfectamente la pelea por esa razón las personas comenzaron acomodarse en las gradas.
Christopher no entendía de robots ni tampoco de las reglas que tenían ese tipo de eventos, lo único que conocía era que los enfrentamientos tenían categorías y que el ganador se llevaba una cantidad jugosa de dinero que por eso era popular entre los jóvenes.
El ambiente de festejo los invadía las personas tenían en la mano banderas con el nombre del creador del robot preferido, el nombre que más se repetía era el de Mario pero también se miraba el nombre de Lucas, otros usaban pulseras con el color que representaba su robot favorito claro que debías estar en el fandom para conocer por ejemplo que el color de Mario era el azul y el de Lucas el rojo, afortunadamente no se miraba disputa entre los asistentes, lo que realmente buscan las personas al asistir a ese evento era un momento agradable disfrutando la tecnología.
Un par de chicos se movían de un lugar a otro en el centro de la pista por lo que todos comenzaron a gritar porque ya la competencia estaba por dar inicio, con lo que abrió el evento era una banda de rock y un espectáculo de juegos artificiales.
Los primeros robots fueron de la categoría A y eran los que median cuarenta centímetros este tipo robots en esta categoría lo que se podía ver era la resistencia y fuerza que tenían, tuvo que levantarse para ir al baño cuando iba bajando las escaleras alguien lo golpeo por detrás con el brazo.
- ¿Qué haces aquí?
Vio Aimeé su nombre nunca se le iba a olvidar, ni tampoco su rostro aunque también pensaba en cuanta coincidencia tenía que existir para que se volvieran encontrar en ese lugar sobre todo por el tiempo ya transcurrido, no pensó que Aimeé le gustara esos eventos pero después se dio cuenta que él estaba ahí por sus amigos, en esta ocasión intentaría hablar con ella más tiempo, era un deber para poder seguir con su vida porque cuando descubres a una persona que te hace pensar y sentir cosas que jamás en la vida habías experimentado vale la pena arriesgarse.
- Yo vine con mis amigos al evento
- Pensé que me seguías para que te pagara la cámara
Se alegró que lo recordara
- Creo que me sigues debiendo una disculpa
- Te dije que lo siento
- Esa no fue una disculpa, por tu culpa tendré que pagar esa cámara
La chica al escuchar esas palabras puso los ojos en blanco y dio el primer paso intentando alegarse por lo que Christopher se dio cuenta que tenía que hacer algo en ese momento o no tendría oportunidad de volverla a ver.
- ¿Me puedes decir donde compraste esa cara de engreída?
Esas palabras de inmediato la hicieron voltear, Aimeé se aproximó tanto a Christopher que tuvo la oportunidad de tomar algo de su mochila no sabía que era porque mientras lo hacia lo miraba a los ojos esperando que no se diera cuenta, solamente sentía algo rectangular y pequeño entre su mano tampoco entendía que plan iba a seguir pero sabía que debía tener algo de ella.
- Es la misma cara que tú tienes – contesto Aimeé mirándolo a la cara de manera retadora
Dijo eso y entonces si salió del lugar, cuando la perdió de vista vio lo que había tomado de su bolsa y era su reproductor de música eso seguramente era muy importante para ella y lo utilizaba todos los días o al menos Christopher esperaba eso y que pronto lo buscara para pedírselo, deseaba tener la suerte de que fuera esa misma noche.
Llego con sus amigos y aunque estuvo con la mirada al frente ya no puso atención al evento simplemente se limitó a beber y escuchar a sus amigos, toda su atención se había ido con Aimeé ahora la mayor parte de su ser se encontraba como en la luna.
Al otro día no esperaba que al llegar a la agencia hubiera buenas noticas, cuando la llamaron a la oficina de Perla vio que se encontraba Jorge de inmediato se imaginó que estaba en problemas quizás porque le quedo muy presente el incidente de la cámara.
- Tienes la portada para la revista Elite ¡Te aceptaron! – anuncio Perla muy contenta
Soltó un pequeño suspiro, eso era una muy buena noticia y esperaba que fuera una gran oportunidad para que se realizara un contrato. Agradeció a Perla y Alex aunque pensaba que eso no era suficiente para mostrar su gratitud.
- Siempre confiamos en ti Christopher y estamos muy orgullosos del trabajo que estás haciendo.
Esa hizo que sus ojos se le aguasen y que la nariz le picara sentía que lo siguiente seria que lagrimas cayeran por sus mejillas pero no quería que lo vieran de esa forma por lo que tomo una bocanada de aire.
- Christopher eres menor de edad por lo que necesitamos hablar con algún tutor tuyo para que firme contrato
- Está muy bien pero ¿Cuándo?
- Tiene que ser esta semana por que la próxima semana nos vamos a la ciudad de Monterrey.
Eso era demasiado pronto, los nerviosos comenzaron a sentirse y seguramente los sentiría toda la semana.
- Esta semana estaremos muy ocupados viendo detalles de las prendas y algunos otros detalles del viaje – eso sonó como un aviso de todo el trabajo que se venía y lo comprometido que debía estar.
Cuando salió de la oficina vio sentada Aimeé, eso lo puso muy feliz y pensó que eso no podía ser posible, dos grandes sorpresas en un solo día, el que antes era feliz solamente con que no lo molestaran. Pero con Aimeé tenía un plan por lo que se limitó a caminar y en el momento en que paso por donde ella se encontraba sentada con una actitud despreocupada, paso indiferente.
- Tienes algo que me pertenece – escucho decir enseguida que paso
- ¿Qué?
- Mi reproductor de música
- Eso es una mentira
Aimeé negó con la cabeza
- Si soy mentiroso tu eres un destructora de cámaras
- ¿Quieres que te invite a salir? ¿Por eso lo hiciste?
Ese no era su plan pero era mejor que el que tenía, y con esa forma de jugar con el entendía que era una chica inteligente y coqueta.
- Eso es lo que quiero
- Pero lo malo es que contigo simplemente tendría sexo
Christopher se puso tímido, el color se le subió a las mejillas el jamás había tenido alguna cita y tenía tan poca experiencia con las chicas que empezaba a darse cuenta que el juego de Aimeé quizás lo perdería.
Aimeé comenzó a reírse era una sonrisa dulce pero lo que no conocía Christopher de ella es que era una persona que sabía lo que quería, y decía lo que pensaba eran muy opuestos y era un par de años más chico que ella.
- Si eso es lo quieres no me importa aunque tendrías que aceptar ser mi novia, quiero decir que me gusta a la antigua.
- Y después terminaríamos – suspiro y proseguido diciendo – creo que nos veremos más seguido por aquí, nos conviene llevarnos bien.
Christopher tomo de la mano caminaron con paso firme al salón de ejercicio donde tenía sus cosas, abrió su bolsa y le entrego su reproductor de música, ella lo tomo diciéndole un gracias esas palabras si le parecieron convincentes a Christopher no como en la otra ocasión donde le intento pedir disculpas por lo de la cámara, ya con el reproductor en la mano Aimeé se fue.
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