Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

13

La policía lo estaba interrogando.

Su madre salió del hospital días después, sin embargo, no fue solo eso lo qué pasó. Los médicos interrogaron a sus madre acerca de cómo se había caído. Ella dijo que no estaba segura, que no recordaba, pero seguramente se había caído. Los médicos negaban que sus heridas fueron producto de una simple caída y al parecer llamaron a los policías por sí solos, asegurándose que ella no estuviera viviendo con algún marido agresor o algo similar.

Como era obvio, su padre fue totalmente retirado como sospechoso porque él yacía trabajando en ese momento, el único sospechoso fue Taehyung. Era el único que estaba en su casa.

—Quieres decir que apenas la encontraste llamaste a una ambulancia.

Taehyung asintió, intentando no temblar por el miedo a las miradas de los oficiales. Hoseok había dicho que lo había visto empujar a su madre y, Taehyung solo pensaba en eso. No recordaba pero le creía porque Hoseok no mentiría. Aún no podía creer como se había atrevido a casi matar a su propia madre, y menos que solo recordara verla de lejos siendo empujada por Hoseok.

¿Se estaba volviendo loco?

—Está bien, Kim Taehyung. Es todo por ahora, puedes irte. —El oficial de policía se puso de pie y Taehyung hizo lo mismo despidiéndose con respeto.

—Al fin.

—Hoseok —soltó sorprendido de que estuviera ahí, no lo había visto hasta ese momento—. ¿Qué... qué haces aquí?

Hoseok se encogió de hombros y se apoyó en la mesada de la habitación de aquella comisaría en la que fue interrogado: —Estaba aburrido.

—No me dijiste que vendrías —murmuró mirando como el pelinegro relucía más que nunca bajo la blanca luz del lugar.

—Ay, Taehyungie... ¿acaso alguna vez te conté a dónde iría? No seas tonto. Yo no le doy explicaciones a nadie. —Su tono salió burlesco, de una forma que no le sentó bien.

—Quiero decir, es solo que me sorprendiste. No te esperaba.

—Debía cuidarte. No puedo dejar que alguien se entere de lo que le hiciste a tu mamá, amor.

Su corazón débil se oprimió aún mas: —No puedo recordar...

—Pero lo hiciste. Casi la matas.

Taehyung negó y mil veces con desesperación, con lágrimas en los ojos: —Nunca le haría daño, yo no quise-

—¿Con quién hablas?

Una conocida voz lo tensó por detrás suyo. Taehyung se giró y miró hacia el oficial de policía que estaba de nuevo había aparecido ahí. Estaba observándolo desde en el marco de la puerta de la habitación, mirándolo con clara extrañeza.

¿Hacía cuánto había estado ahí?

—Yo no... —No sabía que decir. Era claro que no veía a Hoseok, que lo había visto hablando a la nada, pero ¿qué tanto había escuchado? ¿Qué estaba pensando?

Enmudeció más cuando Hoseok se acercó al hombre, porque lo miraba fijamente mientras caminaba a su alrededor.

—Estabas hablando con alguien —dijo, demasiado seguro.

—Los hombres uniformados y fuertes son mi debilidad —confesó Hoseok, desconcertándolo por completo. Plantó un feo y amargo sentimiento en él con esas palabras, ya no sentía miedo del oficial, ahora sentía otra cosa al saber lo que producía en Hoseok, al saber que le atraía—. Pero no los que se meten en mi camino... ¿qué deberíamos hacer con él, Taehyungie?

—Hablaba solo —respondió rápidamente Taehyung, cuando la pregunta de Hoseok se sintió como una invitación a hacer algo malo, muy malo—. Lamento asustarlo. —Hizo una reverencia al hombre, quedándose en esa posición hasta que aquel hablara. Rezando que le creyera.

—Entiendo. —El tono del oficial fue firme. Parecía creerle, y confirmó que fue así cuando lo dejó irse, sin ninguna pregunta más.

Taehyung no se daba cuenta que estaba caminando a su casa a paso rápido, no hasta que comenzó a respirar con dificultad y sus pies dolieron. Redujo la velocidad, hasta detenerse en una calle poco transitada. No se sentía solo, únicamente por la cantidad de ruido que provocaban los autos que iban de un lado al otro, pero por alguna razón algo dentro suyo simplemente se dio cuenta que si estaba solo. Completamente solo y confundido. Asustado.

—Es viernes. —Tan pronto esa conocida voz sonó, Taehyung giró a él. Su deseo por abrazarlo fue demasiado, necesitaba rodeándolo com sus brazos y hundir su rostro en su cuello. Hoseok, su Hoseok era el único que siempre seguía a su lado a pesar de todo—. ¿No es hoy la reunión con tus amigos?

Se sorprendió darse cuenta que lo había olvidado por completo. Era hoy, seguramente ya todos estaban en casa de Jungkook. Le habían invitado a él y a Hoseok, aunque no estaba seguro si Hoseok iría, después de todo él no era exactamente como ellos...

—¿Vendrás?

Hoseok sonrió para su sorpresa: —Por supuesto.

—¿Como harás para que te vuelvan a ver? —preguntó dándose cuenta que estaba hablándole en medio de la calle, que seguramente todos alrededor creerían que le hablaba a la nada misma.

O el menos eso creyó hasta que Hoseok alzó sus manos pasándolas en sus hombros.

—No desaparecí para nada hace un momento. —Por supuesto, pensó. Hoseok no lo dejaría solo sin razón. Él lo quería.

Fue junto a Hoseok a casa de Jungkook. Fue la primera vez caminando juntos por la calle, tan nuevo y a la vez tan extraño, no podía dejar de verlo. Era simplemente hipnotizante verlo, adictivo. Dudaba algún día cansarse. Y, la mejor parte era que Hoseok lo había elegido a él, entre todos los hombres que existían.

Sus amigos fueron cordiales, fue una corta reunión tranquila. No había habido nada extraño, a excepción de que Yoongi había hablado poco pero era sorprendente sabiendo que no era tan sociable cuando habían desconocidos, no hasta que entrara en confianza.

—Ahora entiendo porque te gustaba Jungkook.

Taehyung dejó de cepillar sus dientes en ese mismo instante. Miró a Hoseok a través de su espejo, pero aquel solo estaba de perfil apoyado en el marco de la puerta de su habitación y su pequeño baño, mirando a la nada.

—¿A qué te refieres? —preguntó antes de escupir y enjuagarse la boca.

Hoseok hizo un silencio extraño y miró sus uñas, con una extraña sonrisa.

—Él es tan... único.

—Único —repitió sin comprender, intentando acallar el amargo sentimiento que crecía y crecía dentro suyo. Hoseok lo miró, su sonrisa irradiaba cómo hacía mucho no lo hacía. Y, asintió tranquilamente, como si no se diera cuenta lo que le estaba provocando.

—Lindo, caballero, amable... fuerte.

—¿Fuerte? —Recordaba que era lo mismo que había dicho del oficial de policía. Su "debilidad", ¿qué estaba queriendo decirle entonces?

—Se ve tan tierno, pero es fuerte. Diría que es el más valiente de todos ustedes... Me gusta.

—Estás bromeando, ¿cierto? ¿Por qué de pronto estás diciendo esto?

—¿No puedo contarte cuando alguien me gusta? —Ladeó el rostro, mirándolo con inocencia y algo más—. Jungkook es tan... ah, solo verlo me produce tantas cosas. ¿No puedo decir cuándo alguien llama mi atención de esa forma? ¿Cuándo alguien me hace querer desearlo...?

—No hablas en serio, n-no lo haces. Dilo.

Hoseok miró hacia abajo. Taehyung le siguió la mirada y se tensó al darse cuenta de que lo estaba agarrando de la muñeca.

—Me... lastimas.

Lo soltó tan rápido como si quemara, creía no haberlo estado agarrando fuerte, estaba seguro que apenas lo sostenía, pero si Hoseok decía que lo estaba lastimando entonces si lo hacía. Respiraba irregularmente por aquello, porque ni siquiera se había dado cuenta de que lo había agarrado en primer lugar. ¿Así había pasado con su madre? ¿Con el chico...?

—L-lo siento, yo no quise-

Hoseok rió, para nada lastimado como había dicho anteriormente. Rió divertido... Satisfecho.

—Por supuesto que bromeaba, Taehyungie. No hay necesidad de ser agresivo —habló tranquilamente antes de girarse y caminar tocando los muebles de su dormitorio por los que pasaba, dejando al castaño ahí, torturándose por dentro por lo que acaba de pasar, de hacer.

El fin de semana volvió a verse con sus amigos, esta vez en una pequeña reunión con otras personas, y Hoseok también estaba ahí. Hoseok también estuvo en las siguientes reuniones pequeñas que hizo con sus amigos. Ahora hasta Yoongi había comenzado a hablarle normal. En otro momento se hubiera sentido bien por cómo las cosas estaban pasando, pero se sentía cada vez peor sin mencionar que había descubierto que estaba siendo vigilado por un policía por alguna razón. Y era por algo en particular, los había visto hablando a solas en algunas ocaciones y sentía que Hoseok le daba cada vez más atención a Jungkook, o tal vez era algo de su imaginación.

Aunque estaba muy seguro que lo que le dijo Jungkook no fue parte de su imaginación.

—¿Disculpa?

—No lo tomes mal —respondió Jungkook con timidez y algo de arrepentimiento por la expresión que hizo—. Quise decir que, Hoseok es... ya sabes, atractivo. Me gustaría poder sacarle fotos para el trabajo de mi clase, o a ustedes dos-

—No. —Taehyung se puso de pie agarrando su bebida—. Tenemos cosas que hacer —agregó yéndose.

Jungkook lo siguió: —Dijiste que no harían nada mañana.

—Recordé que si.

—Oh, vamos, Tae. Solo serán unas fotos, Yoongi estará ahí también.

—Te dije que no, ¿quieres que te lo deletree? —preguntó Taehyung, comenzando a molestarse.

—¿Por qué parece como si evitaran las fotografías? —preguntó Jungkook de pronto, tensándolo—. Yoongi se dio cuenta de eso. Prácticamente huyen cuando estamos por tomarnos una foto juntos.

Sus manos se apretaron en puños, no había creído que serían tan obvios. Era cierto que huían cuando estaban por tomarse alguna foto, Hoseok dijo que no sería buena idea que saliera en alguna, no especificó la razón pero Taehyung lo obedecería siempre.

—No le gustan las fotos.

—¿Por qué no? Es lindo —soltó y de inmediato pareció arrepentirse de lo que dijo—. Quiero decir, tengo ojos... Hoseok es muy atractivo. Tal vez la persona más atractiva que vi. Si no fuera tu novio, creo que cualquiera lo quisiera —suspiró y negó—. No entiendo porque-

—¿Cualquiera o tú? —dijo, o gruñó, no estaba seguro. Dejó de ser consciente de sí mismo cuando Jungkook habló así de su novio—. Será mejor que te alejes. Si te veo a solas con Hoseok, no responderé.

—No fue lo que quise decir, lo estas malinterpretando-

—No quiero verte —interrumpió alejándose, y esta vez sin escuchar ser llamado. Jungkook había quedado mudo, Taehyung estaba seguro que era porque lo había descubierto.

Sus sospechas se habían aclarado, estaba seguro, luego de lo que había dicho Jungkook. Él miraba a Hoseok de la forma que pensaba, fue decepcionaste y lo hacía enojar demasiado.

Esa misma tarde que llegó a su casa encontró a Hoseok en su habitación recreativa, sus padres no estaban como siempre así que podía estar por toda la casa hablando con él. Eran los mejores días eso, pero luego de contarle, Hoseok solo hizo una mueca que no le gustó en lo absoluto por lo que podría significar.

—Ya lo sabía... me lo dijo, luego que coqueteó conmigo.

—¿Qué? —Fue lo único que salió de su boca, estaba demasiado shockeado por lo que le acaba de confesar.

—No quise contártelo porque es tu amigo y...

—¡Debiste habérmelo dicho! —exclamó indignado, con ira recorriéndolo—. ¿Hace cuánto fue? —preguntó intentando tratar de sonar menos enojado.

—Hace días.

Una vez más se tensó, pero esta vez peor que antes.

—¿Hace días? Ayer los vi hablando a solas. Lo sabes hace días y sigues hablando como si nada pasará con él, ¡¿por qué?! —Está vez la desesperación que sintió fue porque presentía cuál sería la razón, porque también lo sospechaba y era su mayor miedo.

Hoseok se encogió de hombros, inquietándolo.

—Porque también me gusta.

Taehyung ni siquiera pestañeó, algo muy dentro suyo esperaba que dijera que era broma, pero podía sentir como hablaba en serio. Recordaba como de mucho lo había mencionado los últimos días y, como había dejado de tocarlo. Hacía días no lo tocaba, apenas siquiera lo besaba. Era obvia la razón.

—¿Tú y él...?

—No responderé eso —dijo pero Taehyung casi sabía la respuesta, comenzó a entrar en crisis.

—Dijiste que solo me querías a mi.

—Aún te quiero, pero Jungkook... él... me gusta.

—No —negó sin querer aceptarlo—. Él no te gusta más que yo. Él no, él no puede gustarte.

Hoseok se acercó y deslizó sus dedos lentamente sobre los botones de su camiseta.

—Hay una forma para que deje de gustarme...

—¿Cuál?

El timbre de su casa sonó, Taehyung salió aunque su mente solo estaba en lo que acaba de enterarse mientras luchaba con las lágrimas de sus ojos.

Cuando abrió la puerta, la sorpresa fue grande. Era Jungkook.

—¿Qué haces así? —preguntó con claro enojo, con ira incontrolable. No podía creer que estuviera ahí luego de lo que hizo, seguro pensaba que jamás se enteraría.

—¿Podemos hablar? No pude encontrarte en el receso y quería aclarar lo que dije-

—¡Vete!

—Por favor, solo escúchame. Yoongi me está esperando, será rápido —dijo Jungkook entrando por la fuerza. Taehyung lo dejó luego de escuchar que otro de sus amigos fue mencionado, ¿acaso él también lo sabía? ¿Se lo estuvo ocultando también?

—Nunca tendrás a Hoseok.

—Tae, no sé que entendiste pero no es así. Si me dejas explicarte, lo haré, será corto pero es algo... que debes escuchar bien.

—Mátalo —dijo detrás de Jungkook—. Solo si está muerto dejará de gustarme. Solo así seré completamente tuyo de nuevo.

Jungkook giró hacia donde Taehyung miraba, lo notó por cómo rápido giró también.

Matarlo, Hoseok le estaba diciendo que matara a su amigo, su mejor amigo. Le estaba diciendo que volvería a ser solo suyo si lo hacía.

—¿Tae?

¿Qué tan malo sería simplemente hacerlo? ¿Acaso era peor que todo lo que ya había hecho en ese último tiempo?

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro