Me bajé del caballo para mirar hacia el horizonte sobre el mar, sonreí adorando esta vista... Se había vuelto mi lugar favorito desde que lo encontramos hace ya varias semanas atrás, solemos venir aquí por caprichos míos pero esta vez había sido idea de Levi.

-Oye, __________ -me di vuelta hacia Levi.

Él se acerca a mí lado pero yo me di cuenta de la cantidad de personas que se estaban "escondiendo" por el lugar para ver lo que iba a pasar, ¿algo interesante? Quizás.

-¿Am...? ¿Qué sucede? -le pregunté a Levi aún mirando a los chicos.

-Ignóralos -respondió rodando los ojos.

Él me tiende la mano y yo la acepté extrañada, los demás se veían emocionados a más no poder, intenté ignorarlos como dijo Levi. Él me guió hasta las orillas del océano, donde nos detuvimos.

-¿Recuerdas cuando nos conocimos? -preguntó de la nada, mirándo al frente. Asentí con una sonrisa.

-Lo recuerdo... Te salvé de morir de hambre y me quedé contigo aunque no me hablabas casi nada -dije recordando ese momento especial para mí.

-Nunca te agradecí por eso... -me mira finalmente con una sonrisa sincera-. Gracias por salvarme la vida...

-N..No creo que fuese tan así, yo... -él apretó levemente mi mano para hacerme verlo de nuevo.

-________, realmente has salvado mi vida en más de una ocasión aunque no te hayas dado cuenta. Fuiste mi mayor motivación para seguir adelante.

Lo miré sorprendida y sonrojada, muy sonrojada. Cubrí mi rostro con una mano sintiéndome apenada, traté de calmar mis nervios y suspirar profundo.

-¿Por qué recuerdas eso ahora? -cuestioné.

-Porque quiero preguntarte algo, y... quiero que recuerdes el momento con el que empezó todo para nosotros.

Levi se coloca frente a frente conmigo, podía sentir su mano temblando con la mía. Lo miré curiosa y expectante a lo que pensaba hacer, pero entonces lo vi rebuscar en su bolsillo trasero hasta sacar una cajita abierta frente a mí.

-¡¿Hm?! -solté su mano para cubrir mi boca por la sorpresa de ver un anillo precioso. Levi se arrodilla haciéndome retroceder un paso, de nuevo por la sorpresa.

-_________... ¿Me harías el honor... de casarte conmigo?

No podía creer lo que estaba pasando, apenas podía procesarlo. Solo podía mirar a Levi y el anillo frente a mí, hubo un silencio casi absoluto de no ser por el sonido de las olas, los pájaros y caballos a nuestro alrededor, pareció durar una eternidad. Mis ojos se llenaron de lágrimas y solo atiné a asentir con la cabeza.

-¡Sí! -me lancé sobre él hasta caer sobre la arena-. Claro que sí, Levi.

Él suspira aliviado y me abraza con fuerza pero delicadeza a la vez.

-Gracias... de nuevo.

Ambos nos separamos levemente para vernos al rostro, Levi me pide la mano y coloca el anillo en mi dedo. No podía dejar de observarlo pero entonces miré a Levi y lo besé con necesidad.

En ese instante escuchamos los aplausos de todos los presentes quienes se acercaron para felicitarnos. Estaba que no paraba de llorar por la emoción y las chicas me abrazaron.

-Jamás creí que el enano se animaría -dice Hange.

-Oye, cuatro ojos, te escuché -se queja Levi atrás nuestro estando con los chicos.

Yo me reí junto a las otras.
Al separarnos de ellos, volví a juntarme con Levi y miramos el mar.

-Que lindo lugar... ahora más especial... -comenté mirando el anillo en mi dedo-. Te amo, Levi.

-También te amo, _________.

Apoyé mi cabeza en su hombro a la vez que me colgaba de su brazo. Él igualmente apoya su cabeza sobre la mía, incluso deposita un tierno beso en ella. Este ha sido el mejor día de mi vida.

***

***

Solo esperaba a que el sacerdote dejara de parlotear para finalmente decir las palabras especiales.

-Yo los declaro marido y mujer.

-Al fin... -suelta Levi pensando exactamente lo mismo que yo.

Empecé a reír pero él no pierde más tiempo para besarme y yo no tardé ni un segundo en corresponder. Se escucharon los aplausos de todos y nosotros notamos cuando nos tiraron los pétalos.
Sonreí sonrelos labios de mi ahora esposo, al igual que Levi. Cruzamos por entre la gente hasta el carruaje y nos subimos a este, al instante comenzó a avanzar en dirección a la nueva casa que conseguimos para ambos solamente.

-________ Ackerman... me agrada -mencioné acariciando mi nuevo apellido con la voz.

-A mí también -Levi acariciando mi mano con su pulgar pero lo lleva hasta sus labios y besa el dorso de esta.

Sonreí y apoyé mi cabeza en su hombro mientras lo abrazaba con felicidad. Levanté la mirada para verlo al igual que él, ambos dejamos escapar leves sonrisas antes de mirar el camino. Tardamos un poco en llegar pero al hacerlo, Levi me ayuda a bajarme del carruaje, ambos entramos a la casa que amueblamos juntos hace un mes, disfrutando de nuestro nuevo hogar.

Desde que me pidió casarnos hasta ahora pasaron cuatro meses en los cuales preparamos todo con ayuda de los demás.

Me senté en el sofá y agarré la mano de Levi para luego tirarlo sobre mí y mantenernos acostados los dos.

-En todos estos años que pasamos juntos... nunca me imaginé que terminaríamos así -admití-. Supongo que se cumplió uno de mis mayores deseos.

-¿Ah? ¿A qué te refieres? -pregunta él.

-¿Recuerdas cuando nos hicimos novios y lo que dijo Erwin? -asiente-. Pues él tenía razón... yo te quiero desde ese momento o incluso bastante tiempo antes de eso.

Levi me mira y sonríe ampliamente, apoya su mano por el respaldo del sofá y la otra a un lado de mi cabeza para sostenerse.

-¿Por qué no te animaste a decírmelo antes? -pregunta.

-¿Me hubieras aceptado? -cuestioné yo. Él se acerca a mi rostro.

-Te quiero desde hace bastante tiempo antes de ese momento... creo que sí lo hubiera hecho -comenta como si fuera algo obvio.

-¿Desde ese momento? -pregunté sorprendida.

Él asiente cerrando los ojos y luego me besa en los labios, a lo que correspondí enseguida.

-Entonces también puedo decir que uno de mis mayores deseos... se ha cumplido -soltó.

Ambos sonreímos aún más que antes y volvimos a besarnos con intensidad. Supongo que la luna de miel no tardaría en llegar.
Me siento feliz y aliviada de poder vivir este momento... especialmente si es con el que siempre ha sido el amor de mi vida. De toda mi vida.