Capítulo 18

El peli-rubio miraba constantemente hacia la ventana, ya había pasado una semana desde que se comprometió con KaLia, sin embargo, pensarlo demasiado solo hacía que se distrajera de sus actividades.

- ¿Jimin?- salió de sus pensamientos cuando una voz masculina lo llamó. Él miró a la persona. Se percató que era el alumno nuevo.

- ¿Sí?- se inclinó para beber un poco de agua, se encontraban en la clase de danza avanzada.

- Te veo un poco distraído.- comentó el chico- No te conozco mucho pero no estabas así ayer.

- Hoseok, yo no estoy del todo bien, pero no te preocupes.

- Ey amigo- apoyó su mano encima del hombro del peli-rubio- Tranquilo, si necesitas hablar de algo, aquí me tienes.

- No pasa nada, no te preocupes.

Ambos se alejaron el uno del otro para volver a practicar el paso que no les salía, mientras tanto, una chica muy tímida al otro lado del salón se encontraba observando al rubio sin nada de disimulo. Suspiró haciendo un pequeño puchero, planteándose la idea de si acercarse o no.

- Oye... tú... extranjera.- la chica elevó su vista para toparse con una chica muy linda, de cabello negro y corto hasta los hombros.- Deberías al menos ser útil y practicar el paso que a ninguno de nosotros nos sale.

La morena se puso de pie encarando a la chica, todos rápidamente observaron al par; Jimin se percató del tumulto de personas reunidas ahí, no había un responsable en el salón ya que tuvo que salir.

- ¿Qué? ¿Intentarás hacer algo útil?- volvió a decir la pelinegra.

- Pues sí.- cruzó sus brazos.- Callarte la boca, bonita.

Apartó un poco a los que observaban, presionó el botón del play en el teléfono que estaba encima del bafle tamaño mediano del salón de prácticas y comenzó a hacer la coreografía que estaban practicando. El baile contemporáneo suele ser muy complicado en ocasiones, y esta coreografía tenía un cierto grado de complejidad, y al llegar a un paso específico todos fallaban.

Pero ella lo estaba haciendo bien, movía su cuerpo al ritmo de la música, hasta que llegó el momento, hizo el paso que a nadie en el salón le lograba salir y ella lo hizo con total facilidad.

Cuando la música se detuvo, ella encaró a la chica que la estaba molestando.

- ¿Por qué no aprendes a ser útil tú en lugar de meterte en los problemas de los demás?- interrogó Jessica.- Oh Jennie, al parecer, te quedaste callada.- descruzó sus brazos y se alejó un poco, tomó camino hacia los baños, necesitaba lavar su rostro. Después de recoger sus cosas, agarró su bolsa y salió.

Cuando iba por el pasillo fue detenida por una persona que la sostuvo de su muñeca y la arrastró a un salón vacío. Ella creía que se trataba de esa chica y su pandillita, sin embargo, respiró aliviada al ver a Jimin frente suya.

- Me asustaste.- dijo ella.

- Y tú me sorprendiste.- cruzó sus brazos el rubio sorprendido en serio, sonrió emocionado- Le has callado la boca a Jennie, ella es una de las reinas de la escuela.

- Me da igual, ella y su grupito me tienen harta.- resopló fastidiada- Deberían de ser más humildes, es decir, se sabe a la perfección que esas chicas son hijas de papi y lo reciben todo. Yo me he pasado la vida de país en país, de beca en beca, y nunca había sido tan molesto estar en un sitio tanto como aquí en Corea. Odio a los coreanos.- expresó en tono enojado. El rostro de Jimin entristeció repentinamente por su comentario.

- E-Entiendo...es...lo... más normal...

- Pero...- había metido la pata con el chico que le gustaba, y ya no había vuelta atrás.- Uy lo siento...es que...no lo dije por ti...ni por Taehyung...y menos por NaRi, ustedes son...buenas personas.

- Entiendo tu punto, pero eso me hirió.

- Ou...lo siento...- reverenció en tono suplicando para conseguir su perdón.- Lo lamento, no era mi intención ofenderte...puedo hacer lo que sea para que me perdones.- le suplicó, su gesto fue tierno ante los ojos del rubio.

- Bueno...la oferta me atrae.- eleva sus cejas pícaramente, la morena se sonrojó, él rió por su broma.- ¿Me aceptarías una cita?- la chica lo miró con cierta sorpresa.

- ¿Cita?- esa palabra hizo eco en su mente.- No lo sé Jimin, podría buscarme un problema con KaLia, no quiero que ella crea que yo estoy coqueteando contigo. Eres un hombre comprometido.

- Lo sé, pero nunca he dicho que sea una cita con intenciones...raras. Es más una salida de amigos.- la chica asintió más animada- Este fin de semana hacen una feria en celebración por no sé qué carajos, y como el sábado es el último día... quería saber si gustas acompañarme.

- Oh ...claro...nunca he estado en una feria en Corea.- dijo animadamente- Me encantaría ir.

Ambos sonrieron y se pusieron en marcha, debían cambiarse antes de su siguiente asignatura.

(•••)

El tierno pelinegro le sonreía a los clientes y les daba la bienvenida, caminó hasta la barra del bar, donde nuevamente estaría ubicado el día de hoy. Todo estaba tan tranquilo...hasta que se asustó cuando repentinamente NaRi llegó colocando su cabeza con pesadez encima de la barra.

- Ahhh...me asustaste- colocó su mano por encima de su camisa sosteniendo su pectoral del lado izquierdo.- ¿Te sucede algo?

- Estoy cansada, tengo mucho sueño.- miró a YeonJun y levantó su cabeza- No te he visto desde el día del compromiso. ¿Has estado bien?

- Sí, por suerte nada relevante que contarte.- la observó, había algo extraño con ella.- ¿Te sucede algo?- ella lo miró, estudiando sus expresiones faciales.

- No, nada.- mintió.- ¿Por qué?

- Te siento extraña...es como si... hubieras perdido ese brillo tan lindo que te hacía ser tú.

La castaña sopensó un poco la frase del muchacho, estirando un puchero que al pelinegro le pareció muy tierno -realmente ella es muy tierna- y repiqueteando sus dedos encima de la mesa.

- Bueno...sea lo que sea ...espero realmente que se solucione.- le dijo el chico sonriéndole tiernamente.- No merece tu lindo rostro estar triste, nada debe opacar tu ser.- le guiñó el ojo y agarró una bandeja para continuar trabajando.

- Señorita...por favor, una Coca-Cola- escuchó la castaña y rápidamente salió de su ensoñación.

- Enseguida...- vio de quién se trataba esa voz, sus ánimos bajaron nuevamente.- Tae...

- ¿NaRi?

Se encontraba al lado de Jungkook, quien vestía muy bien, una traje formal sin llegar a ser de viejo o de negocios, y su cabello peinado hacia atrás.

- La hermosa NaRi.- saludó el pelinegro tatuado a la castaña que dejó caer el vaso de plástico.- Oh, vaya. Déjame ayudarte.

- No, no es necesario.- lo detuvo rápidamente.- Esto...emmm....bueno que...sean bienvenidos. ¿Qué les pongo?- mordió su labio inferior con nerviosismo.

- A mi una cerveza sin hielo- dijo Jungkook muy animado. Miró a su acompañante.- ¿Qué tomarás Tae?

- U-Una...

- Sí, claro, una Coca-Cola para el señor.- habló NaRi agarrando una botella.- ¿En vaso o en botella?

- E-En...

- Le dejo la botella.- colocó el objeto encima de la barra dando por concluida su conversación con el pelinegro.

»Su cerveza, caballero.- dio una corta sonrisa y se fue a atender a otro cliente en la barra.

- ¿Le sucede algo?- interrogó Jungkook.

- No lo sé.- elevó sus hombros, sin embargo si sabía a la perfección lo que sucedía con la chica.- Ya sabes, hay días malos.

- Comprendo, bueno...hablemos de ti y de mí.

- ¿De tí y de mí? ¿Qué sucede?

- Bueno...creo que va siendo hora de que...podamos conocernos un poco más, no lo sé. ¿Te gustaría venir a mi casa?

- ¿A tu casa? Yo ...no lo sé...creía que se trataba de una copa después del trabajo...yo ...debo atender a Jin.

- ¿No está Wheein?

- Si, pero...bueno, hay que relevarla, sé de sobra como es mi hermano de insoportable y...

- Entiendo lo que pasa Taehyung.- el pelinegro miró al contrario quién acababa de interrumpir sus palabras- No estás claro con tus sentimientos. Y lo entiendo, he estado muy enfocado en querer conquistarte sin darme cuenta que...tal vez no quieres ser conquistado.

- Jungkook...

- No, tranquilo, puedo entender. Soy lo suficientemente maduro como para darme cuenta de eso. No te gusto, y temes perder lo que vendría siendo una amistad.

- Yo...

- No es necesario que te expliques...no me debes explicaciones, yo quise forzarte. Lo lamento.- se mostró muy arrepentido.- Vámonos, te llevaré a tu casa.

TaeHyung miró la hora en el reloj de pared que había en a un lado de la barra. <<NaRi está a punto de terminar su turno>>

-Lamento negarme, pero recordé que debo hacer algo antes de llegar a mi casa.

- Ok, en ese caso me voy.- sonrió el tatuado sacando su billetera.- Preciosa, ¿cuánto te debo?

- Son...500000 wones.- dijo la castaña sin siquiera mirarlos.

- Ten, quédate el cambio.- le sonrió.- Adiós Tae.- y ahí la chica levantó su vista.

<<O sea que...¿Tae no se irá con él?>>- pensaba la chica guardando el billete en el bote de las propinas.

- Bueno NaRi...¿A qué hora sales? Puedo esperarte.

- No es necesario.- dijo ella intentando sonar indiferente. No le salía a pesar de sentirse incómoda aún por lo que había pasado hace una semana atrás. Aún no lo habían hablado.

- Tranquila, Wheein me dijo que se podía quedar el tiempo que fuera necesario...creo que está interesada en Jin.- comentó intentando sonar tranquilo, porque en su interior habían dragones enfurecidos rondando su estómago.

- Al menos ella tiene claro lo que quiere.- dijo cortante terminando de limpiar el vaso que anteriormente Jungkook tenía.

- Bueno...no lo sé, es una suposición.

- Claro.- por fin lo miró, se sintió algo extraño dentro, como si hace tiempo no hubiera mirado a sus ojos negros.

Su contacto visual se extendió un poco, pero tuvo que romperse ya que NaRi fue llamada por su jefe.

- NaRi, por favor, ven aquí.- la castaña despertó de su ensoñación y avanzó hacia donde el hombre se encontraba.

- Dígame, Señor Park.

- Quería felicitarte por tu eficiencia, has trabajado duro en estos días, por eso, quería nombrarte encargada, es un puesto con más responsabilidades y requiere de más horas de trabajo, pero será muy bien remunerado. ¿Qué opinas?

- Oh...yo...no lo sé señor...soy estudiante...creo que debería pensar en alguien más.

- Entiendo, es lógico, no había recordado eso de que eres estudiante, discúlpame.

- No se preocupe.

- Pensaré en otra persona, espero darme prisa, debo regresar a Inglaterra.- dijo regresando por su camino.

- ¿Se irá?- interrogó NaRi, curiosamente.

- Sí, debo atender unos negocios, y necesitaba un encargado suplente en lo que voy y regreso.

- Comprendo.- asintió, miró a sus alrededores.- ¿Ha pensado en YeonJun?- la mandíbula de TaeHyung se tensó al oír la propuesta de la chica.- Sé que haría un trabajo impecable como encargado.

- Sí, la verdad es que es uno de mis mejores empleados.- asintió emocionado.- Gracias por tu propuesta NaRi, linda noche- me sonrió, observó su reloj en su muñeca.- Debería irse, su turno terminó.

Y se fue dejándola sola con el pelinegro.

- ¿En serio? ¿YeonJun?

- ¿Qué más te da? No es tu restaurante.

- Me da igual, es solo que me parece bastante extraño que lo propongas a él y hayas rechazado el puesto tú, si él pensó en ti es porque debías ser tú.

- Tae, eso no importa. Iré a cambiarme.

(•••)

Ambos tomaron el autobús, ninguno dijo una sola palabra durante todo el transcurso de su camino. NaRi observaba las luces de la capital mientras TaeHyung se dedicaba a mirarla a ella, no entendía como un ser humano se veía tan hermosa solo por el motivo de respirar. Espera, ¿Acababa de pensar que NaRi es hermosa? Sacudió su cabeza confundido. ¿Qué le pasaba? ¿Acaso se estaba volviendo completamente loco?

El autobús se detuvo en su parada, NaRi tomó su chelo y se puso de pie, Tae repitió su acción, ambos salieron del bus. Debían caminar dos cuadras para llegar a su edificio.

- Y bueno...- Tae rompió el silencio.- No te he visto últimamente en clases. ¿Estás asistiendo en serio?

- Sí, solo que no estoy sentándome cerca de ti.

Eso le incomodó un poco al pelinegro, sintió una sensación tan fea en su interior.- Ah, bueno,¿puedo saber por qué?

- No creo que gustes escuchar esa respuesta, Tae.

- Dímela.

- Pues...- ella se detuvo, se encontraban cerca de un callejón en donde habían cubos de basura.- Para evitar incomodarte, ya que ni tú mismo sabes lo que quieres.

- De nuevo con eso.- dijo TaeHyung con cierto tono de fastidio.- ¿Qué no te cansas de decirme lo mismo?

- ¿Y tú no te cansas de besarme siempre que quieras y luego querer actuar como si no ocurriera nada?- Taehyung calló, ese argumento lo había dejado completamente sin palabras.

- Yo no...te beso siempre que quiero.- confesó, y ahora era el turno de NaRi de quedar completamente muda.

- ¿Qué?

- NaRi, en serio quisiera encontrar una explicación científica a todo lo que me sucede, pero no la hay. Es que... simplemente creo que...me...me gus...gustas.- las mejillas de la chica se tornaron color rojo, agradecía a la oscuridad para que no se vieran sus rosados cachetes.

»Y sí, he sido un tonto nivel Dios, pero es que entiéndeme. Hasta hace unas semanas atrás se suponía que me gustaban los hombres.- humedece sus labios para continuar. Pero decide callar.

Ambos guardan silencio.

Es más que evidente que ni él esperaba confesar eso, y ni ella escuchar las palabras del chico.

NaRi apretó una de las asas de su mochila -esa que siempre llevaba a todas partes con ella- comenzando a sentirse nerviosa.

»Pero tranquila...yo entiendo tu molestia.

Él continuó su camino, ella aún en shock pestañeó varias veces, aún no podía creer lo que escuchaba.

- Espera Tae.- corrió los pocos metros que él había avanzado, tomó su hombro. Él volteó a verla por encima de su hombro.- ¿Te gustaría...emmm...bueno....yo...esto...

¿Qué te pasa NaRi? Sus nervios no la dejaban articular una frase con sentido. Él sonrió, siempre le ha parecido muy tierna la chica, se volteó completamente quedando frente a frente.

- Bueno....¿Me ayudarías a ser hetero?

NaRi abrió enorme sus ojos. Sintió los latidos de su corazón, acelerados por la propuesta. Sonrió y asintió en respuesta al pelinegro. Entonces...¿Qué pasaría de ahora en adelante con ellos?

***

Buenas, sin mucho que decir, he actualizado como siempre 😃

Pero bueno, se viene una etapa de mi vida complicada y puede existir la posibilidad de que no actualice el día que toque o falle y deje de actualizar porque ando estudiando y preparándome para los exámenes de ingreso de la universidad.

Sin mucho más que decir, nos vemos en la próxima y espero que sea pronto.

Gracias por el apoyo que está recibiendo la historia 🥺

Linda semana para ustedes ☺️