Capitulo 3
Taehyung había llegado a las tres de la madrugada. Apenas llegó se cambió y se metió a la cama. Jungkook ya estaba profundamente dormido. Su esposo se lo quedó viendo por un momento antes de dormir: Jungkook seguía tan hermoso como siempre había sido.
Y con ese pensamiento en la cabeza, se quedó dormido.
Sábado 21 de enero.
Jungkook estaba calentando en el horno las cuatro porciones de la segunda pizza que habían quedado de ayer. Taehyung estaba sentado en la mesa, esperando para comer mientras revisaba su correo electrónico y continuaba pasando la enorme cantidad de informes pendientes. El menor de los dos se acercó detrás de él con la excusa de colgar algo en el perchero: solo se estaba fijando si en realidad su esposo no estaba hablando con nadie por mensajes de Facebook.
No había nada. Todo trabajo y más trabajo.
Jungkook se le acercó con la esperanza de recibir un poco de mimos. Él puso sus dos manos en los hombros de Taehyung y le hizo un pequeño masaje, luego se encorvó un poco para hablarle al oído:
— Si hoy vienes más temprano quizás haya una sorpresita.
— Mmm. — susurró viendo a la derecha para completar el informe en la pantalla. Estaba por terminar uno más de la pila de quince. — No lo creo.
— Es sábado.— volvió a decir Jungkook. — ¿No puedes decirles que...?
— Manejo mi unidad, Jungkook — Taehyung apenas giró su cabeza para verlo de reojo — se supone que tengo que responsabilizarme de los casos. Ya sabes que la unidad del señor Choi se retiró y nos dejaron todos los casos para nosotros.
Jungkook suspiró y se fue a ver la comida, cruzado de brazos. Taehyung continuó con su informe y una vez terminado, cerro la laptop y la guardó en su maletín. Se levantó y fue a la cocina. Había escuchado el suspiro de Jungkook.
— Te prometo que mañana tendré tiempo. — le dijo tomando dos platos mientras los llevaba a la mesa — intentaré ocuparme hoy de todo lo que queda y continuaré el lunes.
Jungkook sacó la pizza calentada del horno y la dejó en la mesa. Más bien casi tiró la asadera a la mesa.
— Haz lo que quieras. — le dijo volviendo a su cuarto. — después de todo tu trabajo es muy importante ¿no?
Y cerró la puerta de un golpe fuerte.
Rosé salió del baño con una toalla sobre la cabeza. Ya estaba vestida para salir con Gyu esa tarde. Ella fue hacia el living y vio un plato vacío.
— Yo ya comí antes. — le dijo a su papá.
— Se supone que el plato era de Jungkook.
—¿Y donde está él?
— Se encerró en el cuarto. — respondió como si nada.
Rosé arrugó las cejas. Intentó mantener toda la calma que le fuera posible y se sentó frente a él con las manos cruzadas.
— ¿Estás saliendo con otra persona?
Taehyung levantó la vista al momento.
— No. ¿Por qué lo dices?
— Déjame ver tu celular.— le dijo extendiendo la mano.
Taehyung alzó las cejas, pero luego se lo dio. Rosé se tomó el tiempo necesario para revisar todas y cada una de sus aplicaciones. Revisó Instagram (su padre apenas tenía 20 seguidores así que había sido un trabajo fácil) revisó su otra cuenta de Instagram que era la de policía y esa le costó más trabajo pero no halló ningún chat comprometedor. Revisó Facebook y WhatsApp, no había ni uno solo archivado. Ni siquiera había llamadas perdidas ni de números desconocidos.
Revisó la galería y tampoco halló nada.
— Por lo menos me alegra que tengas un fondo de pantalla con papá. — lo regañó a medias.
—¿Por qué? ¿Quieres que te ponga a ti?— preguntó guardando su teléfono otra vez en el bolsillo.
Rosé suspiró.
— ¿Puedes hacerme un favor, Taehyung?
Él dejó de comer y la miró con seriedad, luego él dijo:
—¿Por qué siempre me llamas por mi nombre?
— Por que estoy enojada. —fue sincera. Ella siempre era sincera. Casi nunca mentía. No había necesidad de hacerlo. — Hazme un favor.
—¿Qué quieres?
Ella se quitó la toalla de la cabeza porque se sentía ridícula. Necesitaba seriedad.
— Hoy iré a dormir a la casa de Gyu. Les dejaré la casa sola a ustedes dos, así que más te vale que te encargues de meterte en tu cama con él y hacer algo productivo. — ella se levantó de la mesa enojada — por que lo estás perdiendo. Y si lo pierdes a él, a mi también.
Y tal como su papá, también le dio un portazo a la puerta.
Taehyung cerró los ojos. Últimamente su hija estaba siendo demasiado dura con él. Miró su celular y notó que faltaba media hora para ir a la estación de policía.
Quedarse con Jungkook durante todo ese tiempo le retrasaba adelantar el trabajo. Tenía demasiadas cosas que hacer y si fuera por él se iría en esos momentos a la estación, pero su cerebro le exigía un poquito de descanso.
Taehyung se levantó y llegó hasta el cuarto que compartía con Jungkook. Él estaba sentado en el escritorio corrigiendo algunos exámenes que debía entregar el lunes. Jungkook no solo era profesor de música, sino que también daba lengua y literatura y una hora de gimnasia los jueves a los de primer año. Él solo se encargaba del curso C. Tenía bastantes horas que cubrir en la escuela. Un multi maestro a decir verdad. Él siempre podía con todo.
Taehyung se quedó en la puerta, mirándolo, sin interrumpirlo.
— ¿Precisas algo? — dijo Jungkook de mala gana sin siquiera despegar la vista de los exámenes.
Taehyung se acercó hasta él y tomó una silla para sentarse a su lado.
— Estoy con muchas cosas Jungkook. Cada día mi trabajo consume más tiempo...
Jungkook paró de corregir o de lo contrario haría pedazos la hoja del pobre alumno.
— Claro, porque darme un beso todas las mañanas te quita una hora ¿verdad? — Jungkook dejó su bolígrafo a un lado — abrazarme por las noches te quita tiempo ¿no? wow... yo también estoy ocupado, Taehyung.
— Jungkook...
— No. — dijo él mirándolo fijo — ir a verme a la cocina y tomarme de la cintura te quita tiempo. Bañarnos juntos te quita tiempo. Ir a cenar te quita tiempo. Llegar tarde te quita tiempo. tomarme de la mano te quita tiempo... darme un mimo te quita tiempo... — Jungkook suspiró fuerte — mandarme un mensaje te quita tiempo. Saludarme todas las noches te quita tiempo... Descuida — dijo irónico — claro que lo entiendo. El tiempo de tu trabajo es muy valioso, tal como el mío. — él volvió a tomar el bolígrafo — lárgate que tengo que terminar con estas cosas.
Taehyung no se movió.
— Vete a tu trabajo, que estás más feliz ahí que aquí. Vete, — le dijo volteando su silla para no tener que verlo — que estás perdiendo el tiempo.
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Estoy considerando un final feliz...
Pero no lo sé.
Quiero aclarar una cosa: mientras que no vean el cambio de fecha quiere decir que los capítulos son escenas de un mismo día. Por ejemplo, hasta este capitulo y el que sigue, serán del 21 de enero y así lo iré cambiando.
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