— A ver, te estoy diciendo que revisen los callejones — le dijo Taehyung a Jay por teléfono. — no, no... en los abiertos, donde hay casas ocupadas. Estoy seguro que hay policías cubriendo la zona. Sí, bien... bueno, mañana me lo cuentas. — Taehyung estaba por cortar cuando Jay le preguntó si debía usar su arma — solo en caso de ser necesario, recuerda que tú todavía no tienes el permiso. 

Y cortó la llamada. Taehyung se llevó una mano al cabello. Estaba enojado ¿por qué sus oficiales no podían hacer nada bien mientras él no estaba? aunque definitivamente ellos no eran buenos para las persecuciones serias. ¡Se suponía que la unidad del señor Choi se ocupaba de esos asuntos! Pero el señor Choi se había ido, y sus oficiales habían sido cambiados a otras unidades en otra parte de la ciudad. 

Taehyung dejó salir un suspiro largo. Jungkook estaba terminando de comer el pollo hervido. Taehyung le sacó los platos vacíos y los lavó todos. Finalmente terminó con el ultimo plato y se fue a sentar al sillón. Pero luego se paró y empezó a dar vueltas en la casa. 

Jungkook lo miraba mientras él se paseaba por la casa de un lado a otro. 

— Vete. — le dijo haciendo ademán con la mano — estoy mejor. — Taehyung le clavó la mirada un momento e hizo una mueca. Jungkook tenía ojeras y estaba pálido. — No te necesito. Es lo mismo estar contigo que sin ti. Tú no parecieras estar aquí de todas maneras.

Inevitablemente esas palabras le dolieron en el corazón y detuvo su andar por toda la casa. Taehyung se acercó a él y corrió la silla que estaba a su lado. Lo miró de frente pero Jungkook siguió mirando la mesa. Taehyung lo tomó de la mano, haciendo girar el anillo de Jungkook. 

— Te amo. — le dijo y le dio un beso en la mejilla. Jungkook hizo puchero. Quería llorar otra vez. — y yo sí te necesito. — le dijo en el oído. Esas palabras que Jungkook había dicho le habían dolido como la mierda. Y pensar que el día que se casaron antes de decirle que aceptaba compartirr su vida con él le había dicho "no puedo imaginarme una vida sin ti" ¿Y ahora no lo necesitaba? — sabes que siempre voy a seguir sosteniendo un pedazo de tu corazón. No te olvides de eso. Por favor, Jungkook. Yo siempre estaré aquí para ti. Siempre, maldita sea... No por nada fue hasta que la muerte nos separe ¿No? — dijo un poco más calmado, pero con la garganta cerrada.

Jungkook miró hacia otro lado. Taehyung volvió a dejar un beso en la mejilla de él. Luego sacó su celular y lo apagó. Lo dejó sobre la mesa y le tomó ambas manos a Jungkook. 

— Mírame. — pidió en un susurro. — sé que estás muy enojado... quizás decepcionado sería la palabra correcta. 

Jungkook no lo quería mirar. Por esa razón Taehyung con dos de sus dedos lo tomó la mandíbula y lo obligó a verlo. Luego apoyó por completo la palma de su mano en su mejilla. 

A Jungkook se le caían algunas lágrimas. Taehyung se ocupó de borrarlas con su pulgar. Apoyó su frente contra la de Jungkook y le hizo mimos con su nariz. 

— Eres muy importante para mí, Jungkook. Eres mi vida entera...

— Si de verdad lo fuera no me dejarías solo todos los días hasta la madrugada. Si yo fuera importante para ti te darías cuenta que gastar cinco segundos de tu vida en darme un beso todas las mañanas no te quitaría mucho tiempo del trabajo... Si yo fuera importante para ti me abrazarías por las noches y me dirías lo mucho que me amas... Si yo fuera importante... me prestarías un poco mas de atención. — Jungkook cerró con fuerza los ojos y los apretó. Le salían más lagrimas — ¿sabes que no me das un beso en los labios hace más de un mes, verdad? No me mimas y ni siquiera aprecias las pequeñas cosas que hago por ti. ¡Vaya! Ni siquiera me das las gracias por el almuerzo o la cena ¡Tú ni siquiera te puedes cocinar algo porque quemarías toda la cocina, carajo y ni quiera me agradeces por tener un puto plato sobre la mesa! — Jungkook tomó una gran bocanada de aire mientras veía como Tae luchaba por no llorar, le temblaban el labio y tenía los ojos al borde de las lágrimas. El corazón ya ni siquiera lo sentía en el pecho —. Cuando vienes a casa ni siquiera me dices Buenas Noches ¡YA NO ME DICES QUE ME AMAS! ¿Y SABES QUE ES LO PEOR? ¡YO SÍ TE AMO, TE AMO MAS QUE A MI MALDITA VIDA!

Jungkook se levantó del asiento y se fue hacia la habitación, Taehyung lo siguió y lo abrazó por detrás antes de que él entrara al cuarto. Lo apretó con fuerza, se le estaba yendo.

Su vida se le estaba yendo. Su compañero... Su todo.

Su mundo entero.

— Aunque yo no haga todas esas cosas te sigo amando como la primera vez. — le susurró soltando las lágrimas. — Te amo... Te amo...

Jungkook puso sus manos en las de Taehyung y la despegó de su cintura. 

— Si me amaras te molestarías en demostrarlo. De lo contrario solo me haces pensar que yo ya no te importo. Que ya no significo nada para tu vida. 

Y le cerró la puerta en la cara. 

—Tú eres mi mundo...