El día de la convocatoria había llegado, los últimos días había estado muy callado y reservado con Lin, pero más que nada, estaba celoso, veía como Jimin iba a la galería cuando le viniera en gana, le llevaba comida, la sacaba a pasear, la tomaba de la mano y no dudaba en que también la besaba cuando estaban solos, no quería dejarlo siquiera tocarla con el pensamiento, sin embargo, mi posición de robot no me permitía mucho.

Íbamos camino a la universidad, la reunión sería a las 11:00 a.m. el personal académico se comprometió a tener todo listo, solo para que Lin llegara y hablara.

Al llegar el director nos recibió en la entrada, saludó con mucho respeto a mi dueña.

—Buenos días, señorita Oh —le hizo una reverencia.

—Buenos días director Han —respondió ella de la misma manera.

—Es un honor para todos nosotros que alguien tan admirable como usted quiera apoyar el talento de nuestros alumnos —sonrío ampliamente. —Pero por favor, acompáñeme, seguro que los chicos ya están en el auditorio.

Nos mostró el camino, como era costumbre Lin iba sujetada de mi brazo y con su mano libre llevaba su bastón; sentí como ejercía fuerza en mi antebrazo, discretamente me acerqué a su oído y le susurré.

—Tranquila, todo estará bien, lo harás genial —no respondió, pero asintió con una ligera sonrisa casi inexistente.

Entramos al auditorio, había bastante gente, yo me encontraba muy nervioso y ni siquiera sería yo quién hablara, sentía como las palmas de las manos me sudaban y se me dificultaba pasar saliva.

—Atención chicos, sé que muchos están ansiosos por saber de que se trata todo esto, así que sin más, por favor recibamos a la pintora Oh Lin Ah —el director nos hizo una seña, por lo tanto ayudé a Lin a subir por unos escalones al escenario, la acompañé hasta el micrófono y retrocedí unos pasos solo para que ella fuera la atención de todos, cosa que sería muy fácil ya que esa chica era la más hermosa en todo el lugar.

—Buenos días —fueron sus primeras palabras, las cuales interrumpió un chico al fondo.

—¡Lin Ah!¡Te amo!¡Soy tu fan! —la voz me pareció conocida.

—Gracias —respondió Lin con una sonrisa tímida.

Miré al lugar de donde provenía la voz de ese chico y cuando logré visualizarlo, sentí un nudo en mi estómago, las lágrimas me amenazaban con salir, mordí el interior de mi mejilla y aparté la mirada de ese tipo, ese chico que le gritaba "te amo" "soy tu fan" era Park Jimin y lo odiaba, lo odiaba tanto porque quería ser yo quién gritara esas palabras, quería ser yo quién estuviera apoyandola, diciéndole lo mucho que la quería y la admiraba, yo quería ser su novio.

—Bueno —Lin aún parecía un poco dudosa.—Se preguntaran porqué estoy aquí —hizo una pausa y los murmullos se hicieron presente. —La razón de esta reunión es para abrir una convocatoria a todos ustedes como artistas, hoy la galería Byeol abre sus puertas a los estudiantes de arte y escultura, por ende queremos que sus obras sean exhibidas, se realizará un evento donde muchos compradores e inversionistas serán invitados, además de que también habrá reporteros cubriendo los noticieros, por el momento los cupos serán limitados, conforme vayan avanzando iremos dando lugar a los demás haciendo más eventos, el punto es que todos puedan mostrar sus obras en algún momento, ¿tienen alguna pregunta?

—Sí, yo —una chica que estaba al frente se levantó. —Dice que los cupos serán limitados, pero entonces, ¿cómo escogerán las obras?

—La galería Byeol tiene su propio equipo de críticos, cuando todos se hayan registrado, pediremos que llenen un formato donde deberán poner una fotografía de su escultura o pintura, de ahí partiremos a hacer la elección —respondió.

—¿Y si no tenemos una obra pero queremos participar? —habló otro chico.

—Es preferible que tengan una obra lista o apunto de terminar para que no se presionen contra el tiempo, de igual manera, tienen un mes para finalizar su inscripción y llenar el formato.

—Señorita Lin —la voz de Jimin atrajo su atención. —¿La convocatoria es solo para los pintores y escultores? ¿Qué hay de la carrera de artes escénicas?

—Bueno, es una galería de pintura, no tenemos donde presentar una obra escénica, pero si estos eventos avanzan bien, consideraré la idea de construir un teatro para todos aquellos que se dedican a la danza y otras cosas —sonrió. —Espero que puedan tomar esto como una oportunidad de sobresalir y de todo corazón les deseo lo mejor, lean bien las pautas de la convocatoria que su coordinador les entregará y sin más espero su participación —Lin hizo una reverencia, me acerqué a ella para dirigirla a la salida del auditorio.

Justo en el momento que salimos, ella expulsó la bocanada de aire que había tomado, sentí como su tensión disminuía, a pesar de que se veía segura y confiada de si misma frente a todos, estaba nerviosa y temerosa por dentro, era un alivio que ese momento había terminado.

—Señorita Oh —el director Han se nos acercó por detrás. —Algunos de los profesores y yo queremos hablar con usted en mi oficina, si no le molesta.

—Por supuesto, con gusto —sujetó mi brazo pero en el momento en que dimos el primer paso, mi teléfono comenzó a vibrar en mi pantalón, discretamente lo saqué y revisé la llamada entrante.

—Señorita Lin, el señor Choi me está llamando —mentí. —¿Puede adelantarse con el director? La esperaré fuera de su oficina —note que se sorprendió por mi tono formal, pero lo hice por las personas que estaban presentes.

—Oh... claro, no hay problema —una profesora tomó a Lin del brazo para dirigirla, me dio un poco de gracia.

Que confiansuda.

Atendí la llamada antes de que terminara de sonar y lo primero que escuché fue una risa burlesca.

—Deja de reírte, dime qué quieres —respondí molesto.

—¿Qué es esto? ¿Estás sacando las uñas? —volvió a reír. —No vuelvas a hablarme con ese tono porque te aseguro que me olvido de la deuda y te mato.

—Jangsu... —me interrumpió.

—Sabes perfectamente lo que quiero Kim Taehyung, quiero mi dinero —dejó de reír.

—Aún me quedan dos semanas para pagarte.

—Más te vale que lo hagas, de lo contrario... —escuché un balazo que me erizó la piel. —Sabes lo que pasará —no me dio tiempo a responder colgó la llamada.

Maldecía internamente, era obvio que podía tener el dinero en la fecha justa ya que mi trabajo de robot terminaría el mismo día, sin embargo, no quería que terminara, quería quedarme al lado de Lin aunque ella tuviera novio, aunque solo me viera como una máquina pero quería estar con ella.

—¿Taehyung? —me giré para ver quién me llamaba. —¡Sabía que eras tú!

—¡Hoseok! —me alegré de verlo, desde que abandoné la universidad perdí el contacto con él.

—¿Qué haces aquí? —rió. —¿retomarás la carrera?

—Quisiera pero no puedo —suspiré sonriendo. —Estoy aquí por trabajo.

—Eres el asistente de Oh Lin Ah, ¿verdad? Te vi con ella en el auditorio.

—Algo así —reí nerviosamente. —¿Que hay de ti?

—Dejé la pintura, me cambié a artes escénicas el semestre anterior.

—Asombroso, ya decía yo que tu vida estaba en el baile.

—Así es y no me arrepiento de nada —miró a todos lados. —Ah ven, quiero presentarte a alguien —me tomó del brazo y me jaló hasta llegar a un chico que estaba de espaldas.

—¡Jimin! —dijo Hoseok, al escuchar ese nombre no pude reaccionar. —Él es mi amigo del que te hablé, Kim Taehyung.

Jimin se giró, me miró de pies a cabeza y luego dio una sonrisa de lado.

—Así que tú eres Taehyung, ¿eh? —no sabía qué hacer, quería que la tierra me tragara y no me escupiera nunca, estaba seguro de que Jimin me había descubierto.

—Y tú al parecer eres Jimin —traté de disimular.

—Estoy seguro de que se llevarán bien, hablen un poco entre ustedes, ya vuelvo —Hoseok corrió hasta llegar a una chica. —¡Sunmi espérame! —la chica se detuvo y cuando Hobi llegó a ella avanzaron juntos.

—Ya entiendo —Jimin bufó en risa. —Sabía que un robot no podía estar celoso de alguien, pero resultó ser que realmente no eras un robot.

En ese momento tuve miedo, Park me miró con una sonrisa imborrable, temí porque fuera corriendo a decirle la verdad a Lin, que ella le creyera y me odiara por mentirle, no podía permitir eso, pues el odio de Lin Ah hacia mí, acabaría completamente con mi vida.