Ansiedad
Madox bajó sus gafas de sol mirando el nombre de la pantalla y descolgó su celular asegurándose que era el de él.
-Espero que tengas una buena razón para llamarme cuando hace apenas unas horas que nos vimos. Vinimos juntos pero no revueltos y además que sea rápido. Julian está durmiendo- él bostezó al terminar. Ambos se habían quedado rendidos en la tumbona, el omega sobre él y entre sus piernas. El alfa tenía una mano sobre su nalga posesivamente y cuidado aquel que osara echarle el ojo.
-Madox- la respiración de otro lado del teléfono era algo alterada- Cállate de una puta vez-
Madox pestañeó pues era extraño que Dominic le soltara una palabrota como aquella, así que se alarmó.
-¿Qué pasa?- se removió pero se quedó quieto al momento recordando al omega contra él.
-Es Aidan, está entrando en celo-
-¿Solo es eso?- este dejó salir todo el aire de sus pulmones más calmado- No me asustes así-
Dominic se exasperó del otro lado de la línea.
-¿Cómo que solo eso? Está entrando en celo, precisamente él-
Madox se acomodó las gafas nuevamente.
-No seas trágico, ya era hora que le ocurriera, los medicamentos que le estábamos proporcionando son muy fuertes, así que es normal que ya estén dando resultados. Además, aunque sea su primer celo será más leve pues su sistema hormonal no se ha recuperado del todo, así que fóllatelo y resuelves el problema-
-MADOXSSS-
-No me grites- tapó el oído de Julian con miedo que el sonido lo despertara, aunque era irónico pues llevaban rato en la piscina.
-Si no quieres que te grite dime que puedo hacer, sabes que no puedo tener sexo simplemente con él, te recuerdo que desde aquella vez no he podido tocarlo más de lo normal-
Madox suspiró.
-No puedo creer que esté hablando con otro alfa. Oye es un omega en celo, va a querer tener sexo contigo no importa lo que…- se quedó pensativo- No sé donde estés pero llévalo al cuarto. Nosotros nos uniremos con ustedes en un momento- y colgó.
Dejó el celular a un lado y le sacudió con suavidad el hombro al omega.
-Julian, pajarito, despierta-
Él se removió y sacudió la cabeza contra el pecho musculoso como si fuera un gato. Madorx le acarició la cabeza para terminar sus dedos sobre su nuca que acarició suavemente contra la herida.
-Amor, hay un pequeño asunto del que quiero que te encargues- se sentó arrastrando al chico soñoliento para besarle el cuello- Aidan está entrando en celo- Eso hizo que JUlian se desperezara y abriera los ojos a pesar de estar cansado, después de todo había cierto alfa que había cumplido su promesa de no dejarlo dormir mucho.
-¿Ya está entrando en celo?- se restregó los ojos.
-Si, Dominic sintió sus síntomas ahora quiere decir que está empezando así que le tomará unas horas en que se haga más fuerte. Crees que puedas prepararlo, sabes del pequeño gran problema que hay entre ambos-
Julian asintió con una sonrisa.
-Ya nosotros hablamos sobre eso, no será un problema, ya encontramos una solución. Solo me sorprende que él esté entrando en celo, quizás así las cosas sean más fáciles-
Madox le besó la mejilla con orgullo. Él siempre un paso por delante pensando en todo.
-Y hablando del tema del celo, él tuyo debe estar cerca- le acarició el cuello con la punta de la nariz.
Julian se estremeció gimiendo silenciosamente pegándose más a su cuerpo. Nunca sabía cuándo le daba con exactitud, simplemente el alfa siempre estaba ahí en el momento indicado.
***
Dominic llevó a Aidan hacia la habitación con paso apresurado, le preocupaba que alguien oliera las feromonas que emanaban de su cuerpo, aunque él estaba muy tranquilo al momento de dejarlo en la cama. Por su parte el alfa caminaba de un lado a otro como una fiera enjaulada.
La habitación se llenaba de un delicioso aroma, las feromonas omegas estaban emanando de Aidan sin control. Dominic tuvo que salir de la habitación hacia la terraza y cerrar la puerta de cristal detrás de su espalda bloqueando todo el olor. La ropa se le pegaba al cuerpo, estaba sudando y jadeando. Demonios era su omega el que estaba entrando en celo ahí mismo, a solo pasos de él. Podría tomarlo todo el tiempo del celo sin problemas, hacerle sentir que el mundo se derritiera, pero tenía miedo, y si él se asustaba de nuevo. No quería ver el rechazo en sus ojos, otra vez.
Aidan miró hacia la terraza y su pecho se apretó. El calor en su estómago cada vez era más fuerte, siendo incómodo, los pezones picaban contra la tela que lo contenía y estaba demasiado sensible. Podía lidiar con eso por el momento, no era tan terrible. Sabía que sus feromonas estaban por todos lados y cómo debía sentirse Dominic. La culpa pulsó dentro de él.
Oyó unos toques en la puerta.
-Aidan, soy yo, Julian, ábreme-
El omega casi saltó de la cama y abrió la puerta.
-Dios, este lugar es peligroso- Madox alzó una ceja aspirando el ambiente- Ya entiendo a Dominic- se restregó la nariz, se había equivocado con decir que el celo del omega sería débil, las feromonas eran verdaderamente fuertes e incluso difíciles de tratar para un alfa como él.
-Pajarito, llévalo al baño, yo sacaré a Dominic. Me llamas cuando creas que sea necesario-
Julian asintió y agarró de la muñeca a Aidan metiéndolo en el enorme baño dejando el resto en manos de Madox. Dominic oyó como a puerta de la terraza se abría y abrió los ojos. El viento que refrescaba su cuerpo se vio interrumpido por el aroma que salió de la habitación incitándolo a entrar. En cambio el que estaba allí era su amigo.
-Tú y yo, nos vamos de aquí, los cachorros tienen cosas que hacer primero y tú necesitas refrescar tu mente-
Dominic le gruñó. No le gustaba la idea de otro alfa cerca de su omega en celo aun cuando este era precisamente Madox.
-Eh, eh, cuidadito con los dientes, que solo estoy ayudándote- se acercó y tiró de él del brazo hacia el interior y después pasando el brazo sobre sus hombros empujándolo.
Dominic tembló de ansiedad y miró hacia la puerta del baño donde el olor se hacía más fuerte, pero Madox no dejó de empujarlo hasta que estuvieron fuera de la habitación. Lo arrastró hacia su propio cuarto y lo lanzó directo a la piscina.
-Quédate ahí hasta que refresques la mente. Yo te llamo cuando sea el momento adecuado- le protestó el alfa parado frente a él, en la orilla- Y no se te ocurra salir, no quiero tener que limpiar tu desastre y menos que Julian lo haga, le gusta la organización y la limpieza- se giró y dejó a Dominic dentro de la piscina estupefacto.
Dominic respiró profundo y se sumergió hasta que el agua estuvo sobre su cabeza. Ni siquiera la tranquilidad del agua podía relajar sus músculos. Ansiaba estar con su omega, mimarlo, abrazarlo, derretirse contra él, pero ahora estaba allí, separado de su cuerpo, una tortura total.
Julian sacó a Aidan del baño después de ayudarla a secarse. Solo había pasado un momento, pero sus manos temblaban. Lo dejó envuelto en una toalla y se fue a buscar en la maleta ciertas prendas.
-Están en la bolsa de atrás- Aidan le indicó y Julian a encontró poco después llevándola de regreso.
-Creo que es buen momento que las uses- le sonrió- Estoy seguro que le gustarán aunque no durarán mucho tiempo encima de ti- Julian se burló sacándolas de la bolsa y poniéndoles sobre la cama.
-Julian, ¿cómo se siente el celo?- le preguntó Aidan con un toque de preocupación, era totalmente nuevo para él.
El omega se quedó pensativo y después le sonrió
-La palabra ideal para eso es COMPLICADO- se rascó la nuca- Es difícil de describir, no soy el mejor ejemplo pues en mi caso no tengo buena experiencia, y puede ser doloroso si lo pasas solo, pero si estás con tu alfa, puedo asegurarte que es algo genial, lo querrás repetir aunque no tendrás muchas recuerdos después-
Aidan se acarició el cabello corriéndolo hacia atrás.
-¿Crees que esté preparado para hacerlo con él? Digo, ya no le tengo tanto miedo como antes pero cuando me toca de más…-una cinta apareció delante de sus ojos-
-¿Quieres probar, al menos al principio?-
Aidan se quedó inmerso en la cinta y al alzar los ojos lo hizo lleno de confianza. No perdía nada con hacerlo.
***
Madox esperó recostado en la cama hasta que su celular sonó. Lo colgó y buscó a Dominic que estaba sentado en la tumbona de la terraza con los ojos cerrados. Aqullos dos chicos se habían demorado tanto que hasta él se había impacientado. El atardecer estaba cayendo haciendo de la vista lo más bello de la ubicación, le hubiera gustado que Julian estuviera allí para verla, quizás todavía tenía tiempo.
-Mueve el culo, tu omega te espera- le dijo a su amigo.
Dominic giró la cabeza hacia él.
-¿Aidan me espera?- no se lo creía.
-Si quieres voy yo y me lo follo en tu nombre - soltó con ironía y ya Dominic caminaba hacia la puerta gruñéndole. Su ropa apenas se había secado después de salir de la piscina, pero no le importó.
Encontró a Julian en la entrada revisando el celular y le sonrió al notar el olor exaltado del alfa.
-Está en celo, pero sé suave con él- el chico le tocó el hombro y se alejó de vuelta con su alfa.
Dominic pudo percibir parte del olor del celo de Aidan sobre él. Esperaba que Madox no lo tirara de cabeza en la cama, él se veía tan delicado que parecía que podía quebrarse en cualquier momento.
Respiró profundo y agarró la manigueta de la puerta. Estaba tan ansioso que sus dedos estaban entumecidos. Pero no podía esperar más y simplemente abrió dejando que el mar de feromonas lo envolviera.
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