Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capitulo 6 Es hora...

–Mamá es así, no te preocupes. Es m
correcta, creo que le gustaste—Intento hablarle a Rush. Estoy un poco avergonzada.

–¿Cómo no le voy a gustar?—Le entrego su teléfono, no sé para que me preocupo.

–Tengo que ir a recoger la mercancía. Te veo pronto.

Se marcha, aún no confió en su persona. Me dirijo a mi habitación pero una inmensa multitud de personas en el lobby impide mi paso. Al parecer un magnate de alguna empresa daría una entrevista. No tengo nada que ver con ese tipo de evento, odio la prensa. Antes de subir la elevador escucho un nombre, era Connor... ¿algo así?

Cierran las puertas, logro llegar a mi cama, rezaba por ella. Mañana me espera un día largo.

A las seis el despertador me levanta, tomo un baño y recojo mis maletas agradezco la estancia y me voy.

Bajo hacia el mostrador entregro la llave, pago la comida de ayer. Veo al portero, este parece un niño. Dios que criticona soy.

–Mi nombre es Delis, no recuerdo el número de habitación, gracias—Recojo mis maletas y a coger un taxi. Oh que dolor, mi bolsillo.

Llego rápido a mi nuevo hogar, pregunto a la señora de la puerta por Jess, al parecer salió. Recuerdo que me mandaría al vecino si no estaba. Le pregunto a la mujer.

–¿Cuál es tu nombre?—pregunta.

–Soy delis, su nueva compañera de cuarto—Digo, su expresión cambia.

–Perdón, hubieras empezado por ahí. Ahora mando a llamar a Rush— eso es fantástico. No me quedaré botada y me cargarán las maletas. Sí lo sé, me pongo feminista. Es hora de darle una oportunidad, es demasiada coincidencia. Venga que no me va a robar nada, a menos que quiera mis dos maletas...

–Espere en el lobby—Dice—Ahora baja a recogerla.

Le agradezco, tomo mis maletas. Veinte minutos después baja corriendo, con el pelo todo mojado.

–Oh dios—toma aire presipitadamente— Delis te juro que me he apurado, tuve un accidente en el baño y bueno...—Paro su charla.

–Rush no importa, no fue mucho tiempo—¿Qué mentirosa soy?—Tienes la llave—Asiente—Quiero subir parezco perro callejero.

–¡De verdad me gustas! Lo que se te ocurre a ti no se le ocurre a más nadie—Toma mis maletas.

–Sígueme—Lo detengo.

–Ehh espera. Me llevas por fin a mi casa—Hago un puchero.

–A menos que quieras conocer la mía—Se ríe el muy condenado.

–No para nada, vamos— Salgo disparada con las mejillas sonrojadas, mi mente me juega malas pasadas.

Paro en seco, frente a nosotros se encuentra un  hombretón inmenso, rubio, súper ancho de espaldas y todo músculo. Me gusta todo tipo de hombres, fuertes o no, aunque siempre se pide el todo incluido ¿Por qué no?

–Dios mío, la creación perfecta—Se lo que piensan, no fui yo. Rush babea tanto como yo. ¡Confirmado es gay!

–Rush, lo has dicho demasiado alto. Creo que nos ha escuchado—Veo la sonrisa del rubio al pasar por nuestro lado.

–Por dios que escuche, es un punto Dios griego—Es igual de loco que yo. Parece que el chico lo escucha, se gira. Joder era Hércules en persona.

–Vamos, no quiero que nos voten por escandalosos—Agarro su mano derecha que sostiene mi maleta, tiro de él aunque no parece hacer mucho efecto.

–¿Qué mala suerte?-—Vuelvo mi cabeza a él, pregunto.

–¿Qué mala suerte que? Camina—Sigo intentando moverlo, pero estos hombres con que los hacen.

–Es hetero—Dice y comienza a caminar, por fin.

–¿Por qué lo dices?—Se ríe mientras entramos en el ascensor.

–Te estaba mirando, no, me retracto, te estaba comiendo con los ojos—Es muy tarde para comprobarlo, soy una loca tímida.

–Estás loco—Digo mirando la paleta del ascensor.

–Pero, ¿dónde se ha visto una mujer tímida con lengua afilada?—Suenan sus carcajadas por suerte el elevador se detiene. Hablo de otro tema para cambiar el ritmo de la conversación.

–Rush, puedes adivinar ¿Cuál es mi sueño americano?—No demora ni un segundo en contestar, suelta las maletas y me mira.

–Obvio, la de toda mujer extranjera encontrarse un papacito americano—Hace la postura de un fisicoculturista— que cumpla tus fantasías y te baje la luna, el sol y las estrellas—Termina haciendo un corazón sobre su pecho.

–No, estas equivocado—Súper equivocado.

–¿Cómo? Ah sí, falto millonario—Me rio, es un pesado. Recojo una maleta y camino hacia la puerta.

–Nunca vendría a este país por eso, puede que por amor sí, pero lo que quiero es comenzar a ejercer lo que estudie hace siete años.

–¡Trabajar! ¿en serio? Por favor, eres joven vive la vida, ya tendrás tiempo para eso. Pero hablando con certeza ¿Qué estudiaste? arquitecta, cirujana o tal vez limpia piso—Pregunta abriendo la puerta del depa.

–Gracioso, limpia piso no se estudia, ¿aquí sí?. Mejor ni me respondas—Rie a carcajadas—Rush, soy ingeniera informática, siempre me han apasionado las computadoras y la programación así que si conoces a alguien con quien pueda trabajar, avísame—Entro.

–¿Informática? ¿ingeniera? no eso no va conmigo—Tira las llaves en la meseta de la cocina.

–Puede que no vaya contigo, pero ¡no sé!, de tantas personas que van a tu cafetería, te pueden dar una tarjeta o una dirección. Dejemos esta conversación ¿dime algo de ti?—Corto mi palabrería dejando que se exprese para poder inspeccionar el depa.

–Algo como—Camino hacia la cocina que tiene una gigantesca meseta y una isleta en el medio.

–No sé, ¿Tienes pareja?—Ups la curiosidad me mato. Sigo mirando la cocina paredes azules más intensas, las losas de la mesetas son de mármol, me gusta.

–Si tuviera pareja estuviera las veinticuatro horas follando, ¡que! y esa cara, es la verdad—No sé por qué me sorprende su respuesta.

–¿En serio? Que le ven todas las personas al sexo, ¡no debería ser una forma de expresar los sentimientos—Odio ese tipo de broma.

–¿Amar? Claro, pero cuando lo pruebas te vuelves adicto, no he visto una sola persona que no piense así después de probarlo—me sonrojo.

–¿Qué bueno que todavía...?—No me imagino como una gata en celo.

–Dios, virgen¡¡¡¡¡¡¡¡¡ no me lo puedo creer, ¿Cuántos años tienes?—Su cara está conmocionada.

–Veintidós, ¿Qué tiene de malo?—Inclino la cabeza hacia un lado.

–Ya.... Eres de las que quiere un príncipe azul y todo lo romántico—Mientras hace un vals pequeño en la cocina.

–Como te dije el amor no impulsa nada en mí, no solo porque no lo he conocido, ni hecho; sino que tengo metas que quiero lograr por encima de él.—Regreso a mi posición de explorar.

–Guao, una mujer con propósito y virgen—Sigue burlándose—¿Quién diría que encontraría alguien como tú, sí es que el mundo solo rueda alrededor de sexo últimamente, pero sé diferente, no seas como nadie;  tampoco me escuches mucho porque  aquí donde me ves no he tenido tantas relaciones que digamos—Su cara perdió la risa.

–Gracias por escucharme, me gusta mucho tu compañía, tus bromas—está un poco triste.

–Claro nena. Me voy, me llamas si necesitas ayuda. Mi número está al lado del teléfono, sino subes a mí depa.504—Me da un beso rápido en la mejilla y se va.

Comienzo a arreglar la casa. A pesar de que se ve hogareño el ambiente  parece no vivir nadie. Hora de limpiar y embellecer. Después de varias horas abren la puerta. Aún no he terminado estoy debajo del fregadero y al oír la puerta me levanto dándome el mejor golpe de todos.

–Delis ¿Qué ha pasado aquí?—Uff es Rush, el golpe que me he dado.

–¿Tienes otra llave? No recuerdo que te llevaras la que dejaste aquí. ¿Qué te parece? Crees que esta reconfortarle.

–Es la llave de respuesto, creo que será la tuya y me encanta parece que vinieron a robar y en vez de llevarse las cosas se llevaron el polvo, cuando termines sigue la mía—Dice mirando hacia todos lados.

–Gracioso ¿A qué venias?—Se ríe. Este debe ser el hombre más feliz del mundo.

–Venía a ver si te gustaría comer algo. Traje algo para cocinar, en veinte vengo a comer lo que puedas preparar o sino cocino yo—Sin más se va. Tengo hambre aunque le tendré que decir que cuando tenga hambre que se cocine él.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro