Hola nuevo capitulo, espero que les guste dejenme comentarios sí, pliss.

-Por desgracia si.-Dice Jess antes de levantarse y dirigirse a la cocina.

-Jessica como que por desgracia.-Rush comienza a hablar y entra a mi casa como si nada, solo espera que no empiecen una pelea, los más trastocados somos Rush y yo, se conocen, ¿de dónde?

-Si ustedes son los hombres más controladores que conozco en la vida.

-En eso estoy de acuerdo no sé quién será el otro, pero tu entras en ese perfil.-Oigo la risa de Rush.

-Cállate delis no te metas en esto.-Ves chicos y chicas es un puto controlador.

-No le digas que ese calle tiene todo el derecho de opinar, con que fuiste tú el hombre que casi la mete a la cárcel no pensé que llegarías tan bajo para mantener el legado de la familia Rice.-Esto cada vez se vuelve más raro.

-Pues a ti debería importarte es tu familia también.-Pero qué carajo, miro a Rush para ver si el escucho lo mismo que yo, al parecer sí, su cara es un poema, no quiero ver la mía.

-No soy parte Rush desde que papa me dijo que era adoptada sé que su sangre no corre por mis venas y he dado gracias al cielo.-La veo poner la tasa de café que había cogido en la meseta.-Y el dinero no me importa, yo puedo ganar el mío propio.

-Jess ahorita el legado no me importa te hemos buscado todos estos meses, si querías irte de casa solo tenías que decirlo pero no desaparecer, ahora me tengo que ir tengo una cena que no puedo faltar pero hablaremos de este tema.-Se gira hacia mí y hace un movimiento de cabeza para que lo siga.

-Que bien ahora se cree que soy un perro.-Digo pero es muy tarde para que me escuche, lo sigo pero no sin antes tirarle un beso a Jess, se lo insufrible que es Connor, la entiendo.

-Ten cuidado me dice Jess.

-Nos vemos chicos, duerman bien.-Bueno mejor que yo lo harán. Bajo a toda velocidad gracias a dios que estuvo presente a la hora de escoger mi ropa y me puse tacones bajitos. Busco por todas partes del edificio a Connor pero no lo veo, salgo a la calle y veo una auto muy lujoso debe ser de él.

Me acerco y sale el conductor y me abre la puerta, que rico es tener alguien te lo hago todo, me siento y Connor está al otro lado del auto.

-Tu sabías que ella estaba aquí porque no me lo dijiste.-Su voz transmitía enfado.

-Hee para el caro yo ni siquiera sabía que era tu hermana, y aunque lo supiera no te lo diría eres súper insufrible no dejas a otras personas avanzar. Tienes ese mal de que todas las personas que son cercanas a ti las haces infelices como ahora No podías solamente decirle que te alegrabas de verla, ¿no? Mr. Connor tenía que recriminarla a pesar de no verla hace tanto tiempo como dices.SI fuera mi hermana la abrazaría y no importara lo que hizo me sentiría bien con que ella solo estuviera a mi lado.-Mis ojos estaban llorosos porque yo si extrañaba a mi hermana y no entiendo como ese hombre puede ser tan frio.

-Algún día tu tendrás que renunciar a algo tan importante que te matará el alma, la sonrisa, el niño pequeño en tu interior, al joven y te darás cuenta de lo que yo he sufrido.-Hace una seña al chofer y el carro comienza a moverse.

Él no tiene muchas ganas de hablar y yo menos, estoy confundida. Quiero abrazarlo pero a la vez pienso que haber sufrido no es una causa para hacer tanto daño.

Llegamos a un inmenso edificio de piedras romanas, es muy griego el edificio parecía un museo de antigüedades, las puertas estaban cogestionadas de personas del servicio de seguridad, periodistas y personas normales, no me gustaría salir en la tele así que giro a ver a Connor.

-No te preocupes no pasaremos por ahí.-El carro se debía y va a la parte de atrás la cual tiene guardias pero solamente eran ellos. El chofer me ayuda a bajar mientras Connor sale del auto. No quiero estar aquí la verdad.

Connor me toma de la mano, entramos al edificio, hay unas escaleras que al parecer llegan al segundo piso donde suena música clásica y hacía allá nos dirigimos !Mierda¡ Todo parece un cuento de fantasías, las personas llevan trajes extravagantes otros casi sin ropa, muchos camareros y un mini escenario en el medio del salón donde una pareja danza contemporáneo. Miro a todos lados la verdad no hay nadie conocido, llegamos a la mesa y lo primero que hago es tomar un gran trago que servían en la mesa al llegar.

-Cuidado delis, esto son negocios no una borrachera.-Mi ojos se abre Connor acaba de decir una frase graciosa, no me lo imaginé es mi cabeza.-Te dejo necesito hablar con algunas personas.

Al irse pensé que tendría más tranquilidad pero no es así las mujeres de la sala me miran y bueno yo comienzo a comer hay manjares esquistoso, lo siento yo no cambio. Habían transcurrido horas desde que Connor me dejo, lo había visto pasear por toda la sala hablando con diferentes personas y bailando con muchas de las damas, entonces para que me invito aquí estoy sola parada en la mesita donde me dejo como un trapo sucio.SI se lo que piensan la bebida me está haciendo efecto, yo también lo pienso así que tomo rumbo hacia una de las pequeñas salas del local, no había nadie en la puerta así que podía ser el baño, error.

Mujeres completamente desnudas, bailaban en los tubos de metal tan largos que me daba vértigo ver donde terminaba. Estaba parada en la puerta y veía ese cuarto completamente rojo en donde los hombres se paseaban y miraba, espera hay hombres en los tubos, y este antro de perversión, veo a uno de los peces gordos digo por su vestimenta y sus prendas de oro y si  ese rubio estaba muy bueno. Lo vi ir a una especie de cajas donde saco mucho dinero, después se dirigió a una de las chicas y la saca por otras puertas laterales.

-¿Oh pero mira quien tenemos aquí?-Esa voz me es conocida pero el alcohol distorsiona mis sentidos. Me giro y frente a mi esta Ken.- ¿Sabes lo que les pasa a las mujeres curiosas en este lugar?-No lo sé ni lo quiero saber de eso estoy segura.-Ya lo veras.

Cierra la puerta detrás de él y me jala tapándome la boca, aunque no tengo muchas ganas de gritar me siento un poco débil pero lucho, entro a una de las recamaras donde ahora mismo entró aquel hombre.

-¿Que cojones haces Tiger?-El hombre grita un nombre diferente al que me acuerdo mientras quita de sus pantalones a la pequeña muchacha que estaba arrodillada entre sus piernas, espera no se llamaba Ken o Michael. Lo veo subirse lo pantalones e ir hacia Ken o como se llame .Este me tiro al sofá rojo que estaba en esquina.

-Esta es la puta que jodío nuestros planes, esta es Delis.- ¿Yo? ¿Qué planes? estas personas necesitan un loquero.

-Ah con que eres delis, te mandé a buscar muchas veces y no correspondiste pero el destino es tan bueno que ahorita estas aquí.-Se acerca, coge mi cara y la alza para que lo mire. Con todo mi coraje lo miro.

-Yo no lo conozco a usted, suélteme vine con Connor.-Su cara se retuerce y me da una bofetada.

-Ni me recuerdes su nombre, me quito mi negocio de mujeres, ahora quiere apoderarse de las tecnologías pronto querrá tener la ciudad y en la vida todo no se puede obtener.-¿No entiendo?

-Y ahí en donde entro yo, vaya a joderlo a él que es el que le hace la vida imposible.-Casi me logro parar pero me vuelven a empujar y caigo sentada.

Veo que llegan dos hombres que recuerdo muy bien, aquellos que me hicieron desperdiciar mi dinero y mi queso, esos que me intentaron secuestrarme, ya veo porque es que dicen que la curiosidad mato al gato.