"El sobre"

Mierda la competencia, lo había olvidado. Con todo lo de Alex no tenía cabeza para nada más y había olvidado por completo que hoy era el día de la competencia. Me levanté con prisa de la cama apagando la alarma de mi celular que me recordaba que hoy era el día, me metí corriendo al baño para ser la primera en ducharme.

Después de quince minutos había salido del baño y estaba vistiendome con el uniforme del equipo que consistía en un short corto naranja con dos franjas blancas en cada costado y una blusa sencilla del mismo color pero con un logotipo atrás de nuestro equipo, me calce mis tenis blancos y me hice una coleta alta y me coloque mis lentes. Estaba lista.

Hoy era un día importante y esperaba hacerlo bien, aunque sabía que no había practicado mucho debido a lo de Alex pero con todo el trabajo que Amanda me había puesto días antes sabía que podía lograrlo o eso esperaba. Aunque también le tenía un poco de lástima a Alex ya que él se había preparado mucho para la competencia y ahora ya no podría competir.

Amanda paso por mi unos minutos después vestida con el uniforme del equipo, aunque yo llegando tenía que ponerme ese horrible disfraz de mascota del equipo, odiaba ser la mascota del equipo pero lo que más odiaba era tener que correr. Los deportes nunca fueron mi fuerte.

Al llegar a la pista pude ver la carpa con los jueces de la competencia y algunos chicos practicando para la competencia mientras que aquellos que solo venían a ver se encontraban en las gradas.

-Que bueno que ya llegaron. - dijo la entrenadora llegando a nosotras -Tú, vez a cambiarte - la entrenadora me hizo un gesto con la cabeza para que me fuera a los vestidores y yo bufé a lo cual Amanda río.

Cuando entré a los vestidores no había nadie mas que él traje de la mascota colgado, me pare frente a este y lo fulmine con la mirada, bufé.
-Bien tu ganas esta ronda mascota.

Descolgue el disfraz y cuando estaba a punto de meterme a un vestidor una voz conocida me llamó.

- No sabia que eras la mascota del equipo.

Me gire mirándola, tenia puesto el uniforme del equipo azul.

- Y yo no sabia que estabas en el equipo 1 A. - Fruncí el ceño, ¿Por qué no la había visto en las prácticas?

- No se supone que yo participaría pero tenia que cubrir a Alex. - Al escuchar su nombre levanté mi rostro a sus ojos. - Lamento mucho lo que le ocurrió.

Yo Asentí algo incomoda. Escuche la chicharra indicando que la competencia estaba por iniciar.

- Bueno tengo que irme - Me sonrió cálida - Suerte.

En cuanto Sasha salió sentí un escalofrío recorre mi cuerpo. Sasha seguía sorprendiéndome, había creído que era una mala chica pero ella no parecía ser esa clase de persona si no que todo lo contrario incluso había pensado que si se había disculpado y portado bien conmigo esa noche en el restaurante después de arruinar su cita era por quedar bien ante Allen y Amanda pero no, me había equivocado ella parecía ser una buena chica y cuando me la topaba por los pasillos me saludaba no entendía por qué Amanda se empeñaba en decir que esa chica era mala; pero igual si Amanda lo decía debía ser por algo y había aprendido a tener cuidado con lo que decía Amanda ya que había acertado con Alex.

Sin darle mas importancia entre a un vestidor y me puse esa horrible cosa naranja cuando el disfraz entró en mi cuerpo tome la cara sonriente de esa hormiga cabezona sin antenas y anaranjada entre mis manos y me la coloque en la cabeza.

Al salir pude ver que las gradas estaban llenas de alumnos y que la competencia estaba por iniciar. La entrenadora llegó hasta mi y me tomo del brazo jalandome hasta donde se encontraba la otra mascota.

- Vamos Smith, es hora de que empieces a animar.

Me acomode bien la cabeza de la mascota ya que con la zarandeado de la entrenadora casi se me cae. Pude ver a Amanda saludandome, estaba junto a Allen, sonreí aunque sabía que no podía verme y moví mi mano regresandole el saludo. La señal se oyó y y los competidores empezaron, la primera categoría era de puntería a lo que el equipo naranja ganó y no pude contener me y empecé a festejar como loca, lo bueno del disfraz era que no podían verme ni reconocerme claro sólo los que competían sabían pero en ese momento dejo de importarme. Amanda se reía al verme y podría jurar que vi una leve sonrisa en Allen. La mayoria de los juegos los ganabamos nosotros aunque Allen, Sasha y otros dos chicos habian ganado en sus respectivas categorías. Aun así nuestro equipo iba ganando.

Estaba eufórica y en unos de mis saltos golpee al águila azul, la otra persona que estaba en el disfraz callo.

- Oh lo siento enserio no fue mi intención. - me disculpe pero no supe si logro escucharme bien debido a este tonto disfraz.

Se escuchaban los gritos de la competencia alentando y unos que otros indicando a que comenzará una pelea de mascotas a lo cual yo Negué con la cabeza pero la otra persona se levanto y me embistió contra el césped haciendo que casi se caiga mi cabeza. Tirada en el suelo pude ver a la otra mascota arriba de mi y los gritos del equipo naranja diciendo que me defendiera. Trataba de sacarme de su agarre moviéndome de un lado a otro pero no pude lograrlo, pero cuando la otra mascota se levantó aproveche para tomarlo de sus pierna.

- Vamos Smith acabalo. - Escuche el grito de la entrenadora Ramirez.

Bien esto era guerra. Vas a caer águila.

- No te lo pondré tan fácil. - Escuche decir a la mascota. Era la voz de un chico. ¿Acaso habia pensado en voz alta?

Mientras la otra mascota trataba de zafarse de mi agarre escuche las risas y gritos ensordecedores de los alumnos, e incluso las competencias se habían detenido. Como pude me levante y lo derribe.

- Toma eso águila mala. - Farfulle golpeándolo con las manos aunque apostaba que no le dolía ya que este disfraz no me dejaba golpearlo. Escuche los gritos de Amanda animando me y Voltee a verla estaba saltando y animando me mientras que Allen a su lado tenía una hermosa sonrisa divertida. Mis mejillas se calentaron y en mi descuido con un movimiento rápido el águila se posicionó arriba de mi y me sostuvo de las muñecas. Se quitó la cabeza del disfraz y me quito la mía. Era un chico y me sonrió divertido.

- Eres una mascota ruda. - dijo mostrando sus blancos dientes.

Su cabello castaño cubría ligeramente sus ojos color miel. Yo estaba aún un poco en shock sin mover ni un músculo de mi cuerpo. Fruncí el ceño y luego Solté una risa. El también río aún arriba de mi. Escuche los gritos pidiendo un beso y mi risa cesó pero la de el aumento al ver mi rostro.

- Es un gusto verte de nuevo Annie.- me guiño un ojo y me soltó. Se levantó y me ayudó a ponerme de pie. Yo estaba totalmente desconcertada.

-¿Qué? ¿Disculpa pero tu me conoces? - Pregunté confundida.

- Si que eres algo despistada. - río. - Me siento contigo en la clase de literatura y soy el chico del autobús con el que confundiste las bolsas ¿recuerdas?

De pronto el recuerdo llegó a mi mente, como lo había olvidado si estuve buscándolo como loca ya que el tenía la ropa que yo le iba a devolver a Allen y yo tenia el regalo que le pertenecía, he incluso de ese primer día que me senté con el y ni siquiera Voltee a verlo. Sonreí apenada por no haberlo recordado.

- Si ya te recuerdo.

El negó con una sonrisa y yo sonreí igual.

- Me llamo Sebastian. - me tendió su mano sonriendo y yo le correspondí el gesto igual.

- Un gusto y bueno tú ya sabes mi nombre. - reí algo apenada.

La entrenadora Ramirez llegó hasta mi y me mando a los vestidores al igual que al chico para que nos cambiaramos ya que la carrera de relevo estaba por comenzar.

Estaba en la pista junto con otra chica a mi lado del equipo contrario dejando una distancia prudente. El juego consistía en que cada una tenía un cilindro del color de su equipo y teníamos que correr hasta llegar al otro jugador, según la llegada era como iban saliendo y el primero que cruzará la meta ganaría. Las manos me sudaban y no sabia por que me habían puesto a mi primero a correr pero no podía quejarme mientras más rápido más pronto acabará esto. El cielo estaba nublado y las nubes amenazaban con la llegada de una gran tormenta, el viento soplaba fuerte con una brisa fresca. En cuanto el silbato de la entrenadora sonó salí disparada sin mirar atrás, corrí con todas mis fuerzas, los gritos eran ensordecedores y me animaban a correr más rápido, yo había tomado delantera pero la chica a mi lado estaba alcanzandome, cuando las pequeñas y frías gotas de agua empezaron a caer corrí con más fuerza entregándole el cilindro naranja a un chico que salio con bastante ventaja, la chica llegó unos pocos segundos después y el chico que se lo entrego corrió detrás del otro, me quede parada recuperando el aliento mientras veía como ambos corrían, el chico de nuestro equipo se lo entrego a otra chica la cual salió corriendo igual con una gran delantera y al final estaba Amanda que competirá con Allen. Eran los últimos, habíamos decidió que Amanda sería la última en correr ya que era muy buena y ganaría, de ahí se decidía todo el primero que cruzará la meta ganaría. Amanda recibió primero el cilindro y Allen unos segundos después pero no se le complico alcanzar a Amanda, ellos parecían divertirse y la lluvia se había hecho más intensa pero eso no los detuvo, ni a ellos ni a los alumnos que gritaban emocionados en las gradas y al final como se esperaba Amanda ganó.

La entrenadora Ramirez no paro de alardear y restregarselo al entrenador y Amanda hacia lo mismo, ambos llegaron a mi sin importar la lluvia de igual manera ya estábamos empapados y la lluvia había empezado a cesar.

- Te patee el trasero. - Río Amanda mientras Allen bufaba cruzado de brazos.

- Lo hicieron muy bien chicos.

- No tanto como tu golpeando a la mascota. - Río Amanda a lo que Allen también soltó una risa.

Mis mejillas se calentaron un poco pero me reí igual.

-No cabe duda de que ambas Pateamos el trasero de los 1 A. - Ambas rompimos a carcajadas.

Las risas cesaron en cuanto escuche la voz de un hombre llamarme.

- Señorita Smith.

Me Voltee al escuchar la voz de un hombre, no solo era uno si no que otro mas bajito lo acompañaba, eran morenos y ambos venían vestidos como oficiales de policía.

-¿si? - Pregunté desconcertada.

- Somos los oficiales Daniels y el es mi compañero Beck. - Dijo el oficial más alto señalando a su compañero regordete. - Hemos venido para tomar su declaración en el caso de Alex Drop.

-¿ Y para que quieren a Annie si ella no ha hecho nada? - intervino Amanda a la defensiva, Allen la tomó del brazo y pude escuchar un "Tranquila" salir de su boca.

El Oficial Beck se le quedo mirando a Amanda mientras que su compañero le respondio a mi amiga con voz paciente. - La señorita Smith se encontraba en la escena cuando Alex Drop fue herido, por lo tanto necesitamos que nos cuente que paso para encontrar al culpable.

Sabía que tarde o temprano vendrían a buscarme, obviamente la policía intervendria y los padres de Alex no lo dejarían así, ¿Pero por qué había tardado tanto? Ya habían pasado tres días desde que a Alex lo habían herido. Me pregunto si ya habrían hablado con Alex, después de todo el podía decirles quien le disparó. Amanda pareció leer mis pensamiento.

- En todo caso por que no le preguntan al mismo Alex, el podrá decirles quien fue quien le disparó.

El oficial Beck no apartaba la vista de Amanda y ella lo miraba igual, parecía una batalla que sabia quien iba a ganar pero aunque Amanda había sido algo brusca tenía razón. Igual entendía a Amanda ella no quería que me siguiera metiendo en problemas por Alex y menos después de que había salido herida, sin mencionar que detestaba a Alex.

- ¿Señorita Smith? - me llamo el oficial Daniels ignorando a Amanda.

Mire a Amanda dándole una mirada tranquila aunque ella bufó y volteo los ojos.

- Iré a declarar. - Hable por fin. Los oficiales asintieron y me escoltaron hasta la patrulla, pareció no importarles que estuviera empapada e incluso podría decir que estaban impacientes por escuchar mi declaración.

Una vez adentro vi a Allen mirarme al igual que Amanda. Solo tenia que decir lo que había pasado y ya. No tenía de que preocuparme pronto encontrarían al culpable y yo estaría bien al igual que Alex.

(...)

- ¿Podría decirme que era lo que buscaba ese hombre en el departamento?

- No lo sé. - mentí removiendome en el asiento.

- Señorita Smith, hemos hablado con el portero del edificio y el nos dijo que cuando usted peleaba con aquel hombre le quito un sobre amarillento.

Trague saliva nerviosa. Tenia una hora que me encontraba en la estación, las manos me sudaban y mi mente estaba hecha un caos, no sabia que debía decirles, Alex me había dicho que no dijera nada del sobre. Ya les había contado lo que había ocurrido a lo cual los hombres me preguntaron por que mis huellas aparecían en el arma y tuve que contarles lo que ocurrió después pero omitiendo aquel sobre. ¿Acaso Alex no había declarado? Si el portero les había dicho del sobre lo más probable es que Alex no les haya dicho nada.

- ¿Alex ya ha declarado? - pregunté ignorado lo que me habían dicho.

- Si señorita Smith.

- Entonces ya deben saber quien es el hombre que lo atacó ¿no es así?

Ambos oficiales se miraron, después volvieron su vista a mi y se aclaró la garganta el oficial Daniels - Ya puede irse señorita Smith, ya dio su declaración. - dijo ignorando mi pregunta y levantadose de la mesa. - La llamaremos si necesitamos algo más.

Ambos oficiales me escoltaron a la salida de la habitación y no quise preguntar más, tendría que averiguarlo por otros medios ya que sabia que los oficiales no me dirían nada. Salí del edificio, las calles se encontraban mojadas y el cielo seguía oscuro con la brisa fría que golpeaba mi piel haciéndome estremecer. El sonido de un claxon me exaltó un poco hasta que vi a Allen hacerme señas junto a Amanda para que me acercará al auto, corrí cruzando la calle hasta llegar ellos que aún seguían adentro del coche.

-¿Qué hacen aquí? - pregunté mirando en el interior del auto y encontrándome con otros dos pasajeros en la parte de atrás. Sonreí al verlos. - Hola chicos.

- Hola Ann lo has hecho muy bien en la competencia y más cuando derribaste a la otra mascota. - Río Sonia y Nicolas la siguió.

- Estuviste increíble chica. - hablo Nicolas.

- Gracias chicos, no sabia que habían ido, no los vi. - dije con una sonrisa. -¿Pero que hacen aquí? - Pregunté dirigiendo mi mirada a Allen y Amanda.

- Queríamos asegurarnos de que estuvieras bien, Amanda me a insistido mucho para venir a recogerte.

Sonreí - Gracias pero no era necesario.

- Si lo era, además iremos a celebrar nuestra victoria - Alardeo Amanda dándole un codazo a Allen, los chicos rieron y Allen bufó volteando los ojos. - y obvio no podemos hacerlo sin la mascota del equipo.

Solté una risa y me subí al auto en la parte de atras junto con los chicos - ¿Y a donde iremos?

- A por hamburguesas. - gritaron Sonia y Amanda al unísono.

Y como ellas dijeron fuimos por hamburguesas. Pasamos la tarde juntos, por algún motivo no podía dejar de pensar en ese sobre amarillento y en su contenido. Aunque no me había tomado el tiempo de pensar en ello no podía ocultar lo que se encontraba en el, y esa fotografía que se encontraba entre todos esos documentos ¿Por qué Alex tendría la foto de esa chica? Y lo más importante ¿Quién era? Esos documentos de propiedades y cargamentos que se encontraban a nombre de un tal Asten Harrison y otros más a nombre del padre de Alex, ¿Quién era Asten? ¿ Qué eran esas propiedades? La imagen de ese hombre no podía sacarla de mi mente, su cabello negro cenizo y sus ojos cafés opacos, su larga nariz y pobladas cejas, sin mencionar lo alto que era. Me parecía haberlo visto antes pero no recordaba donde. Y la chica de la fotografía, no tendría más de diecisiete años y era muy parecida a Amanda, cabello castaño, de ojos marrones y tez blanca, delgada. Eran tantas preguntas en mi cabeza y la única persona que podría responderme era Alex.

(...)

Después de dejar a los chicos Allen se ofreció a dejarme en el hospital ya que le dije que tenia que hablar con Alex. Amanda no sabia nada y prefería que siguiera así, le había dicho que me alejaría de Alex pero había Muchas preguntas en mi cabeza y la única persona que podría responderla era él.

- Muchas gracias Allen.

- Cuídate Annie. - dijo sin importancia pero había un toque cálido en su voz. Sonreí y Asentí saliendo de su auto.

Entre al hospital y me dirigí a la habitación que ocupaba Alex. Toque la puerta y a los pocos segundos la señora Drop me abrió.

- Hola Annie. - sonrió amable dándome paso a entrar.

- Buenas tardes señora Drop. - sonreí igual.

-¿Qué haces aquí?

La forma brusca en que Alex se dirijia a mi no paso desapercibida frente a su madre.

- Solo he venido a verte. - me removí en mi lugar algo incomoda y mire a la señora Drop. - Necesito hablar contigo acerca de algo.

- Pues yo no tengo nada de que hablar contigo así que largate.

- Alex. - lo reprendió su madre.

Alex ignoro por completo lo que dijo su madre y volvió a gritarme esta vez logrando que diera un salto en mi lugar. - ¡Largate! - Alex jamás había dejado de provocarme cierto miedo, su rostro estaba rojo y su cuerpo tenso.

Quería salir corriendo pero no podía moverme ni un milímetro, parecía estaba pegada al suelo y petrificada en mi lugar.

La madre de Alex estaba furiosa y lo fulminaba con la mirada y antes de que pudiera decir algo intervine.

- ¿Podría dejarme a solas con Alex?

- ¿Estas segura?

Asentí. La madre de Alex se apresuró a salir antes de que este pudiera protestar y yo tampoco le di tiempo de hablar al sacar la pregunta que había estado perturbandome durante esos días.

- ¿Qué tiene que ver el sobre con tu ataque y por que esos hombres lo querían? - Pregunté sin rodeos y firme. Quería ayudarlo aunque no quisiera mi ayuda no quería que volviera a salir herido.

- ¿ Lo viste? - Pregunto sorprendido y la preocupación se hizo presente en su rostro.

- Si Alex, lo vi.

Lo que paso a continuación no me lo espere, me habría preparado para todo, para que empezara a gritarme o incluso que me insultara y demás pero no fue así, parecía derrotado. Soltó un suspiro pensado y llevo sus manos a su cabeza cerrando los ojos.

- Vete por favor Annie. - dijo tranquilo.

- No lo haré Alex.

- Solo largate, esto no es de tu incumbencia, solo no te metas donde no te llaman.

- te equívocas esto también me concierne a mi. - dije decidida con un nudo en la garganta. - ¿Acaso crees que ese hombre me dejara en paz después de lo que hice? Claro que no. Y si te recuerdo el que me metió me esto fuiste tú, te recuerdo que en esa ocasión que huías de esos hombres me arrastraste a tu juego, ¿te ayude no es así? Crees que no me daría cuenta de que el mismo hombre que nos persiguió esa vez es el mismo que te disparo.

- Por lo mismo tienes que dejar esto por la paz, mientras menos sepas mejor.

- Solo quiero ayudarte Alex ¿que no lo entiendes? - me acerque a él y pude ver su cuerpo tensarse pero no pare y seguí acercándome a él hasta sentarme en la cama con él. - No te dejare sólo.

Alex no apartaba su vista de mis ojos, parecía tener un duelo consigo mismo y abrió la boca para decir algo pero no salio nada y la volvió a cerrar. No sabia por que estaba haciendo todo esto, simplemente no entendía por qué me preocupaba tanto Alex o por que no quería dejarle sólo en esto. Pero de algo estaba segura y era que quería que estubiera bien.

- ¿Por qué haces todo esto después de todo lo que te he hecho pasar?

Baje mi vista. Era una buena pregunta y como tal no sabia que responderle por que ni siquiera yo sabia la respuesta.

- No estoy segura. - dije frunciendo mis labios algo que hacía cuando solía pensar. - pero hay algo en que somos muy diferentes sabes, no importa cuánto pueda lastimarme una persona o cuanto me falle si por lo menos una vez fue buena conmigo o me ayudó yo voy a ayudarla, siempre doy todo a pesar de que no debería, ¿y sabes por qué?

Alex negó con la cabeza sin apartar su mirada de mi. Solté un suspiro y continúe.

- Por qué me nace serlo, y aunque tal vez no lo admita en voz alta todos aquellos que me rodean me importan y no puedo ver a alguien que necesita ayuda sin tratar de ayudar... y mas si es alguien que me importa. Y antes de que digas algo más, sólo quiero devolverte el favor, ya que tu también me has ayudado. - dije nerviosa y avergonzada rascando mi brazo y evitando a toda costa sus ojos.

- No necesito tu ayuda.

La forma tan fría y seca en la que lo dijo me hizo sentir una tonta al haberle dicho algo tan estúpido como que me importaba. ¿Por qué me seguía esforzando tanto en ayudarlo cuando el no quería mi ayuda y solo me insultaba o gritaba? ¿por qué no sólo hacia caso a lo que decía Amanda y tomaba la oportunidad de alejarme de él?

- No me importa si no quieres mi ayuda. - ¿quería jugar? Bien. - voy a intervenir quieras o no. Así que dime ¿Quien es el hombre que te disparo y qué tiene que ver ese sobre con los hombre que te hirieron y por que?

Nota de la autora:
¡Hola! Antes que nada Muchas gracias por leer la novela enserio, y les agradecería mucho que me dejaran una estrella y un comentario si les está gustando la novela o cualquier cosa que quieran decirme. También quiero avisar que la historia tiene muchísimas faltas de ortografía que iré corrigiendo cuando termine la novela.

Especialmente quiero agradecer a estas 3 chicas que realmente son las mejores lectoras y las adoro muchísimo por todo el apoyo que me han dado al votar y comentar mi novela. Me alegra mucho que les guste mi trabajo e infinitas gracias.

valentian1229 ♡
GabrielaCastillo922
bitchsbae

Bueno eso es todo. Muchas gracias a todos y si quieren que les dedique un capítulo sólo díganme en los comentarios.