Salir de una prisión para pasar a otra

Un baño decente, sumergida en la espuma y el agua caliente, sentía que toda la suciedad se iba, mis heridas ardían pero eso no importaba, no lo hacia, no mas.

en cuanto Andrea acepto ser la esposa de Hwanwoong las cosas cambiarían, horas antes de que Andrea pudiera disfrutar de su baño, en aquella celda maloliente aparecieron cuatro nuevas personas, al señor Kim ya lo conocía -¿Así que por fin has decidido?- preguntó con enojo el señor Kim.

El hombre de mayor edad levanto su mano y mando a callar al señor Kim, quien solo apretó los puños y miro con total desprecio a la joven que reposaba en aquella vieja colchoneta -Andrea, mi nieto ha llamado diciendo que tienes una respuesta.

Andrea miro fijamente a los dos mas mayores de la habitación, los recordaba, aquellas personas fueron los que esperaron su llegada y los que entregaron los informes del clan rojo -SI- respondió hostil, casi fastidiada.

Hwanwoong no estaba, eso la incomodaba puesto que las imágenes constantes de sus propias masacres aparecían en cuanto recordaba algo nuevo y extrañamente Hwanwoong lograba tranquilizarla -¿Bien?- Pregunto la mujer que suponía era esposa del señor Kim -¿Cual de mis hijos será el afortunado?

una sonrisa casi satánica surco los labios de la Joven quien mirando fijamente a los dos mayores de la habitación contesto -Señores Águilas, acepte casarme con Hwanwoong hijo ilegitimo de su desastrosa familia.

-¡¿Que?! 

Los mayores sonrientes asintieron -La boda se realizara hoy mismo, mi esposa preparara tu todo para la ceremonia, me asegurare que el Pyebaek se lleve a cabo sin discusiones, ni intervenciones. ¿Queda claro?

-Lo comprendo mejor que nadie- respondió sin titubear.

Con los muy sonrientes abuelos y unos muy enfadados y desconcertados padres, Andrea fue custodiada a una nueva recamara, donde se le asignaron a tres mujeres, estas tenían la obligación de prepararla para la boda, sin importar sus heridas o dañado cabello, ella debía estar impecable, así lo dicto el anciano.

Mientras Andrea tomaba su baño, en la habitación de Hwanwoong su padre pedía explicaciones, dos guardias protegían al menor de su padre, orden también de su abuelo -¡No dejare que te cases! ¡Me niego!

La tierna sonrisa de su hijo lo hizo tambalearse en su lugar, lo sabia mas que nadie, aun así no quería perderlo, no como a su madre -Demasiado tarde, padre.

-¡No te dejare! ¡Primero muerto antes que dejarte libre!

Ignorando las amenazas de su padre, Hwanwoong siguió su camino, el día que tanto había soñado había llegado finalmente, a quien primero contacto para darle la noticia fue a su primo quien justo ahora llegaba a la mansión con la intención de felicitar y asistir a la ceremonia.

Hwanwoong camino hasta la sala principal, su primo sonreía en grande -Serás libre- susurro al abrasarlo -Por fin.

-Lo seré, después de mucho tiempo.

Enseñando una botella de vodka Seokji sonrió con emoción, ambos primos sumergidos en dicha decidieron celebrar en su lugar favorito, la zona donde siempre disparaban y nunca escapaban sus deseos.

10:30 pm

Vestidos malditos, el vestido blanco significa pureza, describe que tu alma no esta contaminada por el pecado, habla por ti y te enseña como algo sumamente especial. El rojo en el blanco es adorable, su intensidad se hace mayor por el blanco, la mancha roja simplemente lo hace fascinante.

Después de muchas capas de maquillaje, vendas color piel y un vestido blanco que tapaba su mas horribles vivencias, Andrea estaba lista para ir a su boda, una que organizaron en cuestión de horas, a su lado el hombre mayor de la mansión Kim la guiaba hasta donde seria su boda, después de mucho tiempo, Andrea vio el lugar donde la mantuvieron cautiva, ingreso a un coche y se obligo a sonreír en cuanto llegaron a su destino.

Personas, tantas personas reunidas, sonrientes y mirándola fijamente, abrumada quiso huir, gritar y fingir que todo había sido un sueño, mas al verlo a el, supo que no era momento de abandonar su juego, ambos querían algo, deseaban ese algo mas que cualquier otra cosa.

auto controlando su desespero siguió el camino de la alfombra roja, tan reluciente en medio de tan blanco piso, sujetada por el hombre mayor y dando sonrisas aunque ninguno de los presentes lograran verlo debido a su velo.

-Felicidades- dijo el sujeto a su lado, entregando su mano al hombre frente a ella, quien vestía con un elegante traje negro -Les deseo una buena vida.

Hwanwoong sonrió -Gracias- respondió con fingida gratitud.

El cura nos miro con una sonrisa en sus labios, ambos dimos la espalda al publico -Queridos hermanos, hoy estamos aquí reunidos para unir en sagrado matrimonio a esta hermosa pareja...

La ceremonia dio comienzo, Hawnwoong no dejaba de sonreír, los días de sufrimiento y encierro se terminaría, este lugar era el nuevo comienzo, su despertar, el pequeño denotaba en emoción y eso lo vio Andrea, ese chiquillo emanaba sin querer su euforia.

-Si alguien se opone a esta unión que hable ahora o calle para siempre- el silencio reino, el señor Kim hacia rechinar sus dientes, se notaba a simple vista que deseaba intervenir -Como nadie se proclama procederemos con los votos- Hwanwoong tomo las manos de Andrea, mirándola con admiración le sonrió tiernamente -Yeo Hwan Woong, prometes amar y respetar a Andrea en la riqueza y en la pobreza, en la enfermedad y en la salud hasta que la muerte los separe.

-Si acepto.

-Andrea, prometes amar a este hombre, en la riqueza y en la pobreza, en la enfermedad y en la salud hasta que la muerte los separe.

¿Amarlo? ¿podría llegar a amarlo? - Si, acepto.

-Con el poder concebido por dios todo omnipotente, entreguen sus anillos- dos pequeños llevaron los anillos ante los casi esposos, Andrea entrego el suyo primero, detallando el valor de este, luego Hwanwoong tomo su mano y deposito el suyo, este poseía una piedra preciosa -Sin mas reparo, en nombre de Dios padre, los declaro marido y mujer. ahora por favor bese a su novia.

Quitando el velo del rostro de su esposa, detallo el rostro de esta, estaba hermosa, su piel morena resaltaba con el blanco del vestido, sin esperar mas, tomo el mentón ajeno y con sumo cuidado beso tan deseados labios, un beso lleno de gratitud, así lo sintió Andrea.

pasada la ceremonia oficial se procede a la ceremonia tradicional, el Pyebaek, esta ceremonia se hace en presencia de los padres y familiares cercanos.

Procedimiento de la ceremonia.

''La ceremonia comienza con la pareja de padres sentados en cojines detrás de una mesa y delante de una pantalla pintada, con los recién casados frente a ellos.​ Los recién casados llevan a cabo una profunda que comienza de pie y termina con los recién casados presionando la frente con sus manos mientras apoyan sus rodillas en el suelo.

La novia puede presentar a los padres del novio jujubas (dátiles coreanos) y castañas, que simbolizan los niños.​ En una variación los recién casados ofrecen copas de vino, por lo general . La novia ofrece la copa a su suegro, y el novio ofrece la taza a su madre.

Después de esto, la nueva pareja compartirá la sabiduría y consejo sobre la vida de la pareja, por parte de la pareja de personas mayores con muchos años de casados. Finalmente arrojarán los dátiles y las castañas de vuelta en la novia, que tratará de atraparlos con la falda de bodas.''​

Finalmente, la boda estaba completa.

*La palabra coreana Pyebaek (폐백) literalmente se traduce como «Las monedas y las sedas » ya que el nombre está compuesto en coreano por dos palabras : pye (帛, 'monedas'), baek (幣, 'sedas'). Inicialmente tal palabra compuesta y la celebración así llamada ha tenido el sentido de honrar a Dios o a los reyes pero no es lo usado en coreano moderno, sino que la palabra Pyebaek tiene en coreano moderno el significado de dar el primer saludo a los padres del esposo y al familiar del esposo por parte de la novia como la nuera en su nueva familia. Así el Pyebaek es la costumbre que completa las formalidades

Nuevo capitulo, espero te guste.