Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

capitulo 7

Un par de caminatas negras blindadas se estacionaron a las fueras del viejo hospital, acto seguido un séquito de más de diez personas bajaron tanto hombres como mujeres, disponiéndose a revisar los alrededores mientras que otros van en busca de alguien en específico.

Los visitantes como los pacientes solo se quedan inmóvil, sorprendidos por tan lujosas caminatas. "¿Hay alguien adinerado en este hospital?" Se preguntaron, queriendo saber la identidad. Sin embargo, esos guardaespaldas ignoraron a todos esos que querían hacerles conversación solo para chismear, ellos solo tenían que cumplir las órdenes durante el tiempo acordado sino tienen que prepararse para soportar el castigo.

Y ellos podían aceptar todo menos eso porque los castigos de su jefe no son nada simples, son atroces que hasta el criminal más arrogante lloraría por los métodos tan burdos de su jefe, más cuando se enoja.

—Buenas tardes.—Todo está en mal estado pero muy limpio.

—Buenas tardes.—Responde.

La enfermera no muestra nervioso pese a que ese hombre de piel bronceada es muy intimidante, tiene una cicatriz entre su gruesa ceja hasta llegar casi al párpado. Rapado, pero no al punto de estar pelón, no. Todavía se podía apreciar ese color negro de su cabello.

Ella tenía que mirar hacia arriba para poder hacer contacto visual con esa mirada feroz de un bonito color avellana, es alguien muy alto (1.87 y ella mide 1.65 metros de altura) de corpulenta figura más unas espalda en forma de triángulo invertido mientras su cintura es esbelta, y fuertes piernas largas.

—¿En qué le puedo ayudar?...señor.—Bien tiene unos treinta y tantos años.

‹Últimamente han estado viniendo personas muy extrañas a este remoto pueblo que a penas tiene luz, lo único bueno que una de esas personas donó una generosa cantidad de dinero, lo suficiente para renovar el hospital.› La mayoría de enfermeros como médicos están haciendo su año social en ese hospital, cada plaza fue decidida a lazar y ellos fueron los que les tocó venir a este pueblo.

—Estoy buscando a alguien...

—¿Qué es de usted?—Interrumpe.—Para darle información de los pacientes tengo que saber sobre su relación, ¿familia o amigo?

‹Se ve feroz pero debo de aceptar que es alguien muy guapo, tiene una voz espectacular. Esa cicatriz e inclusive le da un aspecto misterioso, seductor.› Ella estaba cayendo por la masculinidad que transmite ese guardaespaldas, capitan de los demás de allá afuera.

Gareth es el primer y fiel guardaespaldas de Davet Salomé, ha trabaja para el protagonista masculino desde los 18 años, en ese entonces Davet tenía 13 años.

—Soy empleado de la familia.

—Entiendo.—Presiona las teclas de la computadora.—Nombre del paciente.

—Quiero saber en qué habitación se encuentra el joven Arun Salomé?—Preguntó, mirándo minuciosamente a su alrededor en busca de alguna cámara de seguridad.

Para su mala suerte no había nada de eso, sino tenían para unas buenas sillas de espera mucho menos tendrán dinero para comprar las cámaras de seguridad.

‹Cómo es que logró sobrevivir el joven maestro Arun en este lugar si se está cayendo, el señor Daryl la debió tener difícil manejando a este lugar para que no fuera encontrado por la familia del fallecido, mas no sabía que mi jefe ya tenía todo preparado para trasladar a su hermano al hospital, hasta un helicóptero envío pero el señor Daryl fue mas rápido y desapareció del mapa.

Solo hasta hace poco descubrimos que estaba en este pueblo a mas de cinco horas de la ciudad, por eso digo que; ¿cómo es que llegaron llegar sin que el joven Arun muriera desagradó.›

Gareth podía usar su fuerza bruta para llagar a la habitación de Arun, pero no quiere hacer un escandalo. Hay muchos pacientes que requieren tranquilidad no es solo Arun.

—Quiero ver al joven Arun Salomé.—Mencionó una vez más.

—Lo siento pero no hay registrado ningún Arun Salomé.—Informó.—Ya lo busque en tres ocasiones y sigue sin aparecer, y no es porque nuestro sistema sea malo.—Aclara.

—Es está persona.—Muestra una foto de un Arun nada feliz, su mirada es tan vacía.

Soy un tonto por preguntar algo así, es lógico que el señor Daryl no iba a dar los datos verdaderos de su hijo no cuando hay un loco allá fuera que lo espía. Para evitar que los encontrará debió de dar información falsa.

—No, no hay nadie con esa descripción.—Nego.

No es que la enfermedad no reconociera a Arun, solo que el Arun de esa foto es muy diferente a la persona que ingreso al hospital. Este nuevo Arun no es para nada esbelto, tampoco tenia una expresión apagada más bien el de esa foto era como ver un Arun de 16 años aunque en realidad tenia 18 años en ese momento.

—¿Segura?—La información no puede estar equivocada, es imposible que Chadli cometa tal error, no cuando sabe lo mucho que nuestro jefe odia eso.

—Sí, muy segura.

Gareth le explicó un poco a la enfermera sobre las condiciones en las que posiblemente ingreso Arun, también le informó que llevaba un esmoquin blanco de boda.

—¿No hay nadie así?

—Ah, ese joven.—Ya decía yo que ese joven no era alguien simple, no por nada esas personas lo venían a visitar.

—¿Entonces por qué aseguro que no estába aquí?—La ve con rareza.

—Bueno, eso es porque él a cambiado mucho desde su adolescencia e incluso el color de sus ojos, ahora son rojos. ¿Usa ojos de contacto, tal vez?

"¿Adolescencia? Pero si en esta foto tenía 18 años, ahora estoy dudando si estamos hablando de la misma persona. ¿Qué es eso de que tiene los ojos rojos? Son marrón rojizos, tal vez ella se equivocó, ¿verdad?› Gareth tenía muchas preguntas pero no las realizó, no iba a perder su poco tiempo en eso.

—¿En qué habitación está?—Pregunta, viendo la hora en su reloj.

—Un momento.—Busca en la base de datos.—Cuánto lo siento, él fue dado de alta no hace menos de tres horas.—Informó.

—¡Demonios!—Puede que hasta nos hayamos encontrado en el camino.—¿Solo estaban ellos dos?

—Se supone que todavía no podía salir del hospital, seguía en observación pero la persona elegante e imponente expresó que el joven estaba siendo trasladado a otro hospital.

—Ya veo.

Tal vez esas personas están relacionadas con el difunto Bodhi Roux, aunque lo dudo porque el señor Roux no quiere ver ni en pintura a su yerno, no después de que Bodhi murió protegiendo a la persona que amaba.

—Gracias.—Estaba por irse pero detuvo su caminar.—¿Me puede mostrar alguna foto del paciente?—No estaba convencido de que estuvieran hablando de la misma persona.

—No tal cosa, solo puedo decirle que ingreso con tres heridas de bala.—Relató las características de Arun, entre mas la escuchaba Gareth mas alimentaba su creencia de que no estaban en sintonía.—Lamento no poder ayudarle más.

—Ya me ayudó mucho.—Muy raro todo esto.

—¡Ah, pero estoy segura que uno de ellos se llamaba Dewit!—Exclamó.

Gareth solo asintió al tiempo de salía por las puertas, esa era la prueba suficiente de que el cuñado de Arun había ido por él.

—Ya puedo escuchar la fría voz de mi jefe, dejando saber su desconecto.—Él les hizo una señal a todos para que volvieran.

Era hora de regresar y recibir el castigo por su lentitud en llegar al hospital, y mientras Gareth se prepara para llamar a su jefe, este en este instante se encuentra en lo que parecía una cámara de tortura.

Davet estaba “interrogando” a los guardias que permitieron que el “supuesto acosador” de Arun saliera de la celda de seguridad donde se encontraba, Pero que fue sacado y fue entonces que lo terminaron liquidando llevándose a la tumba el nombre e información del hombre que usurpó anteriormente.

A lo que los presentes mantienen su espalda recta con sus manos tras la espalda, mascarillas antigas y mirada hacia el frente e ignorando los lamentos de la persona colgando del techo y de los pies mientras Davet sigue interrogando.

Como si el hecho de que esa camisa blanca con las mangas hasta los codos, más unos arnés alrededor de la espalda, pecho, y manchada de rojo fuera algo que ven todos los días en su jefe, Davet Salomé.

El ya mencionado les está dando la espalda a su gente, sostiene en sus manos un pequeño mazo el cual ya le dio uso. Lo estreno juntamente con esa persona que cuelga del techo, persona que se orinó encima tras entrar en contacto con las feromonas de Davet, por ello los presentes llevan mascarillas para no verse perturbados. Sin embargo, para esa persona fue mas aterrador el hacer contacto visual con esa mirada de bestia sangre fría de Davet, que oler tales feromonas.

—Otro que muere en menos de dos minutos.—Lleva un puro a su boca, uno de los presentes lo enciende.—Que fastidió.—Chasqueo la lengua.

Dos de ellos abrieron la boca mucho antes de que les hiciera escupir la información por la fuerza, pero sus palabras fueran las mismas como si lo hubiesen estado enseñando desde hace mucho tiempo por lo que no les creí y procedí con el interrogatorio, solo que murieron antes de que dijeran algo. No soportaron mis feromonas mucho menos mis métodos de interrogación.

Nunca espero nada de ellos si con solo verlo se puede saber que son unos vividores, se venden por unos cuantos dólares sin pensarlo tanto, esa prisión necesita otro tipo de seguridad o sino los criminales quedarán libres en cualquier momento.

—¿Cuántos quedan?—Preguntó, soltando una bocanada de humo.

¿Ya es hora de que Gareth llevó a Arun al hospital que le indique, ¿entonces por qué sigo sin tener la confirmación aún? Eso no muy propio de él?› Esa mirada se volvió mas irritada.

—Solo quedan dos de los guardias que se vendieron.—Comunicó.—Todo indica que no es la primera vez que son sobornados, al tener deudas por apuestas buscan la manera de obtener dinero fácil para pagarlas.—Finaliza.

—Hacerse cargo de ellos dos.—Su mirada brilla entre el espeso humo dejado salir por la rendija de sus seductores labios.—Sacarle hasta la última gota de información y cuando ya no sean útiles ya saben que hacer.

—Sí, jefe.—Mente en una bolsa a esa persona, dando inicio a una limpieza profunda. No tenía que quedar ninguna mancha de color rojo.

Davet dejo el mazo a un lado en el suelo, tirando los guantes al piso antes de salir de ese habitación y empezar a subir las escaleras, tenía que darse ducha antes de volver a la villa Salomé.

—¿Sí?—Contestó la llamada.—¿Ya está en el hospital?

—Jefe, me disculpo.

—¿Por qué te estás disculpando para empezar?—El puro en su mano fue aplastado aún encendido.

—Todo indica que el joven maestro se fue con su cuñado, Dewit Roux...

—¿Qué más?—Retoma su caminar.

Gareth no sabía si dejar salir el suspiro de alivio por no escuchar algo más terrorífico, o si tiene que irse preparando mentalmente para el castigo. La tranquilidad de su jefe el daba mas miedo que la brutalidad de Davet.

—Solo fue un poco raro lo que me dijo la enfermera tras mostrarle la foto del joven maestro Arun...no le reconoció mejor dicho e incluso aseguro que tiene ojos rojos...¿Jefe?

El guardaespaldas se tensó al escuchar el chasquido de la lengua de Davet, no lo estaba viendo de frente pero podía sentir la presión sofocante filtrándose por medio del celular.

—Investiga en que hospital se encuentra y me envías la dirección.—Finalizó la llamada.—Despertó.—Susurró, y en ese mismo instante tan solo fue un segundo pero sus ojos brillaron de un diferente color.

Mientras tanto en un diferente lugar, en una habitación a oscuras donde la poca luz tenue da únicamente en las pared cubierta de miles de fotografías de una sola persona. Y entre la oscuridad yacía alguien sonriendo a carcajadas mientras veia algo que sostenía en sus manos la cuáles llevan guantes.

También son las únicas que se pueden ver ya qué, en este momento está pegando unas nuevas fotos en la pared. Esa persona de las fotos era nada menos que Arun, y esa nueva indicaba que fue tomada cuando Arun estuvo en coma porque también salieran unas manos con guantes, sosteniéndo el rostro dormido del ya mencionado.

—Descuida mi hermoso Arun.—Sus dedos frotan las mejillas en esa foto.—Pronto estaremos juntos como siempre debió ser.

Era tan escalofriante el ver esas paredes porque hay fotos de Arun desde que era un bebé, no sé podría saber si las hurtó o ese psicópata las tomo directamente.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro