Capítulo 1
Narra Laura
Otro día más en esta casa. No es que odie a mis padres simplemente no soporto a mi madre con sus gritos, pero como dice ella:
-"Mientras vivas bajo mi techo"
Lo que ella no entiende es que me quiero ir ya de aquí. No quiero que me mantengan, pero solo tengo 17 años y solo me quedan unos meses para los 18, aunque no creo que cuando los cumpla me vaya.
-Venga a comer- Interrumpió mi madre.
Me levanté, me puse las zapatillas y fui al salón a comer hamburguesas con patatas fritas.
Por estas cosas amaba a mi madre, tenemos nuestras diferencias pero sabe lo que me gusta.
-Mamá hoy voy a casa de Cristina a dormir.
-¿Otra vez?- Se quejó mi madre.
-Te voy a quitar las salidas- Dijo de nuevo furiosa.
-Si esta semana no he salido mamá, deja de preocuparte tanto por mí-Dije esperando que se lo creyera.
-Mira lo que me está diciendo tu hija- Miro mi madre a mi padre.
-Déjala que vaya, no es malo que salga de vez en cuando. -Dijo mi padre.
-Papá te quiero.
Me fui hacia mi habitación y llamé a Cristina, pero no me cogió el teléfono hasta la tercera vez.
-¿Laura que quieres?, estoy ocupada- Gritó alterada.
-Cristina ,en tu casa a las seis y media ¿vale?.
-Vale te quiero, adiós- Colgó el teléfono sin más.
Cada día me sorprende más lo simpática que puede llegar a ser...
Me quedé dormida y cuando me desperté eran ya las cinco y media de la tarde y acababa de levantarme de la siesta. Aunque otro día hubiese dormido más, pero hoy iba a casa de Cristina a dormir y había quedado con ella en una hora.
Me dirigí hacia el armario, saqué el pijama y la ropa para el día siguiente y como hacía frío, decidí sacar también el abrigo para llevármelo, aunque no sé si a Cristina le gustará ya que no es de esta temporada, pero a mí me gusta y es muy calentito, además no entiendo porque siempre tiene que sacarle faltas a todo lo que llevo, casi nunca le he escuchado decirme "que guapa vas" o "me gusta esa camiseta".
Ella es así de prepotente y piensa que es más que nadie , pero aún así la quiero porque a pesar de eso siempre suele estar ahí,y me lo paso muy bien a su lado. Es una de las personas con las que mas me río y la conozco desde siempre, y sé que antes no era así, ha cambiado mucho de hace unos años hasta ahora, pero no la culpo, la muerte de su madre tuvo que ser muy difícil para ella y lo pasó realmente mal.
Cogí mis llaves, la mochila y me despedí de mi madre.
-Adiós hija, ya sabes portate bien y llama cuando llegues.
-Si mama, te quiero- Dije empezando a caminar más rápido.
Después de media hora andando lo más rápido que pude llegué al fin a casa de Cristina. Pensé que si hubiese cogido la tarjeta del bus me habría ahorrado la caminata, pero ya no importaba, ya estaba allí.
Pegué en su puerta y me abrió su padre.
-Hola, ¿está Cristina?
-Si, sube Laura esta en su habitación, te estaba esperando. Por cierto dile a Cristina que me tengo que ir a una reunión urgente y que vuelvo mañana. En la nevera tenéis la comida.
-Vale se lo diré, adiós buen viaje- le dije. Su padre cerró la puerta de golpe y subí las escaleras.
Pegué en la puerta y se escuchaba el sonido del agua a lo lejos. Cristina estaba en la ducha.
-Ya salgo- dijo.
Así que llamé a mi madre, no quería que se preocupase.
Me tumbé en la cama y mientras esperaba a Cristina estuve observando su habitación. Preciosas paredes rosas, un bonito escritorio, fotos por todas partes... en algunas salgo yo y en otras ella sola ,-¿quién llena su habitación de fotos de ella sola?- pensé. A veces no la entiendo... hay una foto que siempre me llama mucho la atención y es una que sale ella con su madre abrazada, por lo que se ve siempre estaba con la madre.
-¿Laura que haces?-Dijo al ver la foto que yo miraba.
-Viendo tu habitación.
-Pero si la tienes ya muy vista. Venga vente a la cama y hablamos.
-Antes de que se me olvide Cristina, tu padre me dijo que se tenía que ir a una reunión y que volvería mañana.
-Siempre está igual-Dijo Cristina enfadada.
-Bueno Cristina entiende que tiene que trabajar para pagar tus estudios y caprichos.
-Laura si a mi padre sólo le importa su trabajo, yo no le importo.
-No digas eso Cristina.
-Y oye, ¿cómo que tu madre te dejó al final Laura?- dijo ella cambiando de tema.
-Tengo mis tácticas- dije con cara burlona.
-Tu padre, ¿no?.
-Si, él siempre la convence. Por cierto, cuentame lo de Mario.
-Ah, es verdad, hemos quedado mañana- Dijo cabizbaja.
-¿Ya?, pero si sólo llevas una semana hablando con él, todavía ni lo conoces.
-Pero es que me gusta Laura, tú no entiendes el amor.
¿Acaso a ti alguien te han querido alguna vez?
-No me hace falta tener a alguien que no sepa valorarme como soy- dije un poco molesta.
-¿Laura me estás llamando puta?, sabes que si lo hago siempre es porque me gusta el chico realmente -dijo ella más molesta aún.
-Cristina por favor y que dices de Víctor, Manu, Diego...
-Esos no cuentan Laura si ni me acosté con ellos.
- Bueno, lo que tu digas, ¿bajamos a cenar?
-Venga, vamos.- dijo Cristina.
A veces es sorprendente la forma en la que Cristina hace que nada le importe, solo ella y luego ella, bueno y su precioso pelo rubio.
NOTA:
Esta es mi primera novela espero que os guste en primer lugar me gustaría dar las gracias a lauralcalde sin ella no podría haberlo conseguido. Mis pequeñas niñas paarrabal y marinarrabal.
A mis niñas del grupo MI GINECÓLOGO de JaSegu que las quiero mucho a todas dar las gracias a SaryCGM2, Adiiswag, Sofuchiss Annitarojasalva,Victoriagallas,khriss22, angelapjr11
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