Yoongi volvió a su departamento, planeando consecuentemente como le diría Jimin que Jungkook viviría un tiempo con Chanyeol, entró a la casa y buscó al omega por cada rincón del lugar sin encontrar nada, el pánico empezó a invadirlo

-No otra vez- musitó antes de volver a tomar su abrigo para salir casi corriendo del departamento

Apenas colocó un pie en el frio pavimento un taxi se detuvo dejando ver por la empañada ventanilla la figura de su omega cargando sobre sí al pequeño Jungkook, un peso repentino cayó sobre sus hombros, Jimin lo había hecho otra vez, una vez más había tenido el arrebatado impulso de hacer las cosas por su cuenta, sin considerarlo a él, sin considerar su vínculo.

Los omegas, habitualmente, eran dependientes de su alfa en un cien por ciento, sumisos, dóciles, obedientes, pero Jimin, él no era así, el hombre había pasado demasiado tiempo solo, siendo independiente a la fuerza. En una situación de abandono, cualquier otro omega se hubiera dejado morir lenta y tortuosamente pero ese pequeño hombre había sobrevivido con el único motivo de proteger a sus hijos del duro mundo y eso ahora se había convertido en una dolorosa independencia de cualquier alfa, por una parte Yoongi adoraba esa fortaleza pero también le gustaría poder tener el honor de protegerlo, de ser su refugio, de ser considerado su alfa. Suspiró.

Jimin bajó del auto, Kookie se envolvía a su cuerpo como un pequeño koala, aún muy aturdido y asustado de lo que había presenciado, su pecho dolía y sus ojos ardían de tanto llorar en silencio. Yoongi los alcanzó, la mirada decepcionada de su alfa le hizo saber a Jimin que algo no estaba bien.

-Yoongi...

-Entremos, hace frio aquí- ordenó, con los ojos distantes

La puerta se cerró detrás de ellos, Yoongi quería hacer lo posible por ignorar el cuerpo de Jimin apestando a Chanyeol. Su cuerpo temblaba y sus garras se incrustaban en sus manos empuñadas.

-Por favor, ve a bañarte. Apestas- Las palabras del alfa era frías y duras y lastimaban al omega, pero no se atrevía a decir nada sabía que el orgullo de Yoongi estaba herido y era consciente de que su cuerpo olía en su totalidad a su ex pareja.

Dejó con cuidado a Jungkook en su cama, acariciando sus cabellos y mirando sus pequeños ojitos despiertos con devoción lamentando no haberle podido evitar a su pequeño esa decepción, lo arropó y beso su frente. Miro a Yoongi de pie en el umbral de la habitación pero los ojos del alfa se mostraron sorprendidos y furiosos a la vez cuando el pecho de Jimin quedó desnudo pues la camisa (que Chanyeol había prácticamente arrancado) se vio abierta al dejar al niño en la cama.

-¡Jimin!- susurró, todavía consciente de la presencia de Kookie- ¿Qué...?

El omega se apresuró a caminar hasta él para evitar decir algo frente a su niño, tomó su brazo y lo sacó de la habitación hacia los pasillos. Miró a su pareja a los ojos, estaba molesto y lo entendía, sentía su vínculo vibrar con furia, no por él, sabía que era por Chanyeol. Sus cuerpos estaban cerca, sus miradas conectadas, pero sus labios no emitían palabras.

-Yoongi...- sollozó- Lo siento tanto...- se disculpó y se abrazó con fuerzas a su torso inundándose e impregnándose con su esencia

El alfa no dudó ni un segundo en envolverlo entre sus brazos, odiaba sentir ese aroma en su pequeño, su lobo estaba desesperado por saber lo que había pasado pero su lado racional sabía que después tendrían tiempo para eso.

-Ve a bañarte... por favor, cachorro- suplicó, su voz saliendo en un susurro

Jimin asintió, no sin antes aspirar el dulce aroma a seguridad que le regalaba su hombre. Se internó en el cuarto de baño y se aseguró de frotar cada parte de su cuerpo, sobre todo aquellos lugares donde las manos del otro alfa habían tocado, y vertió una cantidad exagerada de jabón en todo su piel, se sentía sucio, a pesar de que el alfa se había detenido a tiempo, en su mente aún recordaba la fuerza que había usado sobre él y el miedo invadiendo todo su ser.

Cuando estuvo totalmente limpio se dirigió a su cuarto, solo había una cosa que quería hacer y era dormir acurrucando a su pequeño en su pecho. Al llegar se sorprendió de ver a Yoongi con el cachorro en sus piernas acariciando suavemente su melena y Jungkook dejándose hacer por el mayor. No había cosa más tierna para ver esa noche y sintió su corazón latir suavemente con ternura.

-Hablé con Hoseok- Interrumpió sus pensamientos- Cuidará de Yoona y Tae esta noche, mañana temprano pasaré por ellos

-Bien, gracias

-Ven a la cama, hay alguien que quiere estar contigo

Jimin miró a Kookie y a sus ojos tristes y caminó hasta la cama, se acostó junto a él y dejó que se escondiera en su pecho, del otro lado de la cama Yoongi se abrazaba a él, era un lindo sándwich de amor, el alfa acariciaba su pancita y se apretaba a su cuerpo, Jimin sabía que era para sentir la seguridad de tenerlos a salvo y que al otro día tendrían una dura charla, pero por ahora solo pensaba en consolar a su niño y darle tranquilidad a su alfa. Durmieron en esa posición acurrucándose uno junto al otro y Jungkook sintiendo fortalecerse el lazo con su papi y la seguridad de sus brazos.

🐾❤🐾

Hoseok estaba sentado en el sillón de su departamento tomando un café caliente en la oscuridad, solo iluminado por la luz de la calle colándose entre las cortinas, lamentaba que su amigo estuviera viviendo todas esas cosas, él conocía a Jimin y adoraba a sus cachorros y no se merecía sufrir todo esto y él sólo podía acompañarlos en lo mínimo.

Bien, lo que lo tenía preocupado ahora no era precisamente la situación con Chanyeol sino la suya propia, se sentía como la mierda, no era tonto, tampoco ingenuo y por parte no quería aceptar el hecho de que la diosa lo hubiera predestinado a un niño ¿Qué rayos había hecho en su vida para merecer tal castigo? Una pareja 19 años menor era un martirio, tendría que esperar nueve años por lo menos para reclamarlo. Su lobo pedía por Taehyung, un niño que ni siquiera se había presentado y ahora que sabía sobre su destino le era imposible tomar a otra persona ni siquiera para calmar su apetito sexual durante los calores.

Cerró los ojos y tiró la cabeza hacia atrás, pensaba en el pequeño hijo de su amigo, el cachorro era un espécimen hermoso, su rostro simétrico, ojitos almendrados, labios rosados y la sonrisa más hermosa de todo el universo, sin duda dentro de unos años y con su belleza más madura sería una pareja digna de ser envidiada. Sintió un toque de orgullo por su pequeño niño, porque si, Taehyung era suyo, suyo y de nadie más.

Sin embargo este pensamiento pasaba de hacerlo feliz a horrorizarlo en menos de unos segundos ¡Era un niño! No, no, no, él no podía pensar así con respecto a un cachorro, Taehyung tenía que crecer, disfrutar de su juventud, experimentar y cuando estuviese listo seria el momento de tomarlo, solo si el pequeño se lo permitía. Y ni hablar de Jimin, si su amigo supiera que él y su pequeño hijo eran pareja, no habría amistad que valga.

El alfa rascó su cabeza con frustración y tiró levemente de sus cabellos, en su mente se había figurado a un Taehyung adolescente con el aroma más exquisito que en su vida hubiera sentido caminando de la mano a su lado, quizás con una linda barriga medianamente crecida esperando un pequeño cachorro de ambos y compartiendo dulces besos y suaves caricias. Valdría la pena la espera, lo valdría cada segundo.

Ahora tenía al niño en su departamento junto a su hermana y él no podía descansar sabiendo que su pequeña pareja dormitaba cómodamente a unos metros de él, o por lo menos eso pensaba...

-¿Tío?- la figura de Taehyung adormilado, arrastrando una almohada y frotándose los ojitos con el dorso de la muñeca lo enterneció, era precioso.

-¡Hey! Hola bebé ¿Te desperté?

-No tío, de hecho...- caminó hasta quedar frente a él y lo buscó en medio de la oscuridad reinante- ¿Podrías... podrías dormir conmigo? Es que yo, bueno, yo...

-¿Tuviste alguna pesadilla?

-No- suspiró- solo quiero que estés a mi lado

-¿Extrañas a Jimin? Yo podría ir a busc...

-¡No! ¡Te quiero a ti!- respondió exaltado ante las evasivas del mayor, él no entendía pero últimamente no podía despegarse de su lindo tío Hobi, era como un imán que lo llamaba a estar a su lado y cuando no lo veía o lo tenía lejos él simplemente se sentía muy, muy triste- Solo quiero que tío Hobi este a mi lado ¿Puedes? Sólo por esta noche...

Hoseok tragó el nudo en su garganta, los orbes almendrados del niño brillaban como dos diamantes. No respondió, no pudo. Solo asintió con la cabeza y lo vio sonreír complacido, esa era la sonrisa que quería ver por siempre en su rostro, el niño le tomó la mano, su cálida y suave piel haciendo contacto con la suya lo estremeció, se dejó guiar hasta su propia cama.

Taehyung subió primero y luego tiró de él para que se acostara. Abrió el cobertor para ambos y se recostaron entre las sábanas blancas, de pronto Taehyung estaba con su cabecita sobre su pecho y podía sentir el olfateo constante sobre su piel, disimuladamente él también tomó una respiración profunda y la guardo en su memoria, su niño destilaba un suave aroma a gardenias. Las gardenias era las flores preferidas de su madre y de niño, Hoseok, las adoraba.

-Hobi

-¿Eh?

-Me siento triste ¿Tu estas triste?

¿Qué?

-¿A qué te refieres, cachorro?

-No lo sé, solo siento algo aquí- posó su mano sobre el pecho del mayor, el lugar donde estaba su corazón- Y me duele

-Taehyungie ¿Tu puedes sentir que estoy triste?

-Si, además...- sus dedos empezaron a trazar algunas formas sobre el lugar donde estaba su manito- tus colores tío, están rosados y azulados por momentos, yo... no lo entiendo. ¿Estas feliz o triste?

Hoseok pensó en las palabras que le dedicaba el menor ¿Colores? ¿Acaso el niño podía leer el aura? Sin duda su pequeño era algo mágico y sorprendente.

-Quizás este algo triste, pero ¿Sabes? Contigo a mi lado no puedo estar más que feliz- le sonrió aunque no lo viera y el pequeño se presionó más sobre su pecho.

Taehyung ladeó la cabeza hacia un costado exponiendo la curvatura de su cuello, el cachorro le estaba dejando entrar, estaba mostrando sumision ante su alfa y Hoseok sintio su corazon latir desbocadamente, muy lentamente posó su nariz en él y subió y bajó sin prisa por el lugar, el aroma era casi imperceptible pues aún no tenía un rango sin embargo estaba allí, suave a sus sentidos pero estaba llamandolo sutilmente, se mantuvo unos segundo oculto ahí mismo, ojos cerrados y manos acariciando la tersa piel junto a él

-Quiero estar a tu lado, solo quiero verte feliz ¿Te quedarás a mi lado por siempre, tio Hobi?- su voz salía más suave, adormecida. Hoseok se separó y lo miró a punto de caer en los encantos de morfeo.

-Trataré pequeño, trataré...- susurró entre sus cabellos y sintió la respiración lenta del cachorro

El alfa continuó despierto un rato más acariciando la pequeña espalda del cachorro y pensando que iba a hacer con respecto a todo aquello que sentía. No era fácil pero tampoco imposible. Por ahora solo disfrutaría los momentos junto a su futura pareja y que la diosa se encargue de lo demás.

🐾❤🐾

Bueeenaaaaas! 🙆💕

Hoy les traigo doblete, enseguida subo otro capítulo 🙈❤

¡He aquí la sorpresa! Esta historia tendrá una pequeña continuación VHope, será corta, quizás un two shot, solo para continuar con la historia de Taehyungie y Hobito ❤

Se llamará "Will you wait for me?" ("¿Esperarás por mi?")

Lo publicaré cuando esta historia termine 😊

¡Gracias por más de 60k lecturas! ¿Saben que las amo? ¿No? Bueno, ¡Las amo! 💕🙇