Yoongi despertó más temprano que cualquier día, observó el rostro relajado de Jimin a su lado, su respiración acompasada y tibia saliendo de sus labios. Era tan perfecto. Contemplo la marca de sus dientes en su cuello, rojiza e hinchada por ser tan reciente aún y se sintió orgulloso, no pudo evitar sonreír y pensar en lo afortunado que era, aunque todo pasaba demasiado rápido sabía que Jimin era exactamente lo que había necesitado toda su vida, el omega le daba dosis justas de felicidad. Podía decir que ahora se sentía completo. El vínculo había traído con él un nuevo inicio, para ambos y para su nueva familia. Acunó más a su precioso lobo junto a su pecho y aspiró su aroma recordando las eróticas escenas de esa noche, conoció una parte de ese tierno hombre que nunca se hubiera imaginado ¡fue tan erótico! Estaba extasiado con esa actitud infantil y sumisa y al mismo tiempo cargado de lujuria. Era la combinación perfecta.

Jimin se removió y abrió lentamente los ojos

-Mi alfa- susurró mientras se acurrucaba más contra su pecho aún desnudo

-¿Cómo durmió este lindo bebé de papi?- acarició su cabello tratando de no reír al verlo colorearse de rosa

-Ni se te ocurra mencionarlo- habló entre las costillas del mayor produciendo cosquillas por la vibración de su voz

- Claro que no bebé- levantó su barbilla para mirarlo a los ojos- solo serás mi bebe dentro de la habitación donde yo puedo ser tu papi y castigarte cuando seas travieso

Su voz áspera provocó que su pene diera un salto bajo las sabanas, no dudo ni una milésima de segundos en saltar hasta su apetitosa boca y devorarla intercalando sus labios con los de su alfa, todo empezó siendo un saludo de buenos días y al siguiente momento estaban restregándose uno contra el otro duros como piedras y jadeando por más, todo hasta que la puerta se abrió y Jimin saltó al costado de la cama envolviéndose a sí mismo con una de las mantas.

-¿Papá?- la adormecida voz de Yoona lo calmó, estaba con su pijama de unicornios, de pie en el umbral de la puerta mientras masajeaba sus ojitos- ¡Papi!- gritó entusiasmada cuando pudo enfocar la mirada y corrió hacia la cama, Jimin estiró sus brazos esperando que la niña saltara a ellos pero para su sorpresa subió y se acurrucó en el hombro del mayor.

-Buenos días mi pequeña- le susurro Yoongi mientras se acomodaba correctamente en la cama y besaba su frente

-Papi ¿harás el desayuno?

-Papi hará el desayuno ¿Qué te parece si vas a despertar a tus hermanos y bajan a esperarnos?

-¡Siii!- asintió la niña mientras bajaba de la cama y corría por el cuarto hacia afuera

Yoongi sonrió por la reciente muestra de afecto, la pequeña Yoona lo estaba reconociendo como el alfa de su manada y nada le había resultado tan tierno jamás, miró a Jimin que seguía de pie junto a la cama, sus ojos perdidos en algún punto entre las almohadas.

-¿Pasa algo, amor?

-Ella realmente te dijo "Papá"... me siento, feliz pero... desplazado a la vez

Yoongi comprendió, siempre había sido Jimin con sus pequeños contra el mundo y de repente llegaba él. Se puso de pie y caminó hasta su omega tomándolo entre sus brazos.

-Soy tu alfa ahora, y ustedes son mi familia, a la cual pretendo proteger a costa de todo

"Proteger" esa palabra le recordó la amenaza de Chanyeol por unos momentos pero las caricias y el beso que dejó sobre su marca en el cuello le devolvieron la tranquilidad.

-¿Qué dices si vas a asearte mientras yo les preparo un delicioso desayuno a ti y a nuestros cachorros?

Jimin sonrió

-Eso suena realmente genial- besó sus labios mientras era sujetado por la cintura- por fin podré ducharme tranquilo

-Tomate tu tiempo- susurró al tiempo que le daba una nalgada en el trasero

🍑

-Alfa... tu olor no es el mismo de ayer ¿has marcado a papi?

Vaya, Taehyung era mucho más perspicaz de lo que esperaba, desde que entró a la cocina no le había quitado los ojos de encima al mayor, incluso mientras comía los deliciosos panqueques con miel, sus ojos parecían querer resolver alguna especie de enigma. Ahora comprendía el porqué de esa actitud, Tae solo trataba de cuidar a los suyos. Incluso Jungkook lo miró curioso antes de poner también los ojos en el alfa, que no pudo evitar reír por los nervios al sentirse tan expuesto bajo el escaneo meticuloso de los dos niños.

-Bueno, yo tal vez...- estaba balbuceando- si, tu papi y yo estamos vinculados ahora. Realmente somos una pequeña pero linda manada

Conocía a los niños y sobre todo se jactaba de conocer muy bien a esos gemelos. Entendía de sus miedos y de sus dolores.

-Ustedes pueden llamarme Yoongi, ya no es necesario que me digan "Sr. Min" cuando estemos en casa

-¿Y no quieres que te llamemos... "papá"?- la ternura e inocencia de Jungkook era tan hermosa

-Nada me haría más feliz que me llamen "Papá" pero solo si eso quieren

-Somos felices con eso... pa- pá- murmuró Tae y el mayor pudo advertir el pequeño brillo de sinceridad en sus ojitos marrones

-¿Le darán un abrazo a papá ahora?

Ambos cachorros se miraron y saltando de los asientos corrieron a los brazos de Yoongi que los esperaba.

-Seremos la envidia de los demás niños- de pronto murmuró Tae y conociendo las ocurrencias de esos dos, el alfa supo que de seguro no le sería fácil explicar su nueva relación ante sus directivos en la escuela, pero qué más daba, en ese o en cualquier otro lugar defendería a sus hijos.

🐺🐺

Ni bien entró a la cafetería fue rodeado por sus compañeros y amigos, los tres lo arrastraron a la cocina

-¡Estas marcado!- acusó Jin- tu aroma tiene una sutil mezcla de café bastante intenso para ser sincero- dijo olfatenado el aire a su alrededor

-Estem... pues si, yo...- Jimin no podía formular una respuesta

-Y los golpes de la pared anoche me dice que la pasaste bien mientras te marcaban- Hoseok codeó a Jimin levantando las cejas en la insinuación- dime... ¿le bailaste?

-¡Yah! ¡Hobi!- el omega no pudo evitar ocultar su rostro entre sus manos

-¿Marcado, eh? Ese alfa sí que es rápido, mira nada más la profundidad de esa mordida- rio Hoseok mientras observaba el cuello de su compañero- esos son muchos dientes

-Así que oficialmente eres mi cuñado ahora- la mirada de Jaemin era un poco intimidante

-Sí, bueno... yo...

-No te pongas nervioso Minie... estoy más que feliz por ustedes, aunque sigo sin saber que viste en Yoongi-

-Cálmate niña, no sabes acaso que el amor es ciego- fue el turno de Jin de hablar

-Y estúpido... pero bueno, eso no nos importa ¿verdad? Bienvenido a la familia Jimin, muero por ver la cara de mis padres cuando sepan que son abuelos de tres niños- la carcajada que salió de la boca de la joven beta le erizó la piel, ciertamente no habían hablado de muchas cosas con su alfa y debían sentarse a conversar, solo esperaba no estar apresurando las cosas y terminar equivocándose por segunda vez.

Todo lo demás fue hermoso, su marca dolía un poco pero las imágenes de Yoongi penetrándolo con delicadeza y la sensación de sus palmas golpeando en sus nalgas lo estaban excitando y agradecía estar parado detrás del exhibidor donde nadie podía notar la rigidez en sus pantalones.

"Yoongi, ya quiero verte esta tarde..."

🐾🐾

Las clases estaban a punto de terminar y nunca antes había sido tan feliz por eso, normalmente era de los que se quedaban después de hora para organizar su trabajo del día siguiente, pero la cantidad de adrenalina en su sangre había conseguido que terminara todo incluso antes de hora. Sentía grandes dosis de ansiedad por volver a casa junto a su familia, tal vez almorzar todos juntos y robarle besos a su pareja mientras los niños toman una siesta.

No había nada que lo preocupara ahora, quizás conseguir una casa más grande para vivir con su familia ¿Jimin querría tener un par de lindos cachorritos más con él? Eso sería fabuloso... ¡Ah! no debía olvidar de presentárselos a sus padres, su madre estaría orgullosa de que estuviera vinculado con un omega tan hermoso y su padre amaría a esos pequeños ya que había heredado el amor por los niños del curioso alfa. Es muy pronto pero ¿si tal vez le proponía matrimonio? ¿Estaría bien su omega con eso? Después de todo ya lo había marcado y no era como el fuera ir a algún lugar. También quería conocer más a los niños fuera del ámbito escolar ¿Y unas vacaciones? Podría organizar un viaje sorpresa para todos ¿una casa rodante estaría bien? Sí, eso sería lo mejor, de paso podrían pasar tiempo juntos y viajar a Gwangju a casa de sus progenitores. Min Yoongi estaba feliz y su cabeza no dejaba de girar en torno a cientos de cosas que quería probar junto a su familia, tan perdido en sus pensamientos que no habia notado que los gemelos estaban a su lado dirigiéndose a la salida.

-¿Vamos a casa, papá?- dijo Jungkookie mientras sujetaba su mano libre del maletín

-¿Qué les parece si les llevamos unos dulces a su papi?- les sonrió el alfa y los gemelos se miraron con enormes sonrisas en sus rostros

-¡Si!- comenzaron a festejar mientras lo arrastraban a la puerta principal de la escuela- De chocolate para papi y de frambuesas para Yoona, son sus preferidos- dijo Tae mientras acariciaba su barriga y se relamía los labios

Yoongi rió, hoy Hoseok no iría a buscarlos ya que el mismo los llevaría a su hogar.

-"Sr. Min"- lo llamó una de sus colegas desde la administración- El director lo solicita en su oficina unos segundos

Yoongi miró a la omega y afirmó deteniéndose en su lugar. Se agachó a la altura de los cachorros "espérenme un momento, regreso enseguida" Con esa orden corrió hasta la enorme oficina vidriada desde donde podía contemplar toda la escuela y en la cuál su directivo lo esperaba.

Jungkook y Tae siguieron caminando hasta la puerta donde lo esperarían para volver a casa, ambos sonreían mientras sujetaban las correas de sus mochilitas con ambas manos intentando controlar el revoltijo que hacían las mariposas en sus estómagos.

El menor de los gemelos sonreía abiertamente, cuando el sol le pegó en el rostro sus dientecitos de conejo brillaron entre sus labios pero esa sonrisa se desvaneció al ver al hombre apoyado en la barra de seguridad de la escuela, con traje y lentes de sol, pero aun asi lo reconocia. Taehyung aún no se habia percatado de su presencia en el lugar, seguía sumido en su alegría.

-¿Pa...?

-¿Eh?- Taehyung miró a Kookie que mantenía su mirada fija al frente, lucia asustado... siguió con sus ojos la línea de la mirada de su hermano y de pronto algo dentro suyo vibró con fuerza, un ardor en su garganta dejó que se le escapara un gruñido

-¿Qué hace aquí?- arrancó el mayor con una posición claramente defensiva mientras cubría el cuerpo de su hermano con el suyo

El alfa frente a ellos los miró con una sonrisa ladina mientras se quitaba los anteojos negros, con su traje de etiqueta impecablemente acomodado y el cabello hacía atrás en un prolijo peinado. Se agachó a su altura y con su penetrante mirada los recorrió

-¡Mis bebes! Los he extrañado tanto ¿No le darán un abrazo a papá?- Chanyeol los esperaba con los brazos abiertos

-Tu ya no eres nuestro padre- las palabras ácidas saliendo de la boca de Taehyung le provocaron un nudo en el estomago

-Sé qué hace tiempo que no nos vemos pero... ¿saben?- el alfa corrió hasta la parte de atrás de un auto negro estacionado sacando grandes paquetes de su interior bajo la atenta mirada de los niños- papá les trajo regalos~

Los gemelos se miraron entre sí, no sabían cómo reaccionar ante todo aquello. La mirada dura de Taehyung analizaba cada movimiento, podía observar la luz oscura que emanaba su cuerpo y no permitia que su hermano cayera en ella, notaba la ansiedad en el cuerpo de Jungkook que quizás moría de ganas de saltar y abrazar al alfa que tanto habia extrañado. Chanyeol dejó tres grandes paquetes frente a ellos esperando que los tomaran aunque ninguno de los dos se movían, pero el alfa era inteligente y ya había previsto que algo así podía pasar.

-Les compré estos regalos, no voy a presionarlos... también hay uno para mi princesa ¿quieren que los lleve a casa?

Taehyung apreció algo de sinceridad en sus palabras y dudó por un minuto. Jungkook tembló cuando su padre le acarició el cabello y sintió un ápice de calidez en el contacto dejándose mimar. Tal vez no todo era tan malo ¿pero qué pasaría con su nuevo alfa, su padre? Taehyung podría ser un niño que no entendia muchas cosas pero sabia que Chanyeol no era confiable, no después de haber hecho llorar tanto a su papi Jimin, porque aunque el mayor lo ocultara el podía percibir su tristeza.

-Vete, alfa. Ya no te necesitamos...

-Mi lindo cachorro, cuidaste bien de tus hermanos y de tu papi ¿verdad? Pero ya estoy aquí, no necesitas seguir haciéndolo. Papá ha vuelto- le dijo a Tae sin dejar de mimar al cachorro menor

Y con estas palabras Jungkook dejó caer todas lagrimas que guardaba en su interior, meses de haber extrañado a su padre y de llamarlo en silencio por las noches, esquivó el agarre de su hermano y trepó a la cintura del alfa entre pequeños sollozos. Chanyeol sonrió mientras acariciaba la mata de cabello castaño

-Shh mi pequeño... papá esta aquí

Taehyung miró a los costados ¿Dónde estaba Yoongi cuando lo necesitaba? No quería que ese hombre se los llevara, no le daba buena espina. Y sabia que Jimin no iba a estar contento con eso

-¿Qué dicen? ¿vamos por un paseo?...